«Estaba harto, me estaban vacilando. Imitaban silbidos de pájaros y cosas así (…) También tenían perros de cuatro patas. Aluciné. A las 2.30 o 3.00 vi gente camuflada con túnicas verdes claras y capuchas entre los árboles. Al frente, un viejo de pelo blanco y calva, vestido de azul marino […]