Empecé a sospecharlo cuando vi a decenas de oficinistas asomar a través de los ventanucos de sus cubículos para aplaudir con sincero entusiasmo a las hordas de rústicos que periódicamente arrasan la ciudad con la precisión de un metrónomo de la zafiedad. Todo aquel que ha sobrevivido a esa etapa aterradora y oligofrénica de la vida sabe que un adolescente es un resuelto fascista en potencia, y más si vegeta en esa consigna de medianías que es la universidad española. Pero en pocos rincones del planeta, salvo quizá en la yerma Atenas y por supuesto en las urbes del Islam, la barbarie ha adquirido como en Barcelona categoría de rasgo cultural distintivo. De folklore, en definitiva. En Barcelona, los ciudadanos jalean al hombrecillo que le pega fuego al coche del vecino con la misma pasión con la que una de nuestras más anodinas beatas progresistas de rebeca y hamburguesa de tofu suplicaba en noviembre de 2000 que nos sentáramos a charlar con los terroristas tras el atroz asesinato de Ernest Lluch. A la cobardía y a la más honda pusilanimidad moral frente a la ferocidad iletrada de los agros los barceloneses le llaman seny. Y luego se dirigen a la granja más cercana a engullir una ensaimada con nata, con la conciencia limpia como un quirófano, mientras dejan a su espalda el reguero sanguinolento de su podredumbre buenrollista, tolerante y participativa como si fuera la baba de un caracol henchido de autoodio.
La fascinación barcelonesa por la violencia no es una moda pasajera del siglo XXI. Ya a finales del XIX Barcelona era conocida como La ciudad de las bombas. Por aquel entonces no había anormal en la villa que a la menor ocasión que le presentara el azar no se propusiera reventar a unos cuantos de sus conciudadanos con una bomba Orsini, las preferidas por el anarquismo del momento. En una de las fachadas de la Sagrada Familia puede verse la escultura de un demonio que le entrega una de esas bombas a un obrero anarquista. La escultura se llama La tentación del hombre. Lo repetiré. La tentación del hombre. Ya ven cómo está el patio por estos lares. Para el catalán universal por excelencia, lo de reducir a fosfatina a tus congéneres entraba dentro de la misma categoría que las mujeres, la soberbia, el vino o la pereza. Un placer tentador como cualquier otro, ese de desmembrar al prójimo. Me abstendré de hacer comentarios sobre la legendaria y victoriana incapacidad catalana para el hedonismo. De ello es suficiente ejemplo la sardana, esa danza soporífera y rechinante que algún catalán desesperado debió inventar como sustitutivo del sexo a falta de chocolate. Sí diré, no obstante, que si la pirámide poblacional de la región no está hoy en día totalmente invertida es sólo gracias a la potencia procreadora de los charnegos. Ellos son los que nos salvan de convertirnos en un pueblo antiestético y enfermizamente endogámico como el vasco, esa estirpe de seres insólitos y toscos cuyo único mérito conocido consiste en la práctica de la reproducción por boinazo.
Uno de los que no pudo resistir la tentación fue un tal Santiago Salvador Franch. El 7 de noviembre de 1893, el susodicho tipejo se llevó por delante a 22 barceloneses e hirió a 35 más tras dejar caer una bomba Orsini sobre el patio de butacas del Teatro del Liceo. De hecho dejó caer dos, pero la segunda no llegó a explotar tras rebotar en las faldas de una dama a la que, supongo, debieron calmar tras el suceso con enormes trasvases de tila en vena. En algo hemos evolucionado: en julio de 2005, los herederos de Salvador Franch tan solo lograron desintegrar a Pretto, el perro labrador del TEDAX que intentaba desactivar una cafetera bomba en el Instituto Italiano de Cultura.
Pero no confundan esa fascinación barcelonesa por la violencia destripadora con algo parecido al coraje, la rebeldía o la fortaleza de carácter. Creo que no me equivoco si digo que Barcelona es la única ciudad sobre la faz del planeta Tierra que ha sido aplastada por todos y cada uno de aquellos que se han tomado la tediosa molestia de desafiarla. Dicho en plata: todo aquel que ha querido cepillarse la ciudad se la ha cepillado a placer cuando y como ha querido. Sin excepción, ya fuera el ejército de Navarra o un miserable atajo de perroflautas. Así que Barcelona es la única ciudad del mundo a la que no se le conoce victoria alguna, ni siquiera contra los más débiles e intelectualmente limitados de sus adversarios. “Son profesionales de la violencia”, dice el Conseller de Interior de la Generalitat de unos tipos cuya más brillante estrategia bélica consiste en cambiarse de jersey a media manifestación para que no los reconozcan. Si estos son los profesionales, imaginen cómo serán los amateurs. De ahí que, a la hora de celebrar, nos tengamos que conformar con celebrar alguna de las incontables veces en las que hemos sido derrotados.
Véase la siguiente lista.
Empezaremos por los tiempos de Maricastaña, para hacer boca.
Los cartagineses, durante la Segunda Guerra Púnica. Los romanos, a principios del siglo III dC. Ataulfo, en 415. El visir Al-Hurr, en 717. Almanzor, en 985.
Mucho más sangrantes y cercanas son la Guerra dels Segadors (1640-1652) o la Guerra de Sucesión (1705-1714), sonadas derrotas históricas que aún levantan ampollas por estos barrios. El general Espartero bombardeó Barcelona a placer en 1842. La represión de O’Donnell y el general Zapatero acabó en 1856 con más de 400 barceloneses muertos. Los anarquistas y los republicanos convirtieron Barcelona en la Medellín de principios del siglo XX sin mayor problema. Las tropas franquistas ocuparon la ciudad a finales de enero de 1939 con apenas una minúscula fracción de la resistencia que aún en ese momento, con la Guerra Civil totalmente decidida a favor de los fascistas, presentaba Madrid. Lean este párrafo escrito a finales de la Guerra Civil por el periodista del Times Herbert Matthews, al que cita Arcadi Espada en su artículo Liberación, caída, genuflexión: “Por amor a la República y a la democracia se debió combatir por Barcelona. (…) Había razones suficientes para la caída de la ciudad y sin embargo suscita resentimiento que los catalanes, a diferencia de los castellanos de Madrid, de los polacos de Varsovia y de los rusos de Estalingrado no escribiesen una página heroica para consignarla en la historia”.
De nuestro peculiar concepto del heroísmo ciudadano dan cuenta, sin ir más lejos, los casi 40.000 votos catalanes, la mayoría de ellos barceloneses, que recibió Herri Batasuna en las Elecciones Europeas de 1987, apenas nueve días antes de la matanza de Hipercor. Los barceloneses pidieron que ETA les matara… y ETA obedeció colocándoles una bomba en un supermercado. De ese mismo frenesí suicida nacen las pintadas que aparecieron por toda la ciudad tras los atentados del 11-S y que rezaban “Bin Laden, mátanos a todos”. De nuevo los terroristas obedecieron, aunque lo hicieron en Madrid. De dicho heroísmo nace también la connivencia, el apoyo y el respeto que demuestran plataformas, partidos, organizaciones no gubernamentales, asociaciones de vecinos e instituciones barcelonesas varias hacia los fanáticos religiosos que entierran en sacos a sus mujeres y las pasean de forma retadora por la ciudad, dos pasos por detrás de ellos, para demostrar que no ha nacido todavía el barcelonés con la suficiente autoestima como para impedírselo. O hacia las numerosas bandas latinas de delincuentes que en Barcelona han gozado del estatus de asociación cultural gracias a la generosidad de esa analfabeta conjunción galáctica de socialistas meapilas, independentistas pueblerinos y totalitarios comunistas que aquí se dio en llamar Tripartito. O la tirria con la que se ataca a los impecables y dignísimos Mossos d’Esquadra tras sus ya rutinarios enfrentamientos con las jaurías perrofláuticas, o con la que se les insulta en vivo y en directo, en plena calle y en sus mismos morros, cada vez que detienen a un ratero marroquí o desalojan una casa okupada. He buscado algún ejemplo similar de una ciudad que se haya entregado con similar ardor al lameculismo de sus verdugos y al desprecio de la ley, pero no he encontrado ninguno. Entiéndanme: los barceloneses no somos los inventores de la pulsión suicida, pero sí lo somos de la pulsión suicida colectiva elevada a categoría de arte. Tendrán que reconocer que alguien capaz de convertir la sumisión al bárbaro en una apología de la tolerancia es un espécimen realmente imaginativo. O increíblemente patético.
Por supuesto, un tipo que está pidiendo a gritos que lo pisoteen no puede ser la alegría de la huerta. Y de ahí un segundo rasgo cultural distintivo barcelonés. El resentimiento. La mala hostia. El lamento y el lloriqueo como único horizonte vital. El puto árbitro, siempre en la boca. El odio africano hacia aquel que osa levantar la cabeza por encima de esa masa amorfa de genuflexos suicidas. La vehemencia con la que en un mundo globalizado se vuelcan energías y dineros en la imposición de una lengua zombi mientras el tejido industrial y cultural de la ciudad emigra hacia prados madrileños e internacionales más verdes. El fervor con el que el barcelonés medio se entrega a la tarea de denunciar anónimamente a todas aquellas empresas y comercios que incumplen las leyes de normalización lingüística. La beligerancia con la que en Barcelona se obstaculiza la libertad de horarios comerciales. La cancha que decenas de acomplejados y provincianos medios de comunicación catalanes dan a cualquier forastero oportunista mientras ningunean a miles de profesionales locales con ideas, ganas y talento. Por eso cualquier emprendedor barcelonés tiene 100 veces más posibilidades de ser entrevistado por Wallpaper, Frame, Monocle, Wired o cualquier otra revista estadounidense o japonesa o británica que de aparecer en La Vanguardia, en Catalunya Radio o en TV3. Sé de lo que hablo: es mi terreno y podría listar decenas de sangrantes ejemplos.
De ahí también esa típica afición barcelonesa a reunirse multitudinariamente en rebaños quejosos por las imbecilidades más nimias y que ha convertido Barcelona en un inmenso manifestódromo abierto 24 horas al día para jodienda de los comerciantes y los profesionales que trabajan en el centro de la ciudad. Es el mito de la Barcelona reivindicativa, tolerante y participativa. Un mito que nació durante los Juegos Olímpicos de 1992 y que sale a relucir cada vez que se juntan cuatro barceloneses en la calle para reivindicar o aplaudir vaya usted a saber qué descabellada mentecatez que a nadie le importa un puto carajo. En realidad, los barceloneses participaron en las Olimpiadas del 92 en la misma medida en que lo hicieron los ciudadanos de Atlanta en 1996, los de Sidney en 2000, los de Atenas en 2004 y los de Pekín en 2008. Frente a tamaña obviedad, Barcelona sigue considerándose a sí misma la capital mundial del fervor ciudadano. Una capital que dice reunir en sus más ilustres manifestaciones más de un millón de ciudadanos mientras la empresa Lynce cuenta apenas 60.000. Estoy hablando de la del 10 de julio de 2010, la del “somos una nación, nosotros decidimos”. Una nación que decide pero que por lo visto no llega a llenar medio Camp Nou. Pero es sólo otro absurdo ejemplo. Hay muchos más.
¿Y saben qué? Quizá tengan razón. Quizá Barcelona sea la capital mundial de la manifestación y la cacerolada. Porque no hay nada más barcelonés que una manifestación o una cacerolada, un evento meramente estético, borreguil, declarativo, pasivo y estéril que no compromete a nada pero que permite sostener la ficción de que tú estuviste allí, hiciste algo y serviste a un fin superior. Aporreando una sartén. Paseando con el carrito del niño mientras tarareabas una de Carlinhos Brown. Boicoteando los eventos que podrían hacer que Barcelona entrara de una vez por todas en el siglo XXI. Aplaudiendo a uno que quemaba un container. Una pamema para pueblerinos aburridos y perezosos con mucho tiempo libre para el autoengaño por delante. La antítesis de la iniciativa personal y de la independencia de pensamiento. Un pasatiempo hipócrita y hortera para una ciudad infantiloide, menopáusica, quejosa, sin tensión ni espíritu ni afinación y que sólo es capaz de mover su presuntuoso culo gordo para suplicar que los vándalos la apisonen.
No había visto tanta bilis y xenofobia desde que un tal Adolf «ganó» unas elecciones.
Más bien es paletismo hispano. Es de aquella manera de ser español cobarda: aquel español que dice a otro: » eres un hijo de puta» el otro se rebota……y al instante el primero le suelta » es bromaaaa, no tienes sentido del cachondeo» ¡ Viva España!
Vaya, un artículo sobre Barcelona y ya nos escaqueamos y escurrimos el bulto …jeje…que raro que no apareciese el «paletismo hispano»; frente a la eterna «modernidad» Barcelonesa, …chico, podrías aparecer en el artículo perfectamente. Inocéncia genética.
Desde hace 20 años que dicen los nacionalistas españoles que Barcelona se hunde como el Titanic. No soportan Europa.
¿Por qué eres tan obvio y tan tonto? Tú y unos/as cuantos/as (por bobería giliprogre que no quede), ¿por qué no se paran un minuto a pensar? ¿Cómo va a ser xenófobo alguien que escribe desde dentro, que critica lo que ve en su propia sociedad? Salvo que, claro, el «Adolf» lo seas tú. Lo digo porque en la Alemania nazi a los pocos que se atrevían a criticar en voz alta lo que veían en el nacionalsocialismo, ya antes incluso de la Guerra, la maquinaria de propaganda de un tal «Joseph» los tildaba de «alemanes que se odiaban a sí mismos». ¿Se trata de eso, entonces, de que como el autor de este artículo critica a los perroflautas y pone en su sitio a la carcundia nacional(ista)-socialista, entonces es que se odia a sí mismo y es racista con sus conciudadanos? Me da que la inteligencia la tienes en busca y captura, a ver si la encuentran
La sombra de Sostres es tan alargada: la letal y zafia combinación de unas ganas desesperadas de epatar, una ignorancia sonrojante y un necio elitismo de clase. Le felicito.
Estupendo resumen de lo que es este artículo.
Sí, sí, el comentario de Ana es acertado, hay ganas de empatar, ignoracia y necio elitismo de charnego. Lo único que le reconozco es un buen ritmo de escritura y una gracia adolescente que no se nota en sus entradas
Estimulante reflexión de un tipo al que no estamos acostumbrados. Es un excelente síntoma que haya suscitado tanto rechazo, teniendo en cuenta el adocenamiento habitual. Afortunadamente no todos los barceloneses son tan ridículamente intolerantes a la sátira. Le animo a continuar en esa linea.
Menuda basura de articulo. Me encanta jotdown, pero esto se enmarca mejor en la gaceta que aqui.
Te has lucido.
Preciado Cristian:
A mayor abundamiento sobre la decadencia de Barcelona, decir que es hoy, tras Berlín, la capital progre de Europa. Y los progres a día de hoy, es bien sabido que no son más que unos paletos vestidos de Desigual. Una parodia andante de las ideas que dicen defender. Y si una ciudad de comerciantes pasa a serlo de progres subvencionados, la decadencia es inevitable.
La duda es ¿antes sí era moderna y abierta, y ahora decayó, o siempre fué un bluff?
Y estarás orgulloso.
Vaya sarta de sandeces.
En este articulo la metáfora es que un barcelonés escribe un artículo suicida, supongo.
Provocador… vale! pero ninguna de las críticas entran en argumentos; o no es una ciudad que jalea habitualmente la insurrección como estética pija?
pues por decir eso no hacáía falta insultar a los catalanes. ¿ Acaso la cultura española no es por antonomasia provinciana y cerrada?
Vaya, lo peor que he leído en meses.
Ni tan solo provoca.
Una basura en barna es la infesta plaga de diseñatas gafapastas encantados de conocerse que, en cuanto salen de su limbo de gilipolleces subvencionadas, ponen en evidencia su desconocimiento de la historia y de la vida.
Vete a Kabul a disfrutar de los suicidas.
Desde luego provoca. No hay más que ver la diferencia de respuestas entre este flojo artículo y la magnífica entrevista a Vicente Todolí.
Quizá lo que tú quieres decir que es provocación barata. En tal caso, la calidad de la provocación lo marca la calidad del provocado.
