Hace ya unos cuantos años que vengo siguiendo una interesante discusión entre biólogos y genetistas sobre el progresivo aumento de la idiotez entre los varones de las naciones avanzadas. Las causas no están claras. Parece que en parte se deba a la facilidad con la que acceden a la copulación con hembras de edad temprana, lo que ha menguado enormemente su voluntad de seducción, los recursos imaginativos y los esfuerzos de la inteligencia para cumplir con los requisitos del celo. Parece ser que un atavismo, el de la reproducción, al ver facilitados de modo grandioso sus protocolos, adormece la capacidad intelectual para encontrar recursos, embota la astucia y deja estupefacto al individuo.
Desde luego basta con acudir convenientemente disfrazado a un botellón, por ejemplo, para poder estudiar sobre el terreno el grado de estupefacción en que se ven sumidos cientos de miles de jóvenes promesas que ya no han de esforzarse para atraer a las hembras reproductoras y mantienen sus tácticas en stand by. Los balbuceos que se han podido registrar y analizar responden, según los expertos, a la conversación normal de un niño de primera comunión en los años cincuenta del siglo pasado. Cálculos de laboratorio han llegado a la conclusión de que los varones han perdido entre un 60% y un 70% de su capacidad intelectiva en apenas medio siglo. Como justa compensación, las hembras, sometidas a una feroz batalla entre competidoras, son ahora listísimas.
No obstante, que ese encogimiento del cerebro viril se produzca entre los adolescentes a nadie preocupa. Mucho más grave es el proceso en los adultos. El último caso, el del general David Petraeus, es como para echarse a temblar. Este reconocido militar norteamericano era hasta hace una semana el jefe de la Inteligencia Americana, más conocida como CIA. Se recordará que la CIA es la compañía encargada de vigilar y en su caso controlar la totalidad del globo terráqueo para que no le suceda nada malo a cualquier ciudadano americano que se aventure más allá de Utah. Es sin lugar a dudas el organismo público más caro de la administración de los EEUU y uno de los más sólidos pilares de la democracia mundial. Pues bien, al jefe del mayor cerebro occidental le han pillado en un adulterio con una señora llamada Paula Broadwell, oficialmente su biógrafa, la cual tenía acceso al ordenador del general y además se dedicaba a amenazar a otra señora, también casada, cuyas relaciones con el cerebro de Petraeus o con otras partes de su personalidad no complacían a la biógrafa.
Lo asombroso es que el servicio de Inteligencia del mundo entero haya ido a dar a manos de un señor como éste. Los datos son admirables. Petraeus es bajito o muy bajito, tiene cara de ratón o de hiena, parece distraído o bobo, ha de estar bastante ocupado de modo que sus prestaciones han de ser rápidas o incompletas y se supone que lo sabe todo o quizá nada. Y es que han bastado dos señoras para ponerle en el más espantoso de los ridículos. ¿Cómo es posible que las tomara en serio? Ellas son fornidas, altas, musculosas, ambas pertenecen al ejército, tienen pechos como obuses y el conjunto de los bajos es muy respetable a lo que se ve en las fotos. ¿De verdad el jefe de la Inteligencia pudo creer que iban a por él por su seductora virilidad? ¿Y que acaso les importaba enormemente su biografía en tanto que funcionario castrense? Si le han engañado dos vulpes de provincias, ¿cómo no le va a engañar el gobierno chino, pongamos por caso?
Hace años, un tipo como Edgar Hoover, jefe de un organismo mucho más pequeño, el FBI, se presentaba en las fiestas de sus amigotes vestido de hembra, con sombrerito de tul, faja y liguero. Nunca pasó nada. De haber habido alguien dispuesto a decir en público que Hoover era un chiflado con licencia para matar habría experimentado de inmediato tal aserto en carne propia. Muchos cuerpos aparecieron flotando en el Hudson por aquellos años. En cambio ahora, no solo las damas no han aparecido flotando en el Hudson, sino que han hundido al jefe, a la figura biográfica, al cándido amante.
