Desconozco cuándo lo normal se volvió anormal. Cuándo la sensatez empezó a estar demodé. Cuándo se comenzó a perseguir a los humildes, apuntándolos con el dedo y riendo a carcajadas faltonas su supuesta mojigatería. “Lo modesto es falso y lo soberbio es auténtico”, proclamaron los infelices que se pasan el día rellenando desideratas. Y, a base de repetir el mantra, la turba ha acabado por creérselo. Hubo una vez alguien que decidió desabrocharse el cinturón de seguridad porque le apretaba y luego todos le rieron la gracia, acelerando hacia el precipicio como el coche de Thelma y Louise.
Uno tiende a pensar que el invento se fue a la mierda en el momento en el que, como por magia, lo normal empezó a ser aburrido y lo sencillo pasó a ser soso. Aplaudir lo altisonante se convirtió en la metadona de una sociedad en la que, si no dabas el cante, no eras de los nuestros. Y se volvió a la pubertad mental, vitoreando las peleas en el recreo y admirando al que se escapa a los servicios a fumar.
En medio de este aquelarre de pintura negra de Goya está Vicente del Bosque, un tipo que todavía tiene el mal gusto de dar la mano al rival nada más terminar un partido. Poco histriónico y nada fotogénico. Un entrenador que reniega de poses de estatua castrense y de miradas desafiantes al infinito y que se pasa el día huyendo del retrato robot del muerto de éxito, ese mito encumbrado de resplandeciente pesadumbre y dorada tristeza del que hablaba Shakespeare. Prefiere caminar con las manos en los bolsillos y encoger los hombros cuando alguien le pregunta qué hace un chico como él en un sitio como este.
En un contexto de señoríos mal entendidos y de dedos que señalan caminos sobra una persona como Del Bosque. Sobra y quiere sobrar. Y es por ello que queda automáticamente estigmatizado. Otra víctima del ejército del ruido, que valora cualquier desliz de Vicente por encima de 30 años al servicio de un equipo en el que solo le faltó limpiarle de barro las botas a los alevines. Ahora está de moda decir que es del Barça, como Charly García puso de moda tirarse a la piscina de un hotel desde la ventana de la habitación. El borreguismo de la trinchera crea siempre tendencias extravagantes.
Y, aún así, seguirá poniendo la otra mejilla en un entorno donde las maneras sencillas son tomadas siempre por indicio de poco valor. Vivir y morir, como escribió Unamuno, en el ejército de los humildes, con la santa libertad del obediente. Vicente del Bosque o la dificultad de ser un hombre normal en un mundo que no lo es.
Fotografía: Guadalupe de la Vallina
Quizá Del Bosque ha entendido lo que a casi todos les escapa: que lo suyo es sólo un juego, un deporte (todavía), y que en la vida hay cosas más serias que sí merecen ser ejemplares (como él lo es, irónicamente a su pesar).
Fantástico. Cuesta encontrar textos con tanto criterio en un mundillo tan viciado y lleno de opiniones fast food como el del periodismo deportivo. Felicidades.
La cuestión es dar lecciones a cuenta de la normalidad, la humildad y todas esas virtudes de obediencia debida. Eso es lo que molesta. ¿Del bosque las dá?. Mmmmm es de la vieja escuela de dejar caer las cosas. Conoce demasiado el percal.
En España hay siempre un montón de exaltaciones sucesivas, pero no creo que la del macarra esté ahora de moda. Te dejas llevar por el ruido que hacemos en tuiter los partidarios de mouriño. En la otra vida, la del cielo gris y las colas del paro, el elogio de la normalidad y su pariente miserable, la moralina, es un paradigma nacional.
Del bosque nunca ha limpiado botas en el madrid, es más, gracias al club, ha tenido una vida cojonuda y ha ganado montañas de dinero. Salió medio mal del Bernabéu (como cualquier grande, y él lo es) y pasea su rictus de folklórica ofendida por las esquinas de la cosa esta (en terminología Susaeta).
Lo que os tenéis que preguntar los que elogiáis sus virtudes morales, es si el tipo es un sacerdote de algún tipo de culto que se me escapa o un entrenador de fútbol. Todavía no ha llegado el día en que un periodista haga ese artículo sobre las bondades futbolísticas del Madrid delbosquiano y la España de delbosque. Que seguro que las hay, como las meigas o la recuperación económica. Sobre los valores amontonados en su mesilla de noche, y su costumbrismo bonachón y esa mítica humildad que se descubrió al salir del Madrid, hay contabilizados 35.758 artículos y un párrafo en las disposiciones adicionales de la Constitución.