Si se lee el artículo mientras se oye de fondo el «Mr. Self Destruct» de Nine Inch Nails la sensación es tremendamente bestial. Bru-tal.
Hostia Irene, tienes razón!
Estoy por tomar un boli y matar a toda mi office y así cumplir con la profecía del artículo!
Felicidades por escribir un artículo tan implacablemente autocrítico. La gente estaría aplaudiéndote si esto lo hubieras dicho de España, dado que el autoodio español es un recurso fácil que la gente ya tiene asumido y que funciona simplemente porque muchos no se identifican con España.
¿Pero hacerlo con una autonomía o ciudad? Eso si que es atrevido, no te lo perdonarán.
Dado que no vivo en esa ciudad no sé hasta qué punto el artículo es exagerado o no (yo las veces que he ido allá he estado muy a gusto y me ha parecido bastante bonita, eso sí), pero algo que sí me llama la atención de Barcelona es la cantidad de okupas y saltimbanquis que hay por allá y las batallas campales que montan con temas como la antiglobalización y similares.
Es la ciudad perrofláutica por excelencia.
8 años de residencia allí (y 20 más a 30km) te pueden dar fe de que tiene razón. Sí, es un artículo brutal, ofensivo, duro, agresivo…pero real. La realidad a veces es así. En Cataluña, muy a menudo.
Cristian espero que una patrulla de impecables y dignísimos Mossos d’Esquadra te follen bién.
Y a ti que una panda de perroflautas destroce tu establecimiento u ocupe tu casa.
Felicitats nano, t’acabes de carregar tu solet el prestigi de tota una publicació online, es a dir, ironicament t’has convertit en l’objectiu de les teves propies crítiques.
Eso es el ejemplo de pluralidad que te gustaría? osea, un artículo que no te gusta, y se carga él solo a todo un medio, …mmm…por lo tanto el medio, a tu entender, no debería publicar más artículos que no te gusten, es decir, todos los artículos deberían ir en «una» linea, la tuya seguramente…!! Mmmm…yo creo que se puede no estar de acuerdo en muchas cosas,…pero en todo, en su conjunto? te digo algo, para medios monotemáticos y monoideológicos, tenemos TV3, RAC1, LaGaceta, LaRazón,…bienvenida sea la pluralidad y que un árticulo genere controversia, porque…una cosa…como duelen las verdades !!!
Me gusta Jotdown, entre otras cosas porque se puede leer artículos y entrevistas que no están encorsetadas por las limitaciones de los grandes medios de comunicación nacionales. Me gusta que de espacio a diferentes personalidades de todo el espectro político e ideológico y lo «agradezco»leyendo no sólo a los que están a priori más cerca de mi forma de pensar (el agradecimiento está entrecomillado porque quien gana con ello soy yo, puesto que aunque raramente cambie de opinión siempre es de agradecer ver otro punto de vista bien argumentado).
Sin embargo creo que este post pasa una línea roja. No se bien cuál, pero la «ironía» (y con este calificativo creo que soy generoso) no ampara todo. Aquí se pretende ofender y ridiculizar y a fuerza de ser reiterativo en ello creo que pierde toda la razón que los argumentos del autor pudieran tener. Sólo me queda una duda, ¿cuál es una ciudad modelo para Cristian?, o mejor aún, ¿cuándo una ciudad o comunidad fue modélica para él?
¿Acaso tiene algún mérito provocar por provocar? Una cosa es la provocación intelectual y otra la provocación zafia, de exhibicionista de gabardina. Y en cuanto a argumentar, ¿se puede argumentar con un aprendiz de Rush Limbaugh que supura bilis sólo para ganar notoriedad? Aplicar su estúpida lógica, sería una pérdida de tiempo: venga, vamos a discutir si deberíamos hablar de la barbarie de Barcelona como de la barbarie de una urbe del Cristianismo (con mayúsculas, como incorrectamente escribe Islam). Sobran Sostres y faltan mentes lúcidas y humildes. Una pena que Jotdown caiga tan bajo.
Si tan poco le gusta, no se que hace viviendo aquí.
Eso mismo le decían a Thomas Bernhard la panda de nazis austriacos entre los que vivía.
Editor de libros de arte y diseño…
Fotógrafo y Dj. Lo que todo un buen barcelonés ha de ser.
Vaya basura infecta.
Pero claro, será que no he entendido la fina ironía tras el artículo.
Y será porque los datos falsos me han despistado, como ese «De ese mismo frenesí suicida nacen las pintadas que aparecieron por toda la ciudad tras los atentados del 11-S y que rezaban ‘Bin Laden, mátanos a todos’.» Viví en Barcelona en 2001 y 2002, y no me suena haber visto ninguna pintada así. No niego que pudiera existir, pero eso de que aparecieron por toda la ciudad…
A que jode que te critiquen verdad? Pues ala, a tragar
Muchas de las respuestas a tu artículo confirman lo que dices. Atacar el narcisismo de los barceloneses es uno de los peores pecados que se puedan cometer. Esa gente no conoce la ironía ni acepta la crítica. Son falangistas.
¿Y los que no somos barceloneses ni catalanes y nos parece pura basura que refleja la mediocridad y las ganas de llamar la atención con que suple el autor su indigencia intelectual, también somos narcisistas y falangistas, no entendemos la ironía y no aceptamos las críticas? Una cosa es la ironía (para eso hay que ser mucho más sutil, inteligente y lúcido) y otra confundir la provocación con un vómito gratuito en la cara del lector.
Muy buen argumento, Ana, muy bueno. «Pura basura que refleja la mediocridad y las ganas de llamar la atención con que suple el autor su indigencia intelectual». No puedo estar más de acuerdo con usted.
Ay, querido Héctor, otro pobrecico estómago agradecido que aún no ha entendido casi nada de un artículo que es, sí, un desahogo, pero que es también mucho más, que tiene -algunos lo sabemos muy bien- una dimensión histórica qwue a Vd., me temo, se le escapa. Repase, si es capaz, y solo un poquito, lo que ocurrió en Barcelona entre 1936 y 1939, sobre todo 1939. Y desde entonces hasta hoy: hay una profunda miseria en la vida barcelonesa y catalana y sobre todo un despreciable ocultamiento de la historia. Pero Vd., Héctor, no tiene por qué preocuparse. Pensando como piensa, Barcelona es SU ciudad.
Muy bien Ana. Yo tampoco soy catalán de nacimiento, ni tan sólo español. Pero no hace falta porque cualquiera advierte en este artículo un rosario de sandeces que rozan el fascismo. Muestra su ignorancia y la tiñe de ironía. Su odio a la modernidad.
«Y de ahí un segundo rasgo cultural distintivo barcelonés. El resentimiento. La mala hostia. El lamento y el lloriqueo como único horizonte vital. El puto árbitro, siempre en la boca.»
«Por eso cualquier emprendedor barcelonés tiene 100 veces más posibilidades de ser entrevistado por Wallpaper, Frame, Monocle, Wired o cualquier otra revista estadounidense o japonesa o británica que de aparecer en La Vanguardia, en Catalunya Radio o en TV3. Sé de lo que hablo: es mi terreno y podría listar decenas de sangrantes ejemplos.»
Al Barcelonés le dijeron que la modernidad era ponerse gafas de pasta de colores, especialmente de rojo, y se quedaron tranquilos jugando con la plusa que se les iba formando en el ombligo mientras el mundo les alcanzaba y les adelantaba. Me gustaba Barcelona. Ya no. Es demasiada local.
Esto es un ejemplo de Terrorismo informativo.
Manipulador de datos y xenofobo, asi ves a los Barceloneses? supongo que es el odio el que te hace escribir tan mal.
Y esto entonces un ejemplo de terrorismo comentativo?
A usted esto no le parece xenófobo?
«Sí diré, no obstante, que si la pirámide poblacional de la región no está hoy en día totalmente invertida es sólo gracias a la potencia procreadora de los charnegos. Ellos son los que nos salvan de convertirnos en un pueblo antiestético y enfermizamente endogámico como el vasco, esa estirpe de seres insólitos y toscos cuyo único mérito conocido consiste en la práctica de la reproducción por boinazo. «
Un catalán metiéndose con los vascos? Nada nuevo bajo el sol. Siempre hemos tendio a los vascos como vanguardia de la reivindicación.
No será «nada nuevo bajo el sol» pero es xenófobo de cojones. Muy nazi.
Oiga señor Bolaño, un respeto, cómo que muy nazi? Muy catalán, y prou.
Oiga, señor comosellame, no me insulte; soy catalán y no conozco a ningún nazi. Bueno, sí, a los que se meten gratuitamente con vascos y catalanes.
Pues yo soy vasco y conozco un monton de nazis: suelen votar a Bildu (HB, Batasuna, EHAK, Sortu, etc, etc) y se han puesto moraos de gritar «ETA mátalos».
Eso si: luego van de progres abertzales por la vida.
Sobre el articulo en cuestion, sólo he ido de turista a Barcelona, pero desde la primera vez que fui, en 1995, a la actualidad, la cuesta abajo ha sido continua y sin frenos.
Un artículo que se desacredita a sí mismo aunque de hecho podría estar de acuerdo con algunas de las ideas que contiene. Lo que pasa es que al autor «le pierde la estética»: es muy fácil provocar por provocar en plan reaccionario, tanto como ser políticamente correcto. Ambas corrientes, aparentemente opuestas, se basan en la pereza intelectual y en el estar más pendiente de la reacción de los demás (aprovación o rechazo) que de estructurar un discurso coherente, agudo y original, que aporte algo. Una lástima. Es tan superficial como los medios que critica.
Efectivamente, amigo…
CONTRAARGUMENTOS. Dice usted: «cualquier emprendedor barcelonés tiene 100 veces más posibilidades de ser entrevistado por Wallpaper, Frame, Monocle, Wired o cualquier otra revista estadounidense o japonesa o británica que de aparecer en La Vanguardia, en Catalunya Radio o en TV3.» ¿No será así porque es más fácil tomarle el pelo a un corresponsal extranjero, que no conoce tan bien lo que se cuece aquí como los reporteros locales? Pregunto.
CONTRAARGUMENTOS. Dice usted: “Sé de lo que hablo: es mi terreno y podría listar decenas de sangrantes ejemplos.” Cite tan solo un par de ellos, por favor.
Creo que es usted un poco ‘punki’ -entiéndase el término tal y como lo entendía Johny Rotten y no como lo entienden ahora los que van de él- y por eso le gusta provocar exagerando algunos puntos de vista. Precisamente por eso me cae bien y me gusta leerle. Además toda exageración, como su propio nombre indica, se mantiene sobre una base auténtica.
Saludos.
¿Y nadie va a salir en defensa de la sardana? Hay que ver cómo somos…
Hay tres cosas que odio a muerte… la Tuna, las habaneras y la sardana. Si tuviera una ametralladora y captara alguna de esas manifestaciones, no sé si podría reprimir el impulso de apretar el gatillo y barrer con todo. Y de las tres, la que no puedo soportar sin poner los ojos en blanco mientras la cabeza se me gira del revés, en plan niña del exorcista, es ¡LA SARDANA! Y no sigo, porque me conozco…
Puedo protestar y protesto.
Las legiones romanas que asolaron -en un ataque sorpresa- Cartagonova salieron de Tarraco -la capital de facto de Hispania, al ser el cuartel de invierno de las legiones-, no de Barcino.
Aquel hecho lo considero como la primera guerra civil entre españoles, aunque eran ocupantes nosotros somos descendientes de ellos y de tantos otros que invadieron la Península.
Me hace gracia tanta beatería. Les voy a copiar algunos tweets al azar de aquellos lectores que andan rasgándose las vestiduras en internet por este artículo y a los que Jot Down anda contestando en su Twitter, con infinita paciencia. No he tenido que buscar mucho:
«Conozco a una tía que tiene cáncer de mama y cuando sale a cenar sigue pagando a escote.»
«Otro garrulo en el barça no, por favor. Con Valdés, Cuenca y Tello tenemos de sobras. Gracias.»
«Los del Mobile World Congress, Construmat y Alimentaria deberían dejar de fingir y organizar, sin más, un Congreso Internacional de Puteros.»
«Escuchar Roll the Dice mientras vas en la Renfe te hace entender cosas. Por ejemplo los atentados del 11M.»
«Me huele el pene a mano.»
«La mejor manera de convencer a los demás de que tienes la razón es matándolos.»
«Un prostituta argentina de 150 kilos me acaba de preguntar que si quiero pasar un rato agradable. Le he preguntado cuánto me pagaba.»
Y ahora ya pueden seguir ustedes con sus «oh, ah, qué escándalo, aquí se fuma».
La diferencia radica en que esos tuits son graciosetes y tú no. Si la consigna es provocar con chistecitos chuscos, desde aquí propongo humildemente a Jot Down que te despida y contrate a alguno de los tuiteros. Un saludo, magnífico magazine, felicidades.
¿Y usted qué sabe si a mí el señor Campos me hace o me deja de hacer gracia? Acostúmbrese a hablar en su nombre, no me sea totalitario.
En otro orden de cosas (o no), el autor busca provocar y lo consigue. Me remito al número de comentarios que están llegando a esta pieza.
Este tío es un genio.
¿Un genio por provocar? Provocar es muy fácil. Ponga a un neocon a escribir un artículo sobre Obama en el New Yorker: todos los lectores se echarán encima, y la noticia tendrá muchas visitas en la web, llena de comentarios. Provocar lo hace el indocumentado de Sostres cada semana. Que El Mundo tenga a Sostres para captar lectores es comprensible, pero Jot Down no lo necesita. Tiene prestigio; no necesita estos exabruptos navajeros. Los lectores pedimos algo más que un grito, queremos argumentos sólidos, y los que hay en este artículo son muy pedestres, tergiversados, reduccionistas y falaces.
No me fastidie querido Héctor y dígame que ha soltado unas cuantas carcajadas mientras leía el texto. Un poco de sensibilidad, por el amour de Dié.
El ‘amigo’ Sostres, por el contrario, es bastante más coñazo. O a mí me lo parece.
No es mi intención provocarle, pero, si le soy sincero, lo que he sentido al leerlo es vergüenza ajena. Sonrojo.
La diferencia radica? desde cuando necesitamos interpretes de la realidad, no podemos desentrañarla solos, que ya somos mayorcitos y ateos, gracias a dios, para que venga un cura a decirnos en qué o no qué radica la diferencia?
La diferencia radica en que esos tuits son graciosetes y tú no. Si la consigna es provocar con chistecitos chuscos, desde aquí propongo humildemente a Jot Down que te despida y contrate a alguno de los tuiteros. Un saludo, magnífico magazine, felicidades. [2]
Jajaja…
A los barceloneses les han dicho tantas veces que son lo más moderno de españa, incluso de Europa, que se lo han creído. Muchas ciudades quieren que sigan creyéndoselo, así las demás ciudades europeas tenemos una competidora menos, pero siempre hay gente como Cristian Campos que desmonta el engaño, creando el peligro de que la población barcelonesa por fin despierte. Cuanto más le crucifiquen desde su ciduad, los suyos, el peligro habrá quedado conjurado.
Claro, ahora resultará que un mindundi que se dedica al arte es el nuevo Mesías encargado de abrir las mentes de centenares de miles de catalanes que viven engañados. Barcelona es una ciudad populosa, cosmopolita y abierta al mundo; basta un vistazo a los datos de turismo para ser plenamente consciente de ello. ¿Moderna? Lo es. ¿Más que otras? Es difícil responder, hasta donde yo sé no existe un índice que cuantifique esta variable.
Lo que desde luego no merece son los calificativos que recibe de parte del polémico autor del artículo, tan subjetivos como provocativos. En virtud de los mismos -nulos- argumentos que esgrime, uno podría trasladarlos a Madrid o París sin el menor esfuerzo, tal es la «afinación» de la crítica. Porque todas las ciudades tienen sus más y sus menos (y Barcelona no es su excepción), pero aquí se comete el terrible error de regodearse en lo peor.
Y Barcelona es mucho más que eso. ;)
Comparar madrid con París requiere un elevado esfuerzo de imaginación. Puede que se parezcan en el elevado número de ministerios.
