Me gusta mucho el café. Me lo bebo preparado de varias formas, pero prefiero a presión: el espresso. No tengo en cuenta en mi lista por tanto el café turco o árabe, que me gusta, pero que es distinto. Sé poco de orígenes porque cada taza es única: nunca he bebido varios cafés preparados por la misma máquina y el mismo cafetero con distintos granos. Son incomparables.
El café bueno debe ser tan denso que casi se pueda masticar. Siempre pido un “café solo muy corto”; si el bar es de baja expectativas digo “muy muy corto”. Lo tomo sin azúcar. Tengo varias denominaciones para cuando un camarero amable me trae un espresso tan largo que puedo bañarme: piscina, aguachirri, cubilete. Solo con el color y la solidez de la espuma ya veo si vale. Nunca pido que lo repitan, por falta de esperanza. Me conformo con lo que traen.
Bebo cuatro o cinco cafés al día, uno poco antes de ir a dormir. Cuando estoy en el extranjero, procuro encontrar cafeterías donde hagan un café aceptable. El espresso se ha extendido, pero hay países o regiones donde aún es raro. Cuando estoy en China dejo de beber café. Me paso al té. A veces entro en un Starbucks —en las ciudades donde hay— para paliar la falta.
La lista de cuatro países que hay abajo es engañosa. Quizá no son donde hagan los mejores cafés, pero sí donde es más fácil encontrar de media cafés aceptables, no piscinas requemadas. Por ejemplo, dos de los mejores cafés que recuerdo los he tomado en Nueva York y en Londres, pero no puedo recomendar ninguno de esos dos países como paraísos del café. En Nueva York fue en el Cafe Grumpy de Chelsea (en la calle 20 oeste, aunque tiene otras dos sedes en la ciudad), y en Londres fue en el Nude Cafe, al lado de Brick Lane (26 Hanbury street).
Una de las claves es la cantidad de carga de café que ponen. En estos casos era doble. En España procuro pedir mi café a la vez que otros clientes. Sale mejor de la boquilla preparada para dos tazas porque hay más. En esta lista de las cinco mejores cafeterías del mundo, para describir el segundo mejor café, en Japón, Adam Goldberg dice: “Sus extracciones son tan viscosas que uno podría poner la taza boca abajo sin que el café cayera”. Eso es un café sólido.
También he tomado grandes cafés en Brasil o Siria. En Alepo recuerdo a un camarero veterano amarrado a su cafetera que hacía cafés sin parar y que estuvo satisfecho cuando le dije que era magnífico. Esto fue en 2011, cuando la revolución aún lo era y afectaba solo a partes del país. El hombre daba todos los cafés para llevar en un vasito de cartón. No es el mejor modo de beber un café, pero uno bueno lo resiste todo. La mejor taza es de pared ancha y base redondeada; hoy casi todas son variantes de esta forma.
En estos cuatro países, la calidad es similar y repartida. No es infalible: en todos he bebido grandes brebajes, pero menos que en otros lugares:
1. Italia. Italia no tiene competencia. Voy mucho a Italia y diría que en el fondo es para beber café. En la lista de Goldberg no sale ningún bar italiano, pero la máquina siempre es italiana, La Marzocco. En Italia el café casi siempre es aceptable —hasta en las áreas de servicio o en los aeropuertos— y a menudo es bueno. Me acuerdo uno en Castroni, un lugar mítico de Roma en la via Ottaviano, cerca del Vaticano.
Hace ya muchos años, en un verano que pasé por Sicilia, me cansé de beber caffe freddo. Los bares preparaban varios cafés, los juntaban en botellas de plástico con o sin azúcar y a la nevera. Lo servían en vasos de chupito. En terrazas de ciudades vacías por el verano como Trápani, es inolvidable.
2. Corea del Sur. En la lista de Goldberg he descubierto que Japón es líder mundial en cafés —no he estado nunca—. Quizá por influencia el café en Corea del Sur es en general bueno. Resulta extraño ver a jóvenes coreanos en cafeterías de tres pisos —como grandes Starbucks limpios— hacer cafés correctos, pero eso es lo que vi y probé.
