Los lectores que huyen de los temas bélicos, las crónicas de batallas o los ensayos histórico-militares dejan a veces escapar la oportunidad de enfrentarse a lecturas que van mucho más allá del mero texto informativo y que, ocasionalmente, resultan tan impactantes, absorbentes y fascinantes como la más impresionante de las novelas. Tal es el caso de Trafalgar: biografía de una batalla, que describe el enfrentamiento a cañonazos entre las flotas británica y franco-española frente a las costas de Cádiz, en 1805. Aparte de la importancia histórica de la batalla en sí, que básicamente impidió a Napoleón invadir Inglaterra —algo que ha marcado el devenir del mundo hasta nuestros días—, el libro de Roy Adkins es una narración apasionada e impactante de lo que suponía para aquellos hombres hacer frente a los peligros del océano y la crueldad del combate naval. Tras un breve inicio centrado en inevitables consideraciones históricas y estratégicas, el libro se lanza a narrar la batalla y es cuando el lector, cualquier tipo de lector, es irremisiblemente prendido.
El gran mérito de este trabajo es lo mucho que recurre a citas directas de testigos de la batalla, obtenidas de cartas escritas en la época o de diarios y memorias, lo cual termina dándole un barniz de autenticidad y realismo a la crónica de la batalla que hubiese sido imposible de conseguir solamente con una narración lineal del estudioso autor. Casi podría decirse que en Trafalgar: biografía de una batalla nos llegan a salpicar la sangre y las astillas de madera de tan inmediatas que pueden resultar las imágenes encerradas en sus páginas. Incluso por momentos resulta difícil distinguir el libro de una película a causa de la vivacidad con que se nos transmite todo lo que aquellos hombres sentían; cada miembro amputado, cada golpe de bala o cada barco que empieza a hundirse ponen al lector en tensión. Al contrario que otros libros sobre batallas que se limitan a un recorrido táctico o a consideraciones político-estratégicas, esta obra nos pone en el pellejo de los hombres y mujeres que participaron de un modo u otro en el sangriento enfrentamiento de Trafalgar. Se nos muestra su esfuerzo, su miedo, su dolor, su piedad y su sentido del honor, y nos da una idea muy convincente de lo que suponía estar a bordo de uno de aquellos buques expuesto a los cañonazos, los disparos y las amenazas del mar. El libro, además de contar la evolución de la batalla en sí, dedica su última parte a la escalofriante narración de una pavorosa tormenta que, justo cuando había terminado el enfrentamiento, azotó a ambas flotas durante varios días y que mostró la otra cara de la guerra: los soldados que un día antes se mataban entre sí se vieron impulsados a rescatarse mutuamente ante el aterrador temporal que estaba destruyendo a los dos bandos por igual, mientras la población española de la costa hacía lo que podía por salvar la vida de marineros españoles, británicos y franceses, sin distinción entre amigos y enemigos.
Si hay un ensayo histórico y bélico capaz de capturar la atención incluso a los lectores más reacios a leer esta clase de libros, es sin duda éste. Emocionante, cautivador, ágil y repleto de testimonios inolvidables. Fervorosamente recomendado.
¿El libro se centra únicamente en la batalla o también aborda causas y consecuencias del conflicto?
Gracias por la reseña, genera ganas de comprarlo :)