Esos mismos twitteros celebran las salvajadas de Andy Kauffman como «una ácida manera de colocar a una sociedad ante el espejo». Y, sobre todo, les parece sanísimo que Woody Allen llene sus películas con coñas sobre judíos. Intuyo que la razón es que a ellos no les parecen coñas.
El resumen es que nos gusta el bestialismo… siempre que sea otro el que ponga el orto.
¿Qué es un «atajo de perroflautas»? ¿Un senderillo por donde triscan alegres los saltimbanquis y sus mastines?
Atajo. Quizás le suene mejor atgarlic y pueda comprederlo mejor.
Un saludo
Hatajo. Hasta con faltas de ortografía escribe el señor editor, oiga. No se ha privado de nada.
Está aceptada sin hache. 6ª acepción. Repase señora Ana, repase.
Qué argumento más chusco: está aceptada ¡en la 6ª acepción!! ¿Es un chiste? No puede hablar en serio. El hatajo del que habla el texto va con hache (le guste a usted o no), aunque la RAE recoja tonterías como que «enervar» quiere decir «debilitar, o perder la fuerza». ¿Le suena?
Es todo un señor intelectual provinciano, como la mayoría de españoles
A ver, al chico le gustaría escribir como Espada, del que es uno de los lameculos oficiales, pero no se le ha pegado nada (y no será porque no lo ha intentado). Por eso se ha de conformar con citarle siempre que puede, por si el Maestro tiene a bien linkarlo en su blog de El Mundo.
Escribir, escribe como Sostres. El chaval no da para más, sólo hay que darse una vuelta por su blog para verlo. Ahora a buscar otra publicación donde pueda vomitar lo suyo otra vez.
Por fin un ad hominem como Espada manda.
Vaya, la has clavado.
Impressionant! He rigut durant tot l’article!
Estupendo, Cristian: gracias a tu artículo y las reacciones histéricas que suscita entre los folklóricos habitantes del oasis (he visto al menos a uno pedir que te follen… ¡los Mossos!), me siento hoy más a gusto que de costumbre con la decisión que tomé hace tres años de largarme de Barcelona.
Sobretot no tornis!
Via fora!!
Aunque discrepo en las formas, estoy de acuerdo con el fondo del artículo. Siempre he vivido en Barcelona y creo que es una ciudad sobrevalorada, triste, oscura, frustrada, sin alma, superficial, autocomplaciente, pueblerina y con pesima calidad de vida. He sido consciente de ello al visitar otras ciudades españolas. Todo ello sin entrar en el tema del nacionalismo.
Algunos dirán: «pero si Barcelona es preciosa (Sagrada Familia, Parque Guëll,…), pero si tiene mucha oferta cultural, pero si tiene magníficas comunicaciones, etc». Sí, para ir unos días fenomenal. Pero para vivir… En mi círculo, muchos de los que somos hijos de padre o madre no catalanes estamos deseando irnos de aquí. Otros ya se han ido. Otros no vienen. Ninguno se arrepiente.
Siento que no os podais largar de esta pésima ciudad. Entre todos podríamos hacer una colecta para pagar los gastos derivados de la carcel a la que estais sometidos. Espero que os podais aposentar en un lugar de las tierras hispanas donde el cosmopolitismo sea la flor de todos los días, un lugar no nacionalista donde sólo se hable castellano. Mala elección tuvieron tus padres.
Esa es vuestra solución: echar a todos los que no comulguen con vuestro pensamiento único. No os dáis cuenta que os tiráis piedras contra vuestro propio tejado. Estáis creando una sociedad cerrada que provoca que buenos profesionales (médicos, catedráticos, ingenieros,…) dejen de venir.
No busco un lugar dónde sólo se hable castellano. Me encanta aprender nuevas lenguas. Es una riqueza. Toda mi infancia he crecido con el club super3 y de hecho me resultaba extraño ver bola de drac o doraemon en castellano. Pero el problema es cuando se politiza una lengua y se utiliza para separar a las personas. Cuando algo razonable como que el bilingüismo de la calle se refleje en las aulas (y sí tb en los cines, la adm,…) es visto como un ataque a la patria o como una oscura conspiración para eliminar el catalán. Es entonces cuándo se provoca que haya gente que se sienta como un extranjero en su casa y que no se sienta identificado con el concepto de catalán que el nacionalismo quiere imponer.
Con lo fácil que sería centrarnos en lo que nos une y no en lo que nos separa.
Aún reconociendo que el artículo en sí es un acto de violencia, negar que Barcelona tiene un problema de permisividad con la barbarie es negar la evidencia.
Lo injusto del artículo es achacar a Barcelona ser la capital mundial de este problema, cuando occidente viene del Mayo del 68, ha pasado por Davos, Bolonia, Roma, París y Londres y ahora está con Atenas.
Otra cosa diferente es que ese mundo progre/nacionalista de salón predomine y hasta gane elecciones, y por tanto se den situaciones como en las que la mujer del que fue jefe de los antidisturbios durante el tripartit se declarase “Antisistema” …
Échenle algo que leer a ese «agent provocateur»:
http://blogs.lavanguardia.com/berlin/?p=250
Yo les diría que no deben tomarse muy en serio esas referencias al carácter sin solución de continuidad de los barceloneses desde hace 2200 años, sobre todo porque el artículo no va acompañado del correspondiente estudio científico que demuestre la existencia mayoritaria de un gen de la flojez en los habitantes actuales y que pueda relacionarse con los encontrados en el cóccix de algún ibero desenterrado al que hayan decidido llamar Pau.
En fin, a Cristian no le gustan los habitantes de la ciudad en la que vive. Tampoco es para ponerse así. Con que no le nombren hijo predilecto creo que será suficiente.
Muy acertado tu comentario. El autor del artículo seguro que se declara antinacionalista furibundo, pero su argumento es profundamente nacionalista, en el sentido de que sugiere esa continuidad del carácter catalán (derrotista, cobarde, lo que se quiera) desde los tiempos de los cartagineses (!!!!) A Convergència le encantará semejante argumento. ¡Es el gen catalán!
Bueno, yo estoy más por creer que no se cree ese argumento y que lo dice de coña para que haya quien se vaya a buscar en la wiki algún acto heroico que poner enfrente o algo así.
Comentario vacío de contenido pero necesario por mi parte (el mío, digo): +1000 a tu explicación.
Que esta denuncia de la permisividad con la barbarie la firme el autor de ‘1.000 ideas for graffiti and street art’ no deja de tener su aquel.
Dear Cornelius, no había encontrado una comparación tan ridícula desde la de peras y manzanas de la señora botella. Está usted bien, quiere un cafe con sal?
Me ha parecido notable que alguien que considera que participar en una manifestación autorizada es «arrasar la ciudad» publique un vademécum consagrado a explicar cómo pintar sobre el mobiliario urbano. Eso es todo. Por lo demás, me encuentro perfectamente, gracias por el interés. Puede guardar el café con sal para su profesor de gramática.
Hombre, algunos elementos del retrato que haces de Barcelona encajarían también en unas cuantas otras grandes ciudades del mundo, pero es verdad que en Barcelona éstos se nos ofrecen juntos y revueltos.
Flipante. Jamás habia visto vomitar tanta bilis sobre un papel y luego publicarlo tan tranquilamente. Espero que al menos se haya quedado a gusto.
Por mi parte, ya ha añadido su nombre a la lista de autores a los que no vale la pena ni mencionar.
Pueden hacer el favor de trabajarse un poco más la prosa? Vomitar bilis o la variante vomitar tanta bilis está más sobada que el chichi de la Bernarda.
Estará sobada pero es bien cierta en este caso.
Espero que no caigamos en la tentación, que les veo venir, de comparar nuestra folclórica y peletilla, rural Barcelona con la cosmopolita Berlín. No seamos ridículos que esto lo leen al otro lado de los pirineos, per favó.
No, con compararla con Madrid es suficiente, ciudad provinciana de coleta nacionalista donde las haya.
Osgualdo, hay que viajar un poco más allá de las ramblas, del campnou, de una ciudad donde el museo más visitado es el del Barça, con eso está dicho todo.
Para criticar Madrid, ya estamos los madrileños, pero si hay algo que no la caracteriza precisamente es el nacionalismo. No se me escapa que ante la opinión de un barcelonés sobre su ciudad no hayas hecho otra cosa que hablar de «paletismo hispano», «provincianismo español» y arremeter contra Madrid sin venir a cuento. Curioso. ¿Si naces en Barcelona y criticas tu ciudad eres un «paleto hispano»? Hablando de provincianismos… Por mucho que nos empeñemos, el homo antecessor no portaba banderas y las fronteras, al igual que las razas, no son más que meras convenciones. Las sociedades llevan siglos siendo fruto de la mezcla, muy a pesar de los defensores de ese concepto tan irrisorio de la «raza pura aria».
En el fondo, yo «cri qui» todo el cabreo viene de que no ha escrito el artículo en catalán.
Es un gustazo leer algo tan políticamente incorrecto e incendiario hoy en día, pero aun más las gazmoñas reacciones y comentarios de los guardianes de las esencias nacionalistas y de una mal entendida y dañina tolerancia que no es sino el síntoma más patente de ese enfermizo relativismo nihilista tan del gusto de nuestra más acendrada progresía.
Sí, sí, es un gustazo. Como leer a Sostres, igual.
Senyo Bolaños, deje de emprenyar, per favo.
¿A quién he «empreñado»? Pido perdón.
Basura, asquerosa corrección política.
Bravo, Cristian. Imagino que habrás recibido los comentarios a puerta gayola. No podía ser menos.
Los barceloneses, nacionalistas y no nacionalistas, están embrutecidos, lobotomizados por el nacionalismo. Generalizo porque el porcentaje de gente sensata es ínfimo, apenas perceptible.
Me largué de Barcelona hace quince años. Fui la primera persona de mi facultad (mejor dicho: de mi escuela universitaria) que pidió hacer las prácticas fuera de Cataluña. El primero. 1997. Aproveché para no volver. Lo conté el otro día en tuitez y me llovieron unos cuantos insultos. Gente amable: debían de esperar que me fuera muy bien más allá de la franja, porque no parecían muy entusiastas con la posibilidad -remota, claro- de que volviera. Huelga decir que recibo los exabruptos con una gran sonrisa. Es como jugar a las máquinas de los bares sabiendo que te va a tocar. Echas la moneda, suena la musiquilla y te forras. Un placer.
Supongo que se fue a un rincón de España donde el nacionalismo brilla por su ausencia ¡ Viva España!
Se equivoca, pollo. Y sí: ¡viva España!
¿Me equivoco? entonces también hay nacionalismo donde se aposenta. Lo siento, espero que sólo sea nacionalismo español, el del bueno, el que pagamos entre todos cantidades infaustas de dinero para prevalecer la identidad hispana provinciana y ser la cola de europa.
Menos mal que no está todo perdido en la capital de Cataluña, esa hermosa ciudad llamada Barcelona. Tantos años de nazionalismo la han paletizado «ad nauseam»
Mi enhorabuena al autor.
He vivido en Madrid y el nacionalismo español latente no me dejaba dormir, me ahogaba tanto provincianismo disfrazado de normalidad. Cuando fui a Europa me di cuenta de que los españoles en general son considerados paletos, y con razón.
Si criticas Barcelona es porque quieres alabar indirectamente Madrid. Otro lector del Marca.
Barcelona siempre ha sido nacionalista, incluso en época de Franco. Es normal siendo la capital de Catalunya, pero aún así son más nacionalistas todas las ciudades españolas. Madrid se lleva la palma en este sentido, abarratoda de signos españoles. Por eso la capital española es tan provinciana
Se llaman ministerios. Tienen a mal hospedarse en la capital.
entonces está bien, mientras hablen castellano y hagan el gandúl, que para eso pagais los catalanes. ¡Viva España ! ¡ Viva Arcadio Espada!
Barcelona era franquista.
CiU creció fichando a los alcaldes franquistas, rápidamente reconvertidos al nuevo régimen.
El político que salió con más «pasta» del franquismo fue un tal Jordi Pujol. Me refiero al Soley, al padre del que fardaba de Lamborghini.
No tengo ni idea de que Madrid estáis hablando, pero yo llevo toda la vida en esta ciudad, no tengo un pelo de nacionalista y, afortunadamente, años después sigo enterándome repentinamente de la procedencia de la gente con la que convivo y trabajo porque aquí nadie te pregunta de dónde vienes, a no ser que tú lo vayas diciendo. Valoro muchísimo la autocrítica a todos los niveles y no deja de sorprenderme esa actitud del «y tú más», que no sirve más que para delatar las miserias propias. La capitalidad, con sus banderas y ministerios, la regalo a quien la quiera.
CONTRAARGUMENTOS. Dice usted: “Porque no hay nada más barcelonés que una manifestación o una cacerolada, un evento meramente estético, borreguil, declarativo, pasivo y estéril que no compromete a nada pero que permite sostener la ficción de que tú estuviste allí, hiciste algo y serviste a un fin superior.” Pues para ser tan barcelonés, se han visto manifestaciones muy similares en Madrid y en Valencia. ¿Sugiere usted que es mejor no hacer nada y quedarse en case mientras te recortan la sanidad y la educación? No sé yo si su argumento se sostiene (bueno, sí lo sé: no se sostiene por ningún lado. Y sorprende que en la revista no haya editores que no frenen textos de una indigencia intelectual tan flagrante; que mezcla datos, anécdotas y los fuerza para que encajen en una teoría reduccionista y completamente descabellada. )
Senyó Bolaños, deje de emprenyar y de llamar a la censura. Para no gustarle lo comenta con una profusuón admirable. Cambie de canal y prou. tan dificil es?
¿Que deje de llamar a la censura? ¿Me está usted amenazando? Cómo se las gastan por aquí. Pensaba que podía opinar todo lo que quisiese siempre que no faltase al respeto a nadie. Pero, vaya, si amenazan, ya me lo pensaré.
Senyo Bolaños, no sé en qué parte del comentario pasó de ofesnor a ofendido. Por favor, no ofenda llamando a censurar nada. La censura es mala. Pero mala, mala. Gracies.
No es cierto. Yo he intentado contestarle más arriba y no me ha sido posible. Creo que enlazando un determinado número de respuestas ya no se puede añadir ninguna más. Así que nuestra conversación se tendrá que quedar ahí. Un último comentario al respecto: no se sonroje tanto y ejercite la sonrisa.
PD: Y tampoco sea paranoico, que ya empieza usted a ver amenazas en donde sólo hay sugerencias. Creo.
Este texto paródico provoca porque no habla tanto de los barceloneses en general, sino de un especimen que también padecemos fuera, pero allí florece más.
Hablo de los santurrones que se creen que mean colonia y mantiene la sonrisa beatífica ante las peores atrocidades. Y cuando los tratas con la misma arrogancia y condescendencia con la que tratan a los demás les falta tiempo para montar en cólera.
Esto me recuerda cuando una coruñesa que concursaba en Gran Hermano dijo que hablar gallego le parecía bruto, y aquí se montó la de dios es cristo. Por una opinión de una choni. En Gran Hermano. Y no comparo al autor con una choni, sino que digo que cada cosa hay que leerla en su contexto. Este artículo, como los que suele publicar, son una larga hipérbole. Parte de un dato real y lo deforma en el Callejón del Gato.
En madrit també hay grifos con vertmut de reus en alguns bares. o no se ha fijado senyó Bolaños? Convierte eso en producto madrileño? Hágase un entrepá, per favo… con unos arguments mas obvis.
¿Y a mí qué me cuenta?
Oigan, yo asisto a este asunto con frialdad pero hay algo que me incomoda. ¿Nadie se ha fijado en la cantidad de comentarios que se dirigen a los editores para que, como mínimo, retiren el texto y eviten la publicación de futuros escritos similares?
Veo por aquí a muchos a los que les «duele Jot Down».
Yo no tengo ningún temor a que el díscolo Cristian me convenza así que no necesito que los editores tomen medidas profilácticas para protegerme.
Lo que quiero decir es que por mí no lo hagan. Sigan ofertando sus artículos que cuando yo me case de discrepar con ellos, sencillamente dejaré de leerlos.
