Vaya por delante que ante lo joven que es este blog, todavía no he tenido tiempo de posicionarme en la gran mayoría de aspectos relativos a esta industria. Dicho esto, ya adelanto que en estas páginas encontraremos más de un elogio a la estrategia que ha seguido Microsoft durante estos años con su división de entretenimiento, personificada en Xbox y, especialmente, en Xbox 360. Ahora bien, que su última consola me parezca el mejor ejemplo de esta generación no impide que no se cuestiones las directrices que Redmond aplica a sus productos.
Estos últimos días han saltado varias noticias que demuestran que algo se mueve dentro del gigante estadounidense. Después del spring showcase, evento que la compañía siempre celebra durante los primeros meses del año y en el que se pueden apreciar las líneas maestras que el estudio va a seguir a lo largo del año, quedan claras un par de cosas. La primera, que Xbox está cambiando su estrategia y está virando hacia una propuesta más cercana a la de Activision, especialista en bombardear el mercado y en exprimir sus franquicias hasta la saciedad.
Dos son los ejemplos en los que se puede cimentar esta afirmación. El primero es la aparición de un nuevo Forza, la saga de conducción que tantas buenas noticias le ha dado a Microsoft, y que de confirmarse su salida este año va a ser una vuelta de tuerca al concepto en el que han trabajado hasta ahora. Si los Forza Motorsport eran simuladores de carreras y poco más, con Forza Horizon todo indica que el concepto va a dar un giro, aunque todavía no sepamos de cuántos grados. Con un teaser que no enseña prácticamente nada más allá de una invitación al poligonerismo en toda su extensión, poco podemos especular con este nuevo título.
Pero sí que nos podemos hacer una idea de por dónde pueden ir los tiros si tenemos en cuenta que detrás del desarrollo está Playground Games, joven estudio en el que se encuentran los responsables de Colin McRae DiRT o GRID. Dicho de otra manera, y sacando la bola de cristal, parece que Microsoft quiere diversificar la saga Forza. Alternar cada año lanzamientos de Motorsport, el juego que respeta las leyes de la simulación hasta su máximo exponente, con los de Horizon, una aproximación que permita acercarse al juego a un público menos exigente y que no tiene la paciencia necesaria para echarse diez horas al volante para dominar un deportivo de tracción trasera.
Segundo ejemplo: Fable. El caso de Fable merecería un texto aparte. La franquicia creada por Peter Molyneux, ese tipo que sabe provocar a todo aquel que siga un poco esta industria, siempre ha sido controvertida. Acusado de hacer juegos a medio camino entre el rol y las aventuras, de crear un estilo que no es atractivo ni para jóvenes ni para adultos, Molyneux se ha movido entre cierto desprecio por los jugones y unas ventas más que aceptables para las tres partes de su franquicia. Llegado el citado evento, nos hemos enterado que Microsoft va a lanzar en nada y menos Fable: Heroes, un título descargable dirigido al público infantil mientras que a finales de año está prevista la salida de Fable: The Journey, un juego ideado para jugarse en exclusiva con Kinect.
Que la saturación de Fable es considerable es un hecho. Pero lo sorprendente del asunto llega cuando Molyneux decide bajarse del barco de Microsoft y emprender, de nuevo, carrera en solitario en el desarrollo del videojuego. El programador lo ha anunciado esta semana y aunque probablemente sea casual, es un anuncio que lleva a todo tipo de intrigas. ¿Estaría hasta las mismísimas narices de tener que trabajar en un mismo juego una y otra, y otra, y otra y otra vez? Si algo ha caracterizado a Molyneux en su periplo por la industria es la curiosidad por explorar nuevos frentes y su rechazo a dormirse en los laureles y apostar por fórmulas en las que ya ha trabajado. Sí, lo ha hecho alguna vez (Black & White, sin ir más lejos), pero estamos hablando de una franquicia que, con los lanzamientos de este año, se iría a la quinta entrega. Sinceramente, y a falta de saber la versión oficial, voy a sacar la bola de cristal por segunda ocasión para creer que algo de hartazgo de la saga Fable ha tenido que ver con la marcha de Molyneux.
Queda un último punto, el regreso de Halo. Anunciado en el último E3, Halo 4 debería llegar también a las tiendas a finales de año. El proyecto aúna esperanzas y temores entre los seguidores de la serie por dos motivos bien diferentes. Esperanzas ante la vuelta del Jefe Maestro, icono de la franquicia y personaje que se había ido de vacaciones en las últimas entregas, y temores ante la marcha de Bungie, estudio que revolucionó el género del shooter en consolas y que ha cedido el testigo a 343 Industries. El miedo al cambio de estudio es similar al que se tiene con el nuevo Forza, 343 Industries es una incógnita de la que poco se sabe más allá de algunos juegos menores desarrollados para la franquicia Halo.