Tambén se puede hacer un elogio a la hipocresía. Yo era de los gamberros y caro me costó muchas veces. Lo hacía para que me rieran las gracias, por diversión, porque llevaba el mal dentro y para que la chica se fijara en mí. En la otra esquina estaba del bosque, siempre cerca del cura, del maestro y del entrenador, quizás más cerquita de lo necesario. Como ahora lo está de nuestra podrida prensa deportiva. ¿No hay que llevarse mal con nadie, no?.
A veces es necesario.
Sin del bosques no podría funcionar una sociedad, eso sin duda. Y creo -a pesar de este rollo- que existen las buenas personas, y que él no ha perdido parte de su bonhomía en el camino (con su rencor, y sus cobardías, pero es entendible). Pero el exceso de pedagogía, su obsesión por dárselas de maestro y los valores que él y la selección nos venden, no contribuyen más que a acentuar la distancia sideral del Español entre lo que es y lo que aparenta.
Ya lo decían los viejos:
Ojo de águila, paso de buey, diente de lobo y hacerte el bobo.
Y salir del Madrid, fundamental para la canonización universal.
Caes en una cantidad importante de lugares comunes, mesetovich:
1) Del Bosque, antes de ser ese entrenador campeón de Europa rodeado de zidanes, se pateó la vieja Ciudad Deportiva nevando, tronando y diluviando. Durante años y años. Fue un cocinero magnífico antes que fraile. Me hacéis mucha gracia los que os creéis que nació en el banquillo del primer equipo.
2) Ojalá el ruido sólo proviniese de un grupúsculo de Twitter.
3) Ésta es una apreciación mía, así que desconozco si el autor refiere a ello, pero creo que el trabajo de banquillo de Del Bosque tiene mucho más de mental y de pedagógico que de futbolístico. Por eso nadie escribe grandes tesis puramente futbolísticas sobre su persona. No creo que sea un tipo para enseñar en las escuelas de fútbol en el apartado táctico, pero sí en cuanto al manejo de tempos, egos y situaciones. Ahí, es un maestro.
4) El del entrenador que se tiene que llevar bien con la prensa para prosperar es otro greatest hit del mourinhismo. Y lo decís como algo malo. Como si supusiese ser trepa o algo. Intentando demonizar. En fin. Curioso.
Intentaría alejarme de tanto tópico, en definitiva. Ni era tan malo cuando entrenó al Madrid, ni tan bueno ahora. Creo que no ha sido precisamente un tipo veleta y que el artículo de Fran Guillén es bastante ponderado. Así que mejor huyamos de discursos prefabricados.
Pues como dirían los guiris, +1.
conozco de sobra sus andanzas en la ciudad deportiva
las mismas que ha tenido cualquier entrenador de élite. Estar con los chavales no es limpiarle las botas a nadie (se las limpiaría cuando era chaval, como messi se las limpió a ronaldiño). Es un oficio genial, a salvo de un montón de requerimientos de la cotidianidad y en el que ganas un sueldo prohibitivo para el ciudadano medio.
Del bosque hizo un gran trabajo en el madrid y se le pagó adecuadamente. Y cuando terminó contrato: adiós. Menos dramas.
Sobre su relación con la prensa…cuando estaba en el madrid se decía que era ESO: insulso, soso, mediocre y que los que ganaban eran los jugadores. La famosa autogestión con la que periódicamente se intenta echar a los perros a los entrenadores del madrid. Como el tío es listo y conoce bien el trasunto futbolero, nunca dijo nada e hizo bien. Yo no critico eso. Pero sí el que no moviera un dedo ante los caciquismos abisales que se fraguaban en su vestuario: A Hierro y Raúl me refiero. Al primero se le echó de mala manera como debe ser en un club que prima la épica y el relato heróico; el segundo nos jodió el panorama durante 5 larguísimos años iniciando una relación incestuosa de la institución con la prensa contra la que Mou ha intentado luchar con regular éxito.
Por cierto, yo creo que Del Bosque es un magnífico entrenador de equipos grandes y como bien dice Hersey, un gran gestor de grupos a su tranquila manera. Yo no lo demonizo. Pero que no lo utilicen para vendernos una moralina insufrible y anatemizar a los que no son como él.
Porque repito: los que van ganando en el relato del fútbol español; son los buenos. O más bien, los de la aparente bondad. Que ese sí que es un hit español. Decir estar a la contra, cuando se está cómodamente instalado en el stablishment.
