Hace un tiempo varios medios se hicieron eco de los peligros que representa Peppa Pig para el recto crecimiento moral de las niñas y niños de nuestra maltrecha sociedad. Según parece, los aparentemente inocuos cerditos que protagonizan el dibujo animado esconden, tras sus simpáticos hocicos sonrosados, la terrible cara del más fiero colectivismo marxista-leninista; una propaganda panfletaria que amenaza con transformar a nuestros desprevenidos púberes en estandartes del socialismo, el comunismo, y lo que es mucho peor, del feminismo. Créanme, el señor Piers Akerman afirmó que la malvada puerca hacía gala de unas «estremecedoras posturas feministas». Tiene sentido que los inapelables puntos sobre las íes en tan controvertido asunto viniesen del periódico australiano The Telegraph; no en vano, el rotativo es propiedad de Rupert Murdoch, vivo ejemplo de triunfador hecho a sí mismo gracias a las obvias virtudes del liberalismo económico y, por tanto, un hombre decente y de bien. Afortunadamente, pocos días antes de tan necesaria revelación, nuestro bienamado ministro de Justicia acababa de presentar el anteproyecto de la nueva Ley de Protección de la Vida del Concebido y de los Derechos de la Mujer Embarazada, que limitaba los avances de estas peligrosas enemigas de nuestro crecimiento como nación. No obstante, esta nueva ley no es más que un parche; si el señor Gallardón en verdad desea mantener la paz social que nos vertebra y que tanto nos ha costado conseguir entre todos, debería prestar atención a los incesantes ataques feministas que sufre diariamente la ciudadanía más indefensa, esto es, los niños, y apuntar a la médula de tan perniciosos pensamientos. O sea, prohibir la emisión de Peppa Pig, de Dora la Exploradora, de los Teletubbies y sobre todo, desterrar de nuestras parrillas televisivas, de una vez y para siempre, a la mayor apologeta del feminismo que se ha camuflado bajo la máscara de una narración infantil: Mary Poppins.
Una mujer trabajadora en un mundo de princesas
Cuesta imaginar un marco menos proclive a la reivindicación femenina y feminista que The Walt Disney Company, la verdad. Sí, es cierto que hace unos quince años, la mastodóntica compañía dio vida a Mulan, una mujer guerrera tan equiparable a sus pares masculinos que, en efecto, eran pares. No obstante, en el filme, la heroína asiática no hacía gala de su condición de mujer; antes bien, debía ocultarla para llevar a cabo su heroico propósito. Es posiblemente el estreno de Brave en 2012 la primera ocasión en que la Disney, aunque fuese a través de Pixar, coloca al frente a una mujer en su propia y completa condición femenina. Merida es una protagonista sin disfraces, sin imposturas y sin ocultaciones.
Afrontémoslo, salvo estas últimas ondas en la superficie, la corporación del ratón y el castillo llevaba siete décadas solidificando unos roles de género, ejem, tradicionales. Esto es, la mujer y la sartén en la cocina estén; o lo que es lo mismo, la mujer vale para ser guapa y para que la rescate un hombre. Y si quieres ser una mujer fuerte, independiente y carismática, entonces te toca ser, literalmente, la mala de la película.
Veamos. Blancanieves; una pavisosa mojigata cuya única función parece ser la de servir de chacha a siete hombres hechos y derechos, pese a su estatura. La Cenicienta; con esta comienzan las ensoñaciones. La chica tiene una vida bastante espantosa y sueña y sueña con salir de ella algún día. Gracias, por supuesto, a un hombre poderoso; o sea, a un hombre, vamos. Su cometido en el filme es existir. No hace nada más, no toma ninguna decisión. Nada.
La Bella Durmiente; esta directamente es que ni existe. Lo único que hace es dormir, y ni siquiera su vida es especialmente mala, por lo que su ensoñación es aún más ridícula. Solo sueña con un príncipe azul. Porque sí.
La Dama, Lady Marian, la Sirenita, la Bella, Jasmine, Pocahontas, Wendy, Campanilla… todas, pese a ser en muchas ocasiones la cabeza y el nombre de la película, están a la sombra de un príncipe, un soldado, un conquistador, un ladrón o un guerrero. Es que no soportan la menor comparación con sus antagonistas. En serio, piensen en la Madrastra, en la Reina de Corazones, en Cruella de Vil. Piensen en el personaje femenino más carismático de la época dorada de Disney: Maléfica. Firme, decidida, independiente, bella, seductora. Pues ya ven, era la mala. Así que las niñas acababan asociando estas características a la maldad.
En definitiva, parece que la Walt Disney Company se encontraba en una enconada lucha con Mattel por discernir cuál de los dos transatlánticos del entretenimiento infantil femenino perpetuaba una imagen más rancia de la mujer. Posiblemente también peleasen —y aún lo hagan— por patentar el color rosa, pero esa es otra historia.
Y sin embargo, en 1964, apenas cinco años después del estreno de La Bella Durmiente, la compañía ya había puesto una pica en un Flandes que no volvería hasta treinta y cinco años después. La película era Mary Poppins y la protagonista homónima encarnaba una contestación cuidadosamente afinada al prototipo femenino que la Disney había proyectado hasta el momento. Mary Poppins no es una princesa. No tiene derechos de sangre ni herencias visibles u ocultas en ominosas profecías. Mary Poppins no basa su atractivo en lo bella que pueda ser —y no es que Julie Andrews fuese precisamente fea—. Mary Poppins no necesita un hombre para estar completa, no es su búsqueda vital porque ni siquiera es su búsqueda. La relación que tiene con el pizpireto Dick Van Dyke puede incluir una cierta tensión sexual pero no es el leitmotiv de la misma; al menos no desde Mary hacia Bert.
Podrán objetar que tampoco Alicia es la media naranja de nadie, pero seamos honestos, su personaje no deja de comportarse como una bola de pinball a merced de la locura de Lewis Carroll y el País de las Maravillas. Y esto es lo que la diferencia esencialmente de la niñera voladora y lo que eleva a Mary Poppins por encima de todas sus contrapartes: Mary Poppins toma sus propias decisiones y asume sus propias responsabilidades. Conduce su vida como ella considera adecuado; aconseja cuando lo cree conveniente y se muestra severa cuando decide que debe serlo. Y sin perder la amabilidad ni maquinar malvados planes. Mary Poppins es firme, independiente y decidida. Y es la buena de la película.
Quizá me digan que el análisis que presento es demasiado rebuscado. Puede ser, pero también puede ser que, con un poco de azúcar, Walt Disney Pictures nos estuviese metiendo una píldora de libertad en medio de una comedia musical aparentemente sencilla.
Una mujer libre en un mundo de esclavos
Es curioso, porque el personaje que la escritora P. L. Travers dibuja en las novelas originales de Mary Poppins es sensiblemente distinto al que aparece en el filme. El primer libro, escrito en 1934, presenta a una mujer mucho más severa, áspera y hosca. De hecho, Travers veía con muchas reticencias una posible adaptación de su personaje por parte de la Disney; y no fue sino tras una larguísima negociación con el propio Walt Disney que la autora australiana dio su brazo a torcer, permitiendo el rodaje de la película. Con todo, una vez estrenado el filme, Travers rechazó frontalmente la versión cinematográfica, precisamente porque la Mary Poppins que aparecía en la cinta producida por Disney y dirigida por Robert Stevenson no era lo suficientemente severa, áspera ni hosca.