¿Qué clase de majadero había accedido a la cabeza de la CIA en plena guerra de Irak y Afganistán? ¿Y qué cadena de idiotas lo había colocado allí? Posiblemente, como argumentan los biólogos y genetistas, no quedaba ya un cerebro mejor que el de Petraeus en toda la administración americana, incluido el ejército.
En la misma publicación de los biólogos y genetistas antes mencionados viene un estudio que expone cómo los animales más valorados para la taxidermia son muertos por expertos cazadores en el momento de la copulación. Parece que también los insectos.
Si es que los tiempos ya no están para personajes grandiosos. Ahora se premia más al pelota chupatintas. Hasta la CIA se precipita a la mediocridad!! Que Dios nos pille confesados.
Tanta narrativa para contar que unas zorras encandilaron al jefe de la CIA. ¿Andamos tan escasos de ideas, Sr. de Azúa, que nos tiene que referir al mito de Jezebel para explicar lo de Petraeus?
Jejeje desde luego el horizonte de la especie plantea muchas dudas….. Pero nada nada volvamos al modo seducción de Valentino sobré toda mujer que pase por nuestro radar ,empezando por nuestra mujeres, y aumentar el tamaño… De nuestra inteligencia
Hay mucha hipocresía en los comentarios sobre adulterio, sobre todo en los comentarios de los hombres. Por qué pensáis que no hay problema en que las esposas «legales» tengan acceso a la información? Eso es un poco inocente…
¡Sublime! Gracias señor Azúa por dejarnos disfrutar de su humor e inteligencia.
La idea central es chusca y el texto entretenido, pero también este artículo le ha salido machistorrillo al autor; con su buena dosis de testosterona de la de antes. Pena.
Se ve qué es para él la masculinidad. Como si hubiera una sola, que es la que Petraeus no cumple porque es bajito o muy bajito, y que a lo que parece es la única que, en buena ley, debería atraer a las mujeres. Qué antiguo, ¿no? Las dos mujeres tampoco le concuerdan: al autor: ¿cómo a unas señora tan corpulentas les va a gustar un señor tan esmirriado?
Por otra parte, ¿le molestará al autor que las tías de ahora sean «listísimas»? Curioso; dice que los varones de hoy se han atontado porque pueden copular con facilidad (se sobrentiende que también lo harán con mujeres, y no sólo entre ellos). Sin embargo indica que las mujeres deben competir entre ellas para disputarse a los varones y por eso se han espabilado. Pero si copulan con ellos, también lo tendrán fácil ¿no? A mi la relación matemática de ambos conjuntos no me sale. Pero bueno, que la lógica no nos fastidie una «idea brillante».
Por lo demás, tampoco a mí me cae simpático el señor de la CIA, qué se fastide.
Totalmente de acuerdo contigo, Barquín. Este texto es de una simpleza argumental pasmosa, y los estereotipos de género en los que se basa dan entre asco y pena. Y, como chiste, de lo más chusco.
Supongo que el autor se considerará un analista muy agudo, lejos de los idiotas que describe. Así que, en caso de que copule poco con mujeres, ahí tendría una explicación muy halagüeña.
Pues sí señora, todo un analista y con una gran autoridad.Como se ve que usted desconoce,no ha entendido el mensaje y lo ha leído poco.
La incapacidad que Vd. demuestra, Sr. Barquín, para el ejercicio de la ironía, es el ejemplo más acabado de hasta que punto los genetistas consultados por el Sr. Azua en el tema de la evolución del cerebro humano -a menos- en el algunos individuos son pertinentes.
Me da la impresión, Barquin, que está ud respondiéndole por aquí a lo de allí (¡si no me equivoco!) :-)
Me descubro. Después de leer el texto vuelvo a mirar la foto y, la verdad, el tipo tiene cara de gilip… Barquin, relájate, joder. Relájate un poco, ¿vale? ¿Sí? Eso es. Así… así… poco a poco.
Biólogos, genetistas, varones idiotas, tías listísimas, botellones, CIA, requisitos del celo…. Sr. Azúa, se supera usted a cada artículo! Total para demostrar que el jefe de la CIA es carne de cañón para ser embaucado, cosa que todo el mundo sabía antes de que ud. se pusiera a escribir… Uuuuufff!