3. Israel. Estoy ahora en Israel. También aquí preparan bien el café. Aparte de las típicas, solo sé dos palabras en hebreo: ketzar (corto, para decir “café corto”) y maim (agua, para pedir un vaso con el café).
4. Portugal. Las veces que he estado en Portugal he ido con pocas expectativas. Está al lado de España —donde el café es aguachirri— y pensaba que no podía ser mejor. (Para descanso de los españoles, en Francia es aún peor.) Pero en Portugal bebí buenos cafés. No maravillosos pero sí consistentes.
Esa lista es un trabajo de campo progresivo. Trabajo sin rigor científico para mejorarla. Siempre por ejemplo que voy a Estados Unidos encuentro en algún campus universitario o gran ciudad un lugar donde disfrutar de un par de buenos cafés después de tanto starbucks sufridor. En octubre fue el Global Village Organic Coffee, ante el campus de North Carolina State University, en Raleigh. Aún espero también poder colocar otros países en el podio de mi lista. El café y el esfuerzo de algunos cafeteros merece atención.
Fotografía: Jordi Pérez Colomé.
Dentro de España te recomiendo Euskadi. Especialmente Bilbo y Donosti.
Si te encuentras en Euskadi, puedes encontrar nuestro café de excelencia en Hermeneus o en nuestra tienda online. Uno de los mejores cafés del mundo, compruebalo
¿Buen Cafe? Solo se sireve cafe con LECHE y habitualmente con crema!!!! Osea, un batido dulce cafeinado.
Si tomas cafe de verdad (solo y sin azucar) es un infierno mas.
¿Sabéis qué os falta para que sea perfecto? La firma del a foto.
Pingback: Los mejores cafés del mundo
Basicamente tu a lo que vienes aquí es a decir ‘Mirad mi estilo de vida, soy un adicto a la cafeína, pero mi vicio es socialmente superior a cualquiera’. Basicamente un poco de moderneo plasta, denso y que viene a ‘no-decir-nada’. De aportar algo interesante a hablar de los cafés que te has tomado en tus miles de viajes por el mundo hay más distancia que toda la que habrás recorrido en tu vida. Postureo, todo usted es pose, cáscara, piel de cascabel.
No es envidia insana, es que aquí parece que se habla de algo, y no se habla de nada.
Menos mal que has aclarado que no es envidia insana. Yo simplemente veo que habla de que le gusta mucho el café (a mi también, ahora ya no sé si tengo que disculparme por ello) y que ha tenido la suerte de poder viajar mucho por el mundo (aquí no puedo decir lo mismo y yo sí le envidio por ello, insanamente además). Pero no me lo tomo como una agresión contra mí, cuánta susceptibilidad.
Generalmente me gusta lo que escribe Jordi, pero definitivamente este articulo va mas alla de la pedanteria, por ejemplo para que diablos tenia que decirnos esto:
«Cuando estoy en China dejo de beber café. Me paso al té»
Si bueno, es como decir que un café basado en torrefacto es aguachirri cuando es todo lo contrario, super fuerte de sabor (malo además)
No todo es trascendente. Solo cuenta algunas cosas del café que le gusta. No se que te pasa. A mi ni siquiera me gusta el café muy espeso pero me gusta el café. No recuerdo los sitios donde tomé café, como se apunta aquí, pero si recuerdo lo espantoso que era el café en España hace apenas una década. Ahora están más civilizados, el café ha mejorado, luego llegó la pizza, la pasta fresca y los helados, eso al menos en Barcelona, que es donde vivo. Eso es civilización, el tipo este es un tipo civilizado :)
Iba a la mitad de la publicación y empecé a pensar lo mismo y decidí dejarla de leer para escribir un comentario exactamente al tuyo.
En Madrid, desgraciadamente esta en España, te recomiendo Toma Café. Gente con ganas de servir siempre el mejor café posible
«Una de las claves es la cantidad de carga de café que ponen. En estos casos era doble. En España procuro pedir mi café a la vez que otros clientes».