Del bosque es un Rijkaard, no un Guardiola. Porque pep es un Cruyff, que es un Mouriño. El tipo de entrenador-líder que explicíta su heroicidad y no perdona una en ruedas de prensa. No confundáis.
Me ha gustado la última frase. Un intento muy elegante de equiparar a Guardiola con Mourinho. Pero no cuela.
Cuando hablo de frecuentar la Ciudad Deportiva, no hablo del míster del primer equipo pasándose un domingo a ver al B, mesetovich. Me refiero a los años, a partir del 84, en los que Vicente se encarga de la cantera, teniendo desde que rellenar fichas de jugadores a encargarse de ir al aeropuerto a buscar a los nuevos. A kilómetros de los focos y de la prensa, que por aquella época estaban más pendientes de las derivas de Mendoza y de las cabriolas de Hugo Sánchez.
Años de los que, cómo no, ahora nadie se acuerda. Pesa más la chorrada de la insignia, dónde va a parar.
¿No le pagaban o qué?
Pues claro que le pagaban. Igual que le pagan a Arbeloa y se nos hace luego el culo pepsicola diciendo que se deja los huevos en el campo. Ahora el que te paguen invalida el mérito de tu labor. Tócate las gónadas.
Increible. Genial. Excelente comentario. Insuperable. Inteligente, mordaz, sincero, literario, honesto, una maravilla, una gozada. Ha sido sorprendente, una bofetada de sentido común cuando estaba a punto de sucumbir al caramelo buenista del ¿artículo?
Gracias, muchas gracias, a años luz del artículo.
Uno que se zampó la demagogia enterita. De manual.
Por cierto, la foto de lupe, es tan buena como siempre. Capta algo del personaje, que no sé, no sé…
Otra felación más de los medios al que «destila buenrrollismo» pero que no quiere la insignia que el Real Madrid le dio. Caretas fuera ya.
En 7 ocasiones España ha superado el 75% de posesión en esta fase clasificatoria. De lejos líder en esto en Europa. Es la decimoquinta del continente en goles por partido. Decimoquinta. La decimoséptima en remates por partidos. Decimoséptima. El que más tira: Sergio Ramos. Pero Del Bosque no tiene responsabilidad alguna en estos datos. Nonononono. No. Que no, fanáticos. Por cierto, quien más remata a puerta es Pedro, suplente.
Coño, cuando los equipos contrarios -todos los equipos contrarios- se cierran con dos autobuses es difícil que no se den ambas premisas: un exagerado porcentaje de posesión y un exigua cantidad de tiros a puerta.
Estando de acuerdo con que se debería tirar más, y más desde fuera del área, piensa también que tirar más no siempre es tirar mejor, y a veces, ni siquiera es generar más ocasiones.
En la final contra Italia de la Euro2012 no es que España jugase mejor, es que se abrió la lata en el minuto 17 e Italia tuvi que ir a por el partido.
Un saludo.
A ver, bobo, ¿es responsable de ser campeón del mundo y de Europa? ¿Cambio de ciclo?
Bobo lo será su muy especial y dilecta progenitora, señora mía.
Si es capaz de argumentar que España está jugando bien y que esos datos son engañosos, hágalo. Y si no, tóqueme un pie, bonita.
El fallo de Del Bosque está en que ha triunfado en el peor momento posible para un tipo como él. Como puede apreciarse en otros mensajes, el «buenrrollismo» no está moda. La educación o las maneras tranquilas y corteses se ven mal, y lo moderno y lo chic es el macarrismo, la soberbia, el fanatismo y la imagen de triunfador desde la polémica y el pisoteo. Lo otro irrita, escuece, no mola. Tipos como Del Bosque o Guardiola (con todos sus fallos y defectos, porque no son santos) tienen algo de anacrónicos que repulsa a cierto (gran) sector del público de hoy en día.
Y ni con dos Ligas, dos Champions y más con el Madrid; ni con un Mundial y una Euro con España podrá aplacar a ese público alérgico a la educación y a las maneras anacrónicas. Pues nada, sugiero que algún día salga en rueda de prensa a pedir perdón por ese palmarés, por su ética y por ser como es. Y luego, si se atreve, que haga una peineta para que todos los detractores por fin le aplaudan y le reconozcan como uno de los suyos.
Brillante, Feisal.
