“A veces, un hombre muy pequeño puede proyectar una sombra muy grande.”
George R. R. Martin, Choque de reyes
Me va a resultar tremendamente complicado mantenerme objetivo al analizar la segunda temporada de Juego de Tronos. Estoy tan satisfecho y a un tiempo tan disgustado con su evolución, que corro el riesgo de escribir una reseña totalmente esquizofrénica, o al menos más de lo habitual.
Primero, una confesión: soy fan fatal tanto de las novelas como de la serie. A las 00:01 del 12 de julio de 2011 me presenté en la librería Gigamesh para comprar Dance with dragons, el quinto libro de la serie, la misma noche de su publicación en inglés (el 22 de junio se publicará la traducción al castellano, por cierto). Al pasar el trono de hierro el año pasado por Barcelona, no tardé en retratarme ahí un par de veces. Cuando el próximo 28 de julio el mismísimo George R. R. Martin acuda al CCCB de Barcelona, ahí estaré en las primeras filas. En resumen: los buenos ratos que me han hecho pasar las novelas me predisponen ya de partida a favor de la serie de HBO y, en general, de cualquier cosa que tenga el seal of approval del gordo cabrón.
Por otra parte, este reconocido fanboyismo tiene su cara oscura. Buceando por la red me quedo con la impresión de que algunos fans empiezan a presionar demasiado a los autores, llevados por el prurito perfeccionista de los “fans coñazo” a los que me referí ya en otro artículo. Verbigracia: Bryan Cogman, el único de los guionistas habituales con cuenta de Twitter, decidió cerrarla de un portazo (es decir, con el hashtag #NoMoreGoTWritersOnTwitter) después de que un grupo de fans descontentos le machacaran durante unos cuantos días. Este talante quejoso y faltón resulta especialmente sangrante si se une a los ya clásicos apremios a Martin para que acabe de una vez los puñeteros libros (recordemos a Neil Gaiman subrayando que George R. R. Martin is not your bitch). En este ambiente generalizado de tocacojonismo me siento un poco incómodo criticando según qué de la serie, ya que resulta evidente que el esfuerzo que están dedicando productores y guionistas es realmente titánico, y en algunos momentos el resultado es absolutamente soberbio. Pero estos éxitos no permiten esconder que esta segunda temporada tiene errores de bulto en su concepción y cuenta al menos con dos líneas argumentales fallidas: la de Jon y la de Daenerys.
Pero vamos por partes. El reto al que se enfrentaban los creadores de la serie, David Benioff y Dan Weiss (conocidos cariñosamente como D&D), era monumental: adaptar Choque de reyes, un libro mucho más largo, complejo y desestructurado que el primero. Cuando Martin empezó a escribir la saga de Canción de hielo y fuego la planteó como una trilogía, pero a medida que avanzaba con Choque de reyes se fue dando cuenta de que necesitaría unos cuantos libros más para llevar a buen término todas las líneas argumentales. La decapitación de Ned Stark en el primer libro fue un manotazo propinado sobre el tablero que dispersó las piezas del juego por las cuatro esquinas de Poniente. Personajes en fuga (Arya), sitiados (Sansa, Tyrion), embarcados en un viaje a territorios cada vez más salvajes (Jon, Daenerys), aislados por la batalla (Catelyn, Brienne)… Cada uno vive su propia historia, relacionada con el resto pero dotada de cierta independencia temática e incluso estilística; el tono más místico y etéreo de los capítulos de Daenerys contrasta con el “realismo sucio” de los narrados por Tyrion en Desembarco del Rey.
¿Cómo condensar esta metástasis de líneas argumentales en sólo diez capítulos? La solución más obvia es la que se ha adoptado durante gran parte de la temporada: saltos continuos de uno a otro escenario y personaje, dividiendo las tramas en pequeños flashes independientes. El problema es que este enfoque hace difícil que los capítulos tengan una lógica interna que ate cada episodio en una unidad temática coherente. Tal vez hubiera sido mejor centrar cada episodio en dos o como mucho tres líneas argumentales. Así se hizo en Blackwater, el capítulo guionizado por el propio Martin: centrar la atención en Desembarco del Rey y el asedio de Stannis le dio al episodio un enfoque y objetivo del que otros carecen. El resultado fue un episodio excelente, afilado y centrado: el mejor de la temporada y de la serie. ¿Por qué no hacer algo parecido con Jon o Daenerys, que ven su historia troceada en fragmentos finos cual pieles de cebolla?
Más allá de esta objeción, lo cierto es que los guionistas triunfan en su difícil encargo. Los cambios respecto al libro, con alguna notable excepción que veremos luego, son pertinentes: lógicos movimientos menores de piezas (Shae como doncella de Sansa en lugar de Lollys, Bronn como capitán de la Guardia, Samwell encontrando el vidriagón) y alguna escena añadida con mayor o menor fortuna. Otros momentos de la novela han sido magistralmente comprimidos y filmados, como el divertido truco de Tyrion para encontrar al espía de Cersei.
En general hay menos sexposition que en la primera temporada, aunque la serie continúa con la afición de mostrar desnudos con cualquier excusa, lo que acaba resultando algo irritante incluso para un erotómano pechófilo como yo. El cachondeo con este asunto llegó a Saturday Night Live: no os perdáis este impagable gag en que se descubre la identidad de un asesor muy especial…
De siete en siete: siete aciertos
Siguiendo un poco el estilo de mi reseña de la primera temporada, he ordenado los comentarios en grupos de siete, el número sagrado en Poniente. Siete triunfos, siete fallos y siete dudas.
CUIDADO, QUE AQUÍ EMPIEZAN LOS SPOILERS: dejad de leer los que no hayáis visto la segunda temporada todavía.
1. Los peligros del parto natural: La escena en que una embarazadísima Melisandre (por obra y gracia de una especie de pera hinchable, por cierto) da a luz un engendro de sombras es sin duda uno de los momentos icónicos de la temporada. Ya comenté en su momento que una de las principales bazas de Juego de Tronos es la forma comedida en que trata la magia: en cada libro lo sobrenatural tiene más peso que en el anterior (“la magia retorna al mundo”), pero de forma gradual y escalonada. El resultado es que el espectador/lector comparte con los personajes una sensación de maravilla y desconcierto ante prodigios que no deberían existir, o al menos que llevaban siglos ausentes del imaginario colectivo. El parto de la criatura de sombra cumple perfectamente ese objetivo de asombrar y aterrar. Con unos efectos especiales más que correctos y un tanto cronembergianos, el nacimiento obsceno e impío (cómo me gusta imitar a H.P. Lovecraft) queda retratado a las mil maravillas.
Se me ocurre una única objeción menor, fruto de haber unido en una sola escena las dos criaturas de sombra que aparecen en el libro… En la serie no se explica dónde demonios están. Físicamente, digo: ¿dónde está esa cueva enrejada a la que Davos lleva a parir a Melisandre? En el libro tiene sentido: es un conducto que lleva al interior de Bastión de Tormentas, y el bebé de sombra debe matar a Courtnay Penrose, el castellano que lo defiende. En cambio, siendo la víctima Renly en su campamento: ¿por qué es necesario que Davos lleve a Melisandre a una cueva en medio de la nada?
2. Brienne, la Bella Bestia: Cuando hace unos meses Martin publicó en su blog que la actriz elegida para interpretar a Brienne de Tarth sería Gwendoline Christie, mi primera reacción fue de escepticismo contenido. La actriz es en efecto adecuadamente enorme (más de metro noventa), pero la veía demasiado guapa y elegante para representar a una mujer “con cara y dientes de caballo”. Y sin embargo ha superado todas mis expectativas, firmando la que probablemente sea la mejor interpretación de la temporada. Visualmente es una Brienne perfecta: con el pelo bien corto (Christie cuenta que lloró un poco al cortárselo), un cuerpo que se nota trabajado en el gimnasio y un aspecto que logra conjugar una cierta torpeza de gigante con un aura de peligro y agresividad latente. Hay una diferencia notable entre la Brienne de los libros y la de la serie: la televisiva es mucho más violenta, más dispuesta a matar cuando es necesario. Más allá de este detalle, la esencia del personaje está ahí: una mujer siempre rechazada y demasiado ansiosa por encajar. Ahora entiendo lo que dijo Martin durante el casting: “vimos muchas actrices que interpretaban a Brienne y luego a una que era Brienne”. Christie incorporó a su interpretación algunas de sus experiencias como actriz rechazada una y otra vez debido a su altura gigantesca… La aplicación del método Stanislavsky más sencilla de la historia.
Nota lateral: me hizo gracia que la Guardia Real de Renly a la que se incorpora Brienne no mantuviera el nombre que recibe en los libros: La Guardia Arcoiris, en la que cada uno de los siete caballeros ostenta un color diferente. Y es que en pantalla la visión de esa Guardia hubiera quedado probablemente demasiado “fin de año en Chueca”.
3. Cersei va rompiendo su coraza: Confieso que Lena Headey no me convenció demasiado la temporada pasada, al interpretar a Cersei demasiado contenida y casi ausente… Pero en este año le ha pillado al fin el punto al personaje añadiéndole un toque personal: la Cersei de los libros es más volcánica, impredecible y hasta caprichosa, puro fuego; la Cersei de la serie es más taimada, calculadora y retorcida, puro hielo. Y sin embargo, Headey consigue mostrar bajo ese hielo un infierno de demencia preparada para aflorar a la mínima oportunidad, sea en el intercambio con Meñique durante el primer episodio (“el poder es el poder”, nunca una tautología fue enunciada con tanto entusiasmo), en las siempre algo crueles interacciones con Sansa o en el clímax de Blackwater, sentada en el Trono de Hierro con Tommen, borracha y al borde del suicidio. Merecería como mínimo una nominación a los Emmy de este año, que no todo va a ser Dinklage. Y hablando de todo un poco: es una pena que de los mil chistes de Tyrion se haya caído de la adaptación una puyita maravillosa dirigida a Cersei: “no me parece justo que te abras de piernas para un hermano y no para el otro”.
4. Theon Greyjoy, empresario español: He disfrutado enormemente del arco argumental de Theon, quizá el más redondo de la temporada. El año pasado su personaje pasó más bien desapercibido, siendo incluso motivo de bromas por parte de no lectores de los libros que no le encontraban sentido a su presencia. Y sin embargo, en esta temporada tiene su momento de gloria… O de fracaso.