No es por nada, pero convendría echar un vistazo a la esposa traicionada. Al parecer este hombre tenía claro, antes de llegar a las elevadas cumbres desde las que ha caído, a lo que por su simple animalidad y apariencia tenía acceso en el mercado del sexo.
A esa simple animalidad orgánica se le añadieron luego aviones privados, chóferes, despachos enmoquetados, todos los atributos ante los que determinadas hembras pierden el sentido. Se convirtió en todo un macho alfa ante el que caían rendidas las hembras de su entorno. ¿Debería conformarse con su mujer? No está el mundo para ascéticas cuando causas sobrevenidas le hacen a uno ascender en la manada hasta convertirse en un irresistible macho para unas mujeres, las de su entorno, que se quedan preñadas con sólo oler unos calzones de varón investido de poder.
«Es sin lugar a dudas el organismo público más caro de la administración de los EEUU y uno de los más sólidos pilares de la democracia mundial». Impagables las risas. Pasito a pasito, solo nos va a quedar el doblepensar.
No consiento bromitas sobre la esposa del general. He visto las fotos de Holly y considero que Petraeus salió a buscar mortadela fuera, teniendo jabugo en casa.
Pues usted vigile que no se le atragante la mortadela y el jabugo, Sr. Chistoso!
Pieza maestra de humor corrosivo, no le busquen tres ( ¿o eran cinco? pies al gato, simplemente hace sangre de una manera brillante a otro episodio risible de la inteligencia (contraintelengia mejor) americana, nos quieren hacer creer que se destinan de una manera útil miles de millones de dolares cuando todo el mundo sabe que la contingencia es predominante en el mundo de los espías.
¿Pieza maestra del humor corrosivo? ¡Qué fuerte! Azua vs el Duo Sacapuntas—– Fight
A mi me da la impresión de que al Sr. Azúa le gusta la tal Broadwell, ha sentido unos celos enormes al leer la noticia, y ha atacado con su bloguecito… Si no no se explica…
La solución? Poner al Sr. Azúa al mando de la CIA, así los Estados Unidos tendrán la garantía absoluta de que eso no volverá a ocurrir…
Menos mal que la ciencia tiene una explicación, sino genética al menos biológica, para dar cuenta de la limitación en nuestros congeneres. Y es que la ciencia husmeando en el cerebro, y tras arduos esfuerzos, se da de bruces con la inmemorial bruticie que en el mundo rige.
No sé, lo malo de la ironía es que a veces los tontos no la pillamos por escrito.Por si va en serio: Primero noto cierto tufillo de superioridad europea que me estraga un poco. «Cualquier norteamericano que se aventure más allá de Utah». Bue…ni que los españoles fueramos la esencia del cosmopolitismo. Cuando se habla de que los yankees no ven más allá de sus narices me gustaría que se hiciera una encuesta sobre diversos temas de actualidad nacional e internacional a muchos de nosotros. Sería flipante. Luego…el general Petreus quizá sea un hombre en la crisis de la madurez o alguna mierda de esas que le hace buscar jovencitas, pero de tonto o bobo no tiene un pelo. Sus decisiones han dado un vuelco a la guerra de Irak que parecía poco menos que imposible. Sus tácticas de contrainsurgencia se estudian en todas las academias militares del mundo. Todo el mundo (hasta el sr. Azúa, imaginaos! Hasta el sr. Azúa!) tiene un punto débil…o varios.Desde luego Petreus es una mente brillante, quizá desconectada del pito. Como nos ha pasado a todos alguna vez… ¿o no?
Venga Félix, que ni estamos en los tiempos de «Por Favor», ni tu eres Manolo Vázquez Montalbán…
Estoy seguro de que todos pensamos que no se es más o menos inteligente por cometer adulterio o dejarte engatusar por alguien. «El capo de la CIA deja el cargo por adulterio». No hay más que contar. Pero la frase «que no le suceda nada malo a cualquier ciudadano americano que se aventure más allá de Utah», es sublime.
Este tal señor AZUA yo más bien creo que es menos listo que el general este, va de moralista y encima se toma todo el tiempo del mundo para escribir un articulo tan vacio como este.