Y me parece curioso porque, aunque es bien conocido el suavizado general que las películas de Disney llevan a cabo sobre sus homónimos originales, el caso de Mary Poppins es algo distinto. Y me explico; los cuentos de Perrault o los hermanos Grimm son bastante más gore que sus versiones en la pantalla grande, pero Disney creía conveniente su dulcificación para ofrecerlos al público infantil. Quizá este proceso vaya en contra del espíritu de las narraciones, pero sin embargo, el suavizado de Mary Poppins ayuda a la transmisión de un mensaje que la Disney había contravenido sistemáticamente hasta ese momento: que una mujer firme, decidida e independiente puede ser también amable y buena.
Y ser libre.
Porque este es el mensaje último que la película parece difundir: las personas deben ser libres. Libre es la sufragista señora Banks, libre es el deshollinador Bert y libre, absolutamente libre, es Mary Poppins. Y además, aquello que toca se vuelve libre.
Los niños se liberan de una educación decimonónica basada en la rigidez y la impostura de los modales. El propio señor Banks, pese a ser un acaudalado bancario, se libera de un trabajo que le transforma en esclavo. Esclavo del tiempo, claro, pero también esclavo del espacio oscuro y opresivo del banco. Y sobre todo, lo que es verdaderamente horrible, esclavo de una represión emocional derivada de una ambición que no le pertenece. Incluso el director del banco, el tacaño señor Dawes —interpretado en doble papel por el propio Van Dyke— se libera de años y años de avaricia y aprende, finalmente, a volar.
Quizá este mensaje feminista no sea tan evidente como los exuberantes números musicales, los deliciosos efectos especiales o la formidable interpretación de Julie Andrews; pero a mí me gusta creer que contribuyó a las doce nominaciones a los Óscar —incluidas mejor actriz protagonista, mejor película, mejor director y mejor guion adaptado—, a las cinco estatuillas y a que la propia Walt Disney Company considere Mary Poppins como su crowning achievement. Su mayor logro. Su coronación.
Es divertido pensar que la compañía coloca en lo más alto de su propio ranking un filme cuyo trasfondo está en las antípodas del mensaje de timorata sumisión femenina que asociamos a Disney. Que la mejor película de Walt Disney Pictures sea una película feminista.
Porque de eso va el feminismo: de que cada persona pueda tomar sus propias decisiones y asumir sus propias responsabilidades. En igualdad y en libertad. Porque en el coño de Mary Poppins manda ella.
Pingback: Mary Poppins: una feminazi en Disney
Buen artículo, penoso final.
si, tienes toda la razón. la última frase sobra totalmente. y el titulo de feminazi xq confunde mucho y mas cuando lees el primer párrafo que es tan irónico que llega a convencer de que van en serio xd
A la autora: pues se ve que walt disney esta remuerto, xq ahora disney va a sacar una pelicula que se llama Malefica y que es la misma historia que la bella durmiente pero focalizado totalmente en «la mala de la peli» quien es en verdad la protagonista y el icono a seguir.
Por lo demas, muy buen artículo. Yo también he adorado siempre a Mery, que es la mejor bruja de todos los tiempos, y también me quedé descolocá cuando vi que era de disney.
Saludos
No entendiste nada?
Pues a mi me encanta :)
no soy lector habitual de esta publicación: aunque los temas son pretendidamente interesantes, el tono para mi gusto falla estrepitosamente. Y en este caso, el contenido también, ya que resulta sesgado, forzado(feminazi¿?) y errabundo. ¿ Cómo han podido obviar la confrontación del modelo de mujer que encarna supuestamente la protagonista con el de las SUFRAGISTA madre de los pequeños? Num. musical aquí: https://www.youtube.com/watch?v=Kvk1NZDFvZU&feature=youtube_gdata_player no se puede obviar esto en la película para valorar su coherencia interna, discurso, intención, calado, etc
Me sobra la palabra «feminazi» en el título del artículo. Supongo que será un reclamo para llamar la atención pero sólo da pie a seguir manteniendo la confusión y los esterotipos sobre el feminismo.
El término feminazi no es un estereotipo sobre el feminismo, es lo que un gran número de mujeres son por no saber ser feministas dada su enorme falta de cultura y empatía social.
PD. Igualmente opino que sobra del titular.
Sin duda, quien mejor puede aconsejar a una mujer como ser debe feminista, es un hombre.
Porque ojo, el feminismo está bien, pero sin pasarse.
Creo que el término mansplaining no tiene equivalente en castellano pero tu comentario parece un ejemplo maravilloso.
El feminismo no defiende otra cosa que la igualdad de derechos de hombres y mujeres ¿es posible pasarse pidiendo igualdad de derechos?
En tal caso las feministas se opondrán a la Ley Integral contra la Violencia de Género, que según llevan denunciado diversos juristas es inconstitucional al dar un trato legal diferente a hombres y mujeres.
Si resulta que no se oponen a dicha ley, entonces no buscan la igualdad de derechos, buscan otra cosa.
Que los juristas denuncien que es inconstitucional no es garantía de que lo sea. Veamos qué decide el tribunal
Creete mucho mas lo que digan los juristas que el Tribunal Constitucional, que son 12 señores que estan puestos directa o indirectamente por el Gobierno, aunque en teoría no ha de ser así.
Una ley con derecho penal de autor como la LIVG, juzgados de excepción solo para juzgar hombres y varios artículos de la CE pisoteados (14, 17 y 24) no necesita ser revisada con lupa para ver si es o no es inconstitucional: ES un ataque a la democracia y a la propia CE.
Perdón, me acabo de dar cuenta eu lo que decía con ironía respecto al comentario de sulfuro, no?
Lo siento, no había leido bien ;)
Sí, herr Sulfuro puede decirte cómo deber ser una feminisita y una mujer de verdad, jejejeje
Jaja ridicul@ justo » un hombre puede aconsejar a una mujer sobre cómo ser feminista «❓
El término feminazi es el que usa un fascista cuando oye, en boca de una mujer, algo que no le gusta. Es obvio que en el título está usado con recochineo.
¡¡Bien dicho!!
Hoy en día no hay palabra más desvirtuada que la de «fascista».
El termino «fascista» es el que usa hoy en día cual cansino latiguillo cuando un menda quiere señalar a alguien que no piensa como él.
Para los Batasunos, los demócratas son fascistas;
Para los sindicalistas, los empresarios son fascistas; Y los jueces que intentan averiguar dónde se han ido a parar millones en subvenciones, son fascistas.
Para los «antifascistas», cualquiera que se duche todos los días es claramente fascista. Si es católico y va a misa, es un rancio fascista.
Y para las feministas radicales, cualquier hombre que no se pliegue a sus intereses es… exacto, lo han adivinado, un fascista.
