Música

Oasis antes de Oasis: 30 años del Definitely Maybe

Oasis. Foto Cordon Press.
Oasis. Foto: Cordon Press.

La noche del 10 de agosto del año 1966, el presidente de Elektra Records, Jac Holzman, acudió al club Whisky a Go Go, en West Hollywood, para asistir al concierto de un nuevo grupo de Los Ángeles sobre el que le había hablado uno de los artistas de su compañía, Arthur Lee, el emblemático líder de la banda Love. Ocho días después, regresó al club acompañado por el productor Paul Rothchild para que este le diese su opinión sobre aquella banda, todavía desconocida. Esa noche, en cuanto terminó el concierto, Rothchild aconsejó a Holzman que le ofreciese un contrato al grupo allí mismo para publicar un álbum con su discográfica. Los nombres de sus integrantes eran Robby Krieger, John Densmore, Ray Manzarek y Jim Morrison, el grupo se llamaba The Doors y, de ahí en adelante, Paul Rothchild produciría para Elektra Records todos sus discos hasta L.A Woman.

Hubo un tiempo en que esa clase de fichajes, resultado de una maqueta fascinante o una serie de directos impactantes, ocurrían a menudo. Era el tiempo en el que, para la industria musical, lo más importante era la música. También el carisma, pero, sobre todo, la música. Daba lo mismo que tuvieses el aspecto de un cavernícola verrugoso, como Lemmy Kilmister, que ocultases tu timidez —y algo más— tras un flequillo y unas gafas de sol, como Joey Ramone, o que fueses incómodamente asimétrico, como Thom Yorke. Si escribías temazos y, sobre el escenario, tu banda era capaz de proyectar al mismo tiempo atracción e indiferencia, las discográficas acababan prestándote atención. Pero, para que eso sucediese, tu maqueta debía llegar a las manos correctas o, por lo menos, entre tu público debía encontrarse la persona adecuada, como ocurrió con Jac Holzman y The Doors. Todo se reducía a una cuestión de oportunidad. O la suerte se ponía de tu lado o no lo hacía. Y aun en ese caso, todavía te quedaba una posibilidad: traerla tú mismo a rastras.

Así lo entendieron los hermanos Noel y Liam Gallagher en mayo de 1993, cuando, con veintiséis y veintiún años respectivamente, comprendieron que sus opciones en el negocio de la música pasaban por obligar al azar a ponerse de su parte. Cuatro años antes, Noel había empezado a trabajar como roadie para la banda Inspiral Carpets tras presentarse a una audición —sin éxito— para ser su nuevo cantante. Poco después, Liam entró como vocalista en un grupo llamado The Rain, formado por el guitarrista Paul «Bonehead» Arthurs y el bajista Paul «Guigsy» McGuigan. No tardó en convertirse en el líder de la banda y, como tal, su primera decisión fue cambiarle el nombre, para lo cual se inspiró en un cartel sobre la gira de Inspiral Carpets que había visto en el piso compartido en el que vivía su hermano. En ese cartel se relacionaban las fechas de los conciertos del grupo y los nombres de los recintos en los que iban a actuar, siendo el último de ellos el Swindon Oasis. A Liam le hechizó aquella palabra, Oasis, escrita en letras mayúsculas de gran tamaño, y la utilizó para rebautizar a su banda. Bonehead, Guigsy y él tenían actitud y ganas de triunfar, pero ninguno de los tres poseía el talento necesario para componer grandes canciones. Años más tarde, Liam Gallagher describiría los temas escritos por el grupo en aquella época como «basura».

