“La llave para la evolución de nuestra especie está en no creer que nuestro cuerpo es sagrado, en aceptar que es simplemente carne cruda, material. Podemos rediseñarlo como queramos, al igual que nuestra mente.”
Genesis P-Orridge
Si te cayeran del cielo un millón de dólares y pensaras en una operación de cirugía estética probablemente querrías acercarte a algún ideal de belleza clásico. ¿Pero qué ocurre si ese ideal de belleza es simplemente la persona que amas? ¿Qué ocurre si en esas operaciones vieras una oportunidad de parecerte a ella como a la imagen del espejo, fundirte con esa persona formando una sola carne y una sola alma?
Eso hicieron Genesis P-Orridge y Lady Jaye, los artistas que os presentaré en este artículo (quizá el más lisérgico que he escrito para Jot Down), al crear lo que llamaron el pandrógino: una sola entidad que trasciende el género y la individualidad. Ella alteró su nariz y barbilla para que se parecieran más a las de él; él se alteró pómulos y mejillas para acercarse al contorno facial de su amada. Luego vinieron los implantes en los pechos, maquillaje, peinado, vestidos, hormonas y más operaciones.
Para explicar qué hay detrás de este proyecto de amor quirúrgico tendré que hablar de una de las mentes más creativas del pasado siglo, un artista en transformación constante que ha estado siempre a la vanguardia en todo lo que ha realizado, desde crear la música industrial hasta ser pionero de la modificación corporal. “El arte debe modificar lo que la gente percibe como realidad”, dice Genesis, el WTF hecho carne.
La génesis de Genesis
La inclasificable criatura que conocemos como Genesis P-Orridge nació en 1950 en Manchester llamándose Neil Andrew Megson, un niño tímido y asmático, querido por sus padres pero brutalmente maltratado en el colegio. Su padre era músico, su madre actriz y su abuela médium: las obsesiones del Genesis adulto pueden rastrearse en su infancia.
Al cumplir los 21 se cambió el nombre a Genesis P-Orridge, el pseudónimo con el que había grabado su primer disco, la marcianada Thee Early Worm. Ese mismo año conoció al mismísimo William Burroughs, que le puso en contacto con el mayor inspirador intelectual de la generación beat: Brion Gysin. Genesis afirma que sus maratonianas charlas diarias de doce horas con el cultísimo Gysin fueron el equivalente a su educación universitaria… De Brion aprendió a utilizar la técnica dadaísta del cut-up: reordenar textos de forma semialeatoria extrayéndoles nuevos significados, de forma similar a lo que hacía Tristan Tzara en los años veinte sacando palabras de un sombrero para componer poemas… O lo que se suele hacer hoy en día con la frigopoesía de imanes de nevera. Genesis utilizaría el cut-up para componer canciones, escribir poemas, realizar collages fotográficos… Y acabaría empleándola para reordenar los elementos de su propio cuerpo.
Poco antes de entrar en contacto con Gyson, P-Orridge había conocido a artistas como el alucinado Jesus Joheero o la performer, secretaria, actriz porno y bailarina Cosey Fanni Tutti. Juntos crearon a finales de los sesenta el legendario grupo teatral COUM Transmissions, en el que dieron rienda suelta a sus impulsos creativos más salvajes con performances (o happenings, como se llamaban por aquel entonces) cada vez más bestias. Cogieron elementos del accionismo vienés y el arte de acción y le añadieron automutilaciones, sadomasoquismo extremo, sexo explícito, abundante derramamiento de sangre, vómito y orina, violencia, enemas, monólogos alucinados y toques de ocultismo, todo ello regado con música atonal sonando a un volumen físicamente insoportable. Entretenimiento familiar, en suma, una década antes de que La Fura dels Baus empezara a destripar pollos.
