Si la luz azul es o no dañina para nuestros ojos, es un tema bastante recurrente desde hace tiempo. Me sirve de excusa para tratar este asunto el reciente Premio Nobel de Física concedido a los descubridores de los LED (diodos emisores de luz) azules, Akasaki, Amano y Nakamura. Como físico aplicado que soy, les confieso que estoy feliz de que el Nobel de este año haya ido a algo tan prosaico y entendible como son las «bombillas LED» azules. Mientras que los LED rojos y verdes existían desde mucho tiempo atrás (quién no recuerda los típicos pilotos rojos de muchos aparatos), sin LED azules no podía haber luz blanca ni todas sus aplicaciones en iluminación o pantallas. Los científicos japoneses (Nakamura se nacionalizó norteamericano tras muchas disputas con su empresa en Japón) consiguieron fabricar los LED azules y con ellos una plétora de aplicaciones.
Pero es posible que haya quien se pregunte que si a pesar de tan importante reconocimiento disponer de estas fuentes pequeñas y baratas de luz azul puede resultar peligroso para nuestra salud. Antes de ir con un poco de detalle sobre esta polémica, déjenme recordarles unos conceptos simples de física (que pueden saltarse los especialistas). La luz visible son ondas electromagnéticas que tienen una longitud de onda de entre unos 400 (azul) y 700 (rojo) nanómetros (milésimas de milésimas de milímetro). Otras radiaciones electromagnéticas solo se diferencian de la luz en el valor de su longitud de onda, mucho más larga en las ondas de radio y miles de veces más pequeña en los rayos X. Como la longitud de onda está relacionada inversamente con la energía de la onda, nadie se esconde de las ondas de radio, que son de poca energía, pero se toman muchas precauciones con los rayos X, ya que al ser más energéticos son claramente dañinos.
Próximos a la luz azul, los rayos ultravioletas (UV) son invisibles para nuestros ojos y tienen una longitud de onda menor. Están presentes abundantemente y pueden causar quemaduras en la piel y daños en los ojos. Por eso es una práctica necesaria, y aceptada universalmente, protegerse adecuadamente de la radiación ultravioleta. En el caso de la piel, evitando exposiciones prolongadas al sol y usando cremas protectoras y en el caso de los ojos llevando gafas de sol que absorban los rayos UV antes de llegar al ojo.
Pero en los últimos años han aparecido sugerencias que recomiendan no solo protegerse de la luz ultravioleta, sino también evitar la luz azul. En este caso no hay un consenso en la comunidad científica, existiendo dos tendencias enfrentadas sobre si la luz azul nos resulta dañina o por el contrario es necesaria, e incluso beneficiosa.
Es conocido que un exceso de luz azul puede dañar nuestra retina. Por ello, nuestros ojos están equipados de forma natural con inteligentes mecanismos de protección. Tanto el cristalino, la lente interna del ojo, como un pigmento que protege la retina (pigmento macular) son amarillentos, lo que hace que una buena parte de la luz azul que llega al ojo sea filtrada impidiendo que la mayor parte alcance las células sensibles en la retina. Sin embargo, hay quien piensa que se debería «ayudar» a los ojos en la tarea de filtrar la luz azul con lentes o lentillas específicas amarillas que eliminaran la mayor parte de la luz azul que llega a la retina. O en el caso de las tabletas o teléfonos colocando filtros que eliminen parte de la luz azul, justamente proveniente de los LED azules de las pantallas.
Pero por otro lado, está bien demostrado que cuando nos encontramos en entornos ricos en luz azul, nuestro ánimo mejora. Por ello en una posición opuesta, hay quien promueve el uso de lámparas especiales con mayor proporción de luz azul, especialmente en personas de edad avanzada, en las que el cristalino se vuelve más amarillo y por ello de manera natural reduce la presencia de luz azul en la retina.