En 1991, a su regreso de la gira de Inspiral Carpets por Estados Unidos, Noel Gallagher acudió al club Broadwalk de Manchester para asistir a uno de los directos de Oasis, cuyas canciones calificó como «sencillamente horribles». Liam le había pedido a su hermano que fuese a ver actuar a su grupo para que considerase la posibilidad de ser su mánager, pero, en lugar de eso, Noel se ofreció a formar parte de la banda, prometiendo que los convertiría en estrellas del rock siempre y cuando aceptasen sus condiciones: él tendría el control creativo del grupo en todo momento y, además, escribiría todas las canciones. «De lo contrario, os pudriréis aquí en Manchester», sentenció. Por aquel entonces, Noel ya había escrito alguno de los himnos que más tarde se incluirían en el primer álbum de Oasis, como «Live Forever» o «Columbia», por lo que no parecía muy inteligente negarse a que el único tipo con talento fuese el compositor de la banda. Todos aceptaron y, tras los oportunos ensayos, Oasis comenzó a interpretar en directo las canciones de Noel Gallagher. El problema era que, en Manchester y alrededores, a nadie parecía interesarle demasiado aquel material.

Después de dos años actuando en locales de poca monta, el grupo comenzaba a inquietarse. Grabaron una maqueta, sumaron nuevas canciones a su repertorio, pero parecía que nunca iba a llegar su gran oportunidad. Hasta que un día cualquiera de mayo de 1993, los miembros de un grupo llamado Sister Lovers, con el que compartían local de ensayo, les comentaron que tenían entre manos algo importante. De alguna manera, habían conseguido una oportunidad para tocar en el King Tut’s Wah Wah Hut, uno de los locales más prestigiosos de Glasgow. Aquel era un logro considerable; sería algo así como si una banda de Vigo que se esfuerza por asomar la cabeza en la escena gallega se las arregla para actuar en un club famoso de Oporto. Esa es la clase de hazañas que te colocan en el mapa. Pero aquel concierto tenía aún más valor: los Sister Lovers habían descubierto que esa noche iba a encontrarse en el local Allan McGee, propietario de Creation Records, un sello independiente de gran reputación en el rock alternativo británico, especialmente tras publicar los discos de bandas como Primal Scream, The Jesus and Mary Chain o My Bloody Valentine. Allí, en Glasgow, se presentaba, por tanto, una oportunidad inigualable. Allan McGee en el King Tut’s era Jac Holzman en el Whisky a Go Go. Era Brian Epstein en The Cavern. Tocar para él esa noche era lo más importante que los chicos de Oasis podrían hacer en sus vidas. El problema era que nadie los había invitado a hacerlo.

Pero no lo dudaron ni por un instante. Alquilaron una furgoneta junto con los Sister Lovers y recorrieron las cinco horas de camino que había entre Mánchester y Glasgow sin tener muy claro qué iban a hacer al llegar allí. Solamente sabían que esa noche tenían que tocar fuese como fuese. Y no iba a resultar sencillo. Se trataba de un local de referencia en el que actuaban algunas de las bandas punteras del panorama alternativo del Reino Unido. En las dos semanas previas, sin ir más lejos, habían actuado allí The Verve, que se encontraban en plena gira de presentación de su primer disco, y Radiohead, que acababan de publicar el álbum Pablo Honey. No parecía un garito cualquiera en el que quizá fuese suficiente con ofrecerse a tocar gratis. Pero había que tocar. Allan McGee iba a estar presente para ver la actuación de una de sus bandas, 18 Wheeler, pero también para echar un vistazo al resto de grupos que tocaban esa noche, por si alguno de ellos le resultaba lo bastante interesante como para ficharlos para Creation Records. Y esos tenían que ser Oasis.

La realidad, sin embargo, tenía otros planes. El propietario del local les dijo a Noel y Liam que no. Que el cartel para aquella noche estaba cerrado desde hacía tiempo y que no iban a admitir a más bandas. Sus compañeros de local de ensayo sí podían tocar. Los demás grupos que figuraban en el cartel del concierto sí podían a tocar. Pero ellos tendrían que conformarse con asistir al evento desde el público. Estuviese quien estuviese aquella noche entre la gente. Sin margen de maniobra, el azar les había cerrado la puerta de su gran oportunidad. Y lo había hecho en sus narices. Así que los hermanos Gallagher y el resto de miembros de su grupo no tuvieron más remedio que abrirla de una patada.