Suscribo completamente lo dicho. ¡Viva la pluralidad y el humor intereconomico!
Veo que sigue usted mis consejos de mascletero. Pero créame que aún sigo esperando el artículo sobre «Ir al cine es una gilipollez, lo que mola es chuzarse en casa a base de Campari». Le veo enormes posibilidades.
Señor Pedro Torrijos… posibilidades? es usted agente inmobiliario? Llega tarde, esa burbuja petó. no future, terminator.
Muchos petos
Uy no, a mí la los edificios me dan mucho reparo, lo mío son las tetas de silicona.
Le veo posibilidades al artículo. De hecho, creo que hablaré con mi editor a ver si le puedo convencer de escribirlo yo mismo.
Disculpe que no le devuelva los besos, pero es que mi mamá no me deja experimentar contacto físico con desconocidos; de momento me limitaré a un afable alzamiento de cejas si no le importa.
Decía un tal Alberto Einstein que «Si no chocamos contra la razón nunca llegaremos a nada». Pues eso. Vuelvan a leer despacio, reflexionen y comenten razonadamente, que esto parece una perrera.
Fabuloso artículo. Me he reído mucho con él y más todavía con gran cantidad de los comentarios indignados (esta palabra cada vez significa menos).
La penya catalana que se indgna lleva un Torcremat dentro. Lo que pasa es no se dan de cuen, o no lo quieren asumir.
Parece estar más indignada la peña charnega que vive presa en esta ciudad nacionalista, entre los barrotes de baja autoestima.
Osgualdo, ¿tiene es usted una mente colectivista?
Por otra parte, no se dice peña sino penya…
Bueno, y lo del tal Bolaños es de lo más divertido que llevo leído en meses. ¿Le pagan los de Jotdown?
Muchas gracias. Un saludo.
Otro para usted, compadre. Y no se ofenda tanto. Respire. Que Cristian Campos sólo es un Lydon que come butifarra. Con calma :)
El nacionalismo es el opio del pueblo. Mandamientos para ser un catalán de pro: 1º Si falla algo en Cataluña la culpa es de «Madrit» porque no nos da el pacto fiscal. 2º Repetir 10 veces al día «España nos expolia» hasta que parezca convincente. 3º Si algo va bien en Cataluña es gracias a la Generalitat. 4º El catalán está en peligro de extinción, lo que justifica cualquier discriminación positiva. 5º Si alguien sugiere recortar los gastos identitarios (lengua, 6 canales tv, …) es porque es un nacionalista español. 6º Recordar siempre que los españoles tienen como única ocupación durante todo el día planear cómo joder a los catalanes.
fer, ese comentario es a mi entender el del típico nacionalista español que solo ve la paja en el ojo ajeno. No veo más paletismo en ningún otro lado, salvo en algunos nacionalistas catalanes.
Te cambio algo de los mandamientos:
1º Si falla algo en Cataluña la culpa es de “Madrit” porque no nos da el pacto fiscal. – La culpa es nuestra por permitir según qué cosas, como que paguemos las fiestas de nuestros corruptos, las de los corruptos de otras regiones y las de los ciudadanos de éstas.
2º Repetir 10 veces al día “España nos expolia” hasta que parezca convincente.
Llámalo como quieras
3º Si algo va bien en Cataluña es gracias a la Generalitat.
¿Dónde vives? (Quién te ha explicado eso?
4º El catalán está en peligro de extinción, lo que justifica cualquier discriminación positiva
Cualquier discriminación, no. En peligro de extinción, si
5º Si alguien sugiere recortar los gastos identitarios (lengua, 6 canales tv, …) es porque es un nacionalista español.
Somos muchos nacionalistas los que pensamos lo mismo. Pero, ¿porque seguir pagando los servicios de otros mientras hemos de recortar los nuestros. ¿Sabes cómo funciona todo en Alemania?
6º Recordar siempre que los españoles tienen como única ocupación durante todo el día planear cómo joder a los catalanes.
En absoluto .Muchos se conforman con meternos el dedo en el ojo o despreciarnos
Un saludo
He vivido toda mi vida en Figueres y Barcelona. Mi pareja es de Girona. He estudiado en la UB. Por tanto sé de lo que hablo perfectamente.
En Cataluña no existe la autocrítica. Ej: El Tripartit dejó un déficit de más de 11.000 millones de euros y resulta que los recortes (según Mas Colell) son culpa de que no se ha ejecutado la DAd 3ª del Estatut (referente a inversiones del Estado en Cataluña). Y lo increíble es que la gente se lo traga.
Los argumentos del «expolio» de España a Cataluña son de 1º de primaria. Entonces si la ciudad de Barcelona genera el 30% del PIB de Cataluña ¿Tarragona, LLeida y Girona le expolian? ¿los demás barrios de BCN expolian a Sarrià-St Gervias?¿El IRPF y el IVA que se recauda en Cataluña lo pagan sólo catalanes?
¿Es normal que haya 6!!! canales de tv públicos y se recorte en sanidad? Me da igual si es en Cataluña, Andalucía o China.
No hay peor ciego que el que no quiere ver.
¿Vivir en Figueres y Barcelona te da más o mejor información que la que pueda tener yo? (Soy de Barcelona)
Eso de Mas Colell NUNCA se ha dicho así, es fácil manipular información.
Veo que entonces no has leído los libros de 1º. El problema no es «expolio» como lo planteas. El problema es que hay Comunidades que aportan mucho al estado y reciben poco. Y continuamente. Solidaridad si, caradura no. Además, las inversiones de los presupuestos estatales no se cumplen. Se presupuesta una inversión total de 10 y se ejecuta 3 (no digo que sean cifras reales aunque el hecho lo es)
No , no es normal lo de los 6 canales. ¿Esto es autocrítica?
¡A ver si necesitas gafas y no lo sabes!
Se dice así cada sesión del Parlament de Catalunya. Mira las actas.
Como por ejemplo:
http://www.parlament.cat/activitat/dspcp/transcripcions/14_mocio_politica_fiscal.pdf
Ah se me olvidaba: «El catalán está en peligro de extinción» jajjajajajjajaa ¿Quién te ha explicado eso?
Según el Institut d’Estudis Català (en un artículo de 21 diciembre 2011) hay 10 millones de catalanoparlantes en el mundo.
Cada día me digo 50 veces a mi mismo: La culpa del deficit catalan no es Madrid , ni de los españoles; es de los catalanes.
Ahora ya me siento más español, abierto, y tolerante. Ya soy menos nacionalista ¡ Viva España!
¿En qué mundo?
Preguntéselo a ellos: http://www.iec.cat/activitats/noticiasencera.asp?id_noticies=382 Supongo que suman: Cataluña, Andorra, Islas Baleares, Valencia, l’Alguer y el Rosellón.
Perdón: «pregúnteselo»
“la igualtat només serà possible si s’aconsegueix la plena sobirania política”
Esperemos que entonces se pueda utilizar el español con normalidad.
Sin algunas de las leyes de normalización, si, desaparcerá.
Respecto al IEC: Cuando conviene se da el 100% de veracidad al que tiene una opinión contraria y cuando no conviene, son «ciegos que no quiere ver» Con los comunicados de ETA pasaba lo mismo en determinados medios y partidos.
JAJAJAJA Cristian Campos. Algún día, todos los lanzallamas se fabricarán así. Me descubro.
Lo que se está demostrando es que en seis horas esta parida va a ser el artículo con más comentarios de la historia de la revista, lo cual demuestra que su usuario medio es mucho menos selecto de lo que se cree.
El experimento ha sido todo un éxito.
Hala, ahora a meterse con los lectores.
Bravo.
Creo que Christian ha llegado tarde a una cita por culpa de una manifestación, no se lo ha tomado muy a bien y le ha salido este artículo tan moderado, dónde se remonta a los romanos para argumentar que los barceloneses somos una mierdecilla. Supongo que a Christian lo que le gustaría es que se persiguiera cualquier manifestación ciudadana con la saña que el dictador sirio aplasta a su oposición. La propongo que se vaya a vivir a Siria donde podrá disfrutar de lo lindo y que nos deje en paz a los barceloneses que somos gente pacífica y tolerante mayormente.
Vaya, se te ha llenado esto de beatillas.
Qué gente tan carca, ¿no?
¿Alguien se imagina una reacción de furia comparable si se escribiera un artículo similar sobre Madrid?
Yo no.
¿Que no? Mire la reacción a este artículo sobre Madrid, y eso que es razonado, con argumentos sólidos y muy bien escrito. Un artículo sensato, en resumen. Y mire los comentarios.
http://economia.elpais.com/economia/2012/03/02/actualidad/1330712282_179577.html
Pues he estado leyendo los comentarios y pese a que dicho artículo que enlazas ( eso de razonado y argumentos sólidos…) está sorprendentemente lleno de insidiash, me parecen bastante comedidos, casi todos se limitan a echarle la culpa de todo al PP.
Vamos, que no hay comparación.
Yo sí, y más.
El señor Bolaños nos dice obre el artículo de El País que es «razonado, con argumentos sólidos y muy bien escrito «.
Tan solo señalar que lo de Carlos I recomendándole a su hijo poner la capital en Lisboa es falso. Difícilmente podría recomendarle algo así cuando Carlos muere en 1558 y Lisboa no pasa a la casa de Austria hasta 1580. Solidísimo todo, sí.
Pero vamos, que entiendo la cosa, TODO lo que se dice en contra de Madrid está bien, TODO lo que dice en contra de Barcelona, está mal. Esa su idea.
Ah, ¡a mi me encanta la Santa Espina!
No me dirá que va a invalidar todo el artículo por ese detalle.
Y no, la idea no es que todo lo que se dice mal de Madrid está bien. La idea es que un artículo crítico con Madrid genera la misma cantidad de comentarios indignados que uno sobre Barcelona. Vamos, que los de Barcelona y los de Madrid no son tan diferentes entre ellos. Que en todos sitios quieren igual lo suyo.
Pero si usted prefiere pensar que los catalanes (o los barceloneses) son genéticamente una especie degenerada y los madrileños son ángeles, pues allá usted.
– No me dirá que va a invalidar todo el artículo por ese detalle. –
Yo no invalido ni dejo de invalidar nada. Me limito a señalar que si alguien pretende poner de ejemplo de solidez intelectual un artículo con semejante incongruencia, me sorprendo. La verdad no es un detalle.
– La idea es que un artículo crítico con Madrid genera la misma cantidad de comentarios indignados que uno sobre Barcelona –
Puede ser. Pero usted da a entender que en un caso con razón y en el otro, no.
A mi me parece en ambos casos una gilipollez la reacción histérica. Será que soy de poco querer ‘lo mío’ (?), o tengo mejor encaje, o sentido del humor. Y que estas peleítas Madrid-Barcelona me tocan un pie. El rigor histórico me interesa un poco más.
– Vamos, que los de Barcelona y los de Madrid no son tan diferentes entre ellos –
Estoy convencido de ello. Seguro que tengo más que ver con un barcelonés que con un honrado paisano de Soria o de Cuenca, con todos mis respetos para ellos vayamos a liarnos también.
– si usted prefiere pensar que los catalanes (o los barceloneses) son genéticamente una especie degenerada –
No diga bobadas, hombre. Creo no haber citado a los catalanes en mi primer comentario ¿cierto?. Si hasta he dicho, y sinceramente, que me encanta la Santa Espina. Cosas de familia, ya sabe.
En cualquier caso me podría, y digo podría si le conociese, parecer usted el degenerado. Pero usted, señor mío, no es ‘los catalanes’. ni siquiera ‘los barceloneses’.
Saludos.
Vale, es sorprendente ese detalle. Entonces supongo que también le sorprenderán las incongruencias del artículo sobe Barcelona. Fíjese que sugiere una continuidad idiosincrásica entre los barceloneses desde tiempos de los cartagineses. ¡Eso sí es rigor histórico!
Hablamos de un artículo que sostiene cosas de este calibre: «Sí diré, no obstante, que si la pirámide poblacional de la región no está hoy en día totalmente invertida es sólo gracias a la potencia procreadora de los charnegos. Ellos son los que nos salvan de convertirnos en un pueblo antiestético y enfermizamente endogámico como el vasco».
Hombre, hombre. El artículo de El País seguro que tiene algún dato poco sólido pero, en comparación con este, es pura roca.
Que un artículo genere comentarios adversos no me parece una reacción histérica, sino sencillamente saludable. Otra cosa son los insultos
¿Parecerle yo el degenerado? ¡Dios no lo quiera! Exacto, no soy ‘los barceloneses’, ni ‘los catalanes’, solo soy uno de ellos. La generalizaciones mejor dejarlas para el autor del artículo.
Sr, no soy espanola, he visitado Barcelona y ese articulo me ha divertido un monton. Comparto completamente la opinion del autor soibre los perroflautas y los nacionalistas. Creo que lo que Usted necesita son las direcciones de unos buenos psiquiatras.
¿Y los niños?, ¿es que nadie va a pensar en los niños?
Balance de la jornada.
El señor Héctor Bolaños me preguntaba hace unas horas, en un comentario, que por qué catalogaba al señor Campos de «genio». Ahora puedo contestarle con hechos: más de un centenar de opiniones -la gran mayoría acordándose de su madre- en apenas unas horas y el propio señor Bolaños echando la tarde en un artículo que dice despreciar, perdiendo el tiempo contestando a los que hemos sonreído ante la audacia del ‘punki’ catalán.
Por eso, sólo por eso, el autor merece un aplauso. (Por eso y por haber sido comparado con Adolf Hitler en el primer comentario de todos; sencillamente brutal). No hablo de sus ideas políticas o de si el artículo es más o menos riguroso. No tiene que ver con eso, tanto si me creen como si no lo hacen.
Dicho lo cual, good night.
Estaba esperándolo: me sale usted con el argumento de la cantidad! «Si ha generado tantos comentarios, es que el autor es un genio.» Moraleja: coman mierda, millones de moscas no pueden estar equivocadas.
No se considere usted una mosca, que nadie ha dicho eso :)
Bien visto si que es una pena que los barceloneses seamos tan tolerantes. Si a Christian le hubieran dado un par de hostias a tiempo no escribiría tantas tonterías.
Querido Cristian:
¿Cómo se le ocurre usted enardecer a la Supremacía? Ellos: que habían otorgado su bendición a este pasquín internáutico y ahora andan revueltos y con la nausea a flor de piel.
Fíjese usted en que la mayoría no aduce argumentos. Se limitan a despreciar. Levantan la nariz ante el escrito fétido y teclean. Ya sabe usted que su umbral de dolor es mínimo y al más leve pisotón se crispan.
La relación de hitos históricos es muy aguda, aunque habría que haber insistido en Rafael Casanova -de la Guerra de Sucesión- que es un auténtico héroe de pacotilla. El tal Casanova falsificó su certificado de defunción -se hizo el muerto el muy cobardica- y huyó disfrazado de fraile, de Barcelona. Instaló su bufete en Sant Boi de Llobregat y ejerció de abogado hasta que murió con 83 años. El salvaje imperialismo castellano no le dio el coñazo en absoluto. A semejante galán le reza el Nacionalismo todos los septiembres.
¿Y ha reparado usted en cómo se calman cuando dicen «fascista»? Se les mitiga el ardor igual que las abuelas cuando nos echaban vicks vaporub en el pecho. No hay término más balsámico.
Salud y ateísmo.
Un abrazo.
Juan Pablo.
Ni Rafael Casanova es un héroe de pacotilla ni lo fueron los que defendieron Barcelona en nombre del que ellos consideraban el legítimo Rey de España. Como no lo fue el teniente Ruiz que también y lógicamente escapó de Madrid tras el Dos de Mayo ¿verdad?. Diferentes circunstancias sí, pero acusar a alguien de escapar una vez ha combatido y la derrota está consumada es injusto.
Hombre, don Luis.
Me va a usted a comparar al teniente Ruiz a quien le pegan dos tiros, vestido con su uniforme -perfectamente reconocible-, con un señor que se disfraza para huir y que estaba negociando la rendición a espaldas de muchos.
Como si los catalanes no tuvieran gente heroica. ¿Por qué no un Roger de Flor? Pocas cosas más tremendas que esos almogávares hablando perfecto catalán y colocando la cuatribarrada en lo alto del Partenón.