No te lo creés ni tú…
El término feminazi crea confusión y se utiliza como idea estereotipada para desprestigiar el feminismo y hacer que casi una tenga que avergonzarse de definirse de esa manera. Antes eran/ éramos «histéricas», ahora feminazis, no hay mucha diferencia, el tema es que sea el patriarcado quien decide hasta donde se puede llegar.
Y no, no me gustan los extremismos pero me gustaría saber quien decide que es un extremismo y que no lo es, no es tarea sencilla.
Lo siento, pero las palabras no son inocentes, llevan mucha carga bajo ellas y es de responsabilidad saber usarlas adecuadamente.
Aunque feminazi resulte extraño, garantiza autoría revolucionaria
Pues no, no resulta extraño. Pero es despectivo. Revolucion «per se» no me dice nada, lo importante es dotar de contenido a ella (que la mueve y hacia donde va). Ahi radica el matiz. Y feminazi es, -espero que para ti también- un concepto muy jodido de revoluciòn.
Tampoco me gustó que llevara el término ‘feminazi’ aunque entiendo que sea usado en tono sarcástico, pues la gente lo ocupa para desvalorizar cualquier cosa relacionada con el feminismo, como si hubiera que poner un límite a las demandas feministas: si estás siendo demasiado enfática o radical, eres ‘feminazi’ y por lo tanto nada de lo que digas tiene valor ¿me explico? Mira por ejemplo el comentario de Sulfuro, con todo respeto, pero cae en esto que estoy diciendo.
También lo entendí con un cierto toque irónico, el problema es que, a veces, con la excusa de la ironía o el sarcasmo se siguen camuflando y alimentando ideas preconcebidas.
Eso por no hablar de quienes no pillen si es o no sarcasmo y lo tomen al pie de la letra. Yo veo una cierta responsabilidad de educar a la gente en ese aspecto.
falacias!!! en esta peli se ridiculiza a más no poder el movimiento feminista de la época!!! Recuerdo perfectamente que al comienzo de la peli la madre es bronqueada por el padre por no atender «sus labores» por ir a un mitin feminista!! Es más, las mujeres que van a ese mitin son personajes ridiularizados y grotescos!! Ni un sñolo personaje femenino de Disney muestra a las mujeres como realmente son…
Todos los personajes están exagerados para acentuar sus características definitorias. Está claro que o ni has visto la película, no te has leído el artículo entero, ambas cosas, o eres un@ perfect@ zopenc@. Te invito a que te extraigas el palo del culo y a que aprendas algo sobre cine.
Pero pero pero pero… Menuda agresividad y ordinariez! Se puede discrepar educadamente, creo.
Pero hombre si esa escena precisamente es prácticamente una escena cómica!!
Sí, pero la película toma claramente partido por la mujer y el gruñón marido acaba dejando el banco y los supuestos morales de la época. En ese momento el padre representa el rol tradicionalista y conservador que va a ser liberado, como se dice en el artículo, por el toque mágico de Mary Poppins.
Y, ¿cómo son, realmente, las mujeres?
De miles de formas, por supuesto.
Como personas
…pero sin el como.
La versión de los hermanos Grimm no es más «gore» que la actual (sí, la de Perrault que consideraba los cuentos para adultos. Con los hermanos bávaros estamos ya en el romanticismo al niño/a se le valora como en la actualidad y ya en ese momento se dulcifica las historias porque, con un fin pedagógico, están orientadas a los pequeños.
Es decir que la versión de Perrault nada tiene que ver con las actuales pero la de los hermanos Grimm bastante.
Desde el respeto y cariño le recomiendo que se documente.
fulgoresliterarios.blogspot.com.es
Bueno, en la versión de Cenicienta de los Hermanos Grimm, las aspirantes se cortan dedos del pie y parte del talón. De igual manera, las palomas condenan a la ceguera de los malvados a base de sacarlas los ojos en plena boda.
Con todo el cariño y el respeto, le recomiendo que lea el cuento en la versión de los Grimm: http://www.grimmstories.com/de/grimm_maerchen/aschenputtel
Hola, lo siento por los errores pero no escribo en mi lengua materna :)
Mrlemú, tienes razón con lo que dices sobre la romantización de los cuentos. (Aunque los hermanos nunca eran bávaros como nacieron en Hassia donde también coleccionaban sus cuentos.) Como una de sus fuentes más utilizadas era una mujer hugenota podéis leer cuentos originalmente franceses en su obra también, entre ellos La bella durmiente, un cuento ya muy romántico desde sus principios. Pero en general los Hermanos Grimm eran muy influídos por el romanticismo de estos siglos…así…
no.1: Pero lo que quiero decir es que si leo los cuentos de los Hermanos Grimm en alemán, leo cuentos dulces y sencillas como ya dijiste, cuentos para niños inventados ya centenares de años antes en tiempos en que el papel de la mujer era completamente distinta. Y aunque existen cuentos con mujeres fuertes tambien, eligieron a los cuentos ahora conocidos como cuentos Disney. Disney eligió cuentos en general románticos y con exactamente esos papeles que llevan las mujeres en las películas. Pero las aguzaron.
no.2: En el caso del cuento precioso, dramático y romántico de La serenita de Hans Christian Andersen dijeron que a nadie le gustaría un fin tragico en lo cual la serenita se transforma en espuma de mar y luego en un espiritú del aire, ahora capaz de hacer cosas buenas en el mundo, porque no quiere matar a su marido para sobrevivir. Siempre cambiaron los cuentos elegidos para que atraigan más al público (pero lo mismo ya hacían los Hermanos Grimm). Lógico, porque hablamos de millooones de dolares!… así es la industría, no mataría a nadie por eso. Pero…
no.3: Aunque entiendo casi todos los puntos del texto de Pedro, tengo que aducir que nombres como Blancanieves, La bella durmiente y Cenicienta eran los nombres dados a los cuentos por el pueblo que se contó estos cuentos. Si un cuento tenía nombres distintos en la voz del pueblo, los Hermanos Grimm añadaron esos o comentaron al principio de los cuentos que el cuento también era conocido como… Y ya allí las princesas tenían su papel. Pero sí, Disney eligió a utilizar los nombres originales y así tenían una cierta responsabilidad. Porqué, si muchas veces cambiaron tanto las historias que ya no parecían a los cuentos originales con el mismo nombre, no cambiaron los nombres también poniendo debajo: «según el cuento… de…»?
no.4: Pero Pedro tiene razón que en tiempos modernos no hace sentido presentar un papel de la mujer tan «tradicional». Especialmente como muchos de esos cuentos Disney fueron hechos en tiempos de cambio, de la liberación de la mujer etc.
En general critico la elección de los cuentos como fuente, la imagen física de la mujer así como la imágen general de la mujer como princesa que no hace mucho o nada para finalmente casarse con su príncipe azul y no veía nunca ese fin pedagógico que los cuentos originales llevaban.
Sobre Mary Poppins quiero perder unas palabritas: Siempre me encantaba. La tomé por ejemplo cuando era niña y a veces aún hoy cuando me preocupo de los hijos de amigos. Todos los puntos que adujo Pedro los firmaría.