Amistosamente —esto es ironía—, le hicieron al propietario una oferta que no pudo rechazar. Le advirtieron que, si no les permitía participar aquella noche en el concierto, volverían a su local y lo arrasarían hasta los cimientos. Y, de pronto, como por arte de magia, el dueño del King Tut’s entró en razón. Vio la mansedumbre —esto también es ironía— en la mirada de aquellos chicos provenientes de un suburbio de Mánchester, unos veinteañeros que habían conducido cinco horas en furgoneta hasta allí, que no tenían nada que perder y que estaban dispuestos a hacer lo que fuese por una oportunidad, incluso cumplir su amenaza. El propietario sopesó la oferta de los Gallagher y decidió que su idea de tocar a cambio de no destrozarle el club era de lo más razonable. Así que, para no alterar el orden del cartel del concierto y, de paso, evitar un altercado, les dejó tocar cuatro canciones antes de que actuasen el resto de grupos, sin arriesgar demasiado, cuando apenas había gente en el local, ya que Oasis debían comenzar antes de la hora que estaba prevista para el inicio del evento.

Pero a los Gallagher eso les daba igual. Junto a diez o doce personas, Allan McGee ya estaba allí. Bastante borracho y medio drogado, como explicó él mismo tiempo después, pero con su olfato musical intacto. «Me había tomado cuatro cinco Jack Daniel’s dobles. Tocaron la primera canción y me pareció genial, pero estaba borracho y drogado y pensé que probablemente me lo parecía porque estaba bebiendo y tomando drogas. Entonces tocaron la segunda y pensé: “Dios, esto es realmente bueno”. Y en la tercera fue como “voy a ficharlos”». Y los fichó. Fue tal la impresión que causaron en él, que les ofreció un contrato discográfico en cuanto se bajaron del escenario. Como Jac Holzman con The Doors, pero habiendo retorcido el destino a su favor por las bravas.

Apenas un año y algo después, el 29 de agosto de 1994, salía a la venta el primer disco de Oasis, Definitely Maybe, que se convertiría en el álbum debut más vendido de la historia hasta el momento, superando las cien mil copias en los primeros cuatro días y alcanzando una cifra total de ventas de más de quince millones de ejemplares. Oasis aparecían así, de pronto y a lo bestia, en la escena musical británica y, por extensión, en la escena internacional. Y el resto, treinta años después, es historia.

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30 Comentarios

  1. Lo único interesante de su regreso es ver si aguantarán toda la gira juntos o mejor dicho, cuándo tendrán la primera bronca. Totalmente en contra de los regresos de viejas glorias.

  2. Lemmytico

    Pues ya tenían que ser buenos los temas, porque en directo han sido siempre una turra. Y supongo que sería el debut más vendido en UK, no en todo el mundo. «Appetite for Destruction» sin ir más lejos vendió mucho más.

  3. Grupo sobrevalorado como el fútbol o las croquetas.

  4. Vaya cagado el dueño del club.

    • Ambituerto

      Dos guantazos a cada uno de los hermanos retrasados y nos hubiéramos ahorrado la turra de los que nos los han querido vender durante tres décadas.

      • The Mangler

        Si yo hubiera estado en ese club de encargado, no habrían salido de allí sin que les hubiera hecho un nudo en la polla a cada uno. A renglón seguido, me hubiese ciscado en sus encías, con lo que ahora, no existiría nadie que hubiera oído hablar de ellos porque su carrera habría finalizado antes de empezar. Y no exagero un ápice…

  5. La cantidad de amargados que está opinando sobre el regreso de Oasis es de traca y para postres algunos lo venden en plan : no , es que los mejores fueron Radiohead o Manic Street Preachers.
    Oasis es historia viva del rock, el último gran grupo en triunfar junto con Nirvana.
    Oasis y Nirvana reventaron los charts del mundo cuando el rock estaba muriendo y lo volvieron a poner en el mapa. El poder del pueblo. A partir de ahi la nada y actualmente la época del reggetton y el trap.
    Así que el que tenga menos de 40 años que se abstenga de comentar porque no conoce el rock.