Quien ponga en duda tanto la profesionalidad como la CLASE de persona que es el Señor Vicente Del Bosque, evidentemente no entiende nada de nada de muchas cosas, entre ellas de lo que es la vida.
A quienes hablen mal de él o le vean dobles intenciones… lávense la boca antes de hablar de él.
Saludos
Que no coño, que no os enteráis los enterados. Este es el mejor momento para Del Bosque, la suave pendiente del post-zapaterismo. El momento malo hubieran sido los 80, donde se llevaba el futbolista con carácter y bocazas, y los entrenadores vacilones y que no le perdonaban una a la prensa. Un fútbol mucho más crudo y divertido. Ahora es el momento de los valores y las gaitas. Si existiera un Perico Delgado en el pelotón, dirían de él la asociación de Damas Eternamente Ofendidas (DEO) que tiene el perfil típico del maltratador.
Además, esto es fútbol, un juego a medio camino entre la petanca y la prostitución de menores, y yo vengo aquí a divertirme. Bastante jodida es la situación para que me den consejos desde púlpitos multimillonarios. Sí señor, yo quiero cabrones ahí arriba, porque para humilde estoy yo, porque no tengo otra cosa. Que os dejen por lo menos eso.
Que tú quieras cabrones ahí arriba me parece muy respetable, mesetovich. Y muy guay y todo eso. Qué pena que no encuentre el mismo respeto del mourinhismo a la inversa, hacia los madridistas que optamos, muy libremente también, por desmarcarnos de esos cabrones que tú citas.
ah, y una más
Si Don Vicente Del Bosque, Marqués del Nabo (a su pesar) es un tipo listo que sabe ver el espectáculo planeando para no mancharse demasiado y un tío que está en un vestuario de estrellas y los trata con sencillez y de forma directa (algo muy difícil); si este hombre ha salido indemne de retos mayores, es porque se crió en Madrid. No hay más razones. Y cuando se lo preguntan, él lo dice claro.
Una vez que sale del Madrid, el mundo entero descubre toda la sarta de valores que atesora para echárnoslos en cara. Y él -rencorosa como es- pone caritas y hace pucheros en vez de parar la máquina.
Así que yo, con el derecho que me dá mi madridismo de estirpe infantil, lo aprecio como seleccionador y lo desprecio como persona.
Estás tú para despreciar, fenómeno xD
Es verdad. Yo ya estoy harto de los ataques de la prensa a D. Vicente. Tres años llevan así. Todos los días, todo el día. Toda la prensa. Lo País, Lo Mondo, Lo As, Lo Marca, Lo Diario Sport, Lo Mondo Deportivo, Lo Telediario, Lo Sexta, Lo Cuatro, Lo Antenatrés, Lo Más o Menos Plus, Lo Sant Cugat-HAARP… todos contra Del Bosque siempre, inventándose noticias, diciendo que se va, manipulando declaraciones, fabulando conversaciones de vestuario, citando SMSs, whatsapps y cuentas de Twitter falsas… Es una vergüenza. Basta ya. Todos contra el fuego, todos contra el fuego.
Jodó, qué demagogia más chusquera la del tal Mercutio. E intentando ser original, encima.
Acaba de hacer usted un formidable hombre de paja.
Es bastante probable que a Del Bosque no le monten el pollo porque él no da pie a que se lo monten.
Cuando alguien no es un garrulo maleducado (meseta le llama cabrón, debe llevar gafas distintas a las mías), lo normal es que no se encuentre respuestas garrulas y maleducadas.
Si la base de ventiladores de un señor -digamos por ejemplo, Justin Bieber- se caracteriza por un histerismo infantil, es normal que las críticas vengan por ese palo.
No se de que se me extrañan luego.
Ese comentario suyo, aun dirigido a mí, explica bien la necesidad urgente que teníamos todos de un artículo como el que comentamos, que es, insisto, una rareza entre la unánime crítica de la prensa de la que se desmarca con valor y bonhomía el autor. Todo correcto. Seguimos para bingo.
A mí que me cuenta? Yo he venido aquí a retorcer la parte de su dedo que no señala a la luna.
Yo soy más de mus, y aquí está mi envido.
«Es bastante probable que a Del Bosque no le monten el pollo porque él no da pie a que se lo monten».
Precisemos: quien «monta el pollo» es la prensa. Y la prensa no es un agente del Destino, o de Dios: tiene su propia agenda. Puede «montarle el pollo» a alguien sin ninguna razón, o no montárselo a alguien aun teniéndola.