Lo que ocurre es que parece buscarse un héroe deslavazado. Los macedonios le acaban de levantar un monumento a Alejandro Magno; o vaya usted a Mongolia a decirles que Gengis Khan no tenía buen rollito. ¡¡Y se cargó un 25% de Asia, el tío!!
Un saludo.
Bueno, Roger de Flor catalán, catalán…regular tirando a poco. Si de ‘catalanidad’ se trata yo no tendría la menor duda en elegir a Ramón Cabrera y Griñó, el Tigre del Maestrazgo como héroe principal – también cosas de familia-. O si queremos a otro ‘catalán de ley’ , al general Prim.
Pero estamos mezclando. Lo que hagan o dejen de hacer ahora con Casanova no es culpa suya. Ya decía que lo de Ruiz son circunstancias diferentes -como era su rango y el enemigo al que se enfrentaba también- pero Casanova cumplió con su deber y a mi entender es injusto que se le desprecie. A no ser que tengamos un concepto japonés del honor, que no es mi caso, francamente.
Saludos.
Oiga Luis, como descendiente directo del teniente Ruiz -cierto, no broma- y nacido en la Diagonal barcelonesa -oh! cierto tb-, puedo decirle y le digo que NO compare con ese notario disfrazado de señora al que los Boixos Nois le ponen flores cada 11/9; a mi ancestro sólo recriminarle que quizás el enemigo era otro aquel 1808 pero entonces era complicado discernir dónde estaban las luces y las sombras.
Toda la vida con els segadors para arriba y para abajo y todoe seguro por no aflojar la mosca y comprar de una santa vez una cosechadora.
No había visto tanta tontería junta desde el último festival de Eurovisión, al cual el autor de este pastiche (me niego a llamar artículo a semejante bazofia) debe ser adicto visto el nivel cultural y hasta moral del que hace gala sin la menor verguenza. Le recomendaría que pasara una tarde en la que usted llama consigna de medianías de la universidad española, más que nada para ver si se le pega algo de la intensidad con que esos adolescentes universitarios viven y no se limitan a contar lo que pasa en otro lado mientras siguen vegetando detrás de una pantalla.
bazofia… Ya estamos. Al menos no hay que sacar el primperan. Hacer gala también es una expresión que convendría mandar a freír calçots. Hacer gala es una hortera señora mía.
Señor Campos: ¡126 comentarios! Si no es record poco le queda. Y algunos echando la tarde para darle cera…
Lo mejor es lo espontáneamente que se une la gente en un Comité de Actividades Antibarcelonesas. Y con que virulencia.. Le envío, si me permite la cursilada, un abrazo de solidaridad.
Yo podría escribir sobre Madrid, que es mi ciudad, un artículo así de feroz. (Entre nosotros, lo de los perrofalutas lo vamos mejorando día a día) Y al hacerlo a lo mejor pretendía que otros madrileños reflexionasen un poquito sobre su ciudad. O solo lo sacudir el vaso.. Pero ¿Y? ¿Me deberían borrar del Censo? ¿Enviarme desterrada a vivir a Torrejón? ¿Obligarme a cantar el himno del Real Madrid?
Por cierto: Sin acritud, creo que se le ha olvidado comentar que en muchos bares de Barcelona no ponen ni una patata frita con la cerveza. Costumbre que se está imponiendo por Madrid.. Lo se porque voy mucho por Bracelona. Y no voy a dejar de ir
Que lo pase bien. Le seguiré leyendo.
Magnífico artículo; pone el dedo en la llaga. Pero se olvida mencionar que Barcelona tiene una cosa muy buena: que cada vez hay más extranjeros y menos locales.
Buen comentario, aunque olvidas que eso pasa en casi toda España y que si tienes hijas menores, o ellas o tus nietas muy posiblemente se casarán con un extranjero, casi con toda seguridad musulmán. Y estarás encantado, ¿verad Francisco?
Ponga un teléfono de aludidos y se forra. Un saludo
Este sí que es un comentario de un auténtico catalán.
M’encanta. Primer llencen la pedra, i després quan algú s’hi rebota diuen «oh, era per provocar». O sigui: com anar de terribles sense que ens passi res… No ho confonguin amb el coratge.
Después de nacer allí y vivir 45 años, hace 5 que decidí sacar a mi familia de Cataluña tras diagnosticarlo como «territorio enfermo». Estoy encantado; no siendo psicólogo de masas ni nada parecido, sí puedo asegurar que tanta amargura y soberbia «barreixadas» no conducen a nada bueno y que mas allá de CAT se vive «en paz», con problemas quizás, pero «en paz».
Lo siento de veras … porque, además, es pura pantomima
Se está mejor aquí desde entonces.
Bon vent i barca nova!
¿Por qué el primer comentarista pone «ganó» entre comillas?
Lo importante es que hablen de uno aunque sea bien.
«Rebeca y hamburguesa de tofu», eres grande Christian.
Si llego a saber la que se iba a montar escribo sobre Vladivostok.
Gracias de todas maneras por sus comentarios y perdonen las molestias.
¿Molestias? No, hombre, no… Su artículo es una maravilla.
Uno de los mejores cócteles que haya servido el bar de Jotdown, y mira que los hay buenos, como el de Tsevan de hace unas horas, por ejemplo.
SIgan, por favor, que no hay nada más divertido que leer desde el extranjero cómo se ponen de nerviosos los espíritus de campanario de la aldea nacionalista…
Van a necesitar mucha poción mágica (zumo de calçot, supongo).
Oiga, oiga… No se meta usted con el noble lugar de Vladivostok que allí también habitan seres humanos (y serás humanas).
Mire, hoy estuve pensado en su artículo. Me lo recordó Rita Barberá cuando se refirió a las mascletás como ‘arte pirotécnico’. Repítanlo en alto, paladeen la expresión: ‘arte pirotécnico’.
El español es rehén de su partida de nacimiento. Es capaz de hacer cualquier concesión al terruño. Por eso tenemos aeropuertos peatonales y teatros que compiten con el Carnegie Hall en páramos inhóspitos.
¿Recuerdan aquellos tipos de Viana do Bolo que denunciaron a Torrente? Algo más reciente. ¿Recuerdan aquel día en que el jefe de la diplomacia española se prestó a dialogar con un monigote? Así somos, oiga.
Porriño o muerte. Venceremos.
Cristian, ten un pco de decencia intelectual y cuando hagas un artículo pour épater la bourgeoisie al menos que no sea en plan putilla ya tan, tan en modo «arte marginal» como lo define la galerista de los Simpsons.
– La obra de su marido pertenece a lo que llamamos arte marginal. Puede ser la obra de un enfermo mental, o de un bruto o de un chimpancé.
Y no es que tenga ganas de faltarte, pero integrar cosas como el reconocido éxito de las políticas de inclusión de Bandas es ir muy subido de psicoestimulantes. Yo te entiendo, comparto ese sentimiento de frustración ante el entorno actual que le pone a uno en plan oligrofrénico destroyer, pero todo es moderarse…
«El caso es que Barcelona está yéndose a pique. Que sus noches son cada vez más breves, y una tristeza de perdedores de Liga se va amparando en las Ramblas. Que esa insoportable ñoñería que los forasteros llaman seny, y que es un defecto de las capas más prehistóricas de la burguesía catalana, está acabando con la ironía, que es la única virtud del pueblo catalán que ha dado muestras de verdadero talento: la ironía es lo vivificante de Pla, de Foix, de Carner, de Brossa, de Ferrater, y corto por no ponerme pesado». (Félix de Azúa en su polémico artículo de 1982 Barcelona es el Titanic. Un texto que empieza con las palabras «Empecé a sospecharlo cuando…»)
Ah, ja ho hem aclarit. Azúa. Mai he vist tants esforços per justificar la incapacitat de fer l’esforç d’aprendre un idioma.
En una revista en castellano, en un artículo en castellano…..¿En que idioma escribes nen?
Va, home, no em siguis provincià: http://translate.google.es/#es|ca|
No som espanyols?
Doncs només parlem una llengua espanyola, com la que parles tu!
És veritat. Jo sóc asturià i m’agrada molt la llengua catalana.
Des langues je cros que j’an connais quelques unes. And I see no use in learning catalan. Ich habe keine Zeit oder Lust und es gibt andere Sprachen, die viel mehr praktisch sind und viel mehr Litteratur haben. Я тоже чуть чуть гаварю по русский.
Asi que a ver cuando aprendes idiomas majo. Y de paso te recuerdo que estás en un blog hispano-parlante lo cual quiere decir que hay lectores que nunca han puesto los piés en Cataluña y tu mamá ha debido decirte que es de mala educación usar una lengua ante quien no la entiende.
JFM 10/10
Pues hablarlo no lo sé, pero el ruso lo escribes muy mal.
Hay una contradiccion: corriges mi ortografía y luego dices que no sabes si hablo el ruso cuando la respuesta está en la frase. En que quedamos? La has entendido o has hablado por hablar? чуть чуть se hecho se escribe чуть-чуть
con un -. pero es que teclear a ciegas sin teclado círilico es tan pesado que hizo que me diese pereza el buscar donde estaba la -.
Lo que me da vergüenza son los dos typos en francés: «je cros que j’an connais» en vez «je crois que j’en connais» y el segundo puede hacer creer que es una falta de ortografía
Com sou els independentistes…
Yo de ti me diría 100 veces al día : » La culpa no es de Madrid»..Al cabo de dos meses podrás leer a Azua y a francesc de Carrreras. Hablarás castellano y te sentirás enganchado a los toros como buen hispano. incluso podrás mirar con desdén a todo lo que huela en catalán, y te sentirás como un intelectual de pacotilla para los sudamericanos.
Me tomaré la citación de Azúa como un «Eh, que el componente irónico era importante»
Ah, hoygan… pues perdóneme usted si me he confundido sobre la ironía de un texto de varias páginas con posibles errores sobre la validez de resultados de Políticas Públicas.
Tocino y velocidad. Coincido con muchas parte del texto, pero la violencia de algunas partes, la violencia «mental», me parece excesiva.
Enhorabuena, Cristian. Me he reído a gusto. Pero no me creo que no te esperaras la avalancha que te iba a caer encima.
Fíjate que a mí lo que más me ha chirriado del artículo es lo del «odio africano», expresión que sí que habría que erradicar de nuestro vocabulario. Además, como bien demuestran muchos comentarios, aquí poco tenemos que envidiar a nadie a la hora de odiar, así que no nos hace falta importar odio de ningún lado.
Sigue así, hombre, que me río mucho.
Un abrazo.
Lo del odio africano si que es de Felix de Azua, aunque el hablaba de toda la bendita península.
La verdad es que todo el artículo me recordaba a de Azua a medida que lo iba leyendo, mucho menos elegante y cambiando la ironia por el sarcasmo que es como cambiar el silbido por el eructo pero sin duda calcado de FdA.
Hasta que comenzo con la acumulación de adjetivos, una verborrea adjetivadora que dificulta la lectura (por lo que tiene de impostura no por otra cosa) un ejemplo:
«Un pasatiempo hipócrita y hortera para una ciudad infantiloide, menopáusica, quejosa»
5 de 11.
Mezclar a Azua con Sostres es como rellenar un bollicao con gambas al ajillo, como experimento preadolescente unas risas, pero poco más.
‘Odio africano’ es una expresión que viene del odio eterno a Roma que hizo jurar Amílcar Barca – ¡justo el Barca! – a sus hijos. No veo por qué habría que erradicar nada.
Como vasco, me siento indignado con este artículo. Me parece una canallada ampliar a la totalidad del pueblo vasco la garrulez estética, endogámica y sexual de la izquierda aberzota.
Pues yo, como vasco, de lo que me indigno es que nosotros mismos hayamos dejado que la calle sea ocupada por los aberzotas, mientras los demás callábamos y disimulábamos.
Eso sí que ha sido una canallada… y ha durado 50 años.
Tenga cuidado con lo que escribe, Señor Campos, o puede que le obliguen a salir a la calle con una estrella amarilla en la solapa de la cazadora.
Yo le recomendaría que hiciera acto de contrición, subiera las escaleras de la Sagrada Familia de rodillas, dándose fervorosos golpes en el pecho mientras musita, «San Jordi Puyol, perdona mis pecados» y no vuelva a escribir nada que no este previamente aprobado por la élite intelectual catalana que dirige TV3
O venga una temporada por mi terruño, Valladolid, y escriba algo cagándose en nosotros. Necesitamos algo que remueva nuestra conciencia nacionalista, actualmente limitada a reírnos de los Palentinos, (Aunque las novias siempre nos las buscamos ahí).
Un abrazo y continúe escribiendo lo que le salga de sus santas partes. Suerte.
Maestro Campos. 10/10
Barcelona es un sitio raro de narices. Siempre que voy me sorprendo con las cosas raras e impostadas de los barceloneses. Por ejemplo: ver a un colegio entero sentado pintando monas delante la catedral. Pues me choca. Por un lado es una exhibición de pedantería estúpida, por otro da idea de cómo la colectividad se impone al individuo. ¿Qué esperan sacar de ahí? ¿A un Dalí, a un Picasso? Seguro que a ellos no les mandaban a pintar monas con toda la clase. El pecado/enfermedad moral de los catalanes es la ‘novismosis espongiforme’. Creerse el culmen de la modernidad. Obviamente, cuando no consiguen engañar a nadie por sus obras; cuando en vez de modernidad solo hay exhibiciones estrafalarias; cuando por la carencia de talentos ya es evidente que «el rey está desnudo», pasan a la segunda fase: prohibir, faltar, amenazar. Felicidades, Cristían.
PD: LA RUMBA DEL FELÓN: «SI BARCELONA FLORECE, BER-LIM-POM-PE-RA…»
Si escribes un artículo con ánimo de provocar (Cristian lo admite en su blog) es cool, pero si al leerlo te indignas y te subes por las paredes es UNCOOL! Por tanto, lo cool es el BAH! Pero entonces, si lo cool es el BAH!, por qué es cool escribir un artículo provocador? Aún más, si un artículo provocador (cool) espera una reacción (uncool), por qué lo cool necesita de lo uncool para sobrevivir?
AAAAARRRGH!!!!!!!!!!!
Genial, sencillamente genial
Extraordinario prácticamente en su totalidad, salvo en atribuir la matanza del 11M a secuaces de Bin Laden.
Coño pero si Cristian Campos era el de las «Listas listas» que ponía Arcadi Espada en su blog. Recuerdo echarme buenas risas con aquello.
Pingback: La Barcelona suicida [OPINION]
Si alguien hubiera escrito algo similar sobre España habría pasado perfectamente desapercibido (se hace constantemente desde hace décadas, «ya semos europeos» y demás).
Si en tal caso hubiera algún espontáneo molesto sería catalogado como un facha, patriotero, se mencionarían las palabra «caspa» y «taxista» y en definitiva, se mostraría una actitud condescendiente y burlona hacia ese pobre garrulo que carece de sentido del humor.
Pero es sobre Barcelona sobre lo que se ha escrito en ese tono. Ay.
Ahí le has dao.
Joder, con este artículo la Ley de Godwin ha batido un nuevo récord: ¡tenemos a Hitler desde el primer comentario!
Si nos paramos a ver lo que afirma el autor desprendiéndonos del tono irónico -que toca las narices del que discrepa- es posible ver que a lo sumo hay alguna que otra afirmación inexacta o simplemente opinable (lo de la continuidad histórica del carácter barcelonés suena a parodia nacionalista). Así que el revuelo del personal está totalmente injustificado.
En fin, que Jot Down es interesante entre otras cosas porque hay sitio para artículos como éste.
Genial artículo. Acierta en todo. Lo voy a colocar en mi feisbuc. Pro razones como las qeu menciona un servidor se va a vivir a Suiza. No podía ser sino en esta magnífica revista. Gracias, Jot Down. Al resto, os sugiero que estudiéis y observéis.
178 comentarios… Paso de opinar que me llueven hostias!
De todas formas, no sé cómo no se dan cuenta -supongo que por la cercanía- de que este artículo es una declaración de amor.