Entretenido. Pero tengo serias dudas sobre la pertinencia del sistema empleado en el entrecomillado superior. Yo he trabajado como camarero y entiendo que la doble carga se utiliza no para un café sino para dos -tiene dos salidas-, con lo cual la cantidad para cada café viene a ser la misma, más o menos.
Me parece que no has tenido mucha suerte en territorio patrio. La lista de cafeterias que te ofrecer un café estupendo no es extensa, pero está a la altura de la mayoría de países. Lugares como Toma Café de Madrid o Satan´s Coffee Corner en Barcelona, son solo la punta del iceberg. Mr. Chava en Osuna, Loft en Gijon, Venecia en La Coruña, Albatros en Baracaldo, Taza y El Polvorín en Vitoria, La Isla del Café en Zaragoza…
Hay mucha pasión detrás del café y muchos que tenemos cuidado en lo que servimos.
Por Londres prueba Monmouth, a mi me encantó.
Gracias Gustavo por esa lista. Muy interesante.
El Venecia es en Santiago de Compostela, non en A Coruña. Pequeño detalle a corregir.
Probaré el de Zaragoza a ver que tal
Malísimo articulo, se nota desgana en todo, si de verdad te gustase el café no habrías escrito algo tan soso.
Vaya artículo tan malo. Es lo que se llama falacia anecdótica. Hacer una lista de cafés de los mejores cafés basándote en los viajes personales de uno. Es como si ahora mismo empeizo a deciros que el mejor café es el café La Habana en México D.F. en la avenida Bucareli. Y luego añado que en Estados Unidos y Londres he tomado cafés malísimos, para acabar diciendo que en Nicaragua he tomado el mejor café del mundo, todo basado en una experiencia completamente subjetiva que no aporta nada de nada.
O de como fardar de que viajo mucho con la excusa de hablar de cafes
La sensación que deja el artículo, es la de que El Dios Del Café ha impartido cátedra; si se fijan bien, notarán que en ningún momento, dice de ningún café, en ningún país, que es extraordinario. Solo aceptables, buenos… Incluso en Italia, que si no voy errado, me ha parecido vislumbrar entre el tibio escepticismo del articulista, que era la meca del café, sus expresiones son del calibre: «En Italia el café casi siempre es aceptable»
¡BUUUFFF! Puede que se trate simplemente de su talante personal e intransferible…
«Solo con el color y la solidez de la espuma ya veo si vale.»
Espero que se trate de un lapsus y no de una exhibición de ignorancia; si un café tiene espuma, mal asunto. Quiero pensar que se está refiriendo a la CREMA.
vaya nervios en los posts, debe ser la cafeína… perdeos todos en un pueblo panameño llamado Boquete y pedid un café Kotowa (más datos: http://www.kotowacoffee.com) eso sí, si la india te lo va a ponr en taza de cartón poned cara de Hernán Cortés enfadado… insuperable café!!!
una delicia de artículo para tomarse un cafecito. Yo también me lo tomo sin azúcar, pero no expreso. Envidio tu estómago. Aunque el minicafé fredo es una de las mejores invenciones del mundo. Además del café frapé griego (lo siento) Noto en los comentarios que la ligereza no está de moda. Qué lástima. Solo con ligereza se puede enfrentar la dureza. Pero con ligereza así de calidad como los cafés que defiendes. Gracias por el café, Jordi PC
En efecto, siempre es preferible la intensidad a la ligereza, que no deja de ser la sosería de toda la vida. Y no hace ninguna falta que se me advierta de que esta es solo mi opinión, porque eso es algo demasiado obvio… Solo que hay modos más ingeniosos de expresarse que otros, y encuentro que el del Sr. Pérez es bastante neutro por decir algo suave.
maestro Ciruela,
Lee a Italo Calvino en Seis propuestas lo que dice sobre la ligereza. Puede que descubras que sosería y ligereza nada tienen que ver :-)
Vaya artículo fatuo y carente de contenido. Parece escrito sólo para que su autor pueda fardar de los viajes que hace y de que él «bebe» café, en vez de tomarlo, como hacemos los demás.