Por amor de dios. Lo de Hoover es una leyenda urbana difundida mucho después de su muerte (cuando ya no daba miedo), y desmentida mil veces. Edgar Hoover ya es un personaje lo suficientemente sombrío por lo que sí hizo como para andar inventando cosas.
Este tipo de fallos hace que cualquier texto pierda mucho valor.
«El poder es el mejor afrodisíaco» Henry Kissinger. Número de Miss Mundos pasadas por la piedra: 3. Cara: de patata pocha. Cuerpo: de tonel.
Lo que diga ese hombre es la Biblia del ligue.
Vaya, vaya… Para un «ciudadano progresista» como el Sr. Azúa, Petreus debería llegar a casa, sentarse en un sofá a leer el periódico mientras su esposa hace calceta, con la bandera americana a un flanco del hogar y la estatua de Lincoln en el otro, y los peques jugando con miniaturas de los portaviones de la Armada… Eso sí que hubiese sido «inteligente», no es cierto? En cambio, qué poca cabeza tuvo, el bajito (o muy bajito)…
Típico articulista con poca información y mucha imaginación, hasta el punto de hacerla volar hasta la cama de los demás. Al final toman la información de cualquier periódico de la semana anterior, y con la imaginación llegan hasta las alcobas más recónditas del planeta. Proust, de quien Azúa presume haberlo leído mucho, escribe: «No podemos imaginar lo que está ausente».
No sé de que otro sitio se puede tomar información sobre tal asunto si no es de los periódicos de la semana en que fue noticia, salvo que crea que sólo están capacitados para opinar del mismo los que vieron in live los hechos relatados, que sólo serían los mismos protagonistas, salvo tendencia al exhibicionismo sexual de la pareja o voyerismo de alguno que anduviera cerca de la cama en cuestión a la que usted tanto trabajo le cuesta imaginar. En cuanto a la frasecita de Proust, que usted, como vulgar snob, utiliza como sólo los snobs utilizan las cosas, es decir, no por sí mismas sino por su utilidad para otros fines, en este caso, ridiculizar al autor por no sabemos que hostilidad derivada de hechos por usted no revelados pero que razonablemente pudiéramos pensar relacionados con la vulgaridad de la política, decirle que antes de soltarla recapacite sobre el significado que la palabra «ausente» tiene en Proust.
Y finalmente expresar mi legítima queja por comentarios y actitudes como la suya, no por ridículas sino por molestas.
Usted sospecha demasiadas cosas que no son! Mi comentario se debe exclusivamente a la repugnancia causada por un texto deleznable. En cuanto a la palabra «ausente», habría que leerla en el contexto de esta historia, no de Proust. Por eso está descontextualizada. Puedo entender que le moleste mi comentario, pero piense bien dónde se encuentra el origen de este desbarajuste…
No sé qué publicaciones de biología y genética lee, Sr. Azúa, pero el Cociente Intelectual de la humanidad no ha cesado de aumentar:
http://es.wikipedia.org/wiki/Efecto_Flynn
Pero bueno, no se puede pedir rigor a un texto básicamente humorístico.
El Sr. Azúa vive momentos personales de gran singularidad que se proyectan en sus columnas. Es humor, ironía, sarcasmo, defensivo; y la mejor defensa es un buen ataque.
No se sabe con certeza si vamos a más tontos o a más listos, pero la seguridad de que, a cierta edad, todos vamos dejando un reguero de neuronas difuntas, es total. Para muestra, un botón.
Bajito? O muy bajito? En la foto se ve que Petraeus es tan alto como la Broadwell. Y no parece que le desmerezca… Qué te has inventado esta vez, Azúa?
Dado el escarnio al que te somete la vasca he de decir sin la más mínima intención de juzgarte que el artículo, como casi todos en los que he visto tu impronta me gusta.
Dejando el magro de lado, si que sospecho de que seguramente se trata de más de dos muescas en su pistola, y que al elemento le importe poco la opinión de las conejas sobre su dotes varoniles. No creo que sea casualidad que las dos mujeres que han aparecido formen parte del reparto de el mismo drama, y tampoco sería el primer follarín de los bosques que ocupe un alto cargo.