Pues.. lo mismo pensé yo al leerlo y me dió apuro decirlo. Creía que era una sentimental.
Grande Cristian. Admito mis reticencias cuando empecé a leerle por aquí pero con el tiempo me ha cautivado.
Criticar «lo progre» empieza a soltar caspa, marejadas y marejadas de caspa y por ausencia del rival en el ring, que Tigres de Papel ya está descatalogada, por dios..
Menudo bucle, por un lado los gazmoños adoradores de la incorrección política como sustituta de la razón mojando las braguitas y repitiendo el «genial, Cristian, genial» con voz aflautada, y por otro las monjitas escandalizadas de la barcelonesidad santiguándose y pasando las cuentas del rosario. Y el autor, mientras, salivando de gusto porque su paupérrima imitación de Sostres, ilustre ejemplo de indigente intelectual que elige el exabrupto frente a la ilustración, siempre más laboriosa y ardua, ha pasado, merced a la arrogancia de los más embrutecidos, por pieza estilosa, caviar para los que saben. Ahora ya solo falta que el Capitán le pase la mano por el lomo y la gigantesca corrida sepultará esta ristra de comentarios en un mar de Amor líquido.
Me he reido con este post:
«desprendiu 06/03/2012 21:23
Toda la vida con els segadors para arriba y para abajo y todo es seguro por no aflojar la mosca y comprar de una santa vez una cosechadora».
______________
Sr. Campos, seguramente habrá puntos exagerados en su hilarante exposición, pero tiene más razón que un santo, mal que nos pese a algunos barceloneses. Pero la gran culpa es de los políticos (esos que nosotros elegimos, o sea, culpa nuestra), que van a su aire, o al de su pasta, que es lo mismo. Miran la bandera y piensan en la cartera. Y muchos tontos útiles sueltos, eso sí que abunda.
Por cierto, el ‘inventor’ de la sardana fue un andaluz, José (Pep) Ventura. No sé si el baile fue importado de Grecia, o es cosa ‘mediterránea’.
Sin ánimo de molestar: «hatajo» —en este caso— es con h.
Por lo demás: muy bien.
Magnífico artículo. Lo clava.
Dejé Barcelona, donde viven mis padres y mis hermanos, hace 25 años. Cada vez me cuesta más volver.
Siempre he sido un enamorado de la ciudad, pero la complacencia con determinadas situaciones ha generadoa episodios tan lamentables como aquel de la agresión del tal Sergi Xavier M. a una chica latinoamericana en el metro ante la indiferencia general.
Recomiendo «Contra la Barcelona progre» de Xavier Rius.
Un artículo cojonudo. Enhorabuena, Cristián
Muy bueno y sirve de modelo para otras urbes infinitamente mas anodinas y mediocres como Zaragoza,ese inmenso erial cultural cuyo epitome de elegancia y saber hacer es la de un señor con calcetines rojos en que los domingos da de comer a las palomas de la Plaza del Pilar.
Me cansa ya tanto guaisismo e imbecilidad progreguay y tanta feminazi suelta
Con los años tal vez madrid llegará a ser tan moderna como Barcelona, e igual de tolerante. Para ello se tendran que invertir miles de millones de euros, aún así nunca crearan riqueza, siempre seran un lastre para españa.
Otro perro de presa de CIU con ese estilo, tan de moda, de pijo perdonavidas. Fachapalos de boquilla, vamos.
Yo diría que muy nacionalista catalán no es, precisamente.
Muy buen artículo. Enhorabuena
Profundamente nacionalista español, enhorabuena.
Aaprte de que no le veo el nacionalismo español por ninguna parte y que llegué aqui siguindo un link puesto por un catalan de pura cepa dede Wilfredo el Velloso puedes decirùme por que el ncaionalismo español seria malo y el catalan bueno? Porqué que yo sepa el desprecio racista hacia los demas, las multas linguisticas y el incitar a ninños a denunciar a los profesores que hablen español (Viva Pavlin Morozov!) o en marginar a los compa&netilde;eros que hagan otro tanto eso es la obra de los nacionalistas catalanes.
Multas linguisticas las hacen mil veces más los españoles que los catalanes, o no te quieres enterar. Que se sepa ,nadie quiere imponer el catalán en Madrid,pero si quieren el español en Barcelona, por pertener a España, puro fascismo El desprecio hacía las diferentes culturas de España es el pan de cada día . El nacionalismo español tiene ejército, academia de la lengua, fronteras, analfabetismo, toros, teles fascistas, …etc. Con un gasto de miles de millones de euros No sé cual es el mejor , si ser nacionalista español o catalán, e la imposición al provincianismo viene de los españoles.
Cuando dices so de que hay multas linguisticas en Charneguia me ha entrado una dudad. Eres descendiente de esos que en 1939 decian que Finlandia habia invadido la URSS o de los que se lo creian?
Bueno, la caricia en el lomo ya ha tenido lugar, todos a los botes salvavidas.
No creo que en Madrid multen por no rotular en catalán. Ni tampoco creo que Madrid esté invadido por Catalunya. A este nivel tan civilizado nunca llegará la capital del reino de los ladrones.
Pues yo tengo un máster en cultura catalana, que lo hice en Barcelona y de lo que en el artículo se dice no tenía ni idea. God bless Catalonia. ¡Qué cosas!
Eres acojonante, ¿lo sabías?. Te han puesto a parir, como tu querías, te odian y te dicen que te vayas. Eso quiere decir que eres el no va mas y, por cierto, que les vayan dando.
La única que tendría verdaderos motivos para odiarlo sería la Musa de la retórica y la oratoria, pero afortunadamente para ella no existe.
«Creo que no me equivoco si digo que Barcelona es la única ciudad sobre la faz del planeta Tierra que ha sido aplastada por todos y cada uno de aquellos que se han tomado la tediosa molestia de desafiarla.»
Si fuese barcelonés lo llevaría a gala. De la misma manera insustancial y adolescente que el autor lo saca a colación, pero al menos con más gracia.
Por otro lado algún comentarista ha hablado de autocrítica en este artículo. No, hombre, no. Habráse visto. El autor queda fuera al senhalar la mediocridad, sinsustancia e inmoralidad dominantes, precisamente en el acto de senhalarlas. Y aquí me sale al paso precisamente el comentario de le monde, que tengo ante mis ojos según tecleo. Es la sabrosura de deslizarse del siempre enganhoso «ladran, luego cabalgamos» a la auto-complacencia del «ladramos, luego cabalgamos». Si el primero no pertenece al mundo de los razonamientos o expresiones que pretende ensalzar, el segundo se sitúa ya plenamente en el campo de la patología de la la palabra que podemos denominar fariseismo. O séase, queda la sensación de de si no estaremos asistiendo a un fastidioso acto de «puesta en valor» de la propia virtud moral mediante el simple expediente de la exhibición del pecado ajeno. Con citas históricas.
Si yo fuese español también me suicidaría, como el título del articulo ( este comentario será censurado por cuarta vez pues no se puede criticar a lo español)
El artículo me ha dado una idea. Voy a invadir Barcelona. No oponen resistencia. ¿Alguien se apunta?
Ya no hace falta. Barcelona lleva años invadida por los charnegos. De ahí su declive al nivel de madrid
El acabose. Ya entiendo. El problema de Barcelona es la contaminación que sufre la «raza pura aria» por culpa de los «paletos» del exterior. La paleontropología empeñada en que el homo erectus había empezado a emigrar desde África hacia el resto del mundo, y resulta que no, que Barcelona ya estaba habitado y tuvieron que llegar los homínidos estos de tres al cuarto a fastidiarles la fiesta. Mis abuelos y mis padres son madrileños (cosa rara por estos lares), quizá debería exigir mejor trato por pertenecer a esta estirpe única. Qué socorridos son los discursitos xenófobos…
Panda de nacionalistas y localistas, que es peor. Conservan lo peor del paleto y olvidan su autenticidad. Urbanitas, cosmopolitas de su cuarto de baño, indigentes de visión periférica. Vamos una pena
¿Visión periferica? Que se sepa, la periferia de Europa está en Madrid, donde hay más paletos por metro cuadrado de toda la UE, ciudad de toros y de folclore cavernícola, capital de la mediocridad y del engaño, con su provincianismo monolingue disfrazado de intelectualidad hispana. De mentes cerradas, tapeos y siesta, funcionarios gandules, sueldos estratosféricos, ministerios y chupópteros nacionalistas Y ese es el paradigma de capitalidad que ofrece españa. No me extraña que los catalanes no quieren ser españoles, más cerca de europa sí estan. Un ciudadano del mundo.
También osgualdo. También. Reincides en la lucha Madrid/ Barna. Tanto monta, monta tanto…
Existe una curiosa escuela de pensamiento adolescente anclado en la fase anal que dice que las provocaciones tienen valor por sí mismas. Para sus seguidores, Divine comiéndose una mierda de perro en Pink Flamingos vendría a ser la cima de la cultura occidental, y las portadas de las bandas grindcore el más sublime destilado de la creatividad humana. La provocación, se supone, es buena y necesaria y divertida independientemente de su contexto, su oportunidad, su objetivo y su contenido. Otra escuela de pensamiento adolescente igual de absurda que la anterior dice que todo lo políticamente incorrecto es malo per se. Pero supongamos que la primera afirmación es cierta: luego, es lógico suponer que una provocación será tanto más eficaz cuanta más gente se sienta provocada por ella o más virulenta sea la reacción desencadenada. En ese caso el chiste de Vigalondo podría haber llegado mucho más lejos de donde lo hizo. Si se trata de provocar, hay avisperos mucho más sensibles que patear. El Islam es el más obvio de todos ellos. ¿Por qué no convertir en protagonista de nuestras “lecciones de misantropía en letales pedos de dos minilíneas” a Mahoma? Si el mensaje es “nada importa, todo es una puta broma”… llévalo hasta sus últimas consecuencias, machote. ¿Somos nihilistas con respecto a seis millones de muertos? Bueno, ¿por qué no llevar entonces nuestro nihilismo hasta los seis millones más uno: tú mismo? No pretendas pegarle una patada a un avispero porque eso es “divertido” y “provocador” y porque “discrimina gilipollas” y luego te la cojas con papel de fumar cuando las gilipollas de las avispas te pican.
Ahm, qué interesante reflexión, es que entre hacer una crítica jocosa de una ciudad y sus tópicos y trivializar el sufrimiento de seis millones de personas asesinadas hay una leve diferencia. Que pueda haber gente que crea que son algo mínimamente comparables, resulta muy revelador de lo mal que andan las cabezas.
Creo que hacen falta más artículos como éste de Campos, visto lo visto. Creo que la labor del intelectual debe ser esa, precisamente. Escocer un poco, dar lavativas, tocar los huevos levemente, especiamente ante temas que levantan tanta autocomplacencia.
Así que mi enhorabuena al autor del artículo.
Toda polémica sobre humor negro que se precie debe contar con una recua de fans del humorista un poco lentos de mollera. Son esos que vaya usted a saber por qué extraña razón se ven obligados a defender a su ídolo resaltando lo obvio una y otra vez, como si el resto del mundo se acabara de caer del peral y ellos fueran los únicos que han accedido al arcano intríngulis de la cosa. “¡Eh, que no iba en serio, so memos, que era un chiste!” Como los comentarios de estos fans suelen adornarse con ripios del tipo “¡Perico de los Palotes es un genio!”, “¡El mundo no se merece a Perico de los Palotes!” o “¡Bravo por el gran Perico de los Palotes!”, leerlos de principio a fin suele dar un poco de vergüenza ajena. Sobre todo cuando piensas que Perico de los Palotes no tiene ni la más remota idea de que esos tipos que le adoran en la intimidad de su casa existen.
Es el primer artículo que leo de este autor, pero si te hace ilusión pensar que tienes delante a un groupie enfervorecido con los ojos en blanco, pues sé feliz creyéndolo.
Pero por favor, la próxima vez cuando alguien se ría de tópicos regionales, no respondas diciendo que es lo mismo que mofarse del Holocausto. No.
Quizás el artículo tenga mucho de lo que saca a la luz, mucho de ese ‘resentimiento y mala hostia’. Y las reacciones siguen, en gran número, por ese camino. A mí me gusta Cristian Campos cuando se desenvuelve con mejor humor y más frescura, algo menos recargado, también. Pero bueno, como no estoy involucrado en este íntimo suicidio, tampoco sé juzgar cuál es el tono más conveniente, ni si es adecuado ponerse tan violento.
Me sorprende que se sorprendan de las denuncias de paletos y aldeanos, sin embargo. Y valga una imagen, ¿imaginan a unos señores saliendo del fútbol mientras corean con orgullo ‘Viva el Numancia, Viva Soria’ o ‘Viva Osasuna, viva Navarra’? Cataluña es, en ese aspecto, la viva imagen de ‘Nobleza Baturra’, ese film. Están enfangados en ese nacionalismo trasnochado y folckórico y todavía quieren habitar en las posguerras de todas aquellas derrotas. Visto desde provincias son la imagen de la ruina, un lugar del que huir.
«visto desde provincias» desde cuales provincias se puede ver sin el asentamiento nacionalista folclórico español, resulta paradójico. Es un argumento contradictorio.
En Londres también futbol y claman vivas a su reina. No sé desde que provincias puedes ver que de Barcelona es un lugar necesario huir. Pura envidia aldeana ¿ castellana?
Fantástico, Cristian. Realmente genial el artículo. A la prosa ácida y necesariamente directa se une el rosario de argumentos irrebatibles por los detractores que me preceden y que apenas aciertan a decir «vaya sarta de sandeces», «vete a la gaceta», etc. Mi enhorabuena sincera, crack.
«una de nuestras más anodinas beatas progresistas de rebeca y hamburguesa de tofu suplicaba en noviembre de 2000 que nos sentáramos a charlar con los terroristas tras el atroz asesinato de Ernest Lluch.» ….A mí también me indignó la gilipollez de las gentes de esta ciudad con los asesinatos de ETA y la insolidaridad con sus propias víctimas y su derecho a la justícia y a que sus verdugos no consiguieran sus objetivos,por ejemplo «dialogar de tú a tú con el Estado».
«Provocar» es muy sencillo. Solo hay que soltar unos cuantos insultos sobre cualquier grupo de personas, generalizando, y en seguida aparecen los ofendidos. Tampoco parece haber tenido el exito que los seguidores defienden, si tenemos en cuenta la población de barcelona y los lectores que tendrá, 200 son pocos. Pero es muy facil, repito. Otro par de de ideas para lograr este genial exito: la religión católica es pederasta, todas las mujeres son unas putas. Y ahi lo tenemos.
Me ha dado mucha pena esto, el texto y los comentarios de los nacionalistas ofendidos cuando en realidad lo importante aquí es lo ridiculo e infantil de la provocación por la provocación y además sin demasiada gracia aparte de la que le pueda hacer a los otros nacionalistas, lo anti, por obtener respuesta. Ahora teneis aquí tambien circo, amarillismo, lo que sea por el publico. Un rincón que es a la opinión lo que punto pelota a la información deportiva. Felicidades JD, ya sois un poco mas parecidos a los demás.
He criticado el articulo y me lo han censurado dos veces. He sacado a relucir el talante españolista y sectario del mismo pero eso no gusta a los censuradores, por lo visto su visión provinciana española es lo único que les interesa. Los paletos españoles no se enteran de lo que es europa, así os va.
Que alguien tenga la caridad de contestarle algo a osgualdo, por favor, que no le hace caso ni dios,
y ya amenaza con suicidarse.
Parece ser que en Madrid no le dejaron incorporarse ni a las tapas ni a los sueldos estratosféricos y anda el hombre un poco resentido.
Es que España va mal, es como el Titanic. Cada día toros, con sus intelectuales paletos, teles en castellano que no paran de dar horteradas, idioma tercermundista y fútbol amañado,multas por las banderas en los balcones, reformas laborales esclavistas, ….. España se hunde cada día más en su provincianismo pueblerino y fascista. Es el suicidio de España.
Gran artículo. Exigo uno igual, si no mejor, sobre Madrid. Ya saben, esta aldea con esteroides que se encuentra a un tiro de piedra del centro de Seseña.
Buen trabajo. Ni Hitler lo habría expresado mejor.