¿Ha dicho el autor «soy experto en cafés»? ¿Ha dicho «he bebido cafés en sitios que no creeríais»? No sé; parece que ha querido contar que le gusta el café, cómo le gusta y dónde lo ha tomado bueno. Y que seguirá con ello. Ni que fuera una lista de las top models internacionales que se ha follado.
Haga el favor de no estropearme la exclusiva, Tsevan. Me encuentro rematando esa lista de top models internacionales para mi blog. Voy por la 133, Natalia Vodionova.
No, hombre, lo que pasa es que es curioso que tratándose de café, resulte que dé tanto sueño el texto. ¡JAJAJAJA!
Grecia también tiene mucha cultura cafetera
En otras palabras, Jordi Colomé en la forma que degusta el espresso es como si les hiciera el amor con la lengua. Tremendo desplante de ego tiene el articulista. Se pavonea frente al mundo que le pagó el crowfunding para que viaje a cuerpo suelto y ahora regresa la buena voluntad en una notilla de tercer grado básico. Pediría más humildad con el lector puesto que no se pude hablar de los espressos de Italia, USA, Israel, Portugal China, UK, etc.. cuando en España hay más de un 20% de parados. La nota pasa de lo trivial a cotilleo barato. Yo ya no le doy más de mi bolsillo.
«Se pavonea frente al mundo que le pagó el crowfunding para que viaje a cuerpo suelto»
Esta bobada me recuerda a aquellos que le afearon a Cándido Méndez que al terminar una manifestación estuviera en una terraza tomando una caña. Ahí, derrochando. En este caso el despilfarro consiste en tomar cafés mientras hay un 26% de parados en España, habrase visto ¿Pero en serio dices estas cosas en serio?
Si al parecer sigues su blog (aunque juraría que no le diste ni un triste euro y simplemente quieres ir de «cliente» airado) cosa que yo sí hago, sabrás que el crowfunding fue para hablar en él de su viaje a Israel. No de sus colaboraciones en otros medios.
En fin, qué ganas de desacreditar a uno de los pocos periodistas que en vez de pasarse el día llorando por lo difícil que está su sector, se mueve y hace cosas bastante interesantes.
Bueno, sin hacer caso a los que están inmersos en la discusión sobre si eres un chulito que farda de sus viajes y de lo mal que malgasta el crowdfounding, y volviendo al café, decir que hace poco anduve por Oporto y creo que tomé mas café que vino (sobre todo en una cafetería cuyo nombre no recuerdo), y tras el regreso a España… ya no me sabe ningún café igual, todos aguados, insípidos, sin cuerpo… horror.
Por si algún día visito alguno de los lugares que has comentado, me apunto tus recomendaciones para hacer mi propio juicio.
«… puesto que no se pude hablar de los espressos de Italia, USA, Israel, Portugal China, UK, etc.. cuando en España hay más de un 20% de parados.»
Vale, pues como hay más del 20 por ciento de parados, metámonos todos en casa, afeitémonos la cabeza, vistámonos de negro y lloremos por nuestra maldad, que seguro que así sacamos al pais de la crisis.
Está visto que lo que ahora se lleva es el penitenciagite y el milenarismo de treintañeros parados que viven con su mamá.
“En la lista de Goldberg he descubierto que Japón es líder mundial en cafés —no he estado nunca—“ y luego nos dice el bebedor de espressos que “El café y el esfuerzo de algunos cafeteros merece atención.” ¿Habrase visto tamaño periodismo? No importa, ya no doy más de mi bolsillo para gastarlo en espressos, ah, pero vosotros del crowfunding, ya la oyeron, Colomé nunca ha estado en el Japón de los buenos cafés así que a recortar moneditas de los mandados para mandarlo de vacaciones a su regreso de Israel, a ver si el periodista ahora nos da una lección sobre la ciencia del café japonés con bonitas fotos.
Creo que le hacemos un favor a Jot Down si decimos que el artículo es pésimo por malo. No se puede escribir un artículo aprisa y corriendo… y menos sobre el café.