El personaje de Theon es un pobre desgraciado que siempre toma la decisión equivocada y busca constantemente respeto y aprobación (de su padre, de su hermana, de sus hombres) sin conseguirlo jamás. También es un hijo de puta capaz de asesinar niños y decapitar ancianos, claro. En cualquier caso, Alfie Allen logra presentar las contradicciones de su personaje con una interpretación rica y matizada. Le ayuda un buen guión, con detalles como la breve escena en que quema la carta de Robb: un momento creado para la serie por Bryan Cogman y que Allen consigue mostrar como potente y decisivo.
En palabras de un buen amigo, Theon Greyjoy recuerda fuertemente a un empresaurio español de la era de la chapuza, en particular cuando aplica “soluciones creativas” como cargarse a dos críos cualquiera para esconder la fuga de Bran y Rickon. “Y si cuela, cuela, ya nos apañaremos con la inspección de trabajo”, parece estar pensando, distraído. Reconozco que siempre he tenido debilidad por los Hombres de Hierro y sus apariciones en los libros y la serie, tal vez por el kraken que lucen en su escudo (siempre he sentido cariño por los cefalópodos). Quizá por eso me ha encantado verlos en acción: menos vikingos de lo que temía (su look en la serie es más original y propio), impertinentes y pendencieros. Su reacción ante el emocionante discurso final de Theon es tan brillante, adecuada y propia de hijos de perra que todavía me hace sonreír cada vez que la recuerdo.
5. Al fin, una batalla: Es difícil seleccionar una escena de Blackwater, el ya legendario noveno capítulo de la temporada. El guión lo firma el propio George R. R. Martin: recuerdo que me cabreé cuando colgó en su blog que lo estaba escribiendo, porque mi primera reacción en estos casos es pensar “¡deja eso y ponte a escribir The winds of winter!”. Ahora me alegro de que lo haya hecho: la batalla mostrada en los libros se conserva en sus detalles esenciales (y alguna omisión menor, como la cadena que sella el puerto) y se beneficia de un enfoque cerrado del capítulo, que prescinde de argumentos paralelos evitando así el aire descoyuntado de otros capítulos. Dos factores más beneficiaron el episodio: el primero fue la decisión de HBO de aumentar el presupuesto ya abultado, lo que permitió mostrar por primera vez una batalla digna de tal nombre. El segundo golpe de suerte fue el fichaje a última hora del director Neil Marshall, claro y competente a la hora de filmar escenas de acción. Ya había dirigido escenas espectaculares con cuatro duros anteriormente, como mínimo en Centurion y Dog Soldiers.
Hay varios momentos icónicos en el episodio: Bronn como arquero olímpico (casi esperaba oír la fanfarria de Barcelona’92 cuando su flecha impacta en el barco cargado de fuego valyrio), Cersei borracha sentada en el Trono de Hierro, o Tyrion arengando a las tropas en su mejor momento de toda la temporada (“Son hombres valientes: ¡vamos a matarlos!”) y dándole a Dinklage otra oportunidad de Emmy.
No todo es perfecto: Stannis me cuadra más como estratega en la retaguardia que repartiendo mandobles en el pelotón de primera fila, pero en fin, no queda tan cantona la cosa como poner, no sé, al presidente de los Estados Unidos en un caza como en Independence Day. Venga, aceptamos que el Rey esté por una vez en pleno combate en lugar de cazando como hubieran hecho Robert Baratheon o Juan Carlos I.
Ah, y el broche de oro para un capítulo casi perfecto: Las lluvias de Castamere. Se me ponen la piel de gallina al escuchar por primera vez una canción que tanto aparecerá en las tramas futuras…
6. Pon un Perro en tu vida: Recuerdo haberme quejado de que el personaje del Perro estaba infrautilizado en la primera temporada: escenas eliminadas, fragmentos de diálogo regalados a Meñique… Este año Sandor Clegane ha tenido por fin ocasión de brillar, especialmente en sus interacciones con Sansa. Ni os imagináis cuántos fans tienen ganas de que el Perro y Sansa se dejen llevar por la pasión: cuando se les ve juntos parecen tal cual la Bella y la Bestia, o más bien King Kong y Fay Wray, según cómo se mire. Su último diálogo, en particular, es extrañamente freak (en el sentido Tod Browning) y conmovedor.
Por lo demás, en Blackwater el actor Rory McCann tiene una buena oportunidad de ganarse a la audiencia: sus escenas de batalla son apropiadamente brutales (no se me ocurre mejor manera de mostrar su bestialidad que partiendo gente por la mitad) y el contraste con Bronn y su estilo ágil de pelear es mostrado de forma muy visual y efectiva. Pero el momento clave llega cuando lo envía todo a la mierda: ese “Fuck the Kingsguard. Fuck the city. Fuck the king” debe pasar desde ya al Olimpo de frases macarras memorables.
Anécdota curiosa: McCann estuvo a punto de partirse la crisma mientras le daba de comer a unos pajarillos en plena tormenta escocesa. Algo muy propio del Perro.
7. La sota de copas de Harrenhal: De todo el material creado exclusivamente para la serie, la única idea que me ha entusiasmado es la de convertir a Arya en copera de Tywin Lannister durante su estancia en Harrenhal. Los dos actores (Maisie Williams y Charles Dance) están fantásticos, sus interacciones resultan creíbles y la posición de Arya permite a los guionistas mostrar parte de los planes de Tywin sin necesidad de meterle constantemente en un burdel como al pobre Meñique. Solo me sobró ese final apresurado en que Arya busca sin éxito a Jaqen para ordenarle matar a Tywin (¿no podría haberlo pensado antes?). Pero es una crítica menor a un buen número de escenas soberbias.
Siete fallos
1.- Renly tropieza con su propia sombra. Empecemos la ristra de agravios con el momento más decepcionante de la temporada: el inicio del quinto capítulo. Después del parto con que acababa el capítulo anterior las expectativas estaban muy altas, y sin embargo el asesinato de Renly se resuelve en pocos segundos y de forma totalmente fría, desangelada y anticlimática. Ni siquiera Catelyn y Brienne (fantásticas en el resto de la serie) reaccionan de modo especialmente creíble o significativo. He leído por ahí que hubo algún problema de efectos especiales con la escena: en un primer momento iba a ser más parecida al libro, con la criatura camuflándose como la sombra de Renly hasta el último momento, pero finalmente se optó por una resolución rápida y poco visual. Además, darle a Brienne la reacción de rabia asesina que en los libros muestra Loras es bueno para el personaje de Brienne pero pésimo para el del caballero: en contraste, la reacción de Loras resulta demasiado comedida y atenuada. Se supone que el Rey era el amor de su vida, pero Loras Tyrell vela su cadáver con más pinta de crío enfurruñado que de amante transido por la pena.
2.- De Melisandre a Mesalina: Estaba muy ilusionado con la aparición de Melisandre en la serie, pero su única escena convincente ha sido la ya comentada del parto. Por lo demás, la magnífica Carice Van Houten ha sido desaprovechada, y su personaje guionizado con la sutileza de una taladradora industrial. Por poner un ejemplo: la posibilidad de que Stannis le pusiera los cuernos a su esposa con Melisandre se insinúa en los libros (de algún lugar tienen que salir las criaturas de sombra), pero en la serie de vuelve demasiado explícita. O al menos, puestos a mostrar el asunto, hubiera sido mejor hacerlo de un modo más sutil: es poco propio del adusto y austero Stannis Baratheon romper a follar como un adolescente sobre los mapas de la Mesa Pintada de Rocadragón.
3.- La Madre de Dragones roba una cubertería: En Choque de Reyes la historia de Daenerys no es muy extensa, así que era previsible que para darle tiempo de pantalla los guionistas expandieran o directamente se inventaran fragmentos de historia. El problema es que los ingredientes añadidos resultan obvios y poco interesantes: el robo de los dragones, la pseudo-trama de golpes de estado con Xaro y su caja fuerte, la traición de la doncella Doreah… Como consecuencia, todo el arco argumental se resiente y queda deslavazado, inconexo y en el fondo prescindible. Probablemente habría sido mejor solución concentrar la trama de Qarth en dos o tres capítulos como mucho, lo que hubiera aportado más solidez a la trama de la pobre Khalessi colaborando de paso a reducir los excesivos saltos entre protagonistas.
Pero mi mayor crítica es por una ocasión desperdiciada: las visiones de Daenerys en la Casa de los Eternos, guarida del brujo Pyat Pree (todo un acierto fichar al inquietante Ian Hanmore, por cierto). Aprovechando alguna de las visiones de la novela el resultado podría haber sido puro David Lynch: reyes con cabeza de lobo, enanos mordiendo los pechos de una mujer desnuda, una rosa azul en un muro de hielo… Imágenes proféticas aparentemente sin demasiado sentido pero que en los libros acaban haciendo referencia a hechos pasados o futuros. La solución por la que opta la serie es mucho más simple: una visión estéticamente espectacular de la sala del trono destruida (¿fundida por fuego de dragón?) y cubierta de nieve… Y un cameo fantasmagórico de Khal Drogo. Un poco pobre, en comparación. De todas formas, ahí va mi teoría: ambas imágenes son tan significativas para la historia como las de la novela, y no puedo decir nada más sin chafar el final del quinto libro a quienes no lo hayan leído. Y de lo que no se puede hablar, mejor callarse.
4.- No puede ser tan caro conseguir extras: Varias escenas se hubieran beneficiado enormemente de una mayor presencia de extras, como la rebelión del populacho en Desembarco del Rey (presentada en los libros casi como una Toma de la Bastilla y en la serie apenas como una escaramuza) o en la misma batalla de Blackwater, un tanto limitada en escala. Sí, ya sé, la tele tiene un presupuesto más limitado que el cine, pero ¿por qué no recurrir por ejemplo a los fans? Imagino que habrá un buen número de fanáticos de los libros o la serie dispuestos a aparecer gratis, cobrando una miseria o incluso pagando, como se hace en ciertas superproducciones.
5.- La enfermera sexy y el rey pasmado: Sobre el papel era buena idea escribir unas cuantas escenas para Robb Stark: no sólo porque Richard Madden había causado buena impresión en la primera temporada, sino porque en pantalla no hubiera funcionado referirse a Robb elípticamente, como en la mayor parte de Choque de Reyes. Parecía adecuado añadir alguna escena en que Robb conociera a Jeyne Westerling, la joven noble encantadora pero sin utilidad para la realpolitik. Vamos, que el trabajo de los guionistas estaba ya medio hecho, e incluso cambios menores como convertir a Jeyne en una plebeya extranjera llamada Talisa podían funcionar, e incluso añadir matices a la historia.