¿Cómo se ve sin azul? Si se quita, o se reduce, la presencia de azules, las escenas se vuelven menos vivas y, en mi opinión, más aburridas. La foto de abajo es un ejemplo aproximado de una escena de playa real (con azules) y filtrada eliminando la mayoría de azul. Una persona con un cristalino muy amarillento vería la escena más parecida a la imagen de abajo. Con la edad, y de manera paulatina, vamos perdiendo proporción de azul en la retina. No estoy seguro que yo quisiera eliminar todavía más…
Conociendo que la luz azul anima, no es extraño que muchos lugares de trabajo, o de compras, tengan una iluminación con luz más «blanca», lo que indica más proporción de azul, para promover la actividad. O que prefiramos iluminaciones más «amarillentas», es decir con menos azul, cuando queremos descansar.
¿Y que pasa con la luz azul de las tabletas o los teléfonos? Para explicarlo les muestro unas imágenes de mediciones que he realizado en un iPad. Una foto de detalle de los píxeles (los azules son un tercio) y una comparación de los espectros (colores emitidos) por el iPad (con la pantalla en blanco) comparado con el de la luz reflejada por una hoja de papel blanco en un día nublado. El pico de emisión que aparece a unos 450 nm en el iPad se corresponde a la componente azul. Aunque es más intenso en comparación al del espectro solar, al ser muy estrecho, la cantidad de luz azul con longitudes de onda por encima de 400 nm no debe ser muy diferente en ambos casos. El porcentaje de azul que nos llega de una tableta es por tanto similar al que tenemos al leer en una habitación iluminada por la luz indirecta en un día nublado. Aunque no he hecho la medida, supongo que si se trata de día soleado la cantidad relativa de azul será mayor.
¿Es la luz azul como un «ogro» que va dañando silenciosamente nuestra retina o una compañera a la que estamos bien adaptados, que nos hace la vida más agradable y nos estimula positivamente? Creo que no tenemos aún una respuesta absoluta, pero en mi opinión, una protección adecuada de la luz ultravioleta y que nos permita disfrutar de los colores azules es un compromiso suficiente y saludable.
Me parece que ni el aumento artificial de luz azul ni su eliminación son necesarios en la mayoría de las personas. ¡No es tan ogro el azul como lo pintan!
Muchas gracias, profesor Artal. Esto me aclara muchas cosas sobre los protectores de pantallas.
Muy interesante!
De hecho, tras una pequeña investigación un tanto superficial, más que ser una luz a evitar o a potenciar, diferentes longitudes de onda, y por tanto colores, son más adecuados que otros para depende qué actividades.
Por ejemplo, según diferentes estudios, la luz amarillenta no se utiliza únicamente para ambientes descansados, si no que una luz en tono amarillo-anaranjado, de aproximadamente unos 570nm de longitud de onda, provoca una sobreproducción por parte del cuerpo humano de la sustancia llamada melatonina, sustancia que induce al sueño y al cansancio…. Obviamente provoca muchas más cuestiones en cuanto al ritmo cardíaco y tensión muscular….
De la misma forma, hay ciertos estudios que enuncian que una luz de longitud de onda aprox. de 480nm (color azul turquesa) puede favorecer la oxigenación de las células así como mejorar la actividad sexual…..
Me parecia buen apunte/dato a aportar!
Y como quedan despues de leer esto, claramente equilibrado, todos los que quieren vendernos los a incautos consumidores plasticos de proteccion para los telefonos y tabletas?
Por lo que voy leyendo sobre el tema, creo que hay dos aspectos distintos respecto al posible efecto perjudicial para la salud del exceso de luz azul.
1) Por un lado, una posible mayor prevalencia de enfermedades asimilables a una excesiva exposición a los UV: problemas con la retina, enfermedades de la piel, cáncer(!)…
2) Por otro lado, estaría la inducción de un estado de vigilia en momentos de descanso, escenario éste que sería típico del uso en la cama de una pantalla, con lo que aumentaría la fatiga y perjudicaría al sueño.
Por lo que veo, el punto 1 es improbable a falta de pruebas rigurosas que lo confirmen. Pero ¿qué me diría del punto 2? Da la impresión que sus palabras tienden a confirmarlo. Yo, por si acaso, en mi tablet elijo un modo de lectura nocturna de fondo oscuro con letras claras, ambos en suaves tonos marrón/naranja.