Hoy en día casi todos los artistas que recurren a la ultraviolencia sólo buscan «epatar al burgués» sin mayores aspiraciones artísticas o políticas (salvo excepciones como la interesante Diana Pornoterrorista). Pero en los setenta la obra de COUM Transmissions era nueva y fresca, y su estilo salvaje y desinhibido causó un gran impacto en el mundo del arte. Su último espectáculo tuvo lugar en 1976 y se llamó Prostitution, con el subtítulo «paradigma de las condiciones generales bajo el capitalismo». Levantó un escándalo considerable, y en un discurso involuntariamente cómico el diputado tory Sir Nicholas Fairbairn se refirió al grupo como «destructores de la civilización». Genesis estuvo de acuerdo con esta frase, y en su enorme colección de memorabilia guarda con cariño recortes de prensa con las palabras del político. Quién sabe si se le pasó por la cabeza bautizar como Wreckers of Civilization al grupo de música que estaba a punto de nacer…
El cartílago palpitante
Cuatro componentes de COUM Transmissions (Genesis P-Orridge, Cosey Faney Tutti, Peter Christopherson y Chris Carter) crearon Throbbing Gristle en 1977. Acababa de nacer un grupo tan inclasificable que hizo nacer un nuevo estilo por sí mismo: la música industrial, que más tarde seguirían grupos como Cabaret Voltaire, SPK o mis amados Einstürzende Neubauten. A Monte Cazazza, amigo y compañero de fechorías de Genesis, se le ocurrió el famoso slogan del sello discográfico Industrial Records, creado por ellos mismos: “Industrial music for industrial people”. Genesis sintió un extraño orgullo al entrar a mediados de los setenta en una Virgin Megastore y hallar por primera vez un estante dedicado a la «música industrial» ¡Que sólo contenía discos de Throbbing Gristle!
El grupo siguió empleando imágenes de porno duro o de campos de concentración, pero el acento estaba puesto ahora en la música. El uso de ritmos subterráneos y explosiones de energía destructiva mezcladas con melodías inesperadas, música electrónica y samples pre-grabados (en eso, como en tantas otras cosas, fueron pioneros) convirtió a Throbbing Gristle en un grupo de culto cuya influencia puede encontrarse en los lugares más insospechados. Por ejemplo, en las desconexiones territoriales de TVE en los ochenta, durante las que podía oírse esta Distant dreams (part two).
El mismísimo Ian Curtis, alma de Joy Division, era amigo de Genesis y fan de Throbbing Gristle, especialmente por la canción Weeping, que describe un intento de suicidio de P-Orridge. La misma noche en que se disponía a suicidarse, Ian llamó por teléfono a Genesis y le cantó la canción entera: P-Orridge sospechó algo raro pero no pudo evitar lo inevitable.
El espíritu tocacojones de P-Orridge le llevó a jugar con las expectativas del público y explorar de forma satírica y coñona las contradicciones de la cultura popular. Por ejemplo: sabiendo que sus fans acabarían imitando su forma de vestir, adoptaron un estilo cada vez más paramilitar y agresivo, llegando a encargar ropa militar a una modista parisina (“la incongruencia definitiva: pantalones de camuflaje de alta costura”, comenta Genesis). Pero un día salieron al escenario completamente vestidos de blanco, beatíficamente sonrientes e iluminados por una luz etérea. El público enfundado en ropa militar, negra o postapocalíptica, que había venido preparado para los berridos de canciones brutales como Discipline se quedó completamente desconcertado. Objetivo conseguido.
El inquieto P-Orridge sintió de nuevo ganas de transformarse. Así que preparó el terreno para desbandar Throbbing Gristle y empezar sus siguientes proyectos, un plan que empezó a gestarse tras un mal viaje un tanto particular.