Sin embargo, la subtrama ha provocado exasperación y bostezos, cometiendo el peor pecado para una línea argumental de Juego de Tronos: la previsibilidad. A los cinco segundos de la primera aparición de Talisa ya sabemos que va a ser el interés amoroso de Robb. Sus escenas son una sucesión de clichés encadenados, sin llegar al nivel de cursilería de un Anakin vs. Padmé pero por poco. No es culpa de Richard Madden ni de Oona Chaplin: ambos lidian como pueden con un material de partida mejorable.
Por último, y sin querer pasarme de pureta, hay un cambio involuntario en la motivación de Robb para casarse con Talisa/Jeyne que resulta algo molesto. En el libro, Robb busca consuelo en Jeyne tras enterarse de la caída de Invernalia y la muerte de sus hermanos. Una vez desflorada la noble, lo que tendría consecuencias nefastas para ella aunque fuera de una Casa menor, su honor de caballero le exige «hacer lo correcto» y casarse con ella. Cuando su madre le intenta hacer ver los peligros políticos de esa decisión, Robb se enroca en su tozuda honorabilidad, en una postura muy propia de su padre Eddard. En cambio, en la serie, su planteamiento viene a ser que le apetece casarse con ella, y por qué no debería romper sus promesas si todo el mundo, incluso su madre (en referencia a la fuga de Jaime) lo hace. Y no, coño, no es eso.
6.-Jon Nieve da un largo paseo: La historia de Jon ha quedado bastante deslucida, paradójicamente por la voluntad de querer darle más peso. La decisión de avanzar la aparición de Ygritte y alargar sus escenas era ya conocida, pero la forma de hacerlo separando a Jon de sus compañeros me pareció algo torpe. Eso sí, Rose Leslie es una Ygritte perfecta, adecuadamente arrolladora, convincente y con buena química con Jon… Aunque demasiado limpita para ser salvaje, ¿no? Como en las películas prehistóricas en que las protagonistas aparecen maquilladas y con peinado setentero.
El problema es más bien un efecto colateral no buscado pero inevitable: sumar minutos a Ygritte se los resta a Qhorin, lo que convierte uno de los personajes clave del libro en un segundón… Y esto, a su vez, disminuye el impacto de la escena en que Qhorin fuerza a Jon a matarlo para que pueda infiltrarse entre los salvajes. Además, eliminar la intervención de Fantasma durante la pelea provoca que haya que añadir un nuevo elemento para hacer creíble que el joven Jon venza a un veterano explorador: la rabia que siente cuando Qhorin insulta a su desconocida madre. El confuso resultado deja abierta la posibilidad de que Jon lo haya matado en un ataque de rabia, en lugar de con gran dolor de su corazón y sintiéndose increíblemente culpable por ello.
7.- Lord Petyr Baelish, proxeneta: Empiezo a estar harto de que el único negocio de Meñique sean los burdeles. En los libros es un comerciante con tentáculos en todos los negocios de la ciudad, no sólo un proxeneta deluxe que se dedica a amenazar a sus pupilas (véase la innecesaria escena con Ros en uno de los primeros capítulos). Por lo demás, en esta temporada no le dan nada demasiado interesante que hacer aparte de convertirle en recadero paseándose por diversos campamentos. Aidan Gillan es un actor genial: ¡no lo reduzcáis a un chulo conspirador!
Siete dudas
Y termino con siete preguntas que me carcomen, siete escenas o situaciones que no estoy muy seguro aún de si odiar o amar.
1. ¿Era necesaria la escena del Spanking King?: Si el año pasado fue una escena gay la que hizo correr ríos de tinta, este año la polémica ha venido de una secuencia inesperada de sadomasoquismo extremo no consensuado a manos del rey Joffrey y dos prostitutas. Una de ellas es la infame Ros (Esmé Bianco), que como pronto veremos no es muy querida por los fans, y la otra es una simpática actriz porno llamada Maisie Dee, que explicó aquí su experiencia.
Tal vez esta escena no me molestaría si no fuera tan larga y redundante: otra secuencia mucho mejor en este mismo episodio ya establece el carácter sádico y cruel de Joffrey. Cuando el rey niño ordena a Boros Blount pegar y desnudar a Sansa, tenemos una escena con todo lo necesario, incluso el detallito del Perro diciendo “ya basta” y el rescate in extremis de Tyrion. ¿Para qué gastar cinco largos minutos de episodio (¡el 10% del capítulo!) en el dormitorio de Joff repitiendo esencialmente lo mismo? Por otra parte, y ya a título personal como sadomasoquista aficionado que soy: subrayar tanto a la audiencia que un personaje es malvado cargándolo de imaginería S&M es un tropo ya muy gastado.
2. ¿Tan caro es filmar con lobos?: La poca presencia de los lobos huargo en la serie es una queja recurrente de los fans a la que ya hice referencia en mi reseña de la primera temporada. En el primer capítulo de este año hemos tenido un «momento huargo» magnífico durante una de las escenas inventadas para la serie: la intimidante visita de Robb y su mascota a la celda de Jaime Lannister. Ahí se ve por fin el huargo como se describe en los libros: una criatura feroz e inquietante, mucho más grande que un lobo y casi incontrolable. Lo malo es que ése es el único momento en que un huargo asusta durante la temporada, y es para mí una lástima que por ejemplo Fantasma esté ausente en la pelea final de Jon y Qhorin.
3. ¿Por qué Jaime asesina al becario?: Es decir, a su antiguo escudero, un personaje llamado Alton Lannister creado para la serie. En un extraño lapsus de juicio Robb decide encerrar juntos a Alton y Jaime, a pesar de que sería más lógico mantener al Matarreyes incomunicado y sin noticias de la guerra. Y ahí Jaime ve su oportunidad: tras un rato de charla tranquila sobre su pasado (bastante interesante, por cierto, y extraída en parte de Tormenta de Espadas) se abalanza sobre su pariente y lo liquida a golpes. Que su gran plan posterior sea pillar desprevenido al guarda cuando entre a ver qué pasa es un topicazo absoluto para el que no necesitaba matar a su pariente, solo darle una hostia, a lo sumo. En el libro, Jaime huía gracias a unos saboteadores enviados por Tyrion: representar algo similar en la serie hubiera permitido ver que su hermano se preocupaba por él y lo tenía presente…
Y sin embargo, puedo entender el cambio. Ya han pasado muchos capítulos desde que Jaime lisió a Bran, y puede parecer necesario recordarle a la audiencia que es básicamente un tipo egoísta, cruel y despiadado, con un fondo moral oculto (el motivo tras su traición a los Targaryen), pero capaz de las mayores barbaridades para sobrevivir. Vamos, que entiendo a los guionistas y no creo que la escena sea una traición al personaje, como he llegado a leer por ahí.
4. ¿Ros? ¿Quién es Ros?: Para muchos lectores de los libros, la pobre Ros se está convirtiendo en el Jar Jar Binks de Juego de Tronos. Tampoco se trata de eso, pero sí resulta irritante que se le dé tiempo de pantalla para… Bueno, para nada especialmente interesante, en realidad, mientras se recortan escenas de otros personajes. El único momento en que parece que Ros va a tener relevancia es cuando toma el papel de Alayaya, la presunta amante de Tyrion castigada por ello a manos de Cersei. Lo mejor de esa escena es la reacción de Tyrion al ver a Ros cuando creía que iba a encontrarse con Shae encadenada, una mezcla de alivio y fría rabia que promete justicia y venganza. Claro que luego Tyrion parece olvidarse de ella (tiene otras cosas en que pensar después de la batalla), pero lo extraño/absurdo es que Cersei también. ¿No tenía retenida a alguien supuestamente importante para Tyrion? ¿Por qué le permite volver con Meñique como si tal cosa?
La única luz al final del túnel para Ros es la visita de Varys en el décimo capítulo, que parece casi una ruptura de la cuarta pared: el eunuco como trasunto de un guionista prometiendo darle a Ros algo mínimamente significativo que hacer el año que viene.
5. ¿Arya es una inocente criatura?: Pensadlo un poco: ¿no os da la impresión de que Arya evoluciona más bien poco en Harrenhal? Desde que Tywin la emplea como copera no da la impresión (muy presente en la novela) de que se encuentre en peligro constante. Para transmitir esa sensación de peligro malsano, probablemente hubiera ayudado mostrar más a Gregor Clegane, la Montaña Que Cabalga… Pero tenemos pocas escenas suyas, tal vez para no desconcertar a los espectadores con el cambio de actor (este año Conan Stevens ha dejado el rodaje por conflicto de calendario con El Hobbit, siendo sustituido por Ian Whyte).
Todo le acaba resultando a Arya demasiado fácil, y ni siquiera tiene que matar a nadie: en el libro toma un papel más activo en su fuga, matando a un guardia en el proceso. Esa muerte quedará grabada en su mente junto a la del crío del establo que mata casi por accidente en la primera novela: ambas serán parte esencial de su evolución y su futuro…
6. ¿No tenía demasiados mofletes Asha/Yara?: Cambiarle el nombre al personaje de Asha para que no se confunda con Osha (la salvaje que cuida a Bran) es un poco tomar a los espectadores por gilipollas, pero en fin, es lo de menos. Con lo que no estoy muy convencido, aunque dejando un margen para la evolución de la actriz en la próxima temporada, es con el casting: a primer vistazo Gemma Whelan parece demasiado blandita y solemne en comparación a la Asha burlona, agresiva y siempre alerta de la novela. En fin, veremos.