Las críticas positivas se basan todas en los escasos argumentos proespañoles. Del artículo se deduce que la madre de todos los males está en el nacionalismo catalán y la sardana. No hace ni una referencia al nacionalismo español, al castellano imperante y a las victorias franquistas que tanto han hundido a la ciudad. Precisamente el catalanismo es lo único que salva la ciudad de la mediocricidad e impide su provincianismo latente tan frecuente en cualquier aldea española. La diferencia de Barcelona, lo que la hace más europea y atractiva son los reductos catalanistas. La parte castellana es la más triste, pueblerina y cerrada.
La gente que critica positivamente el artículo no lo hace como alabanza al vómito que en realidad es, lo hace por la razón por la cual al autor le provoca la raba.
No quepa duda que un alto porcentaje de las personas que lo secundan son nacionalistas españoles, otro porcentaje menos significativo solo anticatalanistas y otro aun más pequeño sea capaz de verlo con objetividad.
Por mi parte quiero felicitar al autor ya que prefiero una persona desahogada que otra con toda esa frustración y rabia contenida dentro (siempre que pueda permitírselo, como es el caso).
Yo solo conozco Barna de visita, pero respecto a Madrid (ciudad en la que viví dos años) solo me cabe la catalogación de palurdismo profundo. En cuanto tuve oportunidad me volví a una ciudad de provincias a buscarme las habichuelas ya que dicha actitud paleta la soporto mejor en una ciudad en la cual cuadre más (justificada por su progresiva despoblación) que no en una capital de estado donde me resulta más violento.
Las reacciones de la catalanada al artículo se me antojan al mismo nivel de palurdismo.
Fact·checking
‘Toni 06/03/2012 16:03
…
Y será porque los datos falsos me han despistado, como ese “De ese mismo frenesí suicida nacen las pintadas que aparecieron por toda la ciudad tras los atentados del 11-S y que rezaban ‘Bin Laden, mátanos a todos’.” Viví en Barcelona en 2001 y 2002, y no me suena haber visto ninguna pintada así. No niego que pudiera existir, pero eso de que aparecieron por toda la ciudad’
¿Hecho o calentón?
Saludos. BolañO
Con este artículo Cristian demuestra que el localismo es una religión de bárbaros; ha hecho una caricatura de Barcelona como ha podido hacerla de Mahoma, y le han saltado al cuello los mismos.
Por cierto me da igual que disfraces el artículo con acidez en tu prosa pero tienes una rabia a los catalanes impresionante Cristian…. y si amic esto es democracia y lo de «Som una Nació nosaltres decidim» es totalmente legítimo, vamos que la frase «Catalunya és una Nació» aparecía en el estatuto que votaron y al que dieron su aprovación la mayoría de catalanes, o sea que democráticamente estaba totalmente legitimado; luego pasó lo que pasó…. la intolerancia del nacionalismo español se impuso de nuevo…. por cierto gente como tú son una una fábrica de independentistas si crees que somos pocos, vete el Vicente Calderón el próxima mayo que verás el aprecio que muchos le tienen por aquí al Rey, al himno y a la bandera rojigualda en Catalunya y EH… los miles que estarán allí serguro que son más que los que forman parte de tu patético psicoanálisis de los Barceloneses… un saludo!
«gente como tú son una una fábrica de independentistas»
¿Y al revés también vale? es decir, ¿Puedo decir que gente como tú sois una fábrica de peperos?
Sí !!!! y mejor para nosotros!! …. para los independentistas que gobierne en España el PP es muy muy bueno… porque aunque parece que no lo sepan poseen la asombrosa habilidad de meterse en todos los charcos y tienden a crear aun más sentimiento de repulsa hacia lo español y centralista, incluso en aquellos que no lo tenían…
«Sí !!!! y mejor para nosotros!!»
O sea que los nacionalistas periféricos sois el tonto útil del PP para que este pueda eternizarse en el poder.
Pues nada, a seguir disfrutando.
El problema del provincianismo paleto de Cataluña es de Madrid. Es algo que hemos impuesto a los catalanes. Es un hecho político y la alta política en España se hace y se deshace en Madrid. Es nuestra culpa. Así de sencillo. Hemos consentido que haya una cortecita con sus cortestanitos y su chusma paniaguada que hablarían arameo y venderían a sus padres a cambio de una pasada por el lomo de la mano de sus amos. Es repugnante, pero es culpa nuestra. Aunque eso no quiere decir que tengamos que resignarnos a vivir con ello.
Lo que no se puede permitir es que se pretenda suplantar a España en una esquina del solar patrio, y menos aún que administraciones públicas españolas estén dirigidas por antiespañoles. Hay mucha porquería que limpiar en España, pero no faltan herramientas si hay decisión de usarlas. Una, por ejemplo, sería que todos los funcionarios y cargos públicos, sin excepción, juren lealtad pública a España, en un juzgado: firmado de forma vinculante y responsable, y el funcionario que no sea capaz de mostrar su lealtad a quien le paga que se vaya a la calle ipsofacto, sin un duro.
En esta época de recortes los malos españoles deberían ser los primeros en salir por la puerta, habida cuenta de que reman contra el resto y de que son moralmente injustificables. Sin señoritos los malos españoles de Cataluña volverán a su obediencia natural, a su lengua materna y a dignificar su vida en lo posible. Si dejamos que esto se pudra estaremos en el escándalo perpetuo, empobrecedor y vergonzoso de ver la sumisión de unos españoles, que no tendrían porque ser malos españoles, sometidos al capricho de unos mezquinos palurdos y analfabetos con ínfulas planetarias.
ajjajajajaj figuraaaa take it easy parece que te cueste aceptar que hay gente que piensa distinto a tí…. ajjajaajaj que te has equivocado de siglo amigo, lo de imponer cosas aquí se acabó en el 75… ajjajjaaj brutal tu comentario…. si no nos gusta España pues lo decimos y si nos queremos ir y así lo decidimos nos iremos.. ah y dos cosas amigo el catalán se hablaba aquí mucho antes que el castellano puesto que es nuestra lengua así que eso de obediencia y lengua materna vete a decirlo a otra parte; lo de paletos provincianos viniendo de un (intuyo) madrileño cuya ciudad es hormigón y piedra sin historia ni pasado…. (es la capital y ciudad menos antiga de Europa) en medio de polvo castellano tiene tela jajjaj en fin compadre relájate, y acepta que el Tío Paco ya no está entre nosotros…
PD: sin Euskadi ni Catalunya que son las dos grandes potencias del EOE y los dos grandes reductos nacionalistas NO españoles, y a los datos económicos me remito , seríais un país (aun más) de pandereta y toda la gente que vive subvencionada y de nuestro dinero y impuestos (extremeños y andaluces por ejemplo) se le acabaría el chollo…. así que no te quejes tanto porque si nos fueramos si que tendrías que empezar a preocuparte…
¿Como? ¿Si no os gusta España o vais y ya está? ¿Así de fácil? Ah, pues entonces, está claro que España os encanta (ojo, que a mi también) porque lo que está claro es que seguimos todos siendo españoles y seguiremos siéndolo durante todo lo que dure nuestra vida. Al menos, hasta que a alguno le de por nacionalizarse de otra nación. Cosa a la que invito a todo el que no esté contento con la nacionalidad española. Hay 200 para elegir, más que sabores de Haagen Dazs. ¿No te animas?
¡Exacto!! Tienes toda la razón. Que les quede claro que aquí los catalanes votamos mayoritariamente el estatuto.
Bueno… más del 50% mostró tanto interés por el estatuto como por las elecciones en la Antártida y no fue a votar,
pero… es igual.
Porque luego un millón de personas salió a la calle a defenderlo. Millón arriba, millón abajo. Unas 50.000 en total.
Flipat, army, que ets un flipat!!!
Este tío es mi ídolo.
¡Y le han llamado Hitler en el primer comentario!
Insuperable.
Hombre, si este artículo fuese escrito en Berlin, en los años treinta por un paleto ignorante y nacionalista llamado Adolf Hitler con el título » El Berlin suicida», y ponga «judío» a todo lo relativo a lo catalán, la cosa cuadra a la perfección. Lo que le da un cierto aire » dejà vu». Incluso en esto los nacionatas españoles son poco originales, además de paletos, por supuesto
Sisifu, has dado en el clavo, el paralelismo es evidente: el nazismo es una reacción a que la enseñanza alemana fuera exclusivamente en hebreo, o a cosas como que los comercios tuvieran que rotular todo en hebreo.
Eres español, hablas castellano y formas parte de un país casi de tradición tercermundista. Los catalanohablantes son mucho más civilizados, por eso los odiáis, el odio a la cultura europea es intrínseco a la mentalidad hispana paleta y folclórica, sólo hay que ver lo mal escrito que está el panfleto del tal Campos.La culpa es de Madrid y de su provincianismo, tienes razón, no dais para más, bueno,,,si…sois toreros. jajaja.
Nueva exhibición de puntería. Cómo voy a odiar la cultura europea que tiene tanto de la española, así como la universal. Efetivamente los españoles somos algo toreros, Dalí, Picasso entre otros a artistas españoles y universales así nos distinguieron. Yo no odio eso. Yo odio a los ignorantes, a los mezquinos, a los unicejos mentales, a los que se regodean con repugnantes exhibiciones de autoodio. Tengo que dar más pistas?
No des más pistas; te odias a ti mismo.
Otro tiro en el pie.
Yo he estado 13 años fuera de Barcelona, y puedo decir que se esta muy bien en esta ciudad,. Hay nacionalistas, perroflautas, funcionario subvencionado,modernillos baratos, canis, chonis, pero si te vas a otras ciudades del mundo encuentras los mismos patrones repetidos pero con diferente apariencia. Es cierto que el nacionalismo es paleto y que hace daño, y que seguramente desde que tenemos autonomía y mas autogobierno nos hemos hundido nosotros solitos en la mierda, pero aún continua existiendo, a pesar de la cultura del funcionariado imperante, ese gen barcelonés del comerciante, emprendedor, anárquico y luchador que ha levantado esta ciudad de las múltiples veces que como dice el artículo ha sido arrasada. Y por suerte, en los barrios, y mas los que dan al mar, aún se huele el mediterráneo, y se vive como vivían nuestros abuelos, aún las puertas de las casas de para en par esperando al visitante.
Impresionante. Con qué facilidad alguien puede creerse mejor que los demás por haber nacido en un determinado lugar. A ver si China coge el timón del imperialismo del siglo XXI y a algunos «occidentales» se les pasa rápido el ombliguismo. Que aburrido es el geocentrismo, antropocentrismo y chovinismo de aquellos que, paradójicamente, llaman a los demás «provincianos». The pot calling the kettle black.
Un artículo con este alto nivel discursivo creo que merecería haber aparecido en más insignes faros de la comunicación española como La Razón, ABC, Intereconomía o la COPE. Eso sí, la preclaridad del autor augura que pronto lo veremos en ellos.
El posicionamiento del autor me crea muchas dudas, pero lo que ha generado no tiene precio. Como experimento sociológico ha sido un éxito. Me inquieta esa actitud tan «neocon» del ellos/nosotros. Si no apoyas a Bush, es que a apoyas a Bin Laden. Si criticas Barcelona, aunque seas catalán, es que eres un «paleto hispano», provinciano (fuerte la ironía) y nacionalista español. Un tipo de Avilés es los mismo que otro de Mijas. Nosotros somos especiales y únicos, los demás son todos iguales, unos paletos. Ni siquiera existe la opción de la «cobarde equidistancia» de Euskadi. Si soy madrileña y critico Madrid, siguiendo esta lógica, ¿qué es lo que soy? Los nacionalismos, sean centrales o periféricos (lo mismo da) resultan tan irrisorios e irracionales como los posicionamientos religiosos (mi dios es mejor que el tuyo). Desafortunadamente, también matan.
Cristian Campos,
He empezado a leer este articulo con una sonrisa en los labios, pero a medida que lo iba leyendo, m’he ha parecido un texto de auto-flagelación. En que te compadeces de vivir(?) en Barcelona o haver tenido una relación con esta ciudad. En el plano político, sitúas a Barcelona al borde de la esquizofrenia política, escondiendo elementos de juicio. Al más puro estilo de Felix de Azúa, o del grupo del Manifiesto de los 2300. Hablas del nacionalismo catalán pero no del español. Para terminar, creo que este artículo quiere provocar más que ser un análisis sociológico de una ciudad.
¿A qué viene una bazofia como esta en un magazine tan interesante como Jot Down?
En serio, esta basura es digna de leerse en la COPE o de comentarse en Intereconomía, no de hacer perder el tiempo a alguien que se conecta un rato a esta página con la esperanza de disfrutar intelectualmente.
Como nos gusta provocar… has conseguido que me ría, más con los comentarios que con lo otro. Felicidades.
Grandioso artículo. Sólo me ha disgustado el último párrafo, al final. Yo soy menopáusica y tengo el culo gordo. Y qué.
hoy es buen momento para re-leer el artículo, especialmente si uno es, como yo, barcelonés…
Una sonrisa de oreja a oreja se me ha plantado en mi cara leyendo tu blog ‘El Pandemonium’ mientras recordaba este artículo. Retratar la realidad con ese punto agrio e incluso despectivo, pero aún así conocer y vislumbrar cual es realmente el problema (aunque en este país no lo ve ni Dios) y exponerle tan crudamente es digno de mi más sincero elogio.
Gracias, saludos Alberto González.
Pingback: La Barcelona suicida | Mites i mentides del nacionalisme català
Me parece ya cansino y de hipócritas que en el siglo XXI perdure una continua lucha entre «catalanes» y «españoles». Despúes de leer algunos comentarios, lo único que me queda claro es que la mayoría buscaís constantemente en comentarios ajenos cualquier mínimo detalle para adjudicarle un nacionalismo (ya sea catalán o español) a otra persona. Entonces ¿como se puede opinar libremente de este tema sin que te asignen de antemano que eres un catalán amargado que busca la independencia o un estúpido nacionalista español cuya única intención y preocupación en su vida es buscar la destrucción de Cataluña?. De verdad, creo que deberíamos plantearnos pensar antes de escribir cualquier tontería (como esta) para deshogarnos de los problemas de nuestra vida. Yo me imagino que será porque probablemente estamos resignados y realmente sabemos que por mucho que nos quejemos, nada va a cambiar, nos guste o no.
PD: Sí, soy un niñato de Madrid que nunca ha pisado Barcelona e inexperto en el tema, pero realmente las posturas radicales que adoptaís algunos me parecen todavía más patéticas.
Decir que habia 60.000 personas en esa manifestación es de retrasados, mira qualquier imagen.
De entrada lo de «Editor de libros de arte y diseño y periodista en sus ratos libres» (y yo, futbolista en mis ratos libres, no te jode) más «barcelonés suicida», imposible. Supongo que por ahí anda la ironía con el rollo suicida y el tono del texto y tal. O no y eres así de hipócrita, quién sabe.
Pero es que a ver, si hacer de malote en plan Sostres es muy fácil. Es que ni original, joder. Y vale para todos, ya verás.
Por ejemplo, los barceloneses huyendo hacia Francia en 1939 mientras los madrileños, oh héroes, resisitiendo. Hombre, es que para ir a hacer el lerdo en el puto páramo mesetario mejor quedarse a palmarla en la puerta de tu casa.
¿El catalán está zombi? Claro. Está zombi porque hace 50 años llegaron muchos muertos de hambre incapaces de colgar al señorito andaluz de turno, (demasiado ocupados debían de estar jodiéndose la espalda cargando el santísimo mamotreto). Gente que, como buenos castellanohablantes, es ¿genéticamente? incapaz de hablar alguna otra lengua (ya no digamos bien, que eso, ni la suya). Con eso y el enano guardián de las esencias patrias, ahí tienes tu zombi lingüístico.
Y luego, viene sus descendientes tan barceloneses de «provocadores», que se burlan de que se gaste pasta en ella; así ellos exterminan leguas y culturas. Que de eso, son los campeones mundiales.
Fin del modo Sostres-Campos. ¿Ves qué fácil y gratuito es decir gilipolleces?
