«Alguien ha matado a alguien…», «alguien es un asesino…», a base de tales indirectas logró Gila que Jack el Destripador terminara derrumbándose y confesando sus crímenes. Así lo contaba y no tenemos por qué dudar de su palabra. De manera similar podemos decir que alguien ha muerto, concretamente un personaje muy carismático de cierta saga. A ese alguien pese a su carácter difícil se le llegaba a coger cariño y era, para muchos de nosotros, todo un modelo a seguir. No daremos más pistas para que nadie monte en cólera, de lo que sí hablaremos es de películas anteriores en las que la muerte —más o menos inesperada pero siempre injusta— de algún personaje nos dejó para el arrastre. Ese guionista nos rompió el corazón y ahora es el momento de ajustar cuentas, a riesgo de incurrir en algún que otro SPOILER (o destripe, recomienda Fundéu) por el que previamente pedimos disculpas. Esta es nuestra lista, aunque pueden añadir sus favoritas.
(La caja de voto se encuentra al final del artículo)
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Danny Archer, en Diamantes de sangre
1º) La psicóloga rusa Bluma Zeigarnik observó en cierta ocasión cómo un camarero podía recordar los pedidos pendientes pero no los ya servidos. A partir de ahí concluyó que tendemos a acordarnos solo de las tareas inacabadas (intente recordar algo de lo estudiado después de haber hecho el examen, ¿a que no se puede?) y la idea se mereció un epónimo conocido como efecto Zeigarnik.
2º) Una narración es el recorrido entre el planteamiento de un conflicto y su resolución: se descubre al autor del delito o se consuma la venganza, el malo recibe su merecido, las parejas tras el desencuentro previo terminan felices y comiendo perdices, la justicia, la verdad y el modo de vida americano prevalecen y, en definitiva, se restablece el orden cósmico. El círculo se cierra y quedamos satisfechos. Por eso en las series se recurre al cliffhanger, para que la gente sienta la necesidad de ver el siguiente episodio.
3º) Ahora supongamos que queremos rodar una película con mensaje. Una de estas cargadas de moral y buenas intenciones sobre lo mal que funciona el mundo, que ganen premios en festivales e inciten a los espectadores a hacer algo. ¿Cómo lograrlo? Dejando la impresión de que la injusticia planteada no ha sido resuelta, que el mal no ha sido derrotado (o no del todo), que de alguna manera somos nosotros quienes debemos restablecer el orden, cerrar el círculo y así olvidar esa tarea pendiente que aguijonea nuestra conciencia de acuerdo al efecto Zeigarnik.
Conclusión: de ahí que la tasa de mortalidad de los protagonistas en las películas concienciadas sea tan elevada. No hay nada como cargarse a un personaje decisivo al final, sin posibilidad de vengarlo en una trama que ya concluye, para que la gente salga del cine acongojada y —como es el caso de Diamantes de sangre— decidida a no comprar nunca más diamantes de países africanos en guerra. ¡Que habéis matado a DiCaprio!
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Nick, en El cazador
El esquema anteriormente descrito se repite innumerables veces. Uno no puede dar un aldabonazo en la conciencia de los espectadores si muestra a los protagonistas volviendo a su casa tan felices tras mil peripecias. Algún personaje se tiene que quedar por el camino y cuanto más nos duela su muerte, mejor. Si encima están interpretados por actores de la talla de Christopher Walken y Robert de Niro (cuando por suerte para todos aún no había descubierto la comedia) entonces se nos encoge el alma ante ese duelo final y su trágico resultado. Ahí nos damos cuenta de lo que realmente supuso la guerra de Vietnam.
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Guido Orefice, en La vida es bella
El planteamiento de la película era notablemente peliagudo, pues hacer una comedia sobre los campos de concentración puede dar lugar a ciertos malentendidos y herir sensibilidades. Proporcionar intensidad emocional a la historia, evitar la frivolidad a la que ese tono podía llevarla y mostrar la crudeza de semejante episodio histórico exigía un sacrificio humano. Nada como la muerte para imprimir seriedad. Quién mejor que el protagonista, interpretado por el que era también el director y guionista. Así que al final Guido es fusilado porque la realidad del Holocausto no era ningún juego, aunque así se lo hiciera creer a su hijo para hacerle soportable la experiencia.