7. ¿Es aquí el plató de The Walking Dead?: Este recurrente cachondeo con la última escena de la temporada es un poco absurdo, pero también previsible: si la gente se extraña es porque no ha habido prácticamente ninguna referencia previa a los muertos vivientes, al menos este año. En sí misma la escena me ha gustado mucho como sobrecogedor colofón para la temporada. Sin embargo, tengo un curioso problema con el look de los Caminantes Blancos… Como ya avancé el año pasado, mis gónadas y yo tenemos el convencimiento interior de que en los últimos libros de la serie George R. R. Martin introducirá elementos de ciencia ficción en la historia que explicarán la longitud variable de las estaciones (¿cambios en la órbita del planeta?), la existencia de los dragones e incluso la maldición de la destruida Valyria (¿catástrofe econuclear?). No tengo nada en que sustentar mi teoría aparte del hecho de que Martin ha escrito libros de eco-ciencia ficción como Los Viajes de Tuf, así que no insistiré: si la menciono es sólo para explicar que mi imagen de los Caminantes era mucho más oscura, estilizada, tecnológica incluso. Pero me temo que faltan aún muchos años para saber si tengo razón…
Lo del Seal of Approval del Gordo Cabron ya me ha matado, Hoyga. Newfags cant triforce
El artículo está muy bien, pero creo que te has pasado con los spoilers. Me explico, yo soy seguidor de la serie de TV de Juego de Tronos y todavía no he leído los libros, sin embargo, tú das a entender demasiadas cosas en tus spoilers que salen de tus lecturas de los libros que servirán de base a las siguientes temporadas. Si lo llego a saber no lo leo, por lo que creo que deberías explicitar mejor la advertencia…
Estoy repasando la reseña y confieso que no veo referencias a sucesos que ocurran en el tercer, cuarto o quinto libros: precisamente he procurado morderme la lengua al respecto (lo que automáticamente ha provocado que casi muera envenenado). Si ves alguna referencia a sucesos futuros en el artículo, probablemente sea una pista falsa, un chiste o una tontería.
Está explicitada, si te puede la curiosidad ansiosa, es tu problema.
Qué memez gratuita. Está claramente reseñado que el artículo contiene spoilers. Luego eres libre de leerlo o no. Personalmente, pienso que harías mejor en leerte los libros, en lugar de andar criticando un trabajo bien hecho.
Sin haber leido el 5º libro (del cual hay unas ganas terribles), creo que está bastante claro que el 2º y el 4º tomo están compuestos principalmente de capítulos de transición.
Personalmente esta temporada me ha parecido floja, pero es que el libro no da para mucho más. Será más profundo, más trabajado, más psicológico incluso… Pero GoT va mucho más allá que eso. Es una serie claramente sustentada por la acción, dejando lo político para las chanzas de Tyrion o las maquinaciones de Meñique/Varys. Y precisamente este Choque de Reyes tiene mucho de política y poco de movimiento, es normal que muchos fans, especialmente fanboys o novatos de GoT que ni se han ojeado las portadas de los libros (anda que la portada del 5º… telita) hayan puesto el grito en el cielo. Muchos querían sangre y solo han encontrado pasividad en líneas generales, acción muy diluida.
Afortunadamente viene ya el libro de la masacre. Aquí si que tengo altas las espectativas. La 3ª temporada podría convertirse en un TOP de las series de televisión por que lo tiene todo para triunfar. Y hasta aquí puedo leer, antes de que alguien me tire a los leones.
Otro motivo que me ha dejado descontento ha sido esa desvinculación de la serie con el libro. Si bien sigue su argumento (obviusly) en esta ocasión los directores se toman muchas licencias para dotar de ¿Mayor interés? a los capítulos, alejándose de una trama que, con mayor o menor fuerza, sigue siendo perfecta, obra de Martin. Puede ser comprensible que lo hicieran para adaptar la serie a los seguidores que no habían leido los libros (es curioso que a estas alturas todavía tenga que explicar un servidor lo que ocurre con las estaciones en Poniente), pero sin duda pierde fuerza, mucha en mi opinión. Otro ejemplo, la aparente sencillez con la que Cersei y Jaime alardean de sus relaciones prohibidas… Parece que ardan en deseos por contarselo a la humanidad, y todos sabemos que no es así. Suma y sigue.
Y el Season Finale… me pareció que estuvo a la altura de la serie. Correcto, pero no espectacular como podría haber sido para dar un cierre de categoría que nos dejara a todos con la boca abierta. El golpe de efecto de los Walking Dead me pareció muy exagerado, hasta el punto de pensar «venga hombre…»
Miedo me da lo que ocurra sin embargo con la 4ª temporada, ya que es el libro más «flojo» de todos, mucha introducción de personajes y apenas actividad visualmente atractiva para el espectador medio.
Leí algo de que querían juntar 3ª y 4ª en una misma temporada, una opción factible pero erronea en mi opinión. La 3ª tiene contenido para llenar 10 capítulos o los que hagan falta…
Con ganas de que salga ya Dance with Dragons en el idioma de Cervantes. Muchas espectativas puestas en él, sin duda.
A mí que haya cambios respecto a los libros no me preocupa: es más, lo considero inevitable y hasta deseable (medios distintos implican métodos narrativos distintos). Lo que no me gusta es que los añadidos o cambios sean torpes, y al caso de Robb/Talisa me remito.
Respecto a otra cosa que comentas: si no me equivoco, los planes son utilizar dos temporadas para adaptar el tercer libro y una o dos para adaptar el cuarto y quinto… De todas formas es pronto aún para afirmar nada al respecto.
Según lo que yo leí creo que harán el 3º libro en dos temporadas y el 4º y 5º juntos ya que la mitad del 5º sucede en la misma línea temporal que el 4º.
Muy de acuerdo y en muchos puntos.
Sin embargo, no entiendo el paso de puntillas por el punto que más me ha infuriado a mi personalmente: La omisión de Jojen y Meera Reed (con la consecuente atribución de los sueños verdes a Bran).
Será ‘interesante’, cuando menos, ver cómo hacen ahora para encajarlos en la S03.
– Hi Bran! This is Jojen.
– Hi Jojen! Nice to meet you. What can you do?
– Well, I do have premonitory dreams that always become true and a predeterminated fate that’ll be one of the high points in the saga.
– Oh, well…. Nice. However, I do also have all these powers. Whatever, I’m leaving my brother with Osha and parting away with you, even if I’ve just met you.
Otra cosa que me molesta mínimamente es el ninguneo al pasado de la serie. En ella es todo ‘ahora’, cuando lo más interesante de los libros, en la humilde opinión de un servidor, es ir buscando pistas sobre el pasado. Nos hemos quedado sin los ‘delirios’ de Ned, sin las ‘historias’ de Jojen…
Sí que se hace rara la ausencia de los Reed, más que nada por los malabarismos que harán falta para una aparición tan tardía. Mi apuesta es que Bran/Hodor y Osha/Rickon tendrán que separarse por alguna emergencia y los Reed sacarán las castañas del fuego a Bran. Pero vamos, si no lo he incluido como fallo en mi lista es porque aún tengo la esperanza de que arreglen el asunto en la tercera temporada.
Las ausencias al pasado más allá de alguna mención esporádica al Rey Loco sí que empiezan a ser preocupantes, aunque hasta cierto punto son comprensibles. Por ejemplo, cuando Jaime recuerda sus años mozos menciona a Ser Barristan (que sí ha aparecido en la serie) en lugar de al legendario Arthur Dayne… Ahí no tengo queja. Pero si no empiezan pronto a hablar de Rhaegar Targaryen y compañía, la evolución de Daenerys no va a tener mucho sentido… En fin, mi esperanza es que para adaptar «Tormenta de espadas» van a utilizar dos temporadas, así que tendrán algo más de tiempo para permitirse flashbacks o monólogos explicativos.
Te iba a comentar lo de la ausencia de los hermanos Reed pero ya lo ha hecho Jordi. Aun así te escribo para felicitarte por el artículo, muy bueno. Gracias!
No creo que se haga más spoilers que los que has visto en la serie. Además, darte cuenta de este tipo de cosas quizá te ayude a reflexionar sobre lo que vas leyendo. En mi caso estoy por el primer libro y he visto la segunda temporada y no me siento para nada «molesta» con todo lo que aquí se ha dicho. Al contrario, me parece un trabajo fantástico.
Estoy casi totalmente de acuerdo con el artículo. No obstante, no sé si sería por la dificultad de adaptar el segundo libro pero esta temporada me decepcionó sinceramente. Ya no la forma de adaptarlo, sino que me parecieron capítulos lentos y pesados, carentes de emoción, por no decir de acción. La batalla de aguas negras sin duda lo mejor, pero aún así me esperaba algo más alucinante.
Y el final…creo que podrían haber destinado algo más de presupuesto a una parte tan importante de la saga, y no contratar a extras de The Walking Death xD
En fin solo espero que la Tercera temporada vuelvan al estilo de la primera temporada, que para mi gusto fue una adaptación fantástica!
Da una gran profundidad al personaje de Jon que prácticamente no se haya mencionado a su madre……
Es como si no quisieran saturar de información al espectador para que no se disperse, y lo que consiguen es empobrecer el resultado final.
Por cierto me parece brutal la escena de Tyrion y Shae en el 2×10.
Sí que es una buena escena, sí…
Releyendo el artículo me doy cuenta de que he mencionado poco a Shae, y es una pena: Sibel Kekili ya ha hecho suyo el personaje, dándole mucho más sustancia que a la Shae de las novelas. Tengo mucha curiosidad por ver cómo harán evolucionar al personaje en la tercera temporada…
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En general, tienes razón en muchos comentarios que haces. Sin embargo…
Me cansan un poco las críticas constantes de quienes quieren un facsímil audiovisual del libro. Eso sería imposible de obtener, financiar, rodar y, probablemente, de ver.
Yo me la tomo un poco más como un fan film.
Y como apuntes:
Y las escenas de Tywin con Aria, me parecen impagables. La escena SM de la ballesta me gustó. Y aunque la historia de la Volantene no tiene sentido, la pobre Jeyne Westerling tampoco es que añada mucho a la historia, que digamos…
Ya puestos alguien que no añada nada a la historia prefiero a Jeyne mil veces antes que a la Talisa esta, nos hubiésemos ahorrado estas escenas vomitivas y surrealistas de los dos andando por el campamento.
Donde no coincido con el autor es con el tema del asesinato de Jaime a su primo, a parte de que está absurdamente explicado, no concuerda en absoluto con el caracter de Jaime, es irreflexivo, y no duda en conseguir sus objetivos pero ni mucho menos es alguien que mataría a un Lannister por los hechos que se mostraron en la serie. A mucha gente le va a chocar ahora el Jaime de TdE y no lo van a ver como un personaje creible…
En lo demás concuerdo en todo con el autor, me ha encantado éste texto/resúmen con lo mejor y peor de la segunda temporada.