Con Halo 4 el movimiento parece más impropio de Microsoft. Quizá es una de las primeras franquicias estrella en las que loso cimientos se han tambaleado. No a nivel de ventas, pero si entre la crítica, que se ha quejado amargamente de la desaparición del Jefe Maestro de las últimas entregas y que ha acusado a la franquicia de haber querido ordeñar en exceso a la saga. Con la cuarta entrega Redmond parece querer mandar un mensaje: vuelta a las raíces para dar a los fans su droga preferida.
¿Tendrá éxito la nueva estrategia de Microsoft? Lógicamente, el tiempo nos lo dirá cuando echemos la vista atrás dentro de un par de años y podamos valorar el alcance del movimiento. Por ahora la premisa parece clara: saturar el mercado con juegos franquicia y lanzamientos anuales en lugar de espaciarlos como se había hecho hasta ahora. Y la táctica tiene sentido cuando se conocen las cifras de ventas de 360, que en palabras de trabajadores cercanos a Microsoft Ibérica, «van mejor que nunca». En este contexto no es de extrañar que Microsoft quiera vender a dos manos. Y no les culpo, ojo, esto es un negocio y las compañías se meten en esto con la intención de juntar dólares.
La cuestión es saber si la calidad de los títulos se resentirá o si, por el contrario, Redmond será capaz de mantener los estándares de calidad mostrados hasta ahora. Personalmente, le tengo cierto miedo a esta nueva apuesta aunque confieso que cualquier novedad en la saga Forza me parece interesante, viniendo de un equipo que ha sido capaz de robarle el cetro de la conducción a Gran Turismo. Por lo menos se merecen un voto de confianza que se han ganado merecidamente con los años. La respuesta definitiva la intuiremos a partir de este otoño. Hasta entonces, no podemos hacer mucho más que hacer cábalas y contar los días hasta que lleguen las novedades.
El Fable Heroes es un mini-juego de descarga más que un spin off como tal. Es algo que ya hicieron con el segundo y el tercero de la saga. Por otro lado Moulyneux creo que está muy sobrevalorado, sus mejores creaciones se van a Bullfrog y al primer proyecto de Lionhead (el mencionado Black & White). Es mentira que no le guste a Peter lo de crear secuelas: Dungeon Keeper tiene una secuela y una tercera se tuvo que cancelar (anunciada junto a la segunda además). Populous goza de 3 partes. Black & White tiene una secuela. Y del primer Fable al tercero pasaron bastantes años.
Lo que hay que mirar son los spin-offs y las sagas en sí mismas, ya que precisamente es algo típico en el mundo de los videojuegos lo de crear y crear secuelas y derivados. Final Fantasy tiene centenares de títulos en su haber o Resident Evil. La cuestión es que las sagas principales suelen mantener un cierto nivel de calidad y muchos de los spinoffs suelen ser grandes juegos.
Lo de Forza yo no creo que cuente como exprimir la vaca de oro, es más un trabajo por atraer a otros públicos utilizando un nombre ya consagrado. Personalmente preferiría ver anunciado un nuevo Project Gotham Racing.
Joaquim, lo de un Project Gotham lo veo negro porque el estudio cerró. De hecho hay gente de Bizarre en el equipo que va a hacer este nuevo Forza, así que por ahí a lo mejor tienes un incentivo.
Obviamente, del tema de secuelas tienes toda la razón. Es el pan nuestro. El miedo es que por comenzar a hacerlas como churros (a lo Activision), baje la calidad. A ver qué sale…
Creo recordar que ya anunciaron un Gears of War 4 -o una precuela- con otro equipo de desarrollo ¿no?
Por cierto, aunque no sea exclusivo, lo de Ubisoft con Assassin’s Creed es de estudio, van a juego por año.
Molyneux tiene un problema. Se cree un genio a la altura de David Jaffe -otro que tal- pero tiene el problema que le ha salido un duro competidor en este mundillo del rol/aventura, ese magnífico estudio llamado Bethesda. Más quisieran los pobres Fable llegar a la mitad de lo que han alcanzado Fallout o Skyrim, juegos ya imperecederos en el mundo consolero. Recuerdo la presentación de Kinect en la que Peter intentó dárselas de revolucionario con ese crío que respondía a la voz y al movimiento -una soberana gilipollez-.
En cuanto a las políticas de Microsoft con Motorsport, me parece un movimiento totalmente lógico y que puede aplastar -si acaso no lo ha hecho ya- a su gran rival en la otra esfera, Gran Turismo. Veremos lo que da de sí este cambio-, yo por el momento me quedo con mis Burnout.