Gracias por ese artículo y saludos del país de los Hermanos Grimm.
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Una vez Julie Andrews salió en tetas
Sí, en la película conocida como «la película en la que Julio Andrews enseña las tetas». Es triste pero real.
Qué tetas❓?
Me encanta Mary Poppins y otra película que se escapa a los esquemas habituales de Disney es La Bruja Novata.
Angela Lansbury se enfrenta al principio al papel estereotipado de la solterona del pueblo, pero cuando la conocemos nos damos cuenta enseguida de que es una mujer fuerte, a la que ¡oh sorpresa! no quiere ser madre y no ninguna pobrecita que no ha encontrado ningún hombre que la cuide.
Sus ingeniosas ideas llevarán a Ingleterra a ganar una batalla crucial para la II Guerra Mundial.
Es cierto que hay algunas escenas donde los niños de los que se hace cargo, perpetúan claramente los roles tradicionales, pero lo compensa el gran carácter de la Sra. Price.
Según parece, «La Bruja Novata» fue la pseudoversión que hizo Disney de otros libros de Mary Poppins, ya que P.L. Travers se negó en redondo a vender los derechos de sus restantes novelas, al ver lo que había hecho la compañia con el primer libro.
Un saludo.
No es así. La bruna novata está basada en el libro de Mary Norton «Bedknobs and Broomsticks» de 1945. Es cierto que se usaron canciones deshechadas de Mary Poppins (como «En el fondo misterioso del mar») pero de ahí a una pseudoversión…..
Me explico. Ya que Travers no concedió los derechos de sus novelas, la Disney, en vista del éxito de Mary Poppins, optó por adaptar una novela de temática «similar» (mujer mágica y libre que ayuda a niños) en un formato «similar» (animación e imagen real).
Un saludo.
Coincido. Buen artículo, si bien habría que documentarse algo más, pero un final incoherente con el estilo seguido. y el título suena a reclamo rollo «SEXO GRATIS»
Muy de acuerdo con el artículo pero voy a romper una lanza por Alicia, una niña lanzada a un mundo controlado por seres con motivaciones absurdas, cuyas reglas no comprende y que a veces se aviene con ellas y en ocasiones se rebela y hace lo que le sale del higo.
Aunque claro, intentar encontrarle sentido a la obra de Lewis Carroll es quitarle toda la gracia.
Lo de Feminazi es una concesión al sensacionalismo completamente innecesaria, injusta, vulgarizadora y tópica.
Lástima echar a perder un buen contenido para llamar la atención en busca de clics…
Llorica, llama a la buambulancia.
Es un término como cualquier otro
¿Como cualquier otro? Venga hombre.
Si lo que querías era tirarme un insulto, esmérate un poco más.
Por cierto: ¿tenemos algún karma pendiente de otra vida o algo? ¿Me refrescas la memoria?
Por cierto: recibida la explicación pertinente sobre el tema por parte del autor en http://www.meneame.net/story/mary-poppins-feminazi-disney:
«hasta hace bien poco, también consideraba ese término como algo a erradicar y, sin embargo, ahora prefiero hacer un ejercicio de apropiación porque he comprobado que es la mejor manera de desactivarlo»
…creo que debo disculparme. ¡Ea!
Ah, que Mulan es machista porque se tiene que disfrazar de hombre. Y lo de que tras revelarse como mujer y ser aceptada como tal por sus compañeros son estos los que se tienen que disfrazar de mujeres también es machista, imagino.
Muy buen artículo, aunque claramente lo de feminazi no encaja con el resto del contenido.
¡Viva Mary y sus drogas!
Buenísimo artículo. Se entiende más que de sobra la ironía del término «feminazi» que, además, ya dentro del propio movimiento feminista se está usando para apoderarse de él.
Es decir, ¿feminazi yo? Y a mucha honra. El problema del feminismo es que la gente no tiene ni puta idea de lo que es. Parece que le tienen miedo como si fuese el coco. O como si hubiera gente que no está de acuerdo en que las mujeres votemos o trabajemos o hagamos lo que no sale del Mismísimo.
«Ah, no no, si yo estoy de acuerdo en que las mujeres voten, trabajen y tengan el mismo sueldo que los hombres, pero…» PERO NADA. Entonces eres feminista cazurro/a.
Y luego están las personas que le buscan problemas a todo y que se permiten el lujo que «la cultura feminista les ha dado» para etiquetar y meter o sacar en el saco aquello que les place. «Pues esto no es feminista porque tal», «y esto tampoco porque tal…», «y los azotes sexuales tampoco porque tal…». Pereza máxima.
Mary Poppins es la adaptación de una obra de los años 30, ¿no podemos mirar lo positivo que tiene en vez de hacer hincapié en todo lo negativo?
¡Qué pesada es la gente!
Pues muchas gracias por su comentario. Ha escrito lo que querría decir yo, bastante mejor que yo.
Un saludo.
Claro que sí.
Eso es como cuando de pequeño te ponían un mote y para que te dejasen en paz hacías como que te daba igual e incluso decías que te gustaba, pero en realidad te estaba carcomiendo por dentro
«El problema del feminismo es que la gente no tiene ni puta idea de lo que es. Parece que le tienen miedo como si fuese el coco. O como si hubiera gente que no está de acuerdo en que las mujeres votemos o trabajemos o hagamos lo que no sale del Mismísimo»
Es que eso que dice usted no tiene nada que ver con el feminismo. Eso se llama estado de derecho y quien esta de acuerdo con eso no es feminista, es un demócrata. Feminismo tiene que ver con cuotas, con prohibir jugar al fútbol a los niños, con hacer un discurso en el que se denigra a los hombres, con buscar justificaciones ideológicas al pobre desempeño personal, etc.
Un saludo.
El feminismo que busca la igualdad era el de hace 40 años, lo que busca ahora son privilegios legales y dinero público. A ver un tío trabajando de autónomo por qué tiene derecho a ayudas hasta los 30 y una mujer hasta los 35 ¿Qué igualdad es esa?. O que se subvencione contratar a una mujer (200 euros al año) antes que a un hombre. O las ayudas a mujeres empresarias (hombres no) de la Comunidad Valenciana… etc, etc.
Se subvenciona el contratar a una mujer porque, probablemente, si el empresario no pillara esos 200€ no lo haría y contrataría a un hombre en igualdad de condiciones.
Una autónoma tiene derecho a ayudas hasta los 35 porque hay menos mujeres autónomas, igual que hay menos mujeres en altos cargos y menos empresarias; te dejo que adivines tú el por qué, a ver si puedes.
A ver si adivino…. ¿Porque el tío que está en el paro, el autónomo de 31 años y el emprendedor que comienza un negocio en Valencia son todos unos privilegiados por ser hombres? Claro, por eso están en el paro, o sobreviviendo como autónomos o empresarios. Que no te pase a ti, que entonces igual cambiabas de opinión.