Entre lo que un personaje público dice o hace, y su imagen pública, no hay ninguna relación natural o necesaria. Los mediadores existen; eso es todo.
Spoon River, Real Madrid
¿Te preguntas, madridista,
por qué nos hemos hecho delbosquistas
y hemos echado a Mauriño tan estúpidamente?
Nuestros mediadores mintieron: eso es todo.
Estoy de acuerdo, pero no es el caso.
Un saludo.
«Da la mano cada partido…» Pero le otorgan la insignia de oro del Real Madrid y por discrepar con la directiva no la recoge? Pero
Que clase de Madridismo es ese?
Mesetovich, póngame a sus pies.
Yo me limito a insistir en lo de que dé una rueda de prensa y pida perdón por tantos y tantos años de engaños y medias tintas. Que no, que ganar de esa forma Ligas, Champions, Mundiales y Eurocopas no es ganarlas bien. Que escenifique un acto de contrición y pida que se anulen todos esos trofeos. Han sido suciamente ganados por alguien que es, como dice el compadre mesetovich, claramente despreciable. Ah, y que pida perdón por ganar dinero a mansalva a costa de mostrar y repartir bonhomía y sencillez allí donde va. ¿Pero dónde se ha visto esto, por favor?.
Por cierto, aquí hay otro madridista de estirpe infantil, ofendido por todo el mal que ha hecho a este club, a un presidente inmaculado y superior como Florentino, e incluso a las propias vitrinas por llenarlas de trofeos ganados con un estilo rastrero y falso. Es más, Del Bosque, Valdano y algunos más deberían ser desterrados para siempre del panteón madridista, faltaría más. Por estar llenos de virtudes inútiles y atreverse a ser corteses y educados. Desconsiderados con el verdadero y auténtico espíritu madridista, espíritu y alma que encarnan otros tótems cuyos nombres son demasiado sagrados como para que yo les mencione.
eso, que pida perdón
pero en una ceremonia humilde -en un establo- y vestido con harapos (el chándal de la selecciò?)
un poco como cuando en los príncipes de Asturias hizo todo esa gestualidad aparatosa para que Aragonés se sintiera también partícipe de las gloria deportivas
No hombre. A Valdano hay que readmitirle y darle una indemnización por los daños sufridos tras su despido el año pasado. Todo sea porque vuelva al club a seguir demostrando su sapiencia y capacidad. Y su humildad, señorío y buenas formas. Como cuando en mitad de un partido contra el Sevilla se metió en el veastuario del árbitro a gritarle por lo que estaba permitiendo en el campo.
Del Bosque y Valdadno. Tócate las narices. A ver quién fue el que despidió a Del Bosque de malas maneras en un pasillo del Bernabéu. Hasta ahí llega la propaganda buenrollista.
He estado leyendo de nuevo el artículo y todas las respuestas, y creo que quizás me he pasado un poco.
Pensándolo bien, un entrenador de fútbol, (y el fútbol mismo) con lo que eso significa para el grueso de la gente, debe de ser una figura ejemplarizante. Como un papa laico, pero con bigote.
Y pienso también que el renacimiento moral que se ha dado en nuestro país en los últimos años , se debe al benéfico rastro de sana humildad, compañerismo, disciplina y obediencia que han dejado tanto la roja, como el FCB.
Salu2s.
«Yo era de los gamberros […] Lo hacía para que me rieran las gracias»
Viendo como se está creciendo con los comentarios, desde luego, parece que se conoce usted muy bien.
Un saludo.
Abracemos la fe, Mesetovich.
Elogiar la normalidad es, por definición, ir a favor de la corriente. Pero la última vanidad es la de ir a favor de la corriente y a la vez considerarse un rebelde.
Por lo demás, en este artículo, como en la mayoría de los que se escriben para atacar al puto Mauriño (con la excusa de Del Bosque o de quien sea), falta el contexto. ¿Por qué iba Del Bosque a ser agresivo, si toda la prensa lo ha elevado a los altares de la moral? ¿Cómo no iba a serlo el puto Mauriño, si se lo persigue con un encarnizamiento indigno hasta de la peor causa? Pero este artículo es su propio contexto: lo que este artículo hace es lo que explica el comportamiento tanto de Del Bosque como del puto Mauriño.
Y, ya que hablamos de entrenadores, ¿era Cruyff «normal»? ¿Lo era Guardiola? ¿Y Rexach? ¿A quiénes debe el Barcelona su grandeza?