Yo uso desde hace un tiempo en mi ordenador un software que cambia la temperatura del color de la pantalla depediendo de la hora. Desde que lo uso, he dejado de tener problemas para dormir, y los dolores de cabeza cuando me tiro muchas horas delante del ordenador casi han desaparecido.
A mi me ha hecho efecto el deshacerme de la luz azul, por lo menos por las noches, aunque igual estoy influenciado por algún articulo que leí con anterioridad a usar el software en cuestión.
Manuel, Juan Carlos,
Muchas gracias por vuestros atinados comentarios. Muy cierta la puntalizacion sobre el asunto 2 (Manuel).
Creo que es una buena practica (simple y barata) el modificar el brillo y/o el color de la pantalla por la noche. Sobre todo a quien le funciona… a mi, la verdad, aun con el brillo al maximo casi todas las noches me despierto de microsueños con el golpe de la tableta al caer sobre mi cabeza…
Pablo
Totalmente de acuerdo en la conclusión de que la luz azul no es tan «ogro».
Buen trabajo Pablo!
Si a otros problemas de la vida se aplicara la razon y el analisis de los pros y contras, como se hace aqui, no nos iria mejor?
JotDown, deberiais colocar estos articulos en «sociedad» o «politica»! gracias.
«Luz azul» se lee igual del derecho y del reves, así que es tan peligroso como un abad que le da de comer a una zorra. Y eso es así.
Me encanta este detalle… no me habia fijado! Gracias. Pablo
Gracias por compartir el artículo tan interesante. Nos clarifica muchas cosas a los optometristas.
Un saludo!
Interesante… Pero lamentablemente inútil. Los que creen en esa historia no van a dejar de creer, por mas que se les argumente. Anti vacunas, homeopatofilos, enemigos de la luz azul… No atienden a argumentos.
Por cierto: Adán dabale arroz a la zorra.el abad, nada.
Fui demasiado tajante con lo de inútil, perdón. Claro que es útil. Y ameno, y riguroso. Solo inútil para desasnar.
disiento de estas afirmaciones. Los ojos no están preparados para mirar directamente a la luz. La luz del sol, como la luz de una habitación o lampara, no incide directamente en los ojos, si no que nos llega por reflexión. Cuando miramos directamente a un dispositivo móvil, la luz incide directamente en nuestros ojos, con lo que la cantidad de luz azul es bastante mayor que por reflexión. El cristalino, no es amarillo, es como su nombre indica, cristalino, o sea, transparente. Se va haciendo amarillo con la edad, por la cantidad de luz que va filtrando, entre otros factores. La apoptosis, o muerte de la células ganglionares de la retina, está demostrada científicamente, y estas al ser parte del sistema nervioso central, no se regeneran, por lo tanto, producen perdida de visión irreversible.
A parte de todo esto, el uso de dispositivos a partir de ciertas horas de la tarde, produce alteraciones en el sueño, debido a que la «hormona del sueño» se paraliza por la entrada en activación de » la hormona de la mañana» por la incidencia de luz azul.
Con todo ello, creo que es importante proteger los ojos de la incidencia directa de luz azul, máxime a los niños, que desde que pueden mover sus deditos, utilizan los dispositivos, si no queremos tener, adultos con cataratas a los 35 años y con patologías retinianas a los 50.
Siento esta disertación pero creo que es fundamental la protección. Igual que hace 20 ó 30 años la protección solar brillaba por su ausencia hasta que empezaron los malditos melanomas y entonces la población se echó las manos a la cabeza y hoy no se entiende que alguien tome el sol sin protección.
Mas vale prevenir que curar.
Elena, muchas gracias por tu amable comentario a mi ultima entrada.
Solo me gustaria hacer un par de puntalizaciones.
Los efectos de la luz solo tienen que ver con su intensidad y longitud de onda. Dos luces del mismo color e intensidad son indistinguibles (si no consideramos la polarizacion) cuando provienen directamente de la fuente o se han reflejado.
El cristalino de los niños tambien bloquea el paso de la luz ultravioleta y azul a la retina. Con la edad esta absorcion aumenta.
Un saludo, Pablo
Gran y valiente articulo.
Eso de la prevecion esta bien, pero llevada al extremo no abririamos los ojos, no? Por si acaso.