Al final se ha sustituido la búsqueda de igualdad de oportunidades por la de igualdad de resultados. Lo que supone favorecer a unas y perjudicar a otros. A eso no lo llamemos igualdad, porque no lo es.
¿Y con las ayudas a los menores de 35 no te metes?Claro , porque tu has tenido o tienes menos de 35 .Pero como nuca vas a ser mujer que les den.
¿Si la situación fuera a la inversa, con ellas cobrando hasta los 30 y ellos hasta los 35, dirías lo mismo?
Pues eso.
Pues dependería de que si estuviera justificado o no.
El otro día , vi que en SEPE (antiguo INEM) daba el curso para obtener el carnet de manipulación de alimento gratis pero solo para extranjeras .Soy española así que … tengo que entenderlo.
Espera, yo tengo otra respuesta: Las mujeres, normalmente alrededor de la treintena, se quedan o pueden quedarse embarazadas, los empresarios no quieren contratar a mujeres de esta edad porque los enfrenta a bajas por embarazo, permisos por maternidad y jornadas reducidas por conciliación familiar. Evidentemente, es más sencillo contratar a un hombre. Las «desigualdades» que nombras, pretenden, la mayoría de veces sin éxito, igualar las oportunidades. Aunque a mi se me ocurren dos ideas que ayudarían más a la igualdad absoluta. 1. Que los hombres no puedan trabajar ni un día ni hora más que la mujer que va a tener o ha tenido su hijo. Así al empresario no se plantearía el trato desigual, porque los dos sexos le darían el mismo problema. O 2. Que todas las mujeres dejemos de tener hijos, y que durante unas décadas más los empresarios sean felices… hasta el fin de la vida humana.
Si se te ocurre alguna otra idea de cómo solucionar este problema, soy toda oídos…
¡Ah! y viva Maripopins, me ha encantado el título.
Para eso lo que hay que hacer es subvencionar las bajas de maternidad, que ya se hace.
Por lo menos ya estamos llegando después de tanto rollito bienpensante al meollo del asunto: las subvenciones. Que es de lo que va el feminismo de 2014, aunque algunos ingenuos sigan hablando de sufragistas, de la libertad y del arco iris.
Sin ánimo de ofender, el comentario es una reducción bastante materialista de un tema tan complejo e importante como la desigualdad por razones de género.
Además de mezclar y confundir dos conceptos diferentes como feminismo y discriminación positiva.
En que ójala no existiera la discriminación positiva, estamos de acuerdo, tú, yo, y todas las personas que han escrito aquí, porque ese no es el objetivo final ni del feminismo, ni de ningún otro movimiento social que persiga la igualdad. Es un parche de las instituciones, sencillamente.
Que puede estar mal aplicado en determinados casos, por supuesto, la burocracia siempre es mejorable. Pero no entender que se trata de un mal menor, y no de un objetivo malicioso, es demostrar muy poca empatía.
La igualdad no se consigue en un día, ni dos, es cuestión de años, y durante esos años, que tiene que hacer un Estado, consentir que se discrimine sistemáticamente a parte de su población sin intervenir? Es obvio que no. Ahora si preguntaras a cualquier mujer, a cualquier persona, que prefiere: si un Estado que la sobreproteja o una sociedad igualitaria en la que no sea necesario, no hace falta ni decir cual sería la respuesta. Ahora mi curiosidad es si tú responderías lo mismo.
Concuerdo contigo. Hoy en día el feminismo se ha desvirtuado y convertido en eso. Yo soy mexicano y aquí vivimos una situación de segregación y de desigualdad de derechos de los hombres frente a las mujeres. Creo que el feminismo debería de retomar su intervencion sobre aspectos ideológicos más que sobre garantías particulares que no sólo no resuelven, sino que perjudican la imagen que se tiene de la mujer sobre el hombre y sus condiciones
¿Lo dices en el país donde hay feminicidios al por mayor? ¿Dónde han abusado sexualmente de varias de mis amigas y a NINGUNA le han hecho caso? Disculpa, pero creo que no te discriminan por tener pene…
Pues a mi me gusta el título. A la gente le duele que le rompan los prejuicios… entran para criticar y se encuentran con un muy buen artículo.
No es sólo Disney, sino la práctica totalidad del cine la que está atravesada por la reproducción de los roles de género y la ideología del amor.
Entre las escasas excepciones, las analizadas aquí como discursos alternativos:
http://www.contraelamor.com/search/label/CONTRALOVE%20FILMS
No se puede obviar el papel de P.L. Travers en el guión de Mary Poppins. Te recomiendo Esperando al señor Banks, donde cuentan cómo fue el proceso. Disney quería a una Mary más meliflua y menos independiente. Travers le dijo que nada de eso, que Mary se valía por ella misma. Ambos construyeron una película maravillosa. No sé si la mejor de Disney, pero bueno, ésa es otra historia.
Travers tuvo el coraje de decir «en mis personajes mando yo». Y Disney, más o menos, lo respetó. Eso es lo importante: la libertad de la mujer. Lo que hoy algunos, por desgracia, ponen en cuestión.
El artículo es fantástico, pero las imágenes en movimiento son un error desde mi punto de vista, me han dado dolor de cabeza y me han impedido concentrarme en el «placer» de leer
Ojalá un comentario de alguien diciendo «el feminismo es igual de malo que el machismo.»
No se trata de lo mismo, creo que confundes feminismo con hembrismo.
Me parece de lo más superficial achacar los modelos de la mujer hace unos años a una sociedad moralmente no desarrollada como la nuestra, en vez de analizar como yo veo que este cambio de paradigma de la mujer viene de un cambio en las condiciones económicas, es decir en las relaciones de producción. Que Cenicienta, Blancanieves, etc… y de ahí hacia atrás desde Disney a la historia entera de la literatura, que todas esas princesas sólo puedan esperar un príncipe azul que las salve no creo que nazca de una torcida inclinación de los autores de los cuentos por lavar el cerebro de los niños, ni siquiera puedo aceptar que se juzgue aquellas sociedades como moralmente «malas» como si tuvieran una especie de enfermiza voluntad (puramente ideológica) por mantenerlas sometidas. Según yo lo veo es que la mujer, debido a las condiciones de producción antes del surgimiento de las últimas tecnologías, no tenía literalmente apenas un medio de ganarse la vida por si sola. ¿La realidad era machista?… puede.
Al fin y al cabo Mary Poppins tenía un curro liberal, y era eso lo que la hacía tan libre. ¿A qué otras profesiones podía aspirar una mujer a principios de siglo? Juzgar la libertad de la mujer como si el asunto fuera simplemente una lucha de ideas, independiente la realidad económica exterior me parece, no sé, una memez. Cuando surgieron las profesiones liberales, por la inercia histórica y el peso casi sagrado de la familia, los hombres ocuparon estas posiciones, después la mujer poco a poco fue ganando como es de justicia su terreno.
No creo por cierto que sean retratos rancios el de esas princesas que esperan su príncipe. Creo de hecho que la mujer moderna, liberada y estresada, es bastante más rancia que esas antiguas amas de casa dedicadas a tricotar y tener hijos.