El mejor café que yo he probado lo tomé justo saliendo de ‘La Moncloa’ cuando hacía mis prácticas de Derecho en el Ministerio de la Presidencia. Allí había un hombre apostado entre pancartas y objetos varios, Segundo Quiñones, que protestaba contra el gobierno de ZP y contra ‘La Caixa’ que había decidido retirarle su piso en propiedad por el impago de una mísera proporción en relación con el montante global.
El caso es que me senté con él (era mi último día allí y pensé que ‘ahora o nunca) y sacó un termo, no sé muy bien de donde. Me dijo que era colombiano. Cuando lo probé, fue una mezcla de café, canela y mucho azúcar. Incluso me supo picante.
¡Este es el mejor café que he probado nunca!
La verdad me han entretenido mas los comentarios que el artículo en si, que aunque correcto le falla el título, pues apunta otra cosa.
En mi caso, el mejor café que recuerdo haber probado fué en Portugal, en Aveiro. Un café con leche, tibio y en vaso de tubo.
Un café con leche, tibio y en vaso de tubo, ¡vaya mierda!
Jordi, me ha gustado el articulo, comparto tu pasión por viajar y tomar cafe. Además, intentando encontrar la conexión entre estos dos.
Aunque no he viajado tanto como tu, estoy de acuerdo contigo que en los países donde el café standard es agua, es más fácil encontrar sitios donde el café es de puta madre: Inglaterra, Francia o EEUU son buenos ejemplos.
Merci
Para mí el mejor café que he probado hasta la fecha lo hacen en Etiopía. Para prepararlo hacen una ceremonia del café, donde de forma pausada lo van elaborando. Cuando el proceso termina y te entregan el primer vasito, el olor y el sabor son extraordinarios. Un posible origen de la palabra «café» se encontraría en el Reino de Kaffa en Etiopía, de donde procedería la planta del café.
Soy amante del café. He recorrido varios países del mundo, teniendo un cuenta siempre su cultura del café. En España, por desgracia, desde la Guerra Civil, nuestra cultura cafetera se deslizó hacia al horrible torrefacto. He residido en Madrid, donde salvo contados lugares el café es nefasto. Actualmente resido en el País Vasco y puedo aseguraros que aquí tenemos una mayor cultura del café que en el resto del país. Incluso en los pueblos tienes opción de comprar mezclas propias de café. En los bares, como siempre debes de conocer aquel cuya cafetera trabaja con mayor continuidad. Yo resido en un pueblo guipuzcoano, me tomo todos los días dos cafés en el bar (King Kong). Calidad del café: excelente. ¿Por Qué? Sabia elección de cafetera, mantenimiento y mezcla de café (natural, por supuesto). LA carga del cafe tb es fundamental. Se recomienda los 7 gr, pero donde yo los tomo, el barista llena el porta con 10-11 gr. de café. Así sale crema de café. Es decir un ristretto.
Tab aquí, en el País Vasco se cuida el café con leche. La leche entera y espumososa, con posibilidad de añadir crema de leche. Para el desayuno es único. Es normal que con el tiempo que tenemos por estos lares las señoras esté todo el día tomando estos cafés.
Saludos a todos los amantes del café
Te doy la razón en lo del torrefacto, desde la Guerra Civil se arrastra ese tema, se usa demasiado torrefacto… una lástima.
Un ristretto no se hace con más gramos en el porta filtros, sino con menos agua. Dile a tu Barista que poner 10-11 gramos de café, entiendo en una cesta de «single shot» es una burrada.
Pingback: Café « Un Bosque Interior
Me ha encantado el reportaje. ¡Felicidades¡ Y ya que viajas a menudo a Italia, quizás te interese esta recomendación que me hizo llegar un buen amigo y que luego pude contrastar. Para mi, uno de los mejores cafés del mundo –lo preparan siguiendo una receta propia y secreta–, lo he tomado en el Caffé Sant’Eustacchio, en la plaza que lleva el mismo nombre. Lo encontrarás entre el Panteón y la Piazza Navona. Si quieres sentir el verdadero sabor de este café sublime, mejor que pidas un expreso, o sólo un ‘caffè’. Si pides un ‘doppio’, ojo que revoluciona las pulsaciones. Antes de las 11 de la mañana se puede pedir un ‘caffè latte’, un ‘caffè macchiato’ (que es un expreso con una nube de leche), o un ‘latte macchiato’ (que es lo mismo, pero al revés) o un capuccino. El ‘caffè corretto’ es un café «bautizado» con grappa, tan poco recomendable por la mañana como placentero tras un buen ágape. Si un ser racional quiere saber qué café beben los ángeles, los arcángeles y todos los santos que habitan el cielo, no puede irse de Roma sin beber un caffè en Sant’Eustacchio.