La única ley será “haz lo que quieras”
Antwerp, 1977. Durante una actuación especialmente intensa, Genesis bebe una botella entera de whisky y engulle fragmentos de corteza de un árbol cercano, que resulta ser venenoso. En pleno arrebato místico, coge un fragmento de metal oxidado y empieza a grabarse signos en el pecho, sin dejar de hablar a toda velocidad en lenguas desconocidas. Al vomitar no sólo se libra de la planta venenosa, sino también de los esteroides que debe tomar desde la infancia por tener destrozadas las glándulas adrenales. Borracho, drogado, herido y sin su medicación, Genesis es llevado al hospital y dado por muerto… Pero un perfectamente consciente P-Orridge estaba aprovechando el momento para vivir un trance místico.
No era la primera vez que ocurría algo similar, pero en aquel momento Genesis se dio cuenta de que para este tipo de experiencias necesitaba otro entorno en el que pudiera repetir estos trances sin dejar el marrón de su posible cadáver a un galerista o un organizador de conciertos. Así pues, en 1981 Throbbing Gristle desapareció (aunque los miembros originales volverían a reunirse de 2004 a 2010) y Genesis creó el grupo de música experimental Psychic TV y la organización mágico-espiritual Temple ov the Psychik Youth [sic, la grafía es en homenaje a Aleister Crowley], abreviado como TOPY.
TOPY fue un intento de difundir las ideas de ocultistas como Austin Osman Spare pasadaspor el prisma muy particular de las alucinadas intuiciones espirituales de P-Orridge. Su objetivo era proporcionar, citando a Genesis, «formas alternativas de ver el universo, desarrollar el potencial del cerebro y el cuerpo y la habilidad de tener control sobre uno mismo», todo ello mediante magia sexual y sellos cabalísticos, una especie de mandalas. Casi puedo oír a Jodorowsky aplaudiendo en la esquina (de hecho Genesis es fan de El Topo)
William Burroughs escribió sobre «el enigma del número 23», de supuesta importancia mística para eventos significativos (uno de ellos, el casi hundimiento de la carrera de Jim Carrey en 2007 con la horrenda The number 23). Throbbing Gristle ya tenía una canción sobre el asunto, The old man smiled, y Psychic TV intentó (y casi logró) publicar 23 discos durante 23 meses el día 23 de cada mes, así que parece lógico que TOPY adoptara el 23 como número sagrado. Genesis pidió a los miembros de TOPY que el día 23 a las 23:00 dibujaran un sello mágico combinando tres fluidos corporales (orina, sangre y semen/flujo) y dos mechones de cabello, adjuntando una íntima fantasía sexual, y lo enviaran todo a su casa. Es difícil decir cuántos centenares de sellos recibió, o qué hizo con ellos.
Mientras tanto Psychic TV funcionaba muy bien como grupo de música psicodélica. En 1981, el mismo año de la fundación de Psychic TV, Genesis P-Orridge se casó con Alaura O’Dell, que pronto cambiaría su nombre a Paula P-Orridge. Con ella tuvo dos hijas muy alegres y espabiladas llamadas Caresse y Genesse, con las que Genesis tuvo oportunidad de mostrar su lado más tierno (abundan los testimonios que le describen como un padrazo). Ambas aparecieron en uno de los videoclips más famosos de Psychic TV, una impagable versión del Are you experienced? de Jimi Hendrix.
Durante la segunda mitad de los ochenta Genesis tomó un papel más activo políticamente: dio discursos en la Sociedad Anti-Apartheid, participó en manifestaciones por los derechos de los squatters, criticó los abusos policiales contra los gays y se metió en el mundo de las primeras raves semiclandestinas del Reino Unido (magistralmente retratadas en el documental High on Hope). En resumen, se convirtió en alguien incómodo para el establishment.
Febrero de 1992. En un ridículo similar al de Tom Cruise denunciando al FBI la película gore japonesa Flower of flesh and blood al confundirla con una snuff movie, la policía británica acusó a Genesis de asesino satanista comeniños tras ver una de las proyecciones que acompañaban los conciertos de Psychic TV. Creyendo que iban a encontrar mujeres secuestradas y esqueletos enterrados, una brigada de 23 (!) agentes del Escuadrón de Publicaciones Obscenas asaltó la casa de Genesis y la registró de arriba abajo, incautando centenares de vídeos, discos y libros (curiosamente lo único que no tocaron fue el montón de sellos mágicos empapados de fluidos corporales de los miembros de TOPY).