¡Muchas gracias! :)
Hmm, yo sí que veo el asesinato de Alton en línea con el personaje de Jaime: no perdamos de vista que en los libros se comporta como un perfecto hijo de puta y no empieza a evolucionar de verdad hasta que en Tormenta de Espadas le ocurre… Lo que le ocurre.
En lo que estoy de acuerdo es en que la necesidad del crimen está pésimamente explicada, más que nada porque el mismo objetivo se hubiera conseguido con Alton haciéndose pasar por muerto. Lo único que me gusta de la escena es que aprovechan para mostrar bien gráficamente el motivo del odio de los Karstark hacia Jaime…
¡Felicidades por el artículo!
Sólo comento una cosilla: a mí Blackwater me decepcionó un poco, no sé, me parecía como si las escenas no estuviesen bien montadas, por ejemplo cuando la acción vuelve a Stannis pensé «¡anda, si éste todavía sigue en el mismo sitio!» o cuando aparecen los tropotocientos soldados Baratheon de repente…
Pero bueno, pase lo que pase disfrutaré con la serie… y con el quinto, en cuanto esté en mis manos!
Lo de Stannis también me pareció un error, sí. Imagina un pequeño cambio: Stannis en retaguardia en lugar de repartiendo mandobles con el primer grupo de asalto… Y, cuando Tyrion está convencido de haber ahuyentado a los asaltantes en su primera salida, Stannis levanta un brazo y hace entrar en batalla a una tropa de refuerzo (los mil Baratheon que aparecen de repente)…
Stannis sigue teniendo un papel relevante en la batalla pero como estratega, no de mamporrero.
Desde mi punto de vista esta bien adaptada. Esas modificaciones son necesarias, para un mejor entendimiento y progresion continua. Solo discrepo en el tema Ygritte y Dany. La histora de Dany en el 2do es un coñazo, pero son 10 semanas en las que no puedes dejar de lado a un personaje importante, el espectador se va perdiendo. Veo por tanto un alargamiento necesario.
Ygritte para mi necesitaba más minutos que Mediamano, ya que este me la sopla un poco, al ser personaje para que avance la trama es casi como un extra.
Lo unico que tengo que reprochar ahí es la forma de empezar a luchar, no llamarle traidor sin más, deberia gritar algo como que «dejó vivo el chochito y ahora por su culpa les han capturado»…. previa conversacion de «Ahora se que clase de hombre eres» (o algo asi era) cuando la deja viva y se lo cuenta (que bien lo podian haber puesto cuando estan de camino).
Vaya, que Mediamano no es un jugador ergo «pringao» además Ygritte me cae bien y es pelirroja xD.
Coincido en lo de la civilización super-avanzada valyria. Lo primero que pensé al leer sobre «fuego valyrio» fue gasolina. Y me imagino que la «maldición» de Valyria es radiación, o algo similar.
Aunque espero que sea sutil al respecto. No quiero pistolas laser en medio de las batallas de Daenerys con los Lannister, o quienes sea que estén batallando.
El fuego valyrio, como muchos otros elementos de CDHYF, está basado en acontecimientos históricos. En concreto alude al «Fuego Griego», un arma incendiaria utilizada en el Imperio Bizantino http://es.wikipedia.org/wiki/Fuego_griego
cuya fórmula exacta se ha perdido en el tiempo…
Es claramente fuego griego, sí. Es más, la famosa cadena que cierra el puerto y que en la serie se omite, existía de verdad, y cerraba el cuerno de oro de Constantinopla, puerto de la ciudad y base naval bizantina.
Hasta que no te he leido decir aquello de «Sansa y Perro»…….. No he caido en la cuenta. ¡¡Se tiene que estar ciega!!
Jajaja, es fascinante la enorme cantidad de «fan fiction» (que, por cierto, Martin odia por principio), dibujos, disfraces y erotomanía que ha generado el emparejamiento hipotético del Perro y Sansa. Supongo que a la gente le gustan los contrastes, y debe tocar alguna nota del inconsciente colectivo el juntar una (aparentemente) indefensa damisela con un bestiajo enorme pero que sabe ser extrañamente delicado cuando quiere…
La imagen que comento del actor dando de comer a unos pajarillos en la tormenta y partiéndose la crisma me parece taaaaan definitoria del personaje que interpreta…
En tu apartado de dudas añadiria, ¿por qué diablos arde Invernalia? ¿No se habían ido los hombres de Theon porque Bolton manda unos hombrs para que se rindan a cambio de que le entregasen a Theon? Me parece un final chapucero.
En el libro, es el bastardo de Lord Bolton el que incendia Invernalia después de asesinar a los hijos del hierro y capturar a Theon, en la serie es cierto que para los no lectores no queda bien explicado.
Intuyo que la explicación exacta de «quién quema Invernalia y por qué» la dejan para la tercera temporada, como un misterio y una manera intrigante de presentar a los personajes de Roose Bolton (apenas esbozado esta temporada) y su bastardo.
¡¡Sólo vengo a decir que Renly no era tan gay en los libros ni por asomo!! Tan sólo se insinuaba levemente, creo recordar. En la serie, en fin, ya se sabe lo que es bueno para el «showbisnes» y lo que vende.
Bueno, en los libros está bastante claro que es homosexual, ¿eh? Su Guardia Real se llama la Guardia del Arco Iris y cada uno de sus caballeros lleva un color diferente en la armadura: no hay más preguntas, Señoría. :)
El problema, como ya comenté en el artículo del año pasado, es que ningún personaje «punto de vista» tiene acceso a la intimidad del dormitorio real. Pero las cámaras de la serie sí lo tienen, así que lo muestran.
Yo encontré especialmente hilarante la escena en que Margaery Tyrell le propone a Renly poco más o menos que un trío con su hermano Loras…
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He parado de leer y ahora seguiré. Pero me he visto obligado a parar leer por que hay algo en lo que no coincido absolutamente, dices ; «Ahora me alegro de que lo haya hecho: la batalla mostrada en los libros se conserva en sus detalles esenciales (y alguna omisión menor, como la cadena que sella el puerto)», en eso. ¿La GRAN idea de Tyron un detalle menor?. Veamos, no me refiero a la gran idea en sí, que lo es, si no lo que representa ese hecho, añadido a otros en su labor por salvar Desembarco y lo doloroso que es su rechazo final y su poco reconocimiento para él. Comprendí su omisión por simple dificultad de explicarlo en la serie pues no conoces tan perfectamente la geografia de desembarco, pero en el libro a mi me parece sumamente importante, incluso es una de las sorpresas esas que nos regala Martin sin que nos haya dado una sola pista.
Coincido en que en el libro tiene cierta relevancia la cadena de Tyrion, pero visualmente en la adapatación queda mucho mejor la escena de un único brulote cargado de fuego Valyrio (además se muestra que es idea de Tyrion por lo que el mérito de salvar Desembarco del Rey continua siendo suyo).
Intuyo que la cadena aparecía en los primeros borradores del guión de Martin, pero tuvo que renunciar a ella por temas presupuestarios: una cadena de ese tamaño hubiera tenido que simularse por ordenador, y el presupuesto en CGIs les debió huir con la espectacularísima falla verde de fuego valyrio…
En la serie ya queda suficientemente claro para los no lectores que Tyrion es el artífice de la victoria de los Lannister sin necesidad de subrayarlo con la cadena. Eso sí, hubiera sido bonito ver en pantalla el momento en que izan la cadena (me la imaginaba como un objeto titánico, al estilo de las pelis sobre el Coloso de Rodas), pero no se puede tener todo.
Me ha encantado el artículo! En general estoy de acuerdo con todo, excepto con lo de la cadena del puerto, como han apuntado Campoamor y Garibaldi. Precisamente la cadena demostraba un par de cosas sobre Tyrion, y la no menos importante es que no sólo sabe hacer chistes y meterse en camisas de once varas. A Tyrion le importa Desembarco del Rey. A Tyrion le importan los Siete Reinos. Es un gran estratega y el verdadero heredero de lord Tywin.
Por otro lado, también han apuntado por ahí muy bien que si no nombran ya a Rhaegar mal vamos. De hecho, esperaba con ilusión la entrada de Dany en el puñetero templo para ver cómo abordaban la visión de Rhaegar y cómo conectaba la Madre de Dragones las piezas. Entre eso, el comerciante y la cámara secreta, la traición de la doncella de cama, entre otros detalles, la verdad es que para mí ha sido la trama peor llevada de esta temporada.
A Jon lo salvo por Ygritte, que me ha encantado. Mucho más que en las novelas, que la veía yo sosita. Muy limpia, con los dientes rectos y las cejas delineadas, pero maravillosa. Ese momento en que restriega el culillo contra Nieve no tiene precio.
Muy buen texto, pero a mí me gustaría añadir 2 cosas que creo que nadie más ha hecho.
1-¿No han spoileado a Margaery? Quiero decir, en los libros tiene 16 años y ponen a una actriz de 30, se supone (en teoría) que es una muchacha encantadora, inocente y con la flor en su sitio. Y sin embargo, en la serie ya spoilean demostrando que es la ramera del pueblo y sus ansias de poder, a lo Cersei 2.0, cosa que no se sabe hasta el cuarto libro.
2-Me parece que la historia de los Riverlands, Catelyn/Brienne/Robb/Jaime no tiene mucho sentido sin Aguasdulces… no sé cómo meteran todo eso en la tercera temporada, pero vamos, parece que Robb va del Oeste a los Ríos en un par de horas… el fallo empezó en la primera temporada, lo sé, pero en esta temporada yo creo que han perdido mucho margen de maniobra.
Buenas aportaciones, sí. Te doy mi opinión al respecto:
1) A partir del momento en que le suben la edad a Margaery, es difícil presentarla como una inocente criatura… Aunque hubiera sido factible: darle una imagen pública de ingenua hubiera hecho destacar aún más la escena en que le propone a su marido una especie de trío con Loras. :) Se pierde ese matiz de vicios privados/virtudes públicas del libro, pero el cambio permitirá que las interacciones y durísimas rencillas con Cersei sean más explícitamente moviditas («no quiero ser una reina, quiero ser LA reina»). Veremos.Eso sí, gracias al cambio tenemos una justificación clara (recordemos que en la tele es importante explicitar todo más que en los libros) a la ambición de los Tyrell y sus variados cambios de chaqueta.