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Boromir, en El Señor de los Anillos
El actor inglés Sean Bean no podía faltar en esta lista, dado que ha muerto exactamente en un tercio de su dilatada filmografía, es el Kenny de carne y hueso. De entre tantas su favorita, según ha confesado, es la de Boromir. Así que con ella nos quedamos como si fuera su última voluntad.
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Billy Costigan, en Infiltrados
DiCaprio no muere tanto como Bean pero muere bien, cada vez que lo hace se nos queda grabado en la mente. Además de la mencionada al comienzo, acaba innecesariamente congelado en Titanic (había sitio de sobra en esa tabla, así que por tonto no merece ser incluido en esta selección) y en Infiltrados tiene un final tan abrupto que cuesta encajarlo.
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Señor Naranja, en Reservoir Dogs
Lo vemos agonizar desde la primera escena, pero pasa tanto tiempo luchando por sobrevivir, se esfuerza tanto por resultar convincente en ese escenario de desconfianza mutua, que verlo morir ya en el último momento, cuando estaba a punto de lograrlo… Qué le vamos a hacer, es una película de Tarantino, un narrador que exige más sacrificios humanos que un dios azteca. Solo cabe recomendar de paso el inminente estreno The Hateful Eight.
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Bing Bong, en Inside Out
Esta historia está tan cargada de simbolismo y abstracciones que casi deja en evidencia lo que realmente hace Pixar, que es crear películas estupendas con las que los adultos podemos engañar a los niños para que nos acompañen al cine a verlas. Como tiene también muchos colorines y movimiento logró colársela a los pequeños, mientras nos iba contando a los demás en qué consiste eso de madurar. El amigo imaginario de la protagonista es un elefante rosa que, en una escena realmente conmovedora, nos muestra cómo hay que saber dejar cosas atrás para seguir nuestro camino.
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Kyle, en El mejor padre del mundo
Al estar protagonizada por Robin Williams y por el aspecto de su cartel alguien puede pensar que esto es una comedia. En realidad estamos ante uno de los filmes más oscuros y perturbadores jamás rodados, aunque no esté ambientado en algún país del norte o del este de Europa ni dirigido por algún cineasta de nombre impronunciable.
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Espartaco, en Espartaco
El protagonista se sacrifica por la causa de la libertad, por su pueblo o por el mundo entero, emprendiendo una misión sin viaje de vuelta en la que perderá la vida pero alcanzará la gloria. Es más que un cliché cinematográfico, es el mito fundamental del cristianismo, como para no estar familiarizados con él. Podríamos poner un millón de ejemplos, pero este en el que el protagonista muere —precisamente también crucificado por los romanos— después de semejante odisea desde la esclavitud hasta liderar la rebelión de esclavos, es sin duda uno de los mejores. Sabemos que su martirio es inevitable y es lo que da sentido a la historia, pero parecía estar tan cerca de salvarse…
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Lennie, en De ratones y de hombres
La novela de John Steinbeck ha tenido varias adaptaciones al cine y al teatro, nos quedamos con esta dirigida por Gary Sinise y protagonizada por él mismo y por John Malkovich. Lagrimones.