El tema es muy interesante pero ya desde el comienzo hay algunos flecos que se me quedan colgando.
No entiendo muy bien el rebajar la importancia de Mulan y mucho menos con el argumento empleado. No entiendo por qué la Mérida de Brave es «una mujer en su propia y completa condición femenina» y, sin embargo, Mulan no. No entiendo qué tiene que ver vestirse de hombre con la condición femenina. Es más: ¿qué es la «propia y completa condición femenina»? ¿Y la masculina?
Hace mucho que no veo Mulan, pero me parece que es un personaje tremendamente interesante, de esos que cogen el toro por los cuernos y hacen lo que tienen que hacer cuando tienen que hacerlo a pesar de las presiones externas. Mulan se disfraza de hombre como se han disfrazado tantas otras a lo largo de la historia (dentro y fuera de la ficción) y no creo que se ponga en entre dicho la condición femenina que, una vez más, sigo sin tener muy claro qué es.
—-MULAN—–
– Tock, tock, señor Walt Disney, que dicen que usted es muy machista… vamos a perder público!!
– Tranquilidad que ya tengo la solución: una película que trate de una mujer empoderándose.
– ah, sí?? y cómo será??
– Muy fácil, se llamará Mulán y lo único que tendrá que hacer es aprender a:
· luchar COMO UN HOMBRE (ya se sabe que la manera más práctica de resolver conflictos es a través de las guerras)
· cortarse el pelo COMO UN HOMBRE
· escupir COMO UN HOMBRE
http://www.youtube.com/watch?v=Eq_4yD4ROlo
—-BRAVE—-
No solamente desaparece el príncipe azul que salva a la princesa sino que además la película va sobre la relación hija – madre. Siempre que se habla de BRAVE se enfatiza en la desaparición del príncipe (muy importante) pero las películas Disney (Brave es de Disney pero hecha por Pixar) SON FATALES no solamente porque vinculan la existencia de la mujer al hombre por encima de cualquier cosa, sino porque además eliminan la relación de ésta con cualquier otra mujer, determinando el desarrollo de las mujeres a los celos y las envidias entre ellas.
¿Por qué ninguna princesa Disney tradicional tiene madre o cuando la tiene, ésta la quiere matar o la odia? ¿Dónde está la madre de Ariel, de Jazmín, de la Bella? ¿Por qué Cenicienta tiene que ser odiada por su madrastra y hermanastras? ¿Por qué en Blancanieves lo mismo? ¿Es que las princesas Disney no solamente necesitan de un príncipe azul sino que además deben llevarse fatal con todas las mujeres de su alrededor -cuando las hay…-? Esto impacta en el desarrollo de las niñas, futuras mujeres.
Ah! pero una cosilla que puede ser un defectillo: Mérida no quiere casarse porque dice que «no se siente preparada». Mmmm… hubiese molado aún mucho más que no fuese porque «no está preparada para el amor», sino porque, simplemente, NO QUIERE.
Lo cierto es que el pensamiento feminista nos regala reflexiones de gran profundidad que nunca se valorarán lo suficiente. Ahora entiendo por qué he visto discutir tanto a mis hermanas con mi madre o entre ellas: ¡lo habían visto en las pelis de Disney!
Joder, si fueran de otra forma entonces nunca habría habido esos malentendidos sobre los estudios, la convivencia en casa…
Así que suscribo. Es necesario que los personajes femeninos de Disney se lleven bien con su madre, con sus hermanos/as, con todo el mundo… sí, que todo sea chupi constantemente. Y así el mundo real cambiará mágicamente y todos seremos felices y comeremos perdices.
Quitando el título y la vulgaridad final, lo de enmedio me ha gustado mucho.
Lo siento pero no.El autor del artículo y la mayoría de comentaristas no se enteran de nada.Siento tener que decirlo así pero no se me ocurre otra manera.
Un escritor ,un cuentista, un guionista no se para a pensar semejantes tonterías. Un autor teje su historia y depende de la época los personajes son de una manera u otra.
Las mujeres en el siglo XVII tenían un rol en la sociedad,en el XIX otro y a finales del XXI tendrán otro.
No es lo mismo ser mujer ,por ejemplo en 1910, en un barrio rico de Londres , que en un pueblo del Pirineo.
Ni Robin Hood era socialista , ni Juana de Arco feminista.No se puede juzgar por el mismo rasero a Hernan Cortés que a Adolf Hitler, aunque los dos perpetraran grandes matanzas.
No se puede juzgar personajes y hechos históricos desde la perspectiva actual.
Estoy con Victor Martín, Juan Carlos y con Dora.Por cierto si el autor quería expresar lo que escribe Dora o ha tenido un mal día o le hace falta un curso de «Como expresar en palabras lo que estoy pensando»
Totalmente desacuerdo. El tema está además caprichosamente sesgado y forzado. Y si solo daba para un comentario, sobraba.
Sr. Toorrijos. Su artículo es magnífico, soberbio. Desde la concepción a la redacción. Sin embargo, debo reprocharle que haya incluido en el pelotón de las princesas objeto a Bella. Al fin y al cabo es un impetuosa intelectual que rechaza al guapo del pueblo y se arriesga a morir vieja y aterida en un castillo con un monstruo por salvar al insensato de su padre. Vale. Al final el monstruo está forrao. Pero bueno. Nadie es perfecto.
En todo caso, felicidades.
mary poppins es la mejor película de disney sin duda, pero me sigue crujiendo la lesbofobia de la canción de las sufragistas y de como humillan a la madre en la película, recuerdo que decía algo en la canción de <> después llega el señor banks y esconde todos los bártulos de la campaña feminista porque a su marido no le gustan sus vainas. La tensión sexual no resuelta entre bert y mary poppins se debe a que Bert (que es encantador) no es el ejemplo de hombre del que hay que enamorarse y Mary Poppins es una criada que cuida los hijos de los demás (o quieren dejarlo así entender) pero lo camuflan todo porque la protagonista tiene que ser un personaje misterioso después de todo. Mary Poppins es uno de los personajes femeninos más fascinantes la verdad. En cuanto a Mulán, tengo entendido que fue un personaje real y que COMO MUJER DIRIGIÓ EL EJÉRCITO CHINO; en la disney la ocultan y se inventan que se disfrazó de hombre, en serio, yo no la veo una película feminista para nada. Las pelís de Juana de Arco la consienten porque es ultra católica.
“FEMINAZI” es un término inventado por el liberalismo español, como “perroflauta”, “buenismo”, “ecologeta”, “oenegeta”, “mundos de Yupi”, y otros que no recuerdo ahora, cuyo objetivo es ridiculizar algo que va contra sus intereses y no pueden controlar.