Saludos ;)
Una pena que la calidad del texto, de estructura y sintaxis claramente mejorables, no esté a la altura de las exquisiteces de las que habla.
Que pobreza descriptiva. Realmente sabe poco de orígenes y de otros aspectos básicos referentes al café. Este relato lo que resalta es el narcicismo del autor. Me alegra que disfrute viajar, pero eso no justifica una descripción tan fugaz acerca de la cultura del café. Se nota la inexperiencia en el tema, el cual está basado en sus vivencias personales. La lista no solo es engañosa si no deshonrosa y la frase final sólo confirma su ignorancia de las regiones cafeteras. Tal vez debería incursionar en el género de literatura de viajes.
Me gusta el café, mucho. Lo tomo solo y sin azúcar. En España, salvo honrosas excepciones, el café oscila entre malo y muy malo o pésimo. En términos generales es tremendamente amargo y sin aroma, apenas un leve tufillo a requemado. Obviamente en las grandes ciudades y en algunas pequeñas hay alguna excepción que suele sorprender porque uno ya iba preparado para lo peor, pero no son más que excepciones. Lo contrario sucede en Italia, donde en términos generales es bueno y en algunos sitios excelente. Veo dos referencias al café en Euskadi. Francamente me deconciertan, a pesar de considerar que su grastronomía es más que recomendable tiendo a abandonar el momento del café para no estropearme la experiencia previa y eso me sucede muy especialmente en Bizkaia, donde he bebido algunos de los peores cafés de la historia, una pena, esa provincia me fascina sin límites en todo lo demás.
Genial gran articulo. En lo personal me parece genial encontrar a una persona que comparte mi gusto y afición por el café aparte de que me dio mucho tips para conocer y probar una extensa gama de cafés.
Y sobre todo concuerdo con el hecho de que muchas veces uno prueba unos excelentes cafés en los lugares menos imaginado, mientras que la mercadotecnia solo publicita cafés que no necesariamente son buenos.
Sigue así y espero encontrar mas blogs sobre el café y tu investigación en campo . Saludos Luz
Es verdad que la raza humana tiende a volcarse en sugestivas manias, como lo es tomar una deliciosa y, a veces, motivante tasa de cafe, es frecuente ver a todas horas sucumbir, y es más, a tener una conducta pecaminosa y culpable de repetir la actitud tan sólo de ver a alguien pasar en mano este liquido que a muchos nos enloquese y nos hace esclavos de su adicción, y aun más grave es el hecho de flagelarnos concientes de su uso citadino, gracias cafe por existir. Alberto Serrano M.
Para mi el cafe es delicioso aveces lo prefiero solo o con leche, en Mexico cafeterias como El Jarocho son tradicion para deleitar al paladar. Con solo pensar en el delicioso olor quisiera salir corriendo para disfrurar su aromatico y riquisimo sabor acompañado de un delicioso churro (especie de pan alargado espolvoreado de azucar) un gusto que no todos los dias me puedo dar…
en lo personal el café es una de las bebida mas deliciosas, he viajado a Veracruz y considero su sabor como excelente para mi gusto un buen café se toma caliente y si azúcar.
Lo que no es normal llamar al artículo «Los mejores cafés del mundo», ya que lo escrito no tiene nada que ver con su título. Podría llamarse: «En qué lugar del mundo disfruto más del café» o algo así…
definitivamente te falta conocer el cafe colombiano, catalogado como uno de los mejores..