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Ellen Ripley, en Alien 3
Ridley Scott es un director que cuanto menos control tiene sobre sus películas, mejor le salen. Si le dan un buen guion puede adaptarlo con brillantez a la pantalla, pero como tenga ocasión de meter los dedos en la historia… En el rodaje de Alien propuso que la protagonista muriera decapitada al final y el xenomorfo imitara su voz ante el ordenador de la nave. Francamente, no nos imaginamos a semejante bestia poniendo voces y no era el final que la intrépida teniente Ripley merecía después de tanto luchar. Por suerte alguien puso sensatez y el resultado es el que conocemos; su continuación también tuvo el final merecido y con una espectacularidad sin igual. El problema surgió en la tercera. La protagonista incubaba un parásito y finalmente se sacrificaba arrojándose a un mar de metal hirviente justo cuando nacía el revientapechos (sobre su ciclo reproductivo y cuidados básicos ya hablamos aquí). No era justo acabar así, menos aún cuando la saga continuaba y entonces había que recurrir a excusas un tanto disparatadas como que había sido clonada. La prueba de que ese final no satisfizo a nadie es que en Alien 5 —ahora aparcada para dar prioridad a Prometheus 2—, su director Neill Blomkamp pretende, o pretendía, enlazarla con las dos primeras e ignorar la tercera y cuarta.
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Jabba el Hutt, en El retorno del jedi
No podemos concluir sin revelar finalmente lo que insinuábamos al comienzo y ahora llámennos lo que quieran. Como quizá sospechasen, la saga no es otra que Star Wars y el personaje cuyo deceso nos dejó huérfanos, incapaces ya de seguir el hilo de la narración, era este que nos mira tiernamente con sus grandes ojos. ¿Quién no querría tener por esclava a la princesa Leia y gozar de esa bacanal perpetua con todos los placeres a su alcance? Vivió intensamente como si de una estrella del rock se tratase, aunque no dejó precisamente un cadáver bonito. De hecho su muerte fue espeluznante, aquí está por si alguien no la recuerda.
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Sean Connery en The Untouchables. Pudiendo matar a Kevin Costner, ya me dirás tu qué necesidad había.
Jajajaja muy cierto!!
Muy de acuerdo con usted.
Totalmente de acuerdo.
Una muerte mucho más inmerecida que la de más de uno de los que hay aquí.
El soldado judío de Salvar al Soldado Ryan, en especial porque tenía a alguien que le podía haber ayudado en la parte baja de la casa…
Di Caprio muere en Titanic justamente porque es una tragedia , sería el mismo caso (sin hacer juicio de valor) que Guido Orefice.
Mel Gibson en Corazón Valiente me llegó hasta la médula en su momento.
Darth Maul
Comparto plenamente. Darth Maul era el epítome del malvado. Lo era, lo parecía, destilaba rabia por los cuatro costados. Cada gesto suyo decía «esto SI es personal».
Carisma hasta decir basta.
Por si acaso no es sarcasmo:
Tener una espada láser muy chula, tatuajes y cara de cabreado permanente no significa carisma. Darth Maul es posiblemente el villano más petardo y prescindible de todo Star Wars, y también de los más prescindibles del cine en general. Seamos serios, ¿alguien le imagina de verdad en la siguiente película? ¿Haciendo qué? ¿Diciendo qué?
No muere. Al menos no moría en el universo expandido que Disney ahora se empeña en borrar.
Gwen Stacey en Spiderman 2 (de la saga de Garfield). La película es pésima, solo ella valía la pena.
Voldemort. Muy fácil. Tuvieron que darle más tiempo para armar una rivalidad digna de una buena saga.
La muerte de Billy Costigan en The Departed fue difícil pero necesaria. Le dio a la película un salto de calidad increíble.
jonh wayne , en el álamo
Rudger Hauer en Blade Runner, Jack Nicholson en Alguien volo sobre… Y la primera, la que mas me dolio, la mama de Bambi
Coincido completamente con todos los que menciona.
de acuerdo contigo al 100%. Vaya decepcion no encontrar a Blade Runner en los primeros puestos.
No es posible que en esta lista falte…la mamá de Bambi.
Thelma y louise deberian haber seguido años unidas, que solo duraran un fin de semana fue muy triste…
Difícil escoger resulta. La mayoría de muertes que ponéis en la lista tienen un peso importante en la calidad de cada película.
Así que finalmente he escogido a Jabba
Carlito Brigante en esa obra maestra infravalorada llamada «Carlito’s way».