Genesis y Paula estaban de viaje en Nepal junto a sus hijas, y aunque las acusaciones eran una obvia gilipollez, no se atrevieron a volver a Inglaterra por miedo a que les quitaran la custodia. Así que decidieron mudarse a San Francisco. Allí Genesis colaboró en performances multimedia con Timothy Leary, y apareció esporádicamente en grabaciones de Hawkwind o Merzbow. Los EEUU fueron buenos para la creatividad y malos para el matrimonio: no tardó en llegar un áspero divorcio.
La elegancia de Lady Jaye
Jacqeline Breyer (alias Lady Jaye) nació en 1969, se educó en una escuela católica y se vio atraída siempre por la imaginería religiosa. Se convirtió en enfermera, cuidando a niños con enfermedades incurables, era voluntaria en organizaciones de defensa de los animales… Y también hacía de dominatrix profesional de vez en cuando.
La primera vez que Genesis P-Orridge vio a Lady Jaye fue en una mazmorra.
Una noche se quedó a dormir en casa de una amiga, la escritora Terence Sellers, que compaginaba su vocación de poetisa con la gestión de un local sadomaso situado junto a su apartamento. Genesis dormía en el suelo de la mazmorra, cubierto con una sábana, cuando le despertaron un ruido y una luz blanca. En el portal vio a una mujer guapísima vestida con ropa de los años sesenta (venía de una fiesta burlesque) que empezó a desnudarse delante de él para calzarse un ajustado traje de látex negro de dominatrix. «¡Mis dos estilos favoritos reunidos en una sola mujer!», pensó Genesis. Fue amor a primera vista.
En su primera cita Lady Jaye vistió a P-Orridge con elegante ropa de mujer (“soy su Barbie particular”, pensó), y le decoró las rastas que llevaba en esa época con pequeñas joyas y adornos de plata. Sólo hacía unas horas que se conocían y Jaye ya sabía leer al impredecible Genesis como un libro abierto. No tardaron en casarse y empezar a vivir una extraña y preciosa historia de amour fou.
Genesis vivió entonces un renacimiento artístico, tanto con su proyecto de spoken word Thee Majesty como con una nueva encarnación de Psychic TV llamada PTV3 (a la que atrajo poco a poco a Lady Jaye, reacia a meterse en el mundo de la música).
Un día de 1995 Genesis se pasó a saludar a sus amigos de Love and Rockets, que grababan en casa del productor Rick Rubin. Un fallo eléctrico provocó un incendio del que todo el mundo escapó ileso excepto P-Orridge, que sufrió graves heridas y por poco perdió el brazo izquierdo… Un tribunal le concedió más de un millón y medio de dólares como indemnización, así que de repente Genesis se encontró por primera vez con el dinero suficiente como para embarcarse en sus desconcertantes proyectos de modificación corporal.
“Queremos convertirnos en una sola persona”
Para ir abriendo boca (nunca mejor dicho) lo primero que hizo fue cambiarse todos los dientes por implantes de oro. Pero el grueso del dinero lo empleó en las operaciones de cirugía estética que permitieron el nacimiento de la entidad pandrógina Breyer P-Orridge. La idea que desarrollaron Genesis y Jaye fue parecerse lo más posible el uno al otro, no sólo mediante operaciones sino también con maquillaje, vestidos, peinado. “Queremos convertirnos más y más en una sola persona, fundirnos en uno”.
Las tetas fueron fáciles: Genesis siempre había querido ponerse tetas.