2) Quizá sí han tardado mucho en presentar Aguasdulces, pero al fin y al cabo hay un límite en el número de personajes, lugares y situaciones que se pueden introducir en cada (brevísima) temporada sin que los no lectores de los libros se pierdan. Si te sirve de consuelo, se ha abierto el casting para Edmure Tully… ¡Y para el Pez Negro! Parece que por fin tendremos Tullys en la serie…
Enhorabuena, me ha encantado tu articulo, coincido en casi todo contigo y la verdad en las cosas que se añaden en los comentarios como los Reed también.
respecto a la S3, serán 2 temporadas para tormenta y otras dos unificando Festín y Danza (eso leí hace poco en winter is coming)
Un saludo y lo dicho, enhorabuena ;)
Excelente critica, pero se te olvido Bran, la forma como se cuenta en la seria la toma de Invernalia, la muerte de Rodrik, los hermanos reed no aparecieron y son demasiado importantes en la historia de Bran…
De los momentos que comentas, me encantó especialmente la muerte de Rodrik: un buen ejemplo de escena que casi resulta más potente en la adaptación televisiva que en el original literario. Esa decapitación cutre a varios golpes y patada es muy propia del pobre Theon y un buen contraste con las ejecuciones limpias y solemnes a las que nos tenían acostumbrados…
Pues yo creo que eso nos dice mucho de Theon…de su trasnformación…me encantó (entiendase que no disfruté jaja) mucho esa escena en los libros..imaginar esa cara descompuesta de Theon…su poca fuerza pero su perseverancia….no se…a mi me parecio genial,y horrible. En la pantalla es demasaido dulce para la historia…bueno, matizo…para los que conocemos toda la historia leyendo los libros, para la serie no, es perfecta.
Excelente análisis de la temporada. Coincido prácticamente con todo lo que dices.
Coincido contigo en que te has dejado a Bran, como se lo han dejado los guionistas durante prácticamente toda la serie. Pero es que más, con tan poco, es difícil de conseguir.
En general podemos estar muy contentos de disfrutar de una obra con tanta calidad e independencia creativa como esta. Los libros son muy superiores, pero su esencia ha sido bien transmitida a la serie.
Extraordinario artículo, para una extraordinaria serie. Palabra de fan duro.
Y oh sí !!. La parte de Bran y sus sueños y los hermanos comedores de rana…la hecho de menos.
Dice Martin que ya ha empezado el casting para los Reed en la tercera temporada, así que pronto los tendrás en pantalla… :)
Genial.
Un buen punto de vista, comparto este artículo porque me ha gustado mucho.
Como opinión personal de esta temporada debo decir que se me ha hecho muy corta y han realizado pinceladas muy cortas de cada diferente lugar donde se desarrollan los acontecimientos. Por lo demás el final me ha gustado, pero no quiero que muera el gordo amigo de Jon Snow y tiene la pinta,jajaja Me gustaría leer los libros para comparar.
Un buen artículo Josep.
un saludo,
Marc
Sólo comentar que en mi blog – ehem – tengo un enlace para los que prefieran pagar 10 euros por Danza de Dragones (en español y en papel) de importación, a pagar los 46 euros que Gigamesh pide.
Que es para matarlos.
Pues mira, yo voy a pagar con gusto lo que pide Gigamesh, del mismo modo que compré en su momento la edición inglesa… Hay cosas en las que considero adecuado gastar el dinero, y un libro bien editado es una de ellas. Me gustan mucho las ediciones de Gigamesh, y sé de buena tinta que la traducción de Danza de Dragones ha sido especialmente difícil, y su resultado muy bueno. Así que me retrataré por caja…
(Hay una forma de conseguir un ejemplar, no más barato sino gratis total: ¡hoy mismo los de Gigamesh están liberando varias Danzas de Dragones en plan bookcrossing, dejando pistas en Twitter!).
Hola, me ha gustado mucho el artículo. Poco puedo aportar a la comparativa libro-serie, pues no me he leído los libros. Pero sí se me ocurre que podría aportar una cosita al debate, aprovechando mi experiencia en el medio. No quiero parecer un listillo, pero igual la gente tiene curiosidad por como es una producción por dentro.
Estoy de acuerdo en que en muchas escenas se echa en falta mucha figuración (extras), pero respondiendo a tu pregunta: Sí, trabajar con extras sale caro. Carísimo.
No estoy seguro de dónde se graba la serie, me parece que principalmente en Reino Unido, con ocasionales localizaciones por el resto de Europa. Asumamos que la productora es legal y respeta los convenios laborales de cada país donde rueda.
Primero de todo: No, no pueden trabajar gratis. Tienes que darles de alta y pagarles. Dado que es una serie de «época» tienes que hacer preproducción para filtrarlos por aspecto, hacerles pruebas de vestuario y maquillaje. Y luego el día de rodaje tienes que transportarlos al lugar de rodaje, vestirlos (con trajes previamente alquilados o confeccionados), maquillarlos, peinarlos, darles desayuno y comida. Eso implica que hay que contratar coordinadores de figuración, y hay que contratar refuerzos en los departamentos de maquillaje, peluquería, vestuario, dirección, producción, conductores y catering. Hay que multiplicar el tamaño del campamento para que se cambien (bien mediante carpas, bien mediante caravanas). Hay que duplicar la capacidad del comedor. Etc, etc.
Y todo eso si asumimos que va a ser figuración «normal». Si nos metemos en el terreno de las batallas estaríamos hablando de ensayos, especialistas y la cosa se va de madre.
Vamos, que aunque el extra reciba un jornal diario que no llega a los 30€ (en España. En Inglaterra será el triple, en Croacia la cuarta parte) el coste que a la producción le supone cada figurante puede llegar a 200 € (En España. En Ing…)
Ahora, prefiero esa actitud empresarial anglosajona que viene a decir que si no puedes mostrar algo bien, mejor no mostrarlo. Juego de Tronos es una serie en la que gran parte de los hechos ocurren fuera de plano, pero lo que se nos muestra está muy bien rodado.
En España somos más del quiero y no puedo. Hacemos una megabatalla con cuatro gatos, en las que la figuración ha venido sin casting previo por lo que vemos cosas como un romano con aspecto de «poligonero» o soldados a los que el traje les queda grande.
Por poner un simil, si en España se hiciera The Walking Dead, habría presupuesto para contratar a 80 zombies, pero solo para maquillar a 40.
¡Muy interesante el comentario, muchas gracias por escribirlo! Nunca he participado en un rodaje de estas características, así que no me había planteado los costes inevitables de contratar extras… O generarlos por ordenador, que según cómo (si se quiere que quede mínimamente creíble) debe ser más caro y complicado aún.
Y muy buena la comparativa entre las mentalidades anglosajona e hispánica. :) Una cosa buena que tienen los libros es que hay muchas batallas y sucesos multitudinarios que ya en la novela se muestran elípticamente… Sin embargo, es bueno saber que en momentos cumbre como Blackwater la HBO se ha decidido a coger el toro por los cuernos en la medida de sus posibilidades.
Y por cierto, como nota lateral… Parece que se ha abierto un casting para hacer de extra en la tercera temporada. Si algún lector de Jot Down anda cerca de Irlanda y se decide aquí puede optar a ello… :)
http://grrm.livejournal.com/280288.html
Yo tmbién coincido en que la batalla del capítulo 9 queda un poco de andar por casa. Se echa en falta la pasta de una superproducción y las muertes super sangrientas le dan un toque de peli serie B en la que unos colegas experimentan con los efectos especiales. Pero bueno, habrá que acostumbrarse porque quedan muchas batallas y como comentan por arriba, contratar a mil extras sale por un pico.
De los «efectos supersangrientos» (que efectivamente pueden dar un toque a serie B) me sobran un par durante la batalla, pero por ejemplo los correspondientes al Perro me encantan… Como decía en el artículo, pocas cosas califican más como un bestia temible a un guerrero como su afición a ir seccionando en dos a los enemigos. Sólo les falta empalarlos, como Vlad Drakul (aunque, bueno, igual su hermano Gregor…).
Buen artículo, aunque discrepo en varias cosas.
Efectivamente, Blackwater es un gran episodio pero le falta bastante espectacularidad, colorido me atrevería a decir. Y eso que es el mejor episodio de una serie que tiene una primera mitad absolutamente infumable.
Coincido plenamente en la trama de Daenerys y la falta de tensión en la escena de los brujos de Qarth. Hubiese quedado muy WTF y muy interesante.
Echo en falta alguna mención al gran Jaqen H’gar, excelente casting y gran trabajo.
También sobra enormemente toda la trama de Robb Stark, para mí un actor bastante mediocre al igual que Catelyn que es insufrible. No entiendo tampoco la defensa a ultranza del personaje de Brienne, que tiene mucho parecido pero poca chicha. Flojísima la actriz.
Y efectivamente, uno de los momentos que más me cabreó fue la gratuidad con la que Jaime se carga a su allegado en la celda de Aguasdulces. Discrepo: Jaime no es un tipo cruel, es egoísta pero no busca el sufrimiento ajeno de forma gratuita.
Empecemos por el punto en que estamos de acuerdo: no lo he mencionado explícitamente en el artículo, pero efectivamente Jaqen H’gar es uno de los puntos fuertes de la temporada… Es curioso cómo en cada libro/temporada Arya acaba encontrando algún modelo paterno progresivamente más extraño: Syrio Forel, Jaqen H’Gar…
Jaime no busca el sufrimiento ajeno de forma gratuita, sino con un objetivo. No lisia a Bran por divertirse sino para esconder un secreto, no mata a Alton Lannister por maldad sino para conseguir escapar. Desde ese punto de vista, el asesinato está perfectamente en onda con el personaje… El error de los guionistas está en el hecho de que la muerte de Alton sea tan poco instrumental en la fuga: el plan de Jaime debería haber sido algo más elaborado o como mínimo justificar más con el diálogo la necesidad de que Alton muriese.
Y no entiendo como puedes encontrar flojísima a la actriz que encarna a Brienne: reitero que para mí es EL hallazgo de la temporada. No sólo en diálogos sino en miradas, forma de moverse y actitud, para mi gusto es una Dama de Tarth perfecta. De todas formas, en las interacciones con Jaime durante la tercera temporada tendremos el desempate entre tú y yo: allí tendrá Christie oportunidad de brillar o de hundirse.
¿Omisión menor la cadena que cierra el puerto? Has leído el tercer libro?