«No cambiamos al envejecer, tan sólo perdemos fuerzas» No hay ni habrá una muerte en el cine más triste e innecesaria que ésta. Amén.
(Venga va, Tommy Lee Jones en Space cowboys también me da mucha penica, y Viggo Mortensen en La Carretera, y el marinero de Danzad malditos, cómo olvidarlo, y Tim Robins en Mystic River, pobre diablo,y Darín en Kamchatka, y el Indomable Paul Newman, y Fernán Gómez en La lengua de las mariposas, y Ray en Barrio, y Ron Perlman en El nombre de la rosa, cantando una canción infantil mientras lo queman vivo, putos guionistas, siempre poniéndome el cuerpo malo…)
La muerte de la inspectora de color en la serie de person of interest
Algunas muertes que me dejaron patifuso: La señora lapidada en Zorba el Griego, que patético! Jim Kelly el afroamericano karateka de Enter the Dragon con Bruce Lee. Sony de El Padrino. Y aunque sabemos como acaba la historia, el Leonidas de 300, que no te la creés. De la lista he votado por Guido.
Trevor en Cadena de favores
Ratso Rizzo (Dustin Hoffman) en «Midnight Cowboy», muere en el autobús justo amtes de llegar a Miami, tristísimo final. :(
Pues la muerte más injusta, considero que fue aquella cometida por Tony Montana sobre la persona de su mejor amigo y recién cuñado Manny, aunque dicho vínculo familiar lo conoció instantes más tarde, eso lo hace más doloroso todavía, máxime tratándose de un tipo guapo y simpático como Manny.
La muerte estaba justificada por el guión ya que, en cierto modo, desencadena el baño de sangre posterior protagonizado por un Tony Montana de mirada perdida que ya no tiene nada que perder ni nada a lo que aferrarse en esta vida. No obstante, esa muerte, la de Manny, cae como una losa sobre el público y también sobre este escribiente, por lo inesperado y por la empatía sentida hacia un personaje muy criminal pero también simpático y más moderado que otros compañeros de reparto. Cada vez que revisó la peli siempre que le pido a Alpacino que no no no lo haga pero ni caso…… :)
Han Solo en Star Wars episode VIII :(
No entendeis que lo de Jabba es un guiño y al decir «No daremos más pistas para que nadie monte en cólera» no quieren revelar la muerte de han solo?
El troll ya esta feliz. Enhorabuena. Eres muy gracioso. Nos ponemos de pie y te aplaudimos.
Patetico.
Chanquete en Verano Azul y Robert de Niro en Taxi Driver.
Pero Robert de Niro (el gran travis Bickle) no muere, encuentra su redención. Y sinceramente creo que el final hubiera sido mucho mejor si hubiera muerto en esa orgía de tiros y sangre: http://wp.me/p4WfwG-bg
Mel Gibson – Braveheart
La boxeadora de Million dollar baby
Deborah Kerr en la fuerza del cariño
La madre de bambú
El hermano de Hiro en Big Hero Six
Ya le aseguro yo a usted que Deborah Kerr no muere en «La fuerza del cariño»…
Bendita equivocación, confundir a Debra Winger con Deborah Kerr
Don Quijote de la Mancha.
Me falta Sirius Black en La Orden del Fénix :O
John Voigh en «el campeón»
Han solo en ‘el despertar de la fuerza’
El perro de will smith en soy leyenda…
Completamente de acuerdo. Entonces también falta el perro de Hachiko.
No recuerdo el nombre del personaje (tendría que mirarlo), pero a mi fastidió mucho la muerte Chistopher Waltz en Django desencadenado (aunque se lo buscó). Pero hay muchas. …la madre de Forrest Gump, la del propio Buba en la misma película, Mary Louis Parker en tomates verdes fritos, Tom Hanks en Philadelphia, Clint Eastwood en Gran Torino, Willem Dafoe en Platoon, fin, un montón
Robert Reford y P. Newman en dos hombres y un destino……
Cable Hogue.