Excluyendo garitos «especializados» y franquicias…
Una elección totalmente «random» del local te sitúa con las siguientes posibilidades de tomar un buen café:
70% Italia
50% Portugal
30% España
El resto de países de Europa o EEUU 10% o menos. Resto del mundo, no tengo experiencias.
(Nota para los haters: de Europa tampoco tengo opinión de Albania, Bielorrusia y Moldavia)
Madre mía, cuanta gilipollez hay que leer, tu chaval no has estado en España en tu vida y no tienes ni idea… Cualquiera que me diga que en Portugal hacen mejor café que en España es un ignorante, no por nada, sólo porque en Portugal es prácticamente imposible consumir nada que no sea torrefacto…
En fin, cuanto daño hace Internet permitiendo escribir chorradas a diestra y siniestra.
Pues yo coincido… en Portugal el promedio es sustancialmente mejor que en España.
Señores, diferenciemos cosas, en cuanto al origen del café por su orografíá, geografía y climatología Colombia es uno de los mejores lugares.
En Italia es uno de los países donde es más cuidado el proceso de tostado.
En cuanto a preparación y servicio cada vez hay más hosteleros apostando fuerte por este producto y no solo lo sirven en una taza si no que ponen su empeño en ello. En el Norte por ejemplo, en Noruega aunque suene raro para algunos, es increíble como sirven el café.
hablaste de de todos los cafes menos del mejor y el mas delicioso el colombiano ,si va hablar tenga en cuenta el mejor no los que probo
Vaya chorrada de artículo. Mencionar siquiera a franquicias como Starbucks denota un poco la falta de criterio para escribir un artículo sobre los mejores cafés del mundo. De lo poco cierto que hay en el artículo es que Nude Espresso hace buen café, básicamente porque lo tuestan ellos como quieren en el local justo en frente de la cafetería de Shoreditch.
Difícil tomar un buen café en España, pero no imposible. Como decís muchos de vosotros, cada vez hay más sitios especializados en café, sobre todo Madrid y Barcelona. Habla un Barista trabajando en Inglaterra que lo pasa mal para tomarse un café decente en España.
Pffff… inexacto.
El poner más café en el cazo no hace que salga un mejor café.
Las claves…
– Máquina con temperatura de agua adecuada y con buen mantenimiento y limpieza de conductos. Generalmente todas de fabricación italiana (cimballi…)
– El grano que se va a moler. Variedades, que no sea torrefacto, que tenga un tostado homogéneo…
– El molido: Ni demasiado fino ni demasiado grueso. De la primera forma el café tarda una eternidad en salir y casi que se enfría antes de conseguir un «ristretto». De la segunda sale café «americano»: demasiado rápido, demasiado aguado. El molinillo debe estar bien regulado.
– La carga del cazo: Si todo está bien calibrado en el molinillo, para hacer un café debes echar un tiro de molienda en el cazo. No más. No menos.
– Prensado: Siempre, siempre, siempre se debe prensar con firmeza el café para que se compacte y el paso del agua arranque mejor las propiedades del mismo.
Hecho esto solo queda que el cliente te diga cómo lo quiere, si ristretto, expresso, manchado, manchada, con leche… o que lo que quería era un cola cao.
Como en todo, influye también el mimo que ponga el camarero. Si a este ni le va ni le viene alguno de los factores anteriores servirá un producto deficiente que será mejor tapar con mucha leche.
Si tiene oportunidad de pasar por Almería, busque alguna cafetería en que usen «cafés salmerón». Si está todo como le digo y el camarero no es un patán, disfrutará de un ristretto como debe ser.
Se lo dice alguien a quien mucha gente, inclusive italianos, han alabado el café que ha servido.
Como le digo, su afirmación de «a más molienda mejor café» es errónea de cabo a rabo.
Siga disfrutando de sus dosis de cafeina pero, por favor, aparte de fervor use seriedad en sus artículos.
Saludos cordiales
Le recomiendo al autor viajar a Costa Rica y Colombia.
Me gusta mucho el café aunque sinceramente no entiendo si un café es de mejor o peor calidad.Lo que sí digo es que pedir que te hagan uno mejor es insultar al
camarero.Dicho de otro modo,te tienes que aguantar con el que te han puesto.