¿Qué entrenadores hay que no den «la mano al rival nada más terminar un partido»? El puto Mauriño ha dado al rival la mano, y un aplauso, y alguna que otra prenda deportiva como recuerdo. Y esos actos han sido considerados aviesos, hipócritas, demagógicos, por la misma prensa que glorifica la «normalidad» de Del Bosque.
Del Bosque, por cierto, hizo un desprecio al club a cuyo «servicio» había estado «por encima de 30 años», cuando se negó a recibir una insignia. Del Bosque, modelo de humildad.
Fabulosa la manera en la que los de la vesícula biliar se agarran al clavo ardiendo de la insignia con tal de tener algo con lo que enmerdar a Del Bosque.
No me gusta Del Bosque, ni su normalidad. Quedo a disposición del periodismo deportivo ejpañol para que me lapiden.
No me gusta repetir comentarios, pero no me dais otra opción:
Panem et circenses.
Con la que está cayendo y la gente hablando de fútbol eh. Intolerapla.
Sois tan pesados (y me refiero a los mouriñistas y a los antimouriñistas), querido Mesetovich, que ya resulta imposible saber qué hay de real en los delbosques y peps del mundo. Cierto es que en la exaltación de Del Bosque suele subyacer el desmerecimiento de Mou, y, cuando no es así, ya se ocupan de darle ese cariz los mouriñistas (que susceptibles sí son). Todo esto es un coñazo. Me la sudan los valores, la humildad y las virtudes del deporte como ejemplo de conducta. Pero frente a todo esto ¿necesitamos de un paranoico con manía persecutoria que cree que todos los elementos de la naturaleza y la política se han conjurado para joderle la vida?
Yo no comparto la idea de esa normalidad de Del Bosque, más bien me parece un tipo extraordinario. Un hombre capaz de enervar a tantas personas es a la fuerza alguien cuya influencia es profunda, sobre personas a las que ni siquiera conoce.
Si además lo hace desde la confusión, con la sonrisa en la cara, y haciendo buenamente lo que le viene en gana, el mérito es extraordinario.
Del Bosque ha conseguido lo que muchos envidian, tener capacidad de decisión y mando, que se haga su voluntad siempre y que encima la gente se vea confundida por su aspecto y maneras y piense que su apariencia es lo real y sus actuaciones lo ficticio.
En definitiva, un genio, si te dejas atrapar por lo que subyace y no caes en la trampa de creer que Del Bosque es el de los anuncios de danacol.
Los hechos mutan. Eso es lo único seguro, lo demás es humo y debate estéril.
Esto se está convirtiendo en un debate entre Nietzsche y los valores cristianos. Que no pare.
Si queremos que el mundo sea un sitio mejor, deberíamos poner a Del Bosque en la butaca de Obama. Y a Guardiola en la de Pedro. Así, de un plumazo, acabaríamos con el capitalismo y el ateísmo y en adelante, todos gilipollas.
Pero algunos más gilipollas que otros, que diría Orwell.
Cuentan que un día, en Memphis, Navarro le dijo a Lebron durante un partido: «Me, with your body, Michael Jordan». Me lo creo. Y me cuadra.
Del Bosque es taaaaan bueno, que la única vez en sus ventiocho (28) años de carrera en que ha salido de debajo de las faldas de mamá Madrid o los pantalones de Papá Federación, la temporada 2004-05 con el Besiktas, quedó cuarto en la poderosa liga turca, cayó en dieciseisavos de la prestigiosa Copa turca y le mandaron a casa en la fase de grupos de la potente Europa League.
Un arrostrado, Don Vicente.
Y en casa…
En casa se encontró con dos proyectos que ya antes de su llegada habían triunfado sin él, rompiendo inercias perdedoras de décadas en UCL y Eurocopa. VDB, puso en práctica su especialidad: no tocar mucho para no romper nada. Y le fue bien, a los hechos me remito.
Evidencia anecdótica, que sería de nosotros sin ti…
Para variar, lo que era un debate muy entretenido sobre la figura de Del Bosque ha derivado en Forocoches. Lo de alguno es para que le lobotomicen a lo menos tardar.
‘Ahora el que te paguen invalida el mérito de tu labor. Tócate las gónadas’.
De compresión lectora, regulero, ¿verdad?
Muy bonita su descripción de un Del Bosque entregado a la causa por amor al fútbol y a los niños, que era el eje central de su relato. Usted no vende eficacia, vende amor. (?)
Claro. Del Bosque era ineficaz. Bajó a Segunda al Madrí. Seguimos para bingo.