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Buenos días, soy Antonio Barba e investigo sobre el efecto de la luz azul sobre el comportamiento y otras variables fisiológicas. En primer lugar, quiero decir que me resulta muy interesante le artículo que has expuesto. En segundo lugar me gustaría matizar sobre lo que se sabe y habla de la luz azul.
Hace unos años se descubrió en nuestra retina un tercer foto-receptor denominado células ganglionares intrínsecamente fotosensibles (ipRGC, para simplificar). Estas células son altamente sensibles a longitudes de onda corta, específicamente a la luz azul (470 nm aprox), y son una variante de las células ganglionares de nuestra retina. Estas células al activarse por la luz azul sintetizan un foto-pigmento denominado melanopsina. De ese modo, al sintetizarse dicho foto-pigmento en la retina, se mandan señales neuronales hacia un núcleo cerebral denominado Nucleo Supraquiasmático, centro de lo que se denominan ritmos circadianos. Dichos ritmos, son ritmos endógenos sincronizados con los ciclos de luz – oscuridad del contexto ambiental. Gracias a ellos, por ejemplo, estamos sincronizados para dormir cuando es de noche y estar alerta cuando es de día. Esto es debido a que con la luz azul las ipRGCs mandan señales para que se inhiba la secreción de melatonina, hormona responsable de que tengamos sueño. Sin embargo, la luz azul no solo inhibe la secreción de melatonina a través del núcleo supraquiasmático, sino que dicho núcleo conecta con muchas áreas de nuestro cerebro. En varios estudios se ha demostrado cómo la luz azul produce efectos beneficiosos sobre el estado de ánimo (como comentas en tu artículo), pero también a nivel comportamental, es decir, parece aumentar el grado de alerta y mejorar el rendimiento en distintos dominios cognitivos como la atención o la memoria. No obstante, es importante saber que la luz azul puede tener tanto efectos crónicos como agudos. Y que la administración de luz azul al margen de la ambiental debe controlarse y manipularse en los momentos del día adecuado. Entiendo la preocupación que algunos muestran sobre el empleo de dispositivos en la noche ya que al inhibir la secreción de melatonina el sueño se ve perjudicado y dichos efectos a largo plazo, a través del uso continuado de dispositivos durante la noche, puede acarrear problemas de salud. La conclusión a la que quiero llegar es que según el momento del día y la duración de las exposiciones a largo plazo la luz azul puede mejorar tu estado o empeorarlo. Gracias a los efectos beneficiosos de la luz azul se tratan trastornos como el jet lag, trastornos del sueño (trabajos nocturnos) o problemas de estado de ánimo (como el trastorno estacional emocional o SAD en inglés). De igual modo si se concluye que la luz ejerce efectos beneficiosos sobre el comportamiento se podrá aplicar sobre personas que tengan problemas en diferentes procesos cognitivos para facilitar la rehabilitación cognitiva y mejorar su calidad de vida. Sin embargo, es importante saber hasta qué punto ha de ser administrada ya que se trata de un agente externo que nosotros manipulamos, es decir, podría decirse que se trata de un fármaco que produce efectos a tales dosis en tales cantidades, etc. En líneas generales la luz azul no es mas que un sincronizador que informa al cerebro del momento del día que es y de los procesos que debe llevar a cabo. Espero haber arrojado un poco de “luz” al asunto :)
Sufro glaucoma y por curiosidad instale el f.lux en windows , cuando este entró en escena inmediatamente sentí en los ojos un descanso ,es cierto que es extraño se ve con tonos como rosados pero al usarlo durante dias mis dolores de cabeza y la tensión bajaron mucho ademas que se nota casi al instante incluso cuando llevas horas con el filtro y lo quitas notas que esa intensidad ataca de alguna manera ,he notado mejoría tambien uso filtro en el movil es un descanso para la vista en la cama . que puede ser que regulando la intensidad de brillo sin el filtro casi sea parecido tal vez pero esos filtros calman como cuando usas gafas de tono marrón y te da serenidad ,aun asi son automáticos a la zona horaria y sus noches ,yo seguire testeando
Muy interesante, alguien me dijo q en el trópico no era recomendable usar este tipo de cristal. Me pueden dar una explicación acerca de esto?