Luego, multitud de datos que son falacias. Las pintadas por «todas partes» post 11-S, las mujeres en sacos por Barcelona (a decenas, oiga, pero si es en Barna será que está de moda, ¿no?), el «fervor» popular contra los rótulos en castellano, lo de las bandas latinas (infórmate un poco, ignorante). Puro invento, machote. Y los anarquistas esos poco podían ser descendientes del del Liceu, siendo italianos.
Todo esto no tiene nada que ver con la hipérbole, la satira o la ironía, más bien con la pura mentira.
Por cierto, decir que en la manifestación del 10-J había medio Camp Nou es ser, otra vez, un poco mentirosillo. Hombre, no te fies de los que cuentan una manifestación cuando la peña ya se pira a cenar. No por nada esos «lynces» han cerrado la paradita.
Por cierto, lo que no me cuadra, absolutamente nada, es que no te metas con el Barça. Ehem…
Luego, lo de «Sé de lo que hablo: es mi terreno» suena un poco a despecho, señor talentoso. Muy barcelonés otra vez. Como han dicho más arriba, será que a los de fuera sí se las cuelas.
Eso sí, tengo que reconocerte que lo de la falta de hedonismo, y alguna otra perla aquí o allá, está la mar de «ben trovato».
Tendrían que fichar a Grékov como articulista. Como bien dice, es muy fácil hacer de malote en plan Sostres. Lo difícil es escribir artículos provocativos con datos contrastados e interpretaciones con fundamento.
Me ha encantado.
Y lo de…
«. En Barcelona, los ciudadanos jalean al hombrecillo que le pega fuego al coche del vecino con la misma pasión con la que una de nuestras más anodinas beatas progresistas de rebeca y hamburguesa de tofu suplicaba en noviembre de 2000 que nos sentáramos a charlar con los terroristas tras el atroz asesinato de Ernest Lluch. A la cobardía y a la más honda pusilanimidad moral frente a la ferocidad iletrada de los agros los barceloneses le llaman seny»
…supremo
Cataluña ya no existe. Acabó con ella el general Franco. Dado el grado de españolización, los culpables del estado actual de Cataluña solo pueden ser ustedes los españoles franquistas (valga la redundancia), señor Cristian Campos.
Defina «franquista». Por curiosidad y tal.
Pese a la bilis que desprende, el artículo dice algunas verdades. El problema con lo de querer provocar es eso, que se generan bandos y entonces la verdades quedan ocultas y la reflexión aparcada para otro momento. Una lástima
Un artículo muy bien escrito, pero como suele suceder en este tipo de escritos «provocativos», profundamente sectario, sesgado, demagógico, plagado de falacias, medias verdades, falsedades, datos descontextualizados, asociaciones tramposas y afirmaciones de mal gusto.
Sr. Campos, no desperdicie su talento tratando de emular a Carlos Dávila o a Salvador Sostres.
QUE GRAN ARGUMENTO, a todo el que no le gustó el articulo menciono a Hitler, como a todo aquel Españolito de a pie, que le parece mal no poder entenderse con cualquier otro de sus 45 millones de compatriotas, enseguida se le tacha de Facha e intolerante, hay mucha gente recurriendo a lugares comunes y mostrando una total falda de autocritica.
Me ha gustado el articulo, aunque a muchos les moleste que les digan que Barcelona no es el paraiso en la tierra.
Tampoco demoniza la ciudad, solo dice que se esta ahogando, que de tan tolerante que ha intentado ser, ha dejado que muchos intolerantes campen a sus anchas por ella.
Que de tanto que se queja de los Españoles, se ha convertido en impopular entre ellos (no sabeis que cantidad de conocidos me han dicho algo que comparto, «Barcelona es mas bonito que Madrid, pero ni una centesima parte de acogedora») ¿Me llamareis facha trasnochado por decir esto?
Seguid demostrando la capacidad de autocritica evidenciada por muchos en este articulo, seguid hablando del pasado en vez del futuro, es la mejor forma de caminar hacia un abismo espiritual indeseable, pero eso si, los malos seran otros, siempre lo tendreis, porque nunca lo pensareis.
Por decir que madrid es mas acogedora no te llamaremos facha. Te lo llamaremos por decir que te parece mal que en una parte de españa se hable otro idioma aparte del español (que lo has dicho, Jimbojones, lo has dicho
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Lo dejo a la mitad, nen, no puedo soportar tanta bazofia escrita…
Pensaba que ya no iba a haber comentarios, y podría opinar tranquilamente. Sin embargo, veo que el runrún sigue, y ya es curioso que en una revista tan librepensadora como ésta, una entrevista hecha con el estómago sea lo más comentado de largo. No habla bien del estado mental de este país. Voy con lo mío. Llevo 8 años viviendo en Barcelona, y todavía soy incapaz de decidir si me gusta. Si me gusta ella, y si me gusta vivir en ella. Ahora, al acercarse el momento de partir, reflexiono y no acabo de decidirme. La experiencia, en todo caso, ha sido buena. Tiene más cosas que me repelen de las que me atraen, pero estas últimas son más confortables. ¿Es provinciana? Pues si, a su propia manera, como todos; pero la mentalidad de sus gentes, en algunas contradicciones, lo es. ¿Es cosmopolita? En algunos momentos (pocos) te sientes vivir en uno de los epicentros mundiales, y es toda una sensación. ¿Es fachada? (Miguel de Unamuno?) Pues sí, también lo es. Sus habitantes priman demasiado lo que los demás pueden entrever a simple vista. Son generalistas. No abordan con profundidad, en su mentalidad, determinados valores incuestionables en los que todo el mundo está de acuerdo, y eso es mala señal. O sea, una sociedad contradictoria y aparente. Pero es un resumen injusto. También hay algo más. Hay anonimato, hay libertad entre las personas, el ambiente es menos asfixiante en todo lo que no roce la política -ahí comienza el monocultivo-, hay grandes personas… pero hay una cultura colectiva, una abrumadora sensación de pertenencia y un convencimiento total de ser especiales. Hay una necesidad de marcar su autoria en todo lo que hacen que me resulta profundamente ajena. No consigo encontrar en mí mecanismos para conseguir aprenhenderlo. Y en el fondo me resulta una turra. Necesito respirar un poco de aire fresco, aunque sea, paradójicamente, en una sociedad que dicen cerrada. No tiene porqué. Hay un porrón de escritores que dicen lo contrario.
Escribo con años de retraso pero no había leído este artículo hará ahora.
Buen artículo. Bcn es eso, en parte. Basta ir al Camp Nou para notar ese aire infantiloide y quejica que se describe en el artículo. Y muy acertada la descripción del participante al que estoy contestando.
Yo estoy condenado, en parte encantado, a vivir en la ciudad del artículo. Pero la Matraca (ya célebre sustantivo en 2017) empieza a ser de bofetón.
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Pues yo me he reido un montón, es la opinión del señor Campos, y ya está, podemos compartirla o no, pero eso es lo de menos, lo mejor es la desfachatez con que ha ido riéndose de todos los tótems barceloneses… he pasado un buen rato.
Felicidades Daniel, de lo más coherente que he leído. Yo también soy una «niñata» madrileña que no comprende los nacionalismos, ni centralistas ni periféricos. El origen de la Humanidad ya sabemos dónde está y no recuerdo que el homo ergaster portara ninguna bandera. Tampoco entiendo muy bien esa argumentación del campesino andaluz que viene a «intoxicar» a la sociedad catalana, como si esta no fuera fruto de siglos de mestizaje cultural de todo tipo. Las sociedades «puras» son tan reales como el creacionismo. No estaría nada mal que prestáramos más atención a la paleoantropología a ver si comprendemos de una vez que los nacionalismos son meras convenciones, tan artificiales como el reparto de África en la Conferencia de Berlín. Yo nací en Madrid, como pude haber nacido en Peñaranda de Bracamonte o en alguna aldea de Gambia. Por otro lado, también me hace mucha gracia este «nosotros versus ellos». El que lo utiliza siempre aplica a los unos individualidad frente a los otros que, además de «paletos», son un monolito. Es decir, que no hay ningún matiz entre una persona de Pola de Siero y alguien de Mula. Lo que más me gusta de mi ciudad es que todavía me pasa que, diez años después, me entero del lugar de procedencia de alguien porque se va de puente a su ciudad natal. En fin, igual con este cambio de ciclo en el que China va a tomar las riendas del mundo se nos empieza a pasar el ombliguismo occidental, que es de lo más aburrido. Yo mi me conmigo.
He estado unas nueve veces en Barcelona y me gusta el ambiente, quizá es porque soy una de esas «progres» que comen hamburguesas de tofu (aunque no sea vegetariana). Coñas aparte, salvo cuando se empeñan en que por ser madrileña tengo que ser ultranacionalista española del PP (pocas cosas tan insultantes), me encuentro mucho más a gusto en Barcelona que en cualquier ciudad castellano-leonesa. La carta nacionalista es muy rentable en términos de imagen, pero que a nadie se le pase que el «super catalanista» de Joan Gaspart siempre ha estado vinculado a un partido tan rancio, anacrónico y ultraconservador como Alianza Popular (PP de hoy en día). En cuanto rascas la superficie, te das cuenta cuenta de dónde están los verdaderos intereses.
Ante todo, me considero un lector. Quiero decir con ello, que me gusta leer y soy capaz de leer algo aunque no me guste, pero debo decir que este mamotreto, a pesar de decir alguna verdad, me ha parecido infumable y de lo más horrendo que he leído últimamente.
Lo siento…
POR FIN!! gracias Jotdown, gracias Cristian. Se echan de menos artículos así. Ah! soy de izquierdas, progresista.. que parece que si no lo dices.. Hasta el gorro de los tópicos, del seny y de Pep Guardiola. Basta ya, no os lo creáis, Barcelona se vende guay, es una ciudad grande (más para elegir) y tiene un clima estupendo. Pero hay gente rancia, inculta, cutre, aburrida y corrupta como en muchas otras ciudades, españolas y europeas.
Barcelona es el vertedero de España, me duele decirlo porque he vivido aquí toda mi vida pero es muy triste lo que está ocurriendo.
no le den tantas vueltas, que no quiere ser un manifiesto a estudiar en bibliotecas; solo dicen verdades como puños de forma maleducada, pero en el fondo tiene mucha razón, sobre todo cuando se refiere a políticos del tripartito «dejamos a cataluña arruinada y nadie protesta» .com
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Es cierto que hay gente rancia hay en todos sitios; lo que pasa es que en Barcelona… ¡¡ hay tanta!! Debe ser por que la tasa m2/habitante es muy pequeña…Pero no, lo que alucina de esta cuidad , aun después de vivir en ella 6 años (después de París, Sevilla y Londres) es que NO PUEDES MALDECIR en los 5 idiomas que conoces a ningún político catalán sin que un catalán se sienta personalmente ofendido (y eso que ellos suelen hablar, como mucho , 2 -catalán included).Porque se sienten obligados a defenderle por ser catalán, como defienden a terroristas catalanes (también los ajenos si van en la línea de la paranoia instilada desde las intrituciones). Esos catalanes que dicen: estoy jodido, pero en vez de solucionarlo, que jodan a los demás igual , y así me siento menos tonto…Sí, esos que dicen «que paguen peajes también en el resto de España».Y ellos van y le votan. Y luego dicen eso mismo en la calle, porque lo han oído/leído en los medio de comunicación del régimen (léase TV3 ,Club3, Avui, La Vanguardia y demás medios de análisis científico que utiliza el catalán también medio).
¿Que en todas las demás cuidades hay gente así? Efectivamente, amiguitos.Pero sólo aquí se enorgullecen de serlo.
Cito: «Creo que no me equivoco si digo que Barcelona es la única ciudad sobre la faz del planeta Tierra que ha sido aplastada por todos y cada uno de aquellos que se han tomado la tediosa molestia de desafiarla. Dicho en plata: todo aquel que ha querido cepillarse la ciudad se la ha cepillado a placer cuando y como ha querido.»
Y yo, que soy un tipo que ha estudiado un poco de historia he pensado en seguida en cierta batalla de la Guerra dels Segadors que las tropas catalano-francesas ganaron por aplastamiento a las castellanas. Aquí la información: http://ca.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Montju%C3%AFc_%281641%29
Ya me perdonará que lo ponga en catalán, es por el simple hecho que tiene la estrellita. También lo tiene en castellano, inglés y francés.
Yo tenía a esta revista como un cúmulo de información y conocimiento, pero con éste artículo me han defraudado.
Creía que había un mínimo filtro de publicación porque me parece patético que un señor escriba de principio a fin una serie de opiniones (que no dejan de ser personales) críticando una cultura.
La pregunta sería: «¿qué le han hecho a usted los Barceloneses (catalanes) para tenerles tanto odio?» porque un profesional, ese tipo de comentarios no los haría, ya que basaría su artículo en una información objetiva, precisa, concreta, siendo cuidadosamente depurada y contrastada, pero este señor de aquí que no tiene respeto por nada, no aprendió nada en la escuela (si es que de verdad estudió periodismo, claro) porque lo único que hace es críticar a más de 1,5 millones de habitantes, que recordemos que para analizar un grupo antes tienes que comprender al individuo, y una persona que publica un artículo como éste sin siquiera haber contemplado las personas como sujetos individuales es porque su único objetivo es dañar la imagen de éstos.
Pero bueno, no me quiero enrrollar porque no acabaría, sólo quiero comunicar 2 cosas a los administradores de esta hasta ahora maravillosa página:
1.- Este tipo de artículos ofenden a las personas porque no aportan nada, sólo es demagogia barata con la única intención de dañar y alimentar conflicto, por lo que debería de ser retirada. Así que por favor, antes hagan un filtro.
2.- Debería escribir quien realmente esté capacitado para ello, y no cualquiera, porque suceden estas cosas.
Un saludo,
Es muy barcelonesa, en el sentido que le da Campos a la expresión, su exigencia de censura previa (probablemente por parte de algún órgano análogo al «Consell Audiovisual de Catalunya») de artículos de opinión contrarios al «mainstream» catalanista.
Pues a bote pronto, sin ser catalán, y tras una lectura rápida del panfletillo que se ha currado el Christian este, encuadraría el artículo en el género de viajes alucinados, como Los viajes de Gulliver o Alicia en el País de las Maravillas. No creo que su actitud con la ciudad sea honesta sino más bien al contrario, parece que contempla su ciudad en el reflejo de un espejo deformado por sus propios juicios y prejuicios, o al servicio de una determinada opción política, de lo que resulta una visión sesgada y torticera de la historia y presente de un colectivo humano como otro cualquiera.
Yo personalmente agradezco la actitud de insumisión e inconformidad de parte de los habitantes de Barcelona, y recuerdo y respeto, lo reconozco, la lucha de la clase obrera barcelonesa contra los pistoleros de la patronal a principio de siglo en defensa de sus derechos y dignidad, y la lucha callejera de esa clase obrera contra militares profesionales golpistas en julio del 36, en defensa de la democracia, lucha que como bien sabrá el autor del artículo, significó la derrota de estos últimos. Dicho sea sin animo de polemizar. Un saludo a tod@s.
¿De dónde sale todo este rencor Cristian Campos?
¿Podrías desgranar otra ciudad como has hecho con Barcelona? simplemente para calibrar si el odio a Barcelona y sus habitantes es único, o se extiende a lo largo de toda Europa.
No nos engañemos, este artículo no es una crítica a Barcelona, sino a Cataluña (soy catalán pero no barcelonés). Y ojo, a mi que se ponga a caer de un burro a Cataluña, Barcelona o la Meseta profunda, me parece genial. Pero no es cierto lo que he leído en algunos comentarios anteriores: Campos no es un barcelonés autocrítico, que sabe burlarse de su ciudad; es un español (acomplejado, pues le gustaría ser yanki) que odia a Cataluña. Nihil novum sub sole.
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Buen artículo, Cristian. Buenos comentarios también.
Hay bastante de razón. Yo extendería, con algunas variaciones, la descripción de Barcelona al resto de España. El amor a la violencia y a la sangre es compartido.
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Lo mejor que he leído en meses sobre Barcelona y Cataluña
Hola autor, para el autoodio lo mejor es aplicarse el Hemoal con remo, que falta hace con tanto escozor.