    • Roderick

      Yo diría que ayudaron a enterrar el rock, más que ponerlo en el mapa. Viéndolo con perspectiva, hacía falta un sonido de transición para disimular que realmente se quería llegar al panorama actual, dígase Karol g, anteriormente Britney spears, reggaeton, etc. Y ese sonido tenía que gustar sólo a una parte de los que consumían rock: divide y vencerás.

    • Vivimos tiempos musicales jodidos. Te compras una camiseta de Guns ‘n’ Roses en Primark y vas al Mad Cool a ver a Rosalía, mientras escuchas en tu smartphone un tema de Karol G. Pero ahí no queda la cosa. Te pasas varias décadas hablando las maravillas de una de las pocas artistas relevantes que nos quedan, PJ Harvey, y un día vas al Primavera Sound y te parece de lo más normal que J Balvin esté en la programación. No solo eso, vas a su concierto porque ahora eso es lo alternativo. Ya solo queda despotricar contra Oasis. Un grupo de rock sobrevalorado. Unos tipos arrogantes. Una gira por la pasta. Pero al fin y al cabo, un grupo auténtico. Vivan los Gallagher.

  6. Por supuesto son buenos, el problema es que prometían más de lo que acabaron siendo. Después de sacar Morning Glory parecía que podían ser un grupo cercano al nivel de los Beatles, pero se quedaron muy lejos y finalmente sn un grupo del nivel de R.E.M. un grupo bueno, que durante 3 años estuvieron en estado de gracia pero que el resto de su carrera fueron solamente «buenos», no es poco, pero podían haber sido más, si hubiesen aguantado en vez de 3 años, 8 a ese nivel, habrían sido casi como los Beatles.

  7. Yo recuerdo a Fernandisco diciendo lo maravillosos que eran «Oieisis» y sigo sintiendo grima. Al fin y al cabo, éste grupo debe mucho a reventar descaradamente el legado de los beatles, «renovando» su sonido y con producciones de los años 90 al estilo George Martin. Blur tampoco me llamó mucho la atención, pero los pongo por encima. Me parece mucho más interesantes. The Stone Roses me parecen sublimes (Su primer disco), así como Pulp.
    Por mal que se lleven los hermanitos, aguantarán hasta el final de la gira, 100 millones ayudan a tener una jubilación serena.
    Me uno a Ambituerto en su alegato.

    • Absolutamente de acuerdo: Blur y Pulp, por relevancia y trayectoria , y Stone Roses (menuda maravilla de debut), bastante por encima. Sí tienen buenas canciones, solo faltaría, pero es uno de los grupos más sobrevalorados de la historia. Y unos cantamañanas, además.

  8. Estoy un poco confuso. Ayer mismo, pude ver en TV el documental «Supersonic», y la historia que ahí se cuenta sobre el bolo de Glasgow es bastante diferente. Un detalle relevante es que no fueron a Glasgow con «los» Sister Lovers, sino con «las» Sister Lovers, que era un grupo femenino con el que, efectivamente, compartían local de ensayo. Según el documental, las Sister Lovers consiguieron que les dejaran compartir su tiempo de concierto con Oasis (ellas, al parecer, tenían solo 5 canciones en ese momento). La historia que aquí se cuenta es más colorista pero… ¿es cierta? Ciertamente, dada la idiosincrasia del grupo, se non è vero, è ben trovato…

  9. Lucio Anneo

    Pagará la gente la entrada solo para abuchearlos?