Veo que juzgue su comprensión lectora con demasiado optimismo. No se preocupe, eso se cura leyendo un poquito más. Ánimo.
Eso, eso. Yo la suelto y, si veo que la bobada no cuela, ya le echaré la culpa a la comprensión lectora del vecino. Bravísimo, oiga.
Totalmente de acuerdo con Mesetovich.
De hecho, lo que está de moda ahora es lo que vende Del Bosque. Esa ‘normalidad’ que nunca lo será. Pregunten por las categorías inferiores del Real Madrid, a lo mejor más de uno en el off the record se lleva una sorpresa. Del Bosque es un tipo listo que, indudablemente sabe de fútbol, pero de ahí a deificar su humildad va un mundo.
Harto, harto, de los que glorifican la sencillez del que no lo es. Es un privilegiado que vive en una esfera diferente e incomprensible para casi todos nosotros, a ver si nos enteramos.
En fin, así funciona todo en este país. ¡Del Bosque presidente e Iniesta de segundo!
Del Bosque es el mayor experto en evitar meterse en charcos como sí parecen hacer las demás gentes del fútbol.
No digo que no se lo currase en la cantera madridista, pero cuando llegó al primer equipo disfrutó de una de las mejores plantillas de los años que duró en el cargo. Vale, que fue el primero en colocar a Zidane partiendo desde el interior izquierdo, en vez de en la mediapunta aunque al final actuase como tal (con eso que dijo alguien de que centraba mejor con la izquierda y disparaba mejor con la derecha). Una defensa con Makelele y Helguera delante y un ataque con Ronaldo Nazario en sus mejores años (aunque sospecho que si le hubiera tocado en su época floja, porque vago Ronnie era siempre, Vicente no le hubiera dicho nada de nada. Tal es su carácter).
En su época Turca no hizo un carajo (no sé qué tal era esa plantilla pero cara, seguro).
Y en su época de selección le tocó la difícil tarea de continuar con la labor de Aragonés.
Así que altisonante no, pero vaya manía de compararle con Mourinho. Con ese salgo ganando hasta yo y eso que soy insoportable.
Al final tenemos un tío humilde, sí, pero sobre todo listo y afortunado (venga, vamos a admitirle, sin pasarnos, cualidades futbolísticas en el ámbito de dirigir equipos). Ahora, preguntémonos cómo el Señor Marqués dice que ama tanto a su ciudad natal cuando no ha promocionado al equipo de dicha ciudad en su momento más crítico, ni puso un duro de su inmenso patrimonio (tal como hizo Iniesta).
Lo que yo digo: cómo evitamos el pringarnos, Vicen.
Discuten al tecnico que les dio un mundial? Raro…
Yo creo que te equivocas. Muy poca gente cuestiona al Del Bosque entrenador. Ahora. Cuando era entrenador del Madrid le llamaban despectivamente «alineador».Y se lo llamaban los mismos que ahora le otorgan un estatus cuasi místico para atizar al Real Madrid. Eso es lo que se discute. Que se hable mas de su humildad y su campechanía. Mesetovich lo ha explicado de maravilla.
Perseguido Del Bosque? No me hagas reír Guillén…
Joder, el tal mesetovich y su cohorte de palmeros es la explicación 2.0 de por qué España es un país tan decadente y con tan poquito arreglo. Gente de pluma fina y lengua viperina que critican al competente y que no les cuadra que se sea amable y educado porque ellos no lo son.
Las ganas que tendrán esta noche que España la cague con Francia…al nivel de las ganas que tienen tantos compañeros de curro de que la cague el de al lado o el de arriba, para guiñarse con el otro cabrón de café y endiñarle un suave codazo mientras sueltan un «ya te decía yo, tan bueno no era».
Puto país de tarados.
Excelente.
El empeño del sórdido no es sólo airearse con orgullo. También siente la necesidad de cacarear que el resto de seres son peores: no sólo son miserables como él, sino que además caen en la hipocresía de esconder esta naturaleza.
Si os molesta que nos resistamos a vivir en esta paranoia, pues os jodéis. No puede ser gamberro el que se toma demasiado en serio a sí mismo. Se convierte en otra cosa.
Por cierto, a Del Bosque se le protege por pragmatismo. Lo único que le separa del linchamiento es la derrota. Mismamente hoy, tras el partido contra Francia, se puede desatar la avalancha de mierda.
A Del Bosque no se le quiere por haber ganado un mundial: por haber ganador un mundial lo quieren única y exclusivamente los madridistas, no seamos fariseos.