O al menos desde que vio la película Belle de jour en pleno viaje de LSD… En cierto momento de la peli Pierre Clémenti (que interpreta al novio de Catherine Deneuve) se pone tetas, y Genesis se dijo en ese momento que tarde o temprano se pondría pechos “metálicos o de oro”. La pandroginia le dio años más tarde la oportunidad de probar con materiales más tradicionales… Ambos se pusieron implantes de silicona en los pechos el mismo día, en su décimo aniversario, y despertaron en el hospital con las manos entrelazadas. «Casualmente ya teníamos el mismo número de zapatos, pero ahora podemos compartir también lencería», dijo Genesis.
Con los genitales hubo más dudas. Cuando le preguntaban a alguno de los dos cómo era su vida sexual, contestaban: “la de cualquier pareja casada normal”. En una entrevista, Lady Jaye comentó: “Si pudiera añadirme un pene fácilmente lo haría mañana mismo, pero no entra en nuestros planes que él pierda ninguna parte del cuerpo que pueda dar placer”.
Durante las operaciones se tomaron fotografías que sirvieron como base para varias exposiciones, incluyendo la muestra itinerante Painful But Fabulous, que recorrió Estados Unidos y varias capitales europeas. En esa época conocieron a la documentalista Marie Losier, a la que hicieron una curiosa propuesta: querían documentar no sólo el proceso de creación del pandrógino, sino también su vida cotidiana como pareja y sus idas y venidas con PTV3. El resultado tras siete años de trabajo fue un documental magnífico llamado The ballad of Genesis and Lady Jaye, que tuvimos oportunidad de ver en el pasado festival In-Edit.
El rayo de Zeus
En el discurso de Aristófanes durante el Banquete de Platón (ilustrado en la película de culto Hedwig and the angry inch) se cuenta que en la antigüedad los humanos eran «andróginos»: seres con dos caras, cuatro piernas y cuatro brazos. Irritado por su arrogancia, el divino Zeus los dividió con su rayo, creando seres incompletos con el permanente anhelo de encontrar su mitad perdida. Probablemente la pandroginia de Genesis Breyer P-Orridge volvió a molestar a Zeus en las alturas, porque su castigo fue rápido y brutal.
Lady Jaye había padecido un cáncer estomacal, pero una combinación de dieta estricta y cuidados médicos lo había mantenido bajo control. Sin embargo, no fue detectada una afección cardíaca subyacente. Y tras un par de días extrañamente melancólicos, Lady Jaye cayó fulminada y murió en brazos de su otra mitad el 9 de octubre de 2007.
Genesis quedó absolutamente destrozado, con el único consuelo de que parte de Lady Jaye continuaría viviendo en su interior. Tal como grabaron en su epitafio: “S/he is (still) her/e”. Hoy en día Genesis está reinventándose poco a poco, centrándose en la escritura y el arte plástico, tocando el violín junto a Tony Conrad y promocionando el documental que ha acabado siendo un testimonio de su historia de amor truncada por un trístisimo e inesperado final.
Sólo me queda despedir el artículo con una apropiada canción de Psychic TV, una agridulce y melancólica declaración de amor llamada White Nights.
Un artículo estupendo, enhorabuena . Sólo una pequeña corrección : el actor que denunció al FBI la película gore japonesa pensando que se trataba de una snuff movie fue Charlie Sheen y no Tom Cruise. Por otra parte, me gustaría ver ese documental, ¿sabes si se editará en España?…
Muchas gracias por las felicitaciones y por la corrección: tienes toda la razón, he confundido al enano cienciólogo con el borracho juerguista…
Desgraciadamente no tengo ni idea de si el documental se acabará editando en España: sé que empezó como un proyecto especialmente independiente y de bajo coste hasta para los estándares más bien precarios del cine documental, así que no sé qué planes tendrán la directora y la distribuidora. Estaré atento a ver si me entero: su éxito en el pasado In-Edit (aunque no se llevara el premio) supongo que ayudará…
Pingback: La balada de Genesis y Lady Jaye, dos cuerpos fundidos en uno Posted
Al igual que con el articulo de Einstürzende neubauten, me he metido de lleno en el personaje a traves del viaje que has propuesto…de verdad enhorabuena…
Pensad en Flattr ( http://flattr.com/ ) o algo así para el magazine, algunos estaríamos encantados de aportar lo que fuera para que esto continuara a este nivel…;))
Gracias por la enhorabuena! :) Tanto Blixa Bargeld como Genesis P-Orridge son personajes muy extremos pero a la vez curiosamente cercanos: es un placer escribir sobre ellos.