Claro, en España http://en.wikipedia.org/wiki/Feminazi
El artículo en si es estupendo y lleva mucha razón en varios puntos, pero creo que con Disney os habéis colado al hacer un análisis TAN simplista de las películas. Los niños tal vez lo vean así, pero yo como adulta analizo esas historias y no me queda claro que sea todo tan blanco o negro. En Blancanieves no lo voy a negar, ella es una pánfila como pocas, fin, y en La Bella Durmiente, es cierto que el elemento con poder es Maléfica, pero también las tres Hadas Buenas, ya que sin su ayuda el Príncipe no habría podido romper la maldición. En La Sirenita, ella tiene el deseo de ir al mundo exterior de SIEMPRE, no lo deja todo por el príncipe, simplemente él es el último aliciente que encuentra para salir a explorar y en cierta manera ella lo utiliza de excusa para escaparse. La Bella, yo la veo aparte de con el obvio mensaje anti-superficial (ya que ella se enamora SIN saber que él se transformaría después), como una intelectual sin recursos para desarrollar su inteligencia, que la tiene. Pocahontas le da toda una lección de humanidad a John Smith, Jasmine se opone a ser tratada como carne de comercio… en fin que aunque si hay casos en los cuales la protagonista no hace «nada», hay otros en los cuales si te paras a analizar un poquito la historia va más allá de un argumento tan simplista como que el chico las salva. Y por cierto en Blancanieves el príncipe también hace bien poco salvo, como ella, existir, el trabajo sucio se lo llevan los enanos.
Totalmente de acuerdo. Estoy harto de que se critiquen las películas de Disney por ser machistas. Excepto en las primeras (claro reflejo de la sociedad de la época) no veo todo ese machismo que siempre se les achaca…
Todo esto está muy bien. Pero creo que se deja pasar el hecho de que el mensaje es también que la madre de los niños deje de una vez sus batallares políticos y vaya a cuidar de sus hijos. Porque es lo que deben hacer las madres. En la casa a cuidar de los niños.
De eso nada. No hay un sólo momento en toda la película en que se sugiera eso. A la madre no la critican nunca, pero sí al padre por su falta de afectividad y atención a sus hijos, y excesiva rectitud.
Absolutamente de acuerdo contigo! Me parece que al final el mensaje es que tanto el padre como la madre se deben hacer cargo de su familia para que esta sociedad siga funcionando. Por supuesto que la película tiende más a la crítica hacia el papá, aunque la mamá llevaba un papel igual de importante en el desarrollo de los niños, sin embargo la crítica directa a ella es nula. Muy buen comentario
Solo un comentario formal: lo de meter imágenes de esas en movimiento despista mogollón y creo que va contra natura en una publicación pensada para lecturas largas. No me he podido leer el artículo por su culpa. No os contageis de lo más chafardero de internet, por favor Jot Down, que ya moláis sin necesidad de usar recursos así.
Hola.
Primero voy a hacer una pequeña aclaración a la palabra «feminazi» del título.
Considero esa palabra como un término a erradicar, sin embargo, de un tiempo a esta parte, y siguiendo una corriente del feminismo, he decidido que la mejor manera de desactivarlo es «apropiarse» de él.
Un buen ejemplo es este vídeo de apenas 45 segundos, del que recomiendo su visionado: https://vimeo.com/64941331
En cuanto a la «completa condición femenina» de Merida o Mary Poppins respecto a Mulán, se trata de que Mulán, pese a ser una de esas «ondas» menos rancias en la continuidad de Disney, no deja de vestirse de hombre durante parte del metraje. Esto no es «culpa» de Mulán, sino de la época que vive y de los guionistas que la escriben o adaptan. Por contra, en el caso de Merida o Mary Poppins, no necesitan vestirse de hombre ni hacer nada por ningún hombre. Su condición femenina es más autónoma, por decirlo de alguna manera, que la de Mulán.
De igual manera, esto es también circunstancia creada por los guionistas que hayan escrito a esos personajes.
Un saludo.
Lo bien que iba todo y vaya maner de joderla en la última frase por querer hacerse el gracioso.
Ya no retuiteo, ala.
Creo que el autor debe estar acurrucado y llorando después de estas durísimas declaraciones.
Pingback: 30/01/14 – Mary Poppins, una feminazi en Disney | La revista digital de las Bibliotecas de Vila-real
Echando un vistazo veo que no soy la única que está en desacuerdo con la aplicación del término «feminazi» a Mary Poppins.
Tu articulo me parece estupendo, y en cuanto a la película ,que había visto hace mucho, la disfrute el domingo pasado con uno de mis nietos!
Pingback: El crítico prejuicioso - Estrenos 31 de enero | MAYHEM
Para los que quieran ver una película de princesas en la que es ella quien toma sus decisiones: http://tu.tv/videos/la-espada-magica-en-busca-de-camelot_1
Le da mil vueltas a Brave.
Este artículo, como los artículos que critica el autor y la mayoría de los comentarios, caen en la cansina visión que tienen muchos adultos sobre obras infantiles de cualquier tipo: ven ideología, ganas de adocentar a los demás y tres pies al gato con botas. No sé, tal vez su subconsciente les lle a esta crítica no porque según ellos estas obras tengan «mensaje», sino porque no es el suyo que es el verdadero, justo y el que tendrían que aprender en todos los colegios según su gran saber y entender.
En mi soberbia opinión el error es el siguiente: una obra para niños sólo hay una manera correcta de disfrutarla: con ojos de niño.
Suscribo punto por punto.Es lo que queria escribir yo pero como no se, pues eso..
También a mi me parece que buscar significado en las «señales inequívocas» de un musical familiar es cuanto menos sintomático de un trauma o bien de disponer de demasiado tiempo libre.
Pero vaya por delante que hay muchos ejemplos de heroinas disney como Bella de «La bella y la bestia» que toman sus propias decisiones y logran su objetivo en la vida (aunque este no les guste a ustedes), o como la Sirenita, y nos son juguetes en manos del destino o de los demás, si bien son ejemplos recientes ya que como ya se ha opinado, la filmografía de Disney hay que encuadrarla en su época, y si se descontextualiza pues… nos hace perder el tiempo a todos.
Me ha gustado su artículo. Qué pena de título y de última frase.
¿Y qué tiene que ver el feminismo con el aborto? Soy radicalmente feminista, y si Mary Poppins trabajaba, presentaba un nuevo rol social y actuaba según le daba la gana, me parece fantástico, igual que la madre de los niños, una convencida sufragista; pero ¿qué tiene que ver el aborto aquí? Igualmente que digo que soy radicalmente feminista, digo por la misma razón que soy radicalmente anti-abortista, porque yo soy feminista porque creo en la igualdad, en la libertad, en un desarrollo que no dañe a nadie y conjugue a todos, y esos mismos valores me impiden estar a favor de cualquier ley que permita acabar con la vida de un ser humano al que se le niega la libertad a vivir, la igualdad de oportunidades (¿a alguien se le escapa que abortan más las mujeres pobres y que por tanto los niños ricos tienen más »derecho» a nacer?) y se permite que los avances se ceben con ellos »porque no son humanos».
No mezclemos cosas.
No puedes ser feminista y estar en contra del aborto ¿Estás en contra de las mujeres abusadas sexualmente? ¿De las que van a tener un embarazo que las mate y deje solo a los niños que tengan detrás? ¿De las pobres que no podrán darles de comer? ¿De las qué van a ver a esos bebés morir apenas nazcan? Muy feminista.