Lo que a la primera religión por número de practicantes de España (el antimadridismo)le pone de verdad, es que un tipo que el Real Madrid le puso de patitas en la calle, regrese y se eleve cual ave fénix. Y como encima se presta como ariete contra Florentino Pérez y, por derivada contra Mourinho, pues lo nombramos Dios en la tierra, el advenimiento del nuevo Mesías.
Y para más bemoles, los que manejan el ariete, son los Segurolas, Relaños, Julio César Iglesias y demás carroña que le criticaban un día si y otro también cuando entrenaba al Real Madrid. Muchos de estos, incluso celebraron su marcha. Por no decir, que el que despidió a este hombre fue/es el paladín de la prensa izquierdistadeportiva de este país, el señor? Jorge Valdano.
Si Don Vicente hubiera salido del Madrid entre petálos de rosas, en loor de multitudes y con la entrega de una placa en la esquina del Bernabeú, entregada por Florentino Pérez, la visión del personaje daría un giro de 180 grados.
Es como lo de limar tensiones entre los del Madrid y los del Barça. Casualmente aparecen tensiones cuando el Real Madrid se pasa de forma continuada al Barcelona por la piedra (1 victoria en los últimos 8 partidos). En los tiempos del 2-6 y el 5-0, todo una balsa de aceite, oigan
«Es como lo de limar tensiones entre los del Madrid y los del Barça. Casualmente aparecen tensiones cuando el Real Madrid se pasa de forma continuada al Barcelona por la piedra (1 victoria en los últimos 8 partidos). En los tiempos del 2-6 y el 5-0, todo una balsa de aceite, oigan»
Esto no se lo cree ni usted. Precisamente la época más convulsa en el vestuario de la selección data de finales de 2010 y 2011. En los últimos tiempos, los de 1 victoria blaugrana en 8 partidos, ni dopaje, ni teatreros, ni bofetadas, ni «españolitos os vamos a ganar», ni escupitajos en el túnel del vestuario, ni dedos en el ojo.
Que nos intentéis colar la propaganda, se entiende. Que nos toméis por imbéciles es otra cosa distinta.
Tensiones que, por cierto, Del Bosque lidió con solvencia cojonuda.
Seguramente castigando a los jugadores del Madrid a lamer las suelas de los del Barça.
Lo que yo no entiendo es como los grandes equipos europeos no se pelearon por ficharle cuando acabó su contrato en el Madrid y terminó entrenando a un equipo turco.
¿No os parece una de la mayores injusticias deportivas?
Je.
Pero claro, que van a saber los managers de los mejores equipos de Europa.
No entiendo cómo el Madrid tampoco peleó que no se fuese Mata, por esa misma chusquera regla de tres.
Me parece a mí que lo chusquero aquí es comparar a un jugador del filial con el entrenador del Madrid campeón de Europa.
Mata tenía tanta madera de jugador de élite como Vicente de gran entrenador de equipos con vestuarios de peso. ¿Por qué nadie supo ver ninguna de las dos cosas? Porque, lamentablemente, a principios del siglo XXI el Delorean aún no estaba inventado.
Si le soy sincero, su respuesta me ha dejado perturbado.
¿Hacía falta un Delorean para fichar al «gran entrenador de equipos con vestuario de peso» DESPUÉS de su etapa en el Madrid?
Pues vale.
La respuesta está en los medios, cuya máxima ha sido que lo normal no es noticia
Es muy sintomático que el Señor Del Bosque sea alhagado por su «normalidad». Me parece una gran virtud pero poco tiene que ver con el futbol.
Del Bosque está tremendamente sobrevalorado, precisamente por eso: por la normalidad. Es lógico, es tan normal que ni se esfuerza en preparar técnicamente los partidos, simplemente aliena a los de siempre y les dice: «venga, haced lo que sabeis,…»
No os lo tomeis a mal, yo mismo soy salmantino y no hablo por despecho, pero Del Bosque no es un buen entrenador. Coincidió con el Madrid de Zidane y de Ronaldo (el Gordo), y ahora ha coincidido con la generacion de Casillas, Xavi e Iniesta.
El resto de la historia ya la conocemos todos…
Pingback: Elogio a la normalidad | Fran Guillén
Cuentan que un día, en Memphis, Navarro le dijo a Lebron durante un partido: “Me, with your body, Michael Jordan”. Me lo creo. Y me cuadra.
Extraordinario artículo.