Queda bonito, y quizá no sea una tontería, hablar de las pintadas como del twitter predigital. Un twitter predigital, porque el espacio limitado de una pared o 140 caracteres obliga a la concisión y la brevedad. Por el amplio público al que se dirigen. Porque pueden ser anónimas y casi siempre son soeces, demagógicas y previsibles. Y también porque a veces, al doblar alguna esquina, encontramos entre tanto garabato bobo magníficas muestras de ingenio.
Para hablar de pintadas está bien comenzar por Rafael Conde, El Titi. El Titi utilizó las que estaban de moda en la transición para arrancar su Libérate, que además de un grito festivo lleno de razón era también una pintada. “En las calles las pintadas / están de moda hoy en día / verdes, negras, coloradas / pidiendo la autonomía. / Hoy mismito he visto una, ay que me llegó al corazón / la verdad como ninguna, y llenita de razón”.
Hace años, no sé si en facebook o en un blog que ahora estoy tentado de retomar, pregunté a mis amigos por las pintadas más brillantes que habían visto. Entre todos nos salió una longaniza de delirantes de comentarios que recogía algunas de las que siguen. No todas pueden verse ya, pues han sido borradas o las paredes donde se escribieron derribadas.
No me pegue usté, madre, en el margen de una carretera rural de la provincia de Castellón.
El califa, pule trate, pule grifa, en una céntrica calle de Castellón. Y al lado una enigmática Tú no eres Jordi Puig.
Saben aquel que diu que iba un romano, delante del Instituto Peñagolosa de Castellón.
No me mataréiscomo a un cordero / sólo moriré como yo quiero, según la frase del nacional-sindicalista Ramiro Ledesma Ramos, con las letras de final difusas, como si el autor no hubiera podido evitar la muerte del animal pascual y respetar su grito público de dignida.
Burriana, París, Londres, en la salida de Castellón hacia los pueblos del interior.
Haremos una hoguera y kemaremos a Korkuera, en un contenedor de un garito de mi pueblo.
La culpa és teua, en una pared de mi pueblo, al lado de una era.
A França també n’hi ha masos, algo así como En Francia también hay pueblos en traducción libre que facilita la comprensión y que ataca la supuesta superioridad de todo lo extranjero.
El señor hizo en mí maravillas, en Castellón, frente a la casa de un vecino poco agraciado.
Tots morenos i el cul blanc, delante de la piscina del pueblo de Atzeneta.
Moros no, chinos ya veremos, en una pared de Castellón.
Las pintadas de lavabo, ¿también podrían contar como proto-Twitter?
Un blog interesante, sobre esto de las pintadas:
http://prohibidofijarcarteles.blogspot.com/
Mi favorita la tengo recogida en una foto. La tomé en Zamora: «En 30 años, todos al garete».
«No queremos trabajo, queremos dinero. Dinero gratis», en una pared de Torrelavega.
En Madrid, en el barrio de Hortaleza en el puente peatonal que cruza la M-40 (para acceder a los edificios de Erikson, Iberdrola, etc) había una pintada que decía «Tu vida es una mierda y lo sabes»
La verdad es que no animaba mucho leerla a las 9 de la mañana cuando ibas a trabajar
«Nopin tal» en la pared de un comercio chino cercano a mi domicilio.
Ya puestos, haré propaganda del fotolog de una amiga. Señoras y señores, no se pierdan: http://muroshablados.es/
Contiene una buena recopilación de pintadas :)
Pues en mi pueblo hay una que reza: «Vamos a morir todos» y la firma «Un señor»
Simpático, el hombre.
«Retorno a la ortodoxia punk» en un callejón de Granada.
«Aborto obligatorio», en la tapia de un solar en Alcalá de Guadaira.
Basta fatti, vogliamo promesse, en el centro de Génova.
En Vitoria, hace más de 50 años, alguien escribió en la pared el clásico «TONTO EL QUE LO LEA». Y otro, que debió leerlo y se molestó, apuntó debajo «Y MAS TONTO EL QUE ESCRIBE EN LAS PAREDES».
En Castellón, en la calle Herrero, hubo una muchos años que me encantaba: «Marcianos: iros a Marte»