  10. Adam Pontipee

    Lo que está claro es que desde que se anunció su vuelta, alguien está soltando pasta a manos llenas para que aparezcan chorradas sobre ellos en todos los medios, incluyendo a éste en el que nos hallamos…

  11. Ojalá Michael J. Fox pudiese ir en el Delorean y he impidiera lo del Club de Glasgow. Vaya ñordo de banda.

  12. Britney "Meth" Spears

    ¿Te imaginas ser un cincuenton haciendo el ridiculo en primera fila de los Oasis?
    La duda que me asalta es, ¿tan poco cobran ya de los royalties, que van a tener que hacer el ridiculo al os 50 comportandose como cuando eran borrachos de 19?
    Bueno es una pregunta retorica, es evidente que están sin un pavo, tiesos, si no se ahorrarian el mal trago de dar vergüenza ajena, ante un publico calvo y gordo que hace mas el ridiculo que ellos si cabe.

    • Cuanto odio a los cincuentones, ¿no? Algún día los tendrás, espero. Y en cuanto a lo del ridículo, no sé que concepto tienes tu del decoro o lo correcto, pero la gente puede desmelenarse cómo y cuando le plazca. Tu «vergüenza ajena» es tan ajena al espíritu del rock que produce vergüenza ajena. De veras, deberías hacértelo mirar.

    • Eres un pobrecito

      Odio a Oasis, pero tú eres un pringado :)

  13. Madre de dios… no teneis ni idea ninguno. Oasis tiene himnos a la altura de los beatles

    nadie mas a conseguido esto….quizas aqui no lo veais pero si habeis vivido en U.K lo sabríais
    Os puede gustar mas o menos pero eso es irrefutable , os guste o no……
    La gente corea dont look back in anger…..NO PARKLIFE amigos….NO – COMMON PEOPLE, NO CREEP

    son grandes temas, pero no son un himno como lo son muchas canciones de Oasis, guste o no guste…. os caigan bien o mal…

    • En el UK les tienen encumbrados…relativamente..
      La cantidad de comentarios jocosos en redes sociales ( de los propios britanicos ) desde que se anuncio su vuelta es considerable. Me gustaron en su epoca, un puñado de buenos temas ( tambien mucho plagio ), pero tampoco para tirar cohetes. Musicalmente, sencillitos ,tres acordes y punto, Noel tampoco da para mas, y el es el primero en reconocerlo.. Rock al «minimo comun denominador» ( traduccion chungo/literal deconocida una expresion inglesa, pero que siempre me ha parecido que resume muy bien lo que es Oasis ).
      Como personas/personajes, simplemente deleznables. Dan verguenza ajena, y representan lo peor del «chavismo » Britanico ( de «chav», que en ingles viene a ser el equivalente de «cani», no del Venezolano, of course :-) ).
      Tuvieron el merito de ser los «Nirvana» Britanicos en el sentido de pegar un puñetazo en la mesa y recuperar la esencia de un rock guitarrero y reinventar las reglas del juego, abriendo las puertas a todas esas miticas bandas del «Brit Pop» que, por lo general, ( al menos en mi humilde opinion ) fuero bastante mejor que ellos..Blur, Elastica, Pulp, The Verve..

      …Radiohead ,simplemente, estan en otra dimension, es como comparar la Champions League con un torneo de juveniles…

      pues eso… mucho hype, y pocas nueces.

  14. Txemy Ramone

    Oasis pueden gustar o no pero viendo los comentarios no dejan indiferentes . Acabo de descubrir que tengo la edad de Noel y en 1996 estaba perdido por el fin de los Ramones y la Eurocopa de Inglaterra, así que me apunté al Brit pop y de Oasis me gustaron algunas canciones , pero me gustaban mucho más Blur, Elastica, Suede o Cranberries …..que vuelvan con 50 largos no me parece raro , si volvió la Polla Récords y lo petaron !!!!!!! Pues es un poco igual harán la gira para unos fans más consolidados económicamente y la vida seguirá entre reggaeton y mierdas varias con algún grupito interesante tipo Repion o Ginebras ……life is a Gas !!!!!

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