En lo de incluir Flattr o algo parecido en Jot Down ni pincho ni corto, eso que lo decidan los mandamases de la revista…
Hola Josep, me ha gustado el artículo, pero ya me podías haber linkeado la entrevista de la que sacas las declaraciones ;)
Un abrazo.
Ig.
Me alegra que te haya gustado! :) Genesis es todo un personaje, todo lo que pueda hacer para darle a conocer será poco.
Y disculpa si te ha molestado que no incluyera explícitamente un enlace a tu entrevista (en efecto fabulosa y más profunda de lo que suele ser habitual): deja que lo haga aquí para quien quiera saber más del bueno de P-Orridge:
http://ignacioreyo.wordpress.com/2011/02/07/genesis-p-orridge/
Y ya que estamos en ello, incluyo aquí algunas de las otras fuentes de las que he extraído declaraciones de Genesis para redactar el artículo, y que recomiendo consultar a quien quiera conocer más a fondo su historia:
– La larga entrevista «mágica» de Jay Kinney, en que habla entre otras cosas del follón en Antwerp (ojo al fragmento en que habla de los Aghori Babas que conoció mientras la poli registraba su piso):
http://www.chaosmatrix.org/library/chaos/topy/gpo-int.txt
– La de Bizarre Magazine, poco antes de la muerte de Lady Jaye:
http://www.bizarremag.com/entertainment/interviews/6441/genesis_p_orridge.html
– Declaraciones sobre las performance salvajes de COUM Transmissions:
http://brainwashed.com/tg/coum.html
– Una en dos partes para RocknRollDating: recomiendo especialmente la segunda parte y el fragmento en que habla de Lady Jaye:
http://www.rocknrolldating.com/interview/genesis-p.-orridge-pt.-i
http://www.rocknrolldating.com/interview/genesis-p.-orridge-pt.-ii
– Y por supuesto las declaraciones que hace a Marie Losier durante el documental… Que he citado de memoria de lo que recordaba del In-Edit: que yo sepa no puede conseguirse aún (¡si alguien sabe cómo, que lo comente y me hace un favor!).
Un abrazo!
Muchas gracias Josep.
Ná, tranquilo, todo solucionado. Genesis es fascinante, sin duda, y una persona muy, muy dulce. Al menos, eso es lo que sentí hablando con él/ella por teléfono.
Pude ver a Psychic TV en el primer concierto que dieron tras el fallecimiento de Lady Jaye Breyer…su primer concierto tras la tragedia, un año después…Hubo momentos muy emocionantes. Eso sí, se me rompió el mito de NY como ciudad transgresora, estaba lleno de hipsters y poco más. El futuro fue fantástico que dijo aquel…y con Giulliani esa ciudad murió un poco.
Posdata: te dejo un par de vídeos que he encontrado de ese concierto. Poco después tocaban en Madrid y Barna, fue en el 08. ¡Un abrazo!
http://www.youtube.com/watch?v=X1i-KERaAmo
http://www.youtube.com/watch?v=Fheor–MkqA
Pingback: Jot Down Cultural Magazine | Todo lo que necesito saber lo aprendí leyendo El péndulo de Foucault
Maravilloso artículo! Gracias por compartir está inusual y muy desconocida historia de este personaje multifacetico, talentoso y temerario, saludos desde México!
Pingback: Música militar para la juventud psíquica: histeria e historia de Throbbing Gristle (Play Guitar Studio Magazine, 08/08/2018) | Miss 0'ginia
Pingback: Todo lo que necesito saber lo aprendí en "El péndulo de Foucault" - infomag.es