La sociedad no se comporta como tal y esperáis que películas infantiles enseñen la manera de pensar y actuar. Bien.
Lo cierto es que «Mary Poppins» es una película irresistible. Y más allá de sus poderes feministas (que yo creo que los tiene, sin duda), es una película cuyo tema principal es el del «elemento extraño» que llega a una familia (o un entorno concreto y cerrado) y la cambia para siempre. En realidad, si se mira el asunto sin prejuicios y con cierta amplitud de miras, es la misma cuestión que trata Pasolini en «Teorema». Y, cambiando radicalmente de tercio, Leo McCarey en «Siguiendo mi camino» (ahí un cura transforma una pequeña comunidad). Cómo el que viene de fuera (tema de muchos westerns, por otro lado) tiene la perspectiva de ver lo que los que están dentro no saben ver. Y cómo tiene la opción, ese individuo externo y extraño, de transformar la realidad inmediata, para bien o para mal.
Contra las endogamias y los hábitos deterministas, «Mary Poppins» promueve la libertad y la posibilidad de mejorar a través de una receta que al mismo tiempo fomenta la creatividad, el rigor y la firmeza (y un toque de locura).
Un clásico, insisto, irresistible, la inmortal «Mary Poppins». Y sus números musicales, tan bellos y únicos y meritorios. Y ese bolso imposible en el que cabía de todo.
http://www.elcineenquevivimos.es
Ilustrar textos con gifs animados debería estar prohibido.
Estoy de acuerdo, los gifs solo sirven para distraer, ¿qué tienen de malo las fotos?
La última frase del artículo está totalmente fuera de lugar. Por otra parte, a Cenicienta la ayuda básicamente el Hada Madrina, no el Príncipe.
Podrías haber hablado sobre la película Saving Mr. Banks, que aclara todo lo referido a la autora de Mary Poppins. ¿O es que lo has sacado todo de ahí?
El título aunque a mi no me gusta, pero lo entiendo, va con el atículo porque para esos tiempos ella es lo que ahora llaman los machos a las mujeres independientes y luchadora por sus derechos sin necesidad de que ningún hombre la proteja del mundo, eso les llaman ahora FEMINAZIS, y es esta mujer en esa época para todos los hombres como miraban a cualquier mujer que no fuese sumisa.
Me ha encantado el artículo.
Pingback: Las mejores pelis de Disney, parte 2
una pelicula y mas las de disney estan hechas para divertir veanlas y dejense de hacer telarañas en su mente casi siempre le damos la interpretacion a las cosas de acuerdo a nuestra forma de ser el dia que el ser humano deje de fiscalisar todo sera mas feliz
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Excelente el artículo.
El título desconcierta un poco, pero cuando se empieza a leer hay que llegar al final.
Muy buen trabajo, fue un placer leerlo.
Patético final, como no, siempre cuando uno ve un artículo feminista en el cual no se meta con la figura del hombre (cosa que la gente confunde, y no debe ser así) siempre hay un cierre penoso. En fin.
Solo añadir que se pide igualdad en series televisivas, programas, radio y películas y nunca hay. Y no a favor del hombre, al revés. Y me refiero a que una mujer agrede a un hombre, y eso no puede ser así. Se toma como broma y cuando vemos una película antigua en la cual un hombre pega a una mujer, nos indignamos, y hacemos bien pero, ¿por qué cuando es al contrario se ríe la gente? A mí no me parece gracioso ver violencia en la tele, de ningún tipo, ni contra el hombre ni la mujer.
Y vuelvo a decir, que es un buen artículo, pero que nunca se comenta lo que he mencionado con anterioridad.
Alguien me podría explicar el título del artículo? Es que no le veo la relación a lo escrito y al título…
La Sra. Banks, gran activista pro derechos de la mujer, pero en casa obediente a su marido. Me pareció curioso este personaje, un comentario por aquí también hace referencia a ello, y es la primera vez que me fijo detenidamente en esto al ver la peli. Por otro lado, a lo largo de la película nos recalcan constantemente lo femenina, guapa y elegante que es Mary Poppins (aparte de inteligente, eso sí): «Es seria, pero sin perder su feminidad», viene a ser. Y una vez más: “feminista” no es el antónimo de “machista”. Adoro esta película, pero en cuanto lecciones, la verdad que prefiero obviar este tema cuando la veo.
Los cambios no se dan de la noche a la mañana querida. Así comenzaron muchas sufragistas seguramente. Y así es como las grandes revoluciones comienzan. La película lo retrata todo así. Y respecto a las virtudes de Poppins sobre tu crítica a la pérdida de la feminidad, no te das cuenta de que justamente es uno de los mayores aciertos? Por qué una mujer para ostentar esas virtudes tendría que parecer «hombre» o perder esas cualidades que la distinguen? Échale coco
A mí la frase que menos me gusta es «Mary no necesita un hombre para estar completa», pese a tampoco gustarme el título ni la última frase, porque por independientes y autosuficientes que seamos, todo ser humano necesita unirse a otro sentimentalmente aunque en frío crea que no; tiene que enamorarse para comprenderlo. Pero en esta era de capitalismo funerario, donde nos bombardean de individualismo para aislarnos y hacernos consumir, el amor es un obstáculo por implicar lo contrario. Viva la independencia y la autosuficiencia, pero primero el amor, porque sin él ni los más independientes hubieran nacido.
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Qué buen artíiculo y qué pésimo título. Mi película favorita de mi niñez. Mary es irrepetible y es tal y como se describe aquí, era mágica. La autora devalúa su artículo con algo tan peyorativo como lo de feminazi. Podía haberlo dejado en feminista y ya.
«Feminazi» no, libertaria. Me gustó el artículo.
Que bueno que ahora las propuestas animadas para nuestras niñas rompan con ese modelo horrible de la princesa y mujer sumisa que sólo piensa en príncipes azules y ropitas rosa… pfffffff Son más responsables estos de mujeres autónomas, claro sin excesos, conozco algunas feministas que de reivindicación de género, poco y nada, que al contrario polarizan y viven en una competencia permanente sin sentido.
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«Rupert Murdoch, vivo ejemplo de triunfador hecho a sí mismo gracias a las obvias virtudes del liberalismo económico y, por tanto, un hombre decente y de bien.»(nótese el sarcasmo del autor)
«Porque de eso va el feminismo: de que CADA PERSONA PUEDA TOMAR SUS PROPIAS DECISIONES Y ASUMIR SUS PROPIAS RESPONSABILIDADES. En igualdad y en libertad. Porque en el coño de Mary Poppins manda ella.»
Mi pregunta es: según el autor, ¿Cuál es el momento en el que el ideal del liberalismo en su plena expresión (económico, social, etc.) deja de representar a Rupert Murdoch (el mal, el villano), y pasa a ser Mary Poppins (el bien, lo bueno)? ¿No será que el autor entiende la libertad («de que cada persona pueda tomar sus propias decisiones y asumir sus propias responsabilidades. En igualdad y en libertad.») desde su propio plano egoísta y controlador?.