¡Muy buena! La verdad es que Peckinpah es bueno cuando mata bien, pero buenísimo cuando acaba «mal» con sus personajes: Pike y su grupo salvaje, Billy «el Nino» y el sheriff que encarnaba Slim Pickens, el capitán sudista de Mayor Dundee, los viejos pistoleros de «Duelo en la alta sierra», los miembros del pelotón de Steiner,…
Maravillosa muerte, maravillosa peli
CHANQUETE, dónde íbamos a parar…
Dos muertes traumatizantes: la del sindicalista polaco en la segunda temporada de The Whire y la de Eddard Stark en Juego de Tronos. Difícil recuperarse…
Han Solo en Star Wars Episodio VII. Y de haber tenido que morir, hubiera merecido otra muerte menos cutre.
Totalmente de acuerdo… Mejor una muerte heroica que salve la galaxia!!!
El lobo en caperucita roja
Bruce Lee en la entrada del Dragón
Como ya dije, el personaje de Williams (Jim Kelly) el afroamericano es el que muere, no Bruce Lee.
Stringer Bell
Wendell White, que, aunque no muere, si muere en L.A. Confidential.
Elías, en Platoon.
Jack Twist, Brokeback Mountain.
Snif, snif.
Walt Kowalski (Clint Eastwood) en Gran Torino
La muerte de Walt no fue sólo la del personaje de Gran Torino, sino la del tipo duro que Clint Eastwood ha encarnado durante toda su carrera. Es un gran cierre de película y de una vida frente a las cámaras.
El coronel Nicholson en «El puente sobre el río Kwai». Hubiera bastado con ser herido en el ataque final y que el comando enviado a destruir el puente, detonara las explosivos como estaba previsto.
Han Solo en El despertar de la fuerza….. Venga ya
walter white , en breaking bad
Máximo Décimo Meridio… Bien es cierto que su camino era la muerte tras la venganza… Pero con Connie Nielsen a tope con él… al pobre le podrían haber entregado una segunda oportunidad… y haber aparecido en Roma al frente de su ejército hubiese sido un puntazo tremendo…
Definitivamente y sin lugar a dudas Wilson en Náufrago, que final mas injusto por dios…
Yves Montand en «El Salario del Miedo»
Kevin Kostner en la tremenda ‘Un Mundo Perfecto’, Buscemi en ‘El Gran Lebowski’
¿La made de Bamby al final muere? ¡Oh, no! Para qué me lo contaron… Cuando presentí que iba a morir, salí del cine corriendo y nunca ás la volví a ver. A la película, digo. Pero igual hubiera jurado que el puto guionista no sería capaz… Oh, Dios!!!
Lemmy Kilmister, en «the chase is better than the catch».
Stringer bell en la 3 de the wire… Bueno en the wire unos pocos.
cab*nes me he comido unos cuantos spoilers !
y añadiria a mackuley culkin en «my girl»
Iba a decir que Itachi, en Naruto, pero Itachi sí debía morir para poder convertirlo en héroe. El que nunca debió morir es Jiraya, en serio, por qué Kishimoto?
La niña de entrevista con un vampiro
Kevin Costner en Mensaje en una botella
La mamá de Bambi!
Bane en el desafortunado remate de la trilogía de Nolan. No digo que no mereciera morir pero sin duda la muerte que le dieron me dejó totalmente desconcertado. Merecía una muerte mucho más grande y generosa.
Tom Hanks (no me acuerdo el nombre del personaje en la película) en Salvad al soldado Ryan.
Hitler, en El hundimiento (después de tantos videomemes no es justo)
Por dios!! Y Adriann de Rocky ?!? Esa escena inicial en Rocky Balboa en el cementerio fue tristisima
El personaje de Mark Lee en Gallipoli, de Peter Weir… el amigo Mel tenía que haber llegado a tiempo¡
Jesus en «la pasión de cristo»