Para Badiucao el arte no existe sin libertad de expresión, Dostoyevski pudo ser lo mismo un psicópata o un maníaco, las monjas zamoranas disfrazaron su ardor sexual de fervor religioso, y los chinos vinieron a Cadaqués para hacer una réplica perfecta en su país. Además de las dos piezas ganadoras del evento Ciencia Jot Down 2021, celebrado en Donosti. Contenidos de la semana de nuestra revista que te resumimos en este Jot Down News, contados artículo por artículo, sección por sección, para que no te pierdas nada.
Sociedad
La renuncia al pasaporte chino y su exilio a Australia. El apoyo vehemente a las manifestaciones de Hong Kong. El Tank Man, hombre que intenta resistir a los tanques con las bolsas de la compra en la mano, Plaza de Tiananmen, tatuado en su brazo derecho. El trabajo del artista Badiucao se centra en el pasado y en la actualidad del régimen chino. Sostiene que la disidencia es una consecuencia de ser artista ya que «el arte no existe sin libertad de expresión». «Badiucao: mi arte para la gente sin voz». Por Stefano Nicoli.
El seguimiento de los casos judiciales más relevantes a través de los medios de comunicación sea el fiel reflejo de lo que somos. Y pocos lo ilustran mejor que la desaparición de Rocío Wanninkhof, y el posterior hallazgo de su cadáver. Si se trataba de hallar un culpable, nada más fácil que apuntar a la persona con la que había mantenido una relación sexoafectiva. Alejandro Zambudio analiza el reciente documental de HBO sobre este caso, la pluralidad de puntos de vista, sin caer en el morbo ni en sesgos, pero bajo el que recayó el mito de la lesbiana pérfida. En «Dolores Vázquez en el corazón de la LGTBIfobia».
Arte
Hace unos años una nutrida delegación de ingenieros, arquitectos, fotógrafos y agrimensores de la República Popular China, cargados con sus aparatos de medición, aparecieron en Cadaqués. Su objetivo, levantar una réplica exacta de este antiguo pueblo de pescadores en China. «Cadaqués ready-made». Por Ignacio Vidal-Folch.
Estrenos
El espectador de cierta edad saldrá del cine con la sensación de haber revivido una versión de sí mismo treinta años más joven. Estamos ante la película de Cazafantasmas que no tuvimos de niños. Las originales estaban pensadas para adultos, y eso que a su anuncio en 2016 siguió el linchamiento mediático. «Cazafantasmas: Más allá. Cuestión de espectrativas». Por Cristina Aparicio.
Historia
La comidilla del XIII, un Sálvame sin ondas herzianas pero con juglares. Ocurrida en un convento zamorano, con sus dueñas acusadas de dejar entrar a los frailes para hacerlos sus amantes. No un caso aislado, sino más bien el ambiente generalizado entre el clero de la Baja Edad Media, que bajo la excusa del fervor religioso vivía la vida loca. «Las Dueñas de Zamora, una pornocracia en el convento». Por Silvia Castellanos.
El cómic de Guillermo Corral y Paco Roca, y luego serie televisiva dirigida por Alejandro Amenábar, El tesoro del cisne negro, destaca por aunar la divulgación de la historia y el proceso actual de recuperación de la misma. Lo mismo puede decirse de La aventura de la primera vuelta al mundo, escrito por Rafael Marín, dibujado por Abel Ippólito y asesorado por Manuel Parodi. Sus licencias olvidando el rigor histórico sirven magníficamente a su función divulgativa. «Desde la ficción a la historia». Por Paco Cerrejón.
Recorriendo los mismos senderos que llevaron a don Quijote a su retiro penitente, bajo las mismas estrellas que vieron hace siglos los cruzados de las Navas, bandidos de toda condición se disputaron durante décadas una Sierra Morena indómita, de la que eran los únicos dueños. Hoy suenan a leyenda, y en ella son contados, pero todos existieron, surgiendo de un trasfondo histórico y bélico que nos detalla Horacio Fernández del Castillo en «Los bandoleros andaluces que retaron al rey en Sierra Morena».
Humor
Incluso niños que aún son bebés son capaces de entender el humor y el equívoco, y tanto humanos como animales ríen para dar a entender cuando juegan que sus agresiones no son reales, sino mero juego. Situaciones simuladas, comedias, y por tanto sometidas a un pacto mutuo entre interlocutores para aceptar que no es real. Así es como en la realidad la pederastia o el maltrato son temas extremadamente delicados, pero no en la comedia. ¿Tiene entonces que someterse a censura? «Los límites del humor (1)». Por Emilio de Gorgot.
Literatura
Y a pesar de que Dostoyevski sea asociado con la alta cultura, es tan popular como los Beatles. David Foster Wallace ya alertaba sobre los peligros de canonizar a los escritores, complicando imaginarlos como seres vivos. Y ahora, coincidiendo con el bicentenario de su nacimiento, la biografía publicada por Ediciones del Subsuelo nos lo retrata como una víctima del fenómeno fan, capaz de tomar sus argumentos de sucesos reales. Pero sobre todo una persona que lo mismo pudo ser un psicópata que un maníaco obsesivo. «Un Dostoyevski de carne y hueso». Por Rebeca García Nieto.
Vivir era una novela con su planteamiento, nudo y desenlace, cuando cogíamos el autobús en la parada del 19. La enfermedad debió durar un lustro, en el momento en que le dijeron que se moría decidieron casarse, y cuando quedaba solo un mes para el parto la oyó decir que solo pedía alcanzar a verla, a cogerla. «La parada del 19». Por Pedro Simón.
Arte y Letras
Los spomenici son los memoriales que se extienden por toda la antigua Yugoslavia, patrimonio artístico extraordinario, estructuras surrealistas, pero sobre todo conmemoración de un pasado horrible y de la victoria contra el fascismo. Como contextualizarlos requiere otro marco histórico y social, quedan al margen de los circuitos turísticos en los siete países que aglutinan. «Spomenik, memoria histórica en serbocroata», por Brais Suárez González.
Ciencias
Este texto ha sido el ganador del concurso DIPC–LSC–Laboratorium en la modalidad de ensayo de divulgación científica de Ciencia Jot Down 2021. Puedes leer aquí el relato ganador en la modalidad de narrativa. Su argumento, el origen de la cría de gusanos de seda en China, dos mil setecientos años antes de la era cristiana, el interés de una señora inglesa por los mismos, y su influencia en Charles Darwin para dar a luz a la pangénesis. Una idea que le convirtió en padre de la genética. «Espectadores». Por Charo Sabariegos.
Viajes
En 1536, cuando empezaron a fundarla, la Ciudad era un páramo. Hoy ocupa trescientos kilómetros cuadrados de llanura despiadada. Remedo malo del infierno donde nada dura, nada permanece. Hecha, formada, pensada y construida por extranjeros. Perdida su razón y su buen nombre es «Una ciudad en dos palabras». Por Martín Caparrós, escritor y nombrado hace unos años ciudadano ilustre de Buenos Aires.