Tampoco sé si el aceptar el cargo de director de la CIA durante un periodo de guerra sea algo tan inusual tratándose de EE.UU. y si eso desmerece al personaje o nos debe decir algo sobre su personalidad considerando la faceta burocrática que se apoderó de la CIA desde la salida de R. Reagan.
A mí personalmente me congratula que las personas que ocupan cargos de responsabilidad den muestras de humanidad, porque ya que lo mencionas lo que me parecía realmente enfermizo era el complejo mundo y oscurantismo que rodeaba a E. Hoover y a su reprimida sexualidad, o como y cuanto ésta afectaba a sus decisiones ejecutivas.
Respecto a la inteligencia de género, tampoco es que sea relevante que ciertas mujeres tiendan a abrirse de piernas en cuanto ven una estrella en la solapa de un militar; más bien tendrá que ver con la autoestima de cada cual.
Heavens, ¿Los hombres (y las mujeres), nos perdemos, cometemos errores, nos comportamos como idiotas, amamos, traicionamos y arruinamos nuestras carreras por la física y la química y la biología?
Que discovery.
Esta moralina no merecía un artículo ni estas reprimendas monjiles, pero supongo que no puede uno estar siempre a la altura de el «Diccionario de las artes» or «La invención de Caín» en esto Azua es tan humano como los generales a la romana.
Bien , seguramente no es el mejor artículo de don Felix,pero el «mensaje » yo diria que es «no hay nadie al volante» y olvidense de los accesorios,son para provocar a las feministas y a los curas.
El centro del discurso es este.»Si le han engañado dos vulpes de provincias, ¿cómo no le va a engañar el gobierno chino, pongamos por caso?».
El tema lo explican también con humor los hermanos Joel y Ethan Coen en «Romper después de leer»,sseguramente tampoco es su mejor película pero entretiene,que es de lo que se trata.
Sr. Azúa,
há anos acompanho seus escritos, às vezes me surpreeende seu conservadorismo e sua defesa dos poderosos e das coisas indefensáveis. Neste artigo, por exemplo, dizer que a CIA é «…uno de los más sólidos pilares de la democracia mundial», me parece espantoso. Não sei se o levo a sério ou é apenas uma ironia sem nenhuma graça.
Si busco entre mis amigos y conocidos, los individuos con más éxito, más gozadores y mas propensos al sexo, han sido siempre los bajitos. Y yo mido unonoventa… cuando he preguntado a mujeres de confinaza me dicen, me decían, que tienen más encanto y se hace más evidente el deseo.Son más gozadores. Algo que los «morlacos» como yo, desgraciadamente debemos de ocultar sin saberlo.
La espina dorsal de los bajitos es más corta y por tanto los chispazos eléctrico-neuronales recorren una distancia más corta, lo que les hace especialmente hábiles para los movimientos sincopados de lengua, pelvis y manos, resultando en la práctica unos folladores innatos e idóneos para hembras apáticas en busca de emociones arrebatadoras y chispeantes.
Flojo, Félix, flojo
Pue yo preferio tené zezo fasirmente que sabé ezcríbí conrrestamente.
Si dice «varones» ha de decir «mujeres», no «hembras», porque no está hablando de elefantes, ¿verdad?
Es que Azúa debe ser muy macho…
La cosa tiene una explicación bastante banal: la erótica del poder. Los biólogos y psicólogos evolucionistas lo saben muy bien: nostros nos creemos sinceramente que las amamos porque nos gustan sus tetas y su culo, y ellas se creen sinceramente que nos aman porque les gustan los hombres (por más birrias que sean) con poder y dinero como signos de que tendrán medios para sacar adelante a la prole. Es eso tan extendido llamado autoengaño. No creo que haya habido engaño deliberado. Al fin y al cabo, también el enamoramiento «puro» es puro autoengaño. Así funciona el mundo, autoengañándose todos y engañándonos indirectamente unos a otros. Pero en general funciona. No hay que escandalizarse. Además, algun recurso le ha de quedar a los feos, digo yo.
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