Y el cuarto, y el quinto, y los resúmenes del sexto que van haciéndose públicos tras las lecturas de capítulos de Martin en convenciones. :) Pero, como he repetido muchas veces, aunque haga comparativas de libros y serie no hay que perder de vista que son dos medios distintos, cada uno con sus propias limitaciones y constricciones.
De todas formas, si el propio autor de las novelas considera la cadena del puerto un punto que puede omitirse de la adaptación televisiva (teniendo en cuenta que el guión del capítulo lo ha escrito él en persona) no voy tampoco a enmendarle la plana… :P
la batalla no es ni la mitad de buena que en el libro…
En esta entrevista Martin comenta las dificultades con que se encontró a la hora de adaptar Blackwater a la pequeña pantalla:
http://www.hbo.com/game-of-thrones/inside/interviews/george-r-r-martin.html
«If you look at the Battle of the Blackwater in the books, it occupies seven or eight chapters, intercutting from three points of view. If you shot it as I wrote it in the book, it would cost $100 million and take two months to shoot.»
Felicidades por el artículo.Soy hiperfan de los libros, como tú me he leído los 5 y estoy de acuerdo en casi todo.
Detalle:sobre la House of Undying…..no sé qué tiene que ver con ADWD, y me parece que poner en escena las profecías del libro no era HBO.
Más cosas: hecho en falta algo más de reconocimiento a las grandes actuaciones. Aparte de Dinklace, Allen/Theon, Dance/Tywin, Williams/Arya, Gleeson/Joffrey, Turner/Sansa y Heady/Cersei están de Emmy. Y Hill sale poco, pero es el Varys más perfecto que podríamos imaginar.
No ha habido Ramsey Snow/Reek ni Sopa de Comadreja. La historia de Theon y la de Arya ha sido magnífica en la serie…obviando esos dos aspectos más menos claves de los libros. Muy curioso.
Otro: se han cargado a The Ticker antes de tiempo. La escena futura de la posada de Arya será algo diferente. Lástima, porque es una de las más potente de Arya en toda la serie.
Como adaptación le doy un 8, como serie un 9. A la primera temporada le daría un 9 como adaptación y un 9,5 como serie. Es necesario mencionar que el segundo libro es más flojo que el primero…pero tranquilos, el tercero es el mejor de toda la saga.
No puedo explicar aquí a qué me refiero con lo de las profecías y el final de ADWD sin que me rebanen el pescuezo por spoileador, así que te lo cuento mejor por correo privado.
Las actuaciones son soberbias, sí: en los momentos más flojos argumentalmente hablando, las interpretaciones han sido el engrudo que ha mantenido la temporada en pie. Tan sólo tengo ahora mismo graves reservas hacia Stannis/Dillane, más que nada porque sigo temiéndome ahí un miscasting cruzado con Davos/Cunnningham.
*Me sobra una h en el tercer párrafo, no puedo/sé editar el mensaje anterior
No se si pensaréis que soy un ignorante con respecto a la serie, pero tengo una gran duda con desenlace de la batalla en Desembarco del Rey. ¿Cual es la distancia que separa a esta ciudad de Harrenhal?
Me parece una trampa de guión la irrupción del padre de los Lannister, cuando ninguno de sus hijos tenía la más mínima esperanza de ello…
En los libros la llegada de Tywin y los Tyrell se mantiene también en secreto para evitar filtraciones, y si puede llegar al campo de batalla sin ser detectado es gracias a los salvajes de Tyrion, que se cargan a los exploradores de Stannis… Y creo que los ejércitos combinados no vienen desde Harrenhal sino desde Puenteamargo, algo más cerca.
Pero vamos, en cualquier caso si la trampa de guión está ahí creo que es más para que Tywin le quite la gloria a Tyrion que por otra cosa. El desenlace de la batalla está en realidad cantado a partir de la explosión del fuego valyrio, lo demás es tozudez de Stannis.
Maravilloso resumen/crítica de la segunda temporada. Estoy de acuerdo en casi todo lo que dices. Sin embargo, a pesar de que el capítulo 9, con la escena del Aguasnegras, me pareció genial, me decepcionó que la huestes de Desembarco del Rey no contraatacaran con barcos, y no aparecieran las famosísimas cadenas de Tyrion. Y de acuerdo estoy en que también me ha decepcionado bastante la historia de amor de Robb y la chatunga esa que se han sacado de la manga.
Por cierto, creo que Tyrion queda poco desfigurado después de la batalla del Aguasnegras con respecto al libro.
Si hay algo más caro que representar una enorme cadena cerrando un puerto debe ser mostrar una batalla naval, así que imagino que por ahí van los tiros de la ausencia de barcos de los Lannister en pantalla.
Y en el libro queda mucho más desfigurado Tyrion, claro (¡le arrancan la mayor parte de la nariz!) pero en TV hubiera deformado demasiado al pobre Dinklage, que tiene que resultar reconocible y es además un fan-favourite… Una enorme cicatriz ya da el pego.
Que Robert Baratheon habría estado cazando en lugar de estar en la batalla??? Por todos los dioses, que barbaridad!!
El Robert Baratheon de la batalla del Tridente no, desde luego… Pero el gordo borracho putañero de sus últimos años probablemente estaría cazando a manudo elefantes en Botswana.
Estoy de acuerdo con MichaelCor… para Rober (aún en su versión gorda y borracha) lo único que tenía sentido era la batalla, no sabía ser rey, pero si guerrero. De hecho, por eso precisamente está gordo y borracho, porque una vez acabada la guerra, ya no puede combatir. De hecho (no recuerdo si en los libros, la serie o en ambos) quiere pelear en una competición entre los caballeros, algo así como una escaramuza en la que «sólo puede quedar uno» y no le dejan. Si hubiese habido guerra, habría muerto o triunfado en primera línea, sin duda.
«No puedo explicar aquí a qué me refiero con lo de las profecías y el final de ADWD sin que me rebanen el pescuezo por spoileador, así que te lo cuento mejor por correo privado. »
¿Sería mucho pedir un copiar y pegar para mí, que se me ha pasado también ése pseudospiler de la serie?
Cuándo te imaginabas a los caminantes blancos «mi imagen de los Caminantes era mucho más oscura, estilizada, tecnológica incluso» ¿no te imaginabas algo así? http://images5.fanpop.com/image/photos/25300000/Darth-Sidious-darth-sidious-25370721-1600-1200.jpg
Por otro lado no tengo nada más que añadir a TODO lo dicho ya, creo yo. Lo que faltaba por comentar en la reseña se ha dicho en los comentarios. Mi enhorabuena por el trabajo.
¡Muchas gracias! :)
Te he enviado los detalles de la teoría sobre las visiones a la dirección de mail que has puesto al dejar el comentario (si quieres que te los mande a otra dirección, dilo).
No tengo muy claro qué imagen tenía en mente de los Caminantes Blancos, pero seguro que eran menos parecidos a morlocks primitivos…
Excelente artículo, de verdad…
Yo no he visto aún nada de la segunda temporada pero sí me he leído todos los libros incluyendo el quinto.
Me gustaría comentar dos cosas (teniendo en cuenta que hablo por lo que ocurre en el libro, no en la serie).
1. Esto ya lo comenta alguien en otro comentario pero querría hacer hincapié: En los libros, Ygritte es mil veces más importante para la evolución de Jon que Quorin Mediamano (y no estoy diciendo que éste no lo sea), pero lo que hace tambalearse el mundo y las convicciones de Jon es la aparición en su vida de Ygritte… Hasta tal punto que gracias a ella acaba por convertirse en una especie de Kevin Costner en «Bailando con Lobos» (Un diplomático con los salvajes y hasta admirador de muchas cosas de la cultura de estos) hasta el desenlace de Danza de Dragones que sabréis los que lo habéis leído. Todo eso viene por Ygritte, no por Quorin, así que en comparación, podría decirse que Quorin sería el general que decide enviar a Kevin Costner a un puesto fronterizo en territorio sioux e Ygritte sería «En pie con el puño en alto», la mujer blanca que se ha «convertido» ya en india… Así que no sé cómo habrán hecho en la serie, pero desde luego, teniendo en cuenta lo que ambos personajes significan en los libros, veo absolutamente normal que si tienen que recortar de alguno de los dos personajes, sea del de Quorin en beneficio del de Ygritte… Vuelvo a decir, hablando según lo que pasa en los libros y siempre en mi opinión (que respeto completamente las de los demás)… «You know nothing, Jon Snow»
2. Esto es más una duda, porque según lo que habláis de la batalla del Aguas Negras, me ha quedado más que claro que el tema de no incluir la cadena de Tyrion es por cuestión de presupuesto, con lo cual nada que objetar, pero en los libros, la cadena es vital para evitar que toda la flota de Stannis pueda huir del fuego valyrio volviendo por el río a mar abierto, así que mi duda es ¿por qué en la serie la flota no huye a mar abierto si no hay cadena, o es que la explosión de fuego valirio «chamusca» directamente a todos los barcos?
Nada más, un saludo y enhorabuena por el artículo.
Como seguidor de los libros por encima de la serie, creo que la adaptación es más que aceptable a pesar de tener algunos fallos. De todos modos, es verdad que el segundo libro es más complejo que el primero, así que veo relativamente normal que el nivel haya bajado un poco respecto a la primera temporada (en mi humilde opinión).
Cambios más o menos acertados aparte, hay un aspecto en el que estoy en absoluto desacuerdo con el artículo.
¿Blackwater el punto álgido de la temporada? Lo veo totalmente al contrario. La parte de Cersei está muy bien, ¿pero el resto..?
1- Mientras todos van en barco, va bien la cosa, en cuanto desembarcan… se supone que son ejércitos con varios miles de soldados, por dios, si parece una pelea de colegio… ¿20 contra 20?
2- ¿A que viene Tyrion haciéndose pasar por William Wallace? No va con su personalidad en absoluto y es tan cliché que casi lloro de la pena.
3- Fallo en el guión espectacular. La idea de quemar los barcos, correcta. Ahora bien, el plan maestro de Tyrion… ¿salir por un túnel a espaldas de sus enemigos? ¿En serio? Si tuvieran un tanque, o varias AK47, podría servir, pero por dios, que van con espadas, ¿qué ventaja te da pelear mirando a la pared o mirando al mar? Ninguna. Además confirma la guerra de 20 contra 20, porque me gustaría a mi saber como sacas a 10.000 soldados por un pasillito…
4- Ya está mencionado, pero… Stannis peleando, no lo veo mal. Lo que sí es bastante cutre es que se cuele sobre le muro el primero de todos y sin ningún problema, como si entrase en su casa por la ventana de la planta baja que ha dejado abierta. Y una vez ha entrado.. ¿Cómo demonios escapa una vez han perdido la batalla?
5- Tywin y Loras al rescate. ¿Wtf? Parece que hubieran estado escondidos detrás de una roca 10 minutillos. A ver… estamos en un puñetero continente, con todo el mundo desperdigado. La batalla dura 10 minutos y ¿justo aparecen? No se, en el Abismo de Helm (por poner un ejemplo) de «El señor de los anillos» Gandalf llega por la mañana y dando la impresión de que llevan la tira de horas peleando, pero esto es algo así como una peleilla rápida entre 2 bandas rivales a la que se une una tercera banda que pasaba por ahí….
En resumen, la temporada, salvo algunos detalles (como las decisiones de Robb o Jon ya explicadas en el artículo, la parte de Daenerys en general) está muy bien, pero en concreto la parte que se destaca en el artículo, creo que es justo lo contrario, el «supuesto» climax de la temporada es un bajón absoluto, ya que todo lo épico que podría haber sido se convierte en «una peli de batallas sin presupuesto». Lo único destacable de ese episodio, Cersei.
Entre la 1ª y 2ª temporada de Juego de Tronos media el mismo problema que respecto a «Hermanos de Sangre» y «El Pacífico»: la fuerza narrativa.
La dispersión de los personajes y escenarios hace que toda historia pierda fuerza narrativa. En la 2ª temporada de Juego de Tronos hay capítulos en que no se desarrolla nada sino que parecen sucesiones de imágenes, de personajes. Esto se aprecia observando los títulos de los capítulos: que muchas veces hacen referencia a un evento del capítulo que apenas representa unos pocos minutos del total. Esto no funciona.
No funciona tampoco la forma en que están filmadas algunas escenas de acción. La escena del arresto de el Maestre Pycelle, por ejemplo, está muy muy mal resuelta. Incluso en la batalla de Aguasnegras la serie parece despeñarse por la senda de un serie B, incomprensiblemente. Igualmente, no tiene sentido la forma en que se presenta Stannis en las Tierras de Tormenta; ¿tanto costaba plantear un asedio con unas pocas escenas?
Aquí el problema es que una serie del alcance de Juego de Tronos conste sólo de 10 capítulos por temporada. Son insuficientes, a todas luces. El propio Martin ha dicho que serían necesarios 12-13 capitulos. Con el dinero que están ganando… no tiene sentido el no ampliar el número de capítulos o la duración de los mismos.
Desgraciadamente, estas historias que siguen fanáticamente millones de nerds o freaks incondicionales, tienen tanta manga ancha por parte de éstos, que no hay incentivos para mejorar.
Otra oportunidad desaprovechada: el asedio de Invernalia. En el libro se plantea de forma muy interesante, mostrando la traición de los Bolton y la desesperada situación de Theon Greyjoy que se ve aliviada por una presunta victoria que resulta finalmente no serlo. En lugar de esto se optó por presentar a Theon Greyjoy lanzando un discurso calcado del «Discurso del Día de San Crispín» del Enrique V de Shakespeare para ser patéticamente abandonado por sus hombres. FATAL.
Pues fíjate que a mí la escena del discurso de Theon me ha encantado: resume la mayor virtud del personaje (su entusiasmo) y su mayor defecto (que es un pobre hombre) con economía de medios y humor…
Creo sinceramente que si han planteado así el asedio de Invernalia es para reservarse la situación con los Bolton para la tercera temporada. Al fin y al cabo Roose ha salido bien poco esta temporada, y Ramsay ni siquiera ha sido presentado aún… No son personajes suficientemente significativos en pantalla como para que su traición tenga sentido televisivo.
A mí me gustaría destacar un punto más con respecto al reparto: el actor que hace de Joffrey. Creo que está soberbio, no, lo siguiente. No es un personaje fácil de interpretar sin caer en la caricatura, pero él consigue un equilibrio perfecto entre el sádico sin escrúpulos y el niñato cobardica y mimado. Constantemente se percibe, incluso en escenas donde no lo expresa abiertamente, cómo está lleno de ira, la ira del que cree que se lo merece todo y tiene derecho a todo, aderezada por su característico punto de locura. La sensación de amenaza es constante, la sensación de una bomba a punto de estallar en cualquier momento; eso nos permite ponernos de golpe en la piel de Sansa, identificarnos con el miedo en el que vive cada momento. No sé, es una de las interpretaciones que más me ha llamado la atención en la temporada, y creo que el hecho de que sea un personaje tan odiado como poco carismático hace que inconscientemente no se tenga en cuenta la labor del actor, que queda oscurecida detrás de el trabajo de por ejemplo Brienne o Cersei (que a mi parecer están fabulosas en esta temporada pero no desmerecen a Joffrey salvo por ser más queridas o más carismáticas) o de Theon, que a pesar de ser un pobre hombre (impresión que por cierto el actor consigue transmitir perfectamente) no deja de ser más querido por el público que Joffrey (siempre es más interesante un personaje con conflictos que un personaje malo sin más). En resumidas cuentas, que me encanta la manera en que este actor ha conseguido equilibrar los contrastes «matón de patio de colegio-psicópata sádico-niñato mimado» que caracterizan a Joffrey. ¡Un saludo y enhorabuena por un muy buen artículo!
Totalmente de acuerdo… Aunque tenga mis reservas hacia la escena del «spanking king» que he comentado en mi artículo, reconozco que la intepretación de Jack Gleeson como Joffrey es sencillamente soberbia. Curiosamente, parece ser que el actor es un tipo más bien tímido, simpático y culto: ahora mismo está estudiando Filosofía y Teología, y quiere hacer un máster en hebreo antiguo (!).
Por otro lado, no corre el peligro de encasillarse en un personaje, porque ha dicho en alguna ocasión que no seguirá una carrera en el mundo de la interpretación después de «Juego de Tronos»: como mucho, teatro amateur. Veremos…
Nunca me lo hubiera imaginado con esos estudios!!! Es una pena que no quiera seguir siendo actor, creo que tiene muchas posibilidades. ¡Pocos actores consiguen ser tan odiados como él! :P
Y bueno, la famosa escena del «spanking king» es un poco pastiche, en efecto, pero no es culpa suya… y no la resuelve mal, aunque la edad juegue en su contra (hay que tener cierta edad y cierto grado de madurez para llegar a comprender ciertas cosas).
Perdona que he partido el comentario en dos, pero le he dado al ENTER sin querer.
Yo no tengo mucho que objetar a lo que has dicho. No he leído los libros así que no puedo comparar. Tuve que verme otra vez la primera temporada porque no me acordaba de nada y la verdad es que esta segunda es muy poca cosa en comparación con la primera que era muy potente. Esta la veo más de transición. Pero lo que me ha llevado a escribirte es tu comentario acerca del cambio de nombre de Asha para que no haya confusiones y no puedo estar más en desacuerdo con tigo. Estoy viendo The Wire y créeme que agradezco a Juego de Tronos que se moleste en poner nombres claramente diferentes a sus personajes. No es lo mismo ver los nombres escritos en un libro que oirlos.
Hola Josep
Sobre el punto 4 de pegas la limitación de producción no es únicamente por el coste de figurantes, casi eso es lo más barato (ponte que unos 100 euros/figurante, si hubieran puesto 20 figurantes más sumaría 2.000 euros, pecata minuta). Lo que encarece, y que hay que sumar, es que a cada uno de esos figurantes debes vestirlos, atrezzarlos, maquillarlos (por lo que no solo te suben las partidas de estos accesorios, sino que seguramente tendrás que contar con un maquillador y un peluquero más por cada 6 figurantes más, y los sueldos que conllevan) y sobre todo, que desde el punto de vista de dirección mover a más figuración provoca que el rodaje sea más lento (es decir, que en vez de tardar, por ejemplo, dos horas o tres en rodar la escena, seguramente necesites 5 o 6 horas, es decir, casi toda la jornada).
Para tu info :)
En cualquier caso tu idea de aprovechar a los fans es cojonuda. Me la apunto para mi.
Añado:
Es lo que se llama «mover la figuración», es lo que más peso conlleva en un rodaje. Si hicieras, por ejemplo, una escena de una batalla con 200 figurantes seguramente necesitarías dos días para rodarla. Con 20 figurantes en media jornada puedes planteártelo.
Y lo más caro siempre es el total de días para rodar el capítulo, porque ahí computas el 100% de la estructura.
Se me olvidaba, más súmale la dificultad de mover esa figuración. 20 tíos haciendo lo que tu quieres y que salga perfecto el plano es mucho más fácil que 200 tíos que lo hagan a la perfección. Seguramente con 20 tíos harás 5 o 6 tomas, con 200 tendrás que enseyar un día entero y repetir 15 veces.
Sobre tu duda 2 de firmar con lobos pues el problema es parecido. El problema de filmar con «animales y niños» siempre es el mismo: el número de tomas que necesitas para que salga el plano perfecto puede ser infinito (y debo añadir también si te tocase rodar una escena con Marilyn, jeje). Y si para que te salga bien el plano con un animal puedes llegar hasta a 20 tomas, quiere decir que esa escena puede llevarte toda una mañana rodarla, es decir, se encarece la escena muchísimo.
Perdón, «filmar» no «firmar».
Perdón, que escribí estos comentarios con gente a mi alrededor de charla y no me di cuenta que escribí 4 veces lo mismo. Mis disculpas.
Ya le preguntaron a Martin si explicaría de una forma «científica» algunas cuestiones del mundo y dijo que no, que estaba escribiendo fantasía y que si quisiese escribir ciencia ficción estaría escribiendo ciencia ficción.
Así que poca o ninguna ciencia o tecnología vamos a ver, pero sí mucha magia. Y lo de las estaciones lo explicará cuando toque, ha dicho, y además tendrá coherencia con la trama, yo pienso (yo tengo mi teoría).
Ay, el fuego y el hielo…
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La cadena que sella el puerto del Aguas Negras no me parece una «omisión menor», me parece una cagada bastante fea.
Por lo